Promoción de la salud proyecto de educación

Page 1


2


PROMOCIÓN DE LA SALUD: PROYECTO DE EDUCACIÓN PARA LA SALUD DE ADOLESCENTES, PROMOVIENDO ENTORNOS SALUDABLES

Mercedes Piqueras Martinho

3


Editorial Área de Innovación y Desarrollo, S.L

Quedan todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida, distribuida, comunicada públicamente o utilizada, total o parcialmente, sin previa autorización.

© del texto: el autor ÁREA DE INNOVACIÓN Y DESARROLLO, S.L. C/ Els Alzamora, 17 - 03802 - ALCOY (ALICANTE) info@3ciencias.com

Primera edición: septiembre 2016 ISBN: 978-84-945987-8-4 Registro: http://dx.doi.org/10.17993/Med.2016.29

4


INDICE

1. ANTECEDENTES Y ESTADO ACTUAL DEL TEMA ................................................................................... 9 2. OBJETIVOS ......................................................................................................................................... 33 3. METODOLOGÍA .................................................................................................................................. 35 3.1. Ámbito de la intervención .......................................................................................................... 35 3.2. Descripción de la Intervención ................................................................................................... 35 3.3. Plan de Trabajo ........................................................................................................................... 37 3.4. Dificultades y limitaciones .......................................................................................................... 42 3.5. Mecanismo de evaluación .......................................................................................................... 43 4. BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................................................... 49

5


6


RESUMEN En este proyecto de Promoción de la Salud vamos a abordar una intervención en Educación juvenil, orientada a cómo prevenir las Enfermedades de Transmisión Sexual en Adolescentes, desde la Educación y desde la Salud. Con el objetivo de la prevención y la Educación para la Salud. Las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) son infecciones que se adquieren por mantener relaciones sexuales con otra persona que ya las padece. Las ETS tienen en la actualidad una gran importancia en salud pública, no sólo por las infecciones agudas, sino por la gravedad de sus complicaciones y secuelas. En este proyecto revisamos las últimas 3 décadas que nos anteceden observando un claro cambio de tendencias. No todas las ETS son registradas puesto que no todas son enfermedades de declaración obligatoria, nos centraremos en el Sida para explicar este cambio de tendencias puesto que ha sido la ETS de mayor expansión. Hasta el año 1994 existe un incremento progresivo de casos declarados, a partir del cual se observa un descenso. El mecanismo de transmisión que predomina son los usuarios de drogas intravenosas (UDI). A partir de 1994 la transmisión por relaciones heterosexuales supera a las homo - bisexuales. En el grupo de adolescentes el mayor porcentaje diagnosticado corresponde a personas de edades comprendidas entre 20 y 34 años, teniendo en cuenta que el período de incubación oscila de 7 a 13 años, un alto porcentaje se ha contagiado en la adolescencia. En la edad adulta el mayor porcentaje de sujetos contagiados es por hemoderivados o transfusiones. A partir del año 2004 empiezan a aumentar los casos de Sida en adolescentes por relaciones sexuales, siendo la transmisión homosexual mayoritaria. También aumentan las ETS víricas en ambos sexos. Todo esto nos hace pensar en la falta de información de los adolescentes y en las necesidades de prevención. Realizamos un análisis de distintos tipos de prevención que se han llevado a cabo durante estos años, como son campañas publicitarias, talleres, charlas, actividades didácticas, etc. Revisamos diferentes estudios que nos demuestran la importancia de la prevención, la importancia de facilitar información precisa a los jóvenes. Puesto que éstos encuentran información hoy día al alcance de su mano que en muchas ocasiones puede inducir a error, o a crearse falsas ideas o creencias, o que puede conducir a crear actitudes no saludables, proponemos formar a nuestros jóvenes desde la escuela, transmitirle unos conocimientos adecuados, asentar unos valores, y todo ello antes del inicio de las relaciones sexuales. Cada día la edad de inicio se adelanta, a veces por falta de información, por inestabilidad familiar, bajo nivel cultural…Puesto que las actividades didácticas han demostrado ser la mejor y más potente arma de prevención, el presente proyecto propone realizar una intervención de prevención desde la escuela. Incluyendo la educación sexual como currículo del programa educativo, y ser impartida por profesionales sanitarios o educadores sexuales, ayudando así a nuestros jóvenes a adquirir conocimientos suficientes, a dotarlos de las armas y herramientas necesarias para enfrentarse a esta realidad cotidiana, que dispongan de los recursos necesarios para optar por las opciones más saludables y que con ello adquieran unos hábitos y unas conductas de las que puedan valerse con conocimientos suficientemente científicos. Estas conductas saludables repercutirán sobre ellos mismos y sobre la comunidad, puesto que ellos son el mañana.

PALABRAS CLAVE: Adolescentes / Enfermedades de transmisión sexual / Educación para la salud / Estrategias de prevención / Salud sexual / Salud en adolescentes / Embarazo no deseado / Sida / Métodos anticonceptivos / Conocimientos / Actitudes / Sexualidad / Derechos fundamentales. 7


8


1. ANTECEDENTES Y ESTADO ACTUAL DEL TEMA Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son infecciones que se adquieren por mantener relaciones sexuales con otra persona que ya las padece. Esta denominación sustituyó en la década de los 70 a la clásica denominación de “enfermedades venéreas” (relacionadas con Venus), que durante varios siglos expresaba de forma disimulada el riesgo de adquirirlas con las prácticas sexuales. Se incluyeron sífilis, gonococia, chancro blando, linfogranuloma venéreo y granuloma inguinal, por lo que la actual definición permite englobar aquellas enfermedades identificadas recientemente, causadas por microorganismos, en los que la transmisión sexual es relevante (tabla 1)1.

Existen algunas enfermedades infecciosas que se han considerado como de transmisión entérica y que, ocasionalmente, pueden transmitirse por vía sexual, si se practican relaciones sexuales que impliquen un contacto anal-oral (tabla 2)1.

9


Las ETS tienen en la actualidad una gran importancia en salud pública, no sólo por las infecciones agudas, sino por la gravedad de sus complicaciones y secuelas. Datos de Incidencia y Prevalencia en la Población General y en Adolescentes de ETS. Análisis de las últimas 3 décadas. Para conocer la distribución de las ETS nos encontramos distintas dificultades, como el hecho de que son consideradas enfermedades vergonzantes, de forma que se evita acudir a servicios sanitarios, algunas cursan con pocos síntomas, es frecuente la existencia de infecciones mixtas, por lo que se complica el diagnóstico. Y además, no existe un registro global de todas ellas, ya que el sistema de enfermedades de declaración obligatoria (EDO) recoge datos de sífilis, gonorrea, chlamydia, sida (la infección por VIH/SIDA dispone de un sistema especial de vigilancia) y no de otras ETS. Este sistema es útil para demostrar tendencias, pero al tratarse de declaraciones numéricas sólo reflejan el número de personas declaradas, no su distribución por edad, sexo u orientación sexual. Datos de 1982 a 1999: -

En la población general:

El mayor número de casos de muchas ETS se presenta en el grupo etario de 20 a 24 años, aunque hay autores que señalan un predominio en el grupo de 25 a 29 años. Si para calcular las tasas de ETS en el denominador utilizamos el porcentaje de individuos sexualmente activos por cada grupo de edad, la mayor tasa de gonorrea, sífilis, citomegalovirus y chlamydias así como las mayores tasas de hospitalización por enfermedad pélvica inflamatoria (EIP) se encuentra en el grupo de 15 a 19 años ; Los datos de prevalencia de las distintas ETS varían en función del país, del segmento de población estudiado, del tipo de prácticas sexuales y del servicio sanitario que realiza la consulta. En nuestro país con los datos disponibles de ETS incluidas en las Fuentes de Información se aprecia una tendencia a la disminución de sífilis y gonococia, coincidente con la aparición del SIDA, aspecto que también se 10


observa a nivel mundial. Al mismo tiempo se aprecia, según diversos estudios publicados un aumento de ETS víricas (figura 1)1. Esta disminución también se observa en las ETS recogidas por el Servicio de Información Microbiológica

(figura 2)1.

Con respecto al sexo, en general se observa una mayor afectación en los varones. La distribución por sexos de las ETS notificadas al Servicio de Información Microbiológico (SIM) en los años 1989 a 1999 muestra un mayor porcentaje de sífilis en varones que en mujeres, mayor porcentaje de gonococia en

11


varones que en mujeres y menor porcentaje de infección por chlamydias en varones que en mujeres (tabla 4)1.

-

En Adolescentes:

En nuestro país, en la declaración de sífilis y gonorrea no se señala la edad por lo que desconocemos si la tendencia decreciente señalada en la población general incluye a la adolescencia. Los datos obtenidos de las distintas ETS notificadas al SIM de 1989 a 1999 en la población menor de 19 años muestran que el 2,8% de casos de sífilis, el 5,6% de gonococia y el 6,6% de casos de clamidiasis corresponden a esta edad, con una tendencia a la disminución con el transcurrir de los años, notificando en los 3 últimos años el 9,4% del total de casos registrados en el periodo 1989-1999. En las chicas se observa un mayor diagnóstico de sífilis y clamidiasis y un menor diagnóstico de gonorrea respecto a los chicos (tabla 3)1. Si comparamos estos datos con los de la población general, se aprecia que la distribución en función del sexo de gonococia y clamidiasis es igual pero existe un mayor porcentaje de chicas adolescentes a las que se les diagnostica sífilis respecto al total de diagnósticos en mujeres.

Diversos autores señalan que en los chicos adolescentes se diagnostican más casos de gonococia, sífilis y condilomas que en adultos varones y en las chicas, la gonococia y la tricomoniasis fueron diagnosticadas en mayor proporción que en mujeres adultas. Al comparar los diagnósticos realizados 12


entre los años 1977 a 1987 y 1992 a 1996 se aprecia, al igual que en la población general, un aumento de las ETS víricas y una disminución de las ETS bacterianas en el último periodo.

Infección por VIH y SIDA El principal inconveniente es que los casos notificados se refieren a la enfermedad, no existiendo datos de la seroprevalencia. A nivel mundial se calcula que a finales de 1998 existían alrededor de 33,4 millones de personas (adultos y niños) viviendo con HIV/SIDA, de los cuales el 1.5% viven en Europa (unos 500.000 casos). En nuestro país, el total de casos de SIDA declarados desde 1981 hasta 31 de Marzo de 1999 ha sido 54.031. Existe un incremento progresivo de casos declarados hasta 1994, año a partir del cual se observa un descenso (figura 3)1.

Al analizar el mecanismo de transmisión se observa un predominio de la transmisión en usuarios de drogas por vía parenteral. Hay que destacar el aumento de la transmisión por relaciones heterosexuales que a partir de 1994 supera a las relaciones homo-bisexuales. Cuando se analiza la edad de los casos diagnosticados por año, hasta el año 1991, en el grupo de edad que se realizan más diagnósticos corresponde al de 25-29 años, pasando a partir del año 1992 al grupo de 30-34 años. En el grupo de adolescentes, el número total de diagnósticos de SIDA declarados ha sido 436, representando el 0,8% del total de casos. Pero teniendo en cuenta que en el año 1998 el 65,6% de los casos diagnosticados corresponden a personas de edades comprendidas entre 20 a 34 años y que el período de incubación de la enfermedad puede oscilar entre 7 a 13 años, un alto porcentaje de ellos se ha contagiado en la adolescencia.

13


Los mecanismos de transmisión del SIDA en los casos declarados a la población adolescente difieren de la edad adulta en un mayor porcentaje de transmisión por hemoderivados o transfusiones y una escasa transmisión por relaciones sexuales homo-bisexuales (tabla 5)1. Tabla 5. Categorías de transmisión del sida en Adolescentes desde 1981 a 1998 (actualizado a 31-03-1999).

Categoría Homosexuales o bisexuales Uso de drogas inyectables (UDI)* Homosexual- UDI Hemoderivados o transfusiones Vertical Heterosexuales Desconocido u otros

% 1,4 59,0 0,5 28,9 0,7 8,2 1,2

*UDI: Uso de drogas inyectables

Cuando se analizan los mecanismos de transmisión por sexo aparece un mayor porcentaje de chicas si la transmisión ha sido mediante relaciones heterosexuales y de chicos si la transmisión se produjo por uso de drogas inyectables (tabla 6)1. Tabla 6. Sida en España. Distribución por sexo y mecanismo de transmisión (actualizado a 31-02-1999).

% Varones 80,8 80,9 59,3 77,1 74,9 33,3

Afectación (total casos) Transmisión UDI (total casos) Transmisión heterosexual (total casos) Adolescentes afectados Transmisión UDI (adolescentes) Transmisión heterosexual (adolescentes)

% Mujeres 19,2 19,1 40,7 22,9 25,1 66,7

Datos hasta 2010, (analizamos aquí los datos incluidos en el Informe Anual de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Transmisibles, año 2010, que incluye datos procedentes del Instituto Nacional de Estadística de 2005 a 2010)2. Nuevos diagnósticos de VIH en el año 2010 2.907 nuevos diagnósticos de VIH fueron notificados en el año 2010, recibidos de las 17 CC.AA. La mediana de edad al diagnóstico es de 35 años, siendo los hombres el 82% de los nuevos diagnósticos de VIH. La distribución de las categorías de transmisión refleja un 44,1% para Hombres que se relacionan con Hombres (HSR), y un 33,1% para relaciones heterosexuales.

14


Tendencias de 2004 a 2010. Se aprecian diferentes tendencias en los nuevos diagnósticos según las categorías de transmisión. Así, en el grupo de usuarios de drogas intravenosas (UDI) se observa durante el período de 2004 a 2010 un descenso progresivo en las tasas por millón de habitantes. En el caso de la transmisión heterosexual, aunque se evidencia un descenso en el porcentaje de nuevos diagnósticos por esta causa, las tasas se encuentran más estabilizadas. Por el contrario, aumentan claramente los nuevos diagnósticos en hombres que tienen sexo con hombres (HSH). Dado el peso creciente que esta última categoría de transmisión tiene en el conjunto de los nuevos diagnósticos, el incremento en sus tasas repercute sobre las globales. El porcentaje de personas diagnosticadas cuyo país de origen es extranjero es cada vez mayor, pasando de un 31% en 2004 a un 35,7% en 2010. Pero este aumento porcentual no se acompaña de una elevación importante del número de casos, que ha pasado de 475 en 2004 a 533 en 2010. Evolución de la incidencia de Sida en España Desde el inicio de la epidemia en España se han notificado un total de 80.827 casos de sida. Tras alcanzar su máximo a mediados de la década de los 90, el número de casos notificados ha experimentado un progresivo declive. Con respecto al 2009, en el año 2010 los casos descendieron un 16% entre los varones y un 18% entre las mujeres. Por categorías de transmisión los UDI y los heterosexuales descendieron 26% y el 20% respectivamente, mientras que el descenso fue mínimo en los HSH, con un 1%. El VIH se transmite mayoritariamente por vía sexual, siendo la transmisión entre HSH la categoría mayoritaria, y su influencia crece año a año. Las personas de otros países suponen una parte relevante de los nuevos diagnósticos. El retraso diagnóstico es muy importante, y tan solo ha descendido entre los HSH. Respecto a los casos de sida, tras más de una década de disponibilidad de Terapia Antirretroviral de Gran Actividad (TARGA), la información aportada por el Registro Nacional de Sida nos indica que el avance en la reducción de la incidencia de sida en España ha sido notable. Este continuo descenso, inicialmente espectacular, se ha ido ralentizado en los últimos años. SÍFILIS Según los datos de la notificación numérica en 2010 se declararon en España, 3.187 casos de sífilis, lo que supone una incidencia de 6,9 casos por 100.000 habitantes. La incidencia anual de sífilis

15


experimentĂł un importante crecimiento entre 2005 y 2010 (figura 5)2. El mayor porcentaje lo encontramos entre varones del grupo etario 20-24 aĂąos (figura 6)2.

16


INFECCIÓN GONOCÓCICA En 2010 se declararon en España 2.306 casos de gonococia, lo que supone una incidencia de 5,01 casos por 100.000 habitantes. La incidencia anual ha experimentado un incremento continuo desde 2005 (figura 7)2.

Los datos aportados por el Sistema de Información Microbiológica (SIM) muestran una mayor afectación de hombres de entre 25 y 34 años (figura 8)2.

17


INFECCIÓN POR CLAMIDIA Durante el año 2010 se declararon al SIM 948 diagnósticos de Chlamydia trachomatis. Desde el 2005 al 2010 se aprecia un incremento en el número de los diagnósticos notificados al SIM (de 148 en 2005 a 948 en 2010) (figura 9)2.

Los diagnósticos fueron más frecuentes en mujeres de 25 a 34 años (figura 10)2.

18


HEPATITIS B En 2010 se notificaron 858 casos de hepatitis B. La incidencia fue de 1,86 casos por 100.000 habitantes. La incidencia se mantuvo con respecto al año anterior, los casos no presentaron una estacionalidad determinada (figura 11)2.

Los casos de hepatitis B fueron más frecuentes en hombres. En hombres las tasas más altas se dieron en los grupos de 25-34 años y 35-44 años con 4,29 y 4,15 casos por 100.000 habitantes, respectivamente. En mujeres, la tasa más elevada se dio en el grupo de 20-24 años (2,21 casos por 100.000 habitantes) (figura 12)2.

19


Los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dicen que más de un millón de personas se infectan cada día de alguna enfermedad de transmisión sexual y el 60% de ellas, es decir, unas 600.000 de esas personas, son menores de 25 años y de ellos, el 30%, es decir unos 180.000, son menores de 20 años, adolescentes. Así que los padres de adolescentes han de saber que sus hijos pueden padecer enfermedades de transmisión sexual siempre que sean sexualmente activos. Hay padres de adolescentes que creen que sus hijos no son activos sexualmente, bien porque es lo que éstos les dicen o porque sin preguntarles, ellos suponen que las cosas son así. Pero en algunos de estos casos deberían asegurarse porque no son raros los casos de padres que no tienen idea de las actividades sexuales de sus hijos. Cuando hablamos de adolescentes y ETS hay que tener en cuenta que el riesgo es mayor, por una serie de factores: 1.

Factores Biológicos.

2.

Actividad Sexual (edad de inicio de la actividad coital, número de parejas sexuales, prácticas sexuales).

3.

Uso de Métodos Anticonceptivos.

4.

Factores Psicosociales.

5.

Factores Educativos.

6.

Factores Sanitarios.

7.

Uso de Drogas.

8.

Factores Ambientales.

1. Factores Biológicos La inmadurez del sistema reproductivo de las adolescentes supone una mayor susceptibilidad para las ETS.

2. Actividad Sexual Edad de inicio de la actividad coital Se ha producido un adelantamiento en la edad de inicio de la actividad coital y una tendencia a la equiparación de la edad entre los dos sexos en la primera relación coital. Esta disminución de la edad de inicio de la actividad coital posiblemente este influenciado por: • Eficacia y divulgación de los métodos anticonceptivos. • Bajo nivel cultural de los padres. • Falta de creencias religiosas. 20


• Precocidad de la menarquia. • Inestabilidad familiar. • Mayor permisividad cultural y social.

Las chicas que inician la actividad coital antes de los 14 años presentan dos veces más incidencia de ETS que las que comenzaron su actividad coital con más de 17 años. Número de parejas sexuales Cuando existe un mayor número de parejas sexuales, mayor es el riesgo de adquirir una ETS. Prácticas sexuales Las pacientes con ETS exhiben una mayor conducta sexual de riesgo que la población general y el punto culminante son los jóvenes varones homosexuales.

3. Uso de Métodos Anticonceptivos El método anticonceptivo más utilizado por los adolescentes en las primeras relaciones sexuales es el coito interrumpido, pasando entre 6 y 12 meses desde el primer intercambio sexual hasta el uso de un método anticonceptivo de forma regular. Cuando las adolescentes acuden a las consultas de planificación familiar el preservativo es utilizado por un 50-60% de ellas, aunque el uso del mismo no es constante ni de manera adecuada. El uso del preservativo se integraba sólo como mecanismo contraceptivo de transición y no como método de prevención de ETS, pero con la aparición del Sida se produjo un aumento del uso del preservativo como método de prevención de ETS. Entre las dificultades aducidas al uso de los preservativos por adolescentes encontramos: • Reducción de la sensibilidad. • Interrupción de la relación. • Problemas en la relación sexual: retrasos en la eyaculación, no eyaculación, pérdida de erección. • Pérdida de espontaneidad. • No fácil acceso. • Precio. • No disponibilidad. • Falta de información. • Inexperiencia en su uso. • Vergüenza y dificultades para negociarlo con la pareja. 21


4. Factores Psicosociales La adolescencia es una etapa marcada por cambios psicológicos con inestabilidad psicológica y emocional e importantes contradicciones. Se busca la experimentación, existe un fuerte sentimiento de invulnerabilidad frente a enfermedades favorecido por la inexperiencia y la pobreza cultural.

5. Factores Educativos La falta de educación sexual actúa como un factor de riesgo para las ETS. Existe una escasa e incompleta educación sexual e información de las ETS, con una gran ignorancia por parte de los adolescentes de los aspectos relacionados con las mismas. Esta falta de educación se ha debido al temor a incitar las relaciones sexuales, pero en un informe de la OMS se destaca que la educación sexual no fomenta una mayor actividad sexual sino que más bien lo que hace es retrasar el inicio de las relaciones sexuales y potenciar un mejor uso de los métodos anticonceptivos. Los programas de educación sexual reducen el riesgo de relaciones sexuales no protegidas. La pandemia del SIDA aumentó los programas educativos en las escuelas e institutos, mostrando los adolescentes un conocimiento objetivo aceptable acerca de las vías de transmisión del VIH, pero la información no es suficiente ya que se observa una falta de valoración de las implicaciones que conlleva la información y errores de conceptos y opiniones específicas que pueden dificultar las medidas preventivas. Las campañas de prevención son necesarias porque el aumento del uso del preservativo es un beneficio para la salud de la población. El temor al SIDA fue un elemento motivador en la conducta de los homosexuales, tanto con una mayor frecuencia de uso del preservativo, una menor promiscuidad sexual y evitación de prácticas sexuales de riesgo.

6. Factores sanitarios El adolescente suele acudir a la consulta con un cuadro confuso, difícil de definir, muchas veces simulando otros cuadros clínicos y sin el conocimiento de sus padres.

7. Uso de Drogas La incidencia y prevalencia de drogadicción de las “drogas blandas” (tabaco, alcohol, analgésicos) y “duras” (heroína, cocaína....), referidas a las etapas de comienzo como a las etapas de consumo son altamente significativas en adolescentes y jóvenes. Un alto porcentaje de adolescentes consumen sustancias tóxicas (alcohol, hachís, cocaína...) antes de las relaciones sexuales, siendo este consumo un factor de riesgo por múltiples causas. La cocaína es un estimulante temporal del impulso sexual y el alcohol se ha asociado a una mayor desinhibición sexual. Todo ello junto al consumo de otras drogas disminuyen las conductas preventivas en las relaciones sexuales como el uso del preservativo y la 22


capacidad de reaccionar ante situaciones de riesgo. Además, la adicción conduce al intercambio de sexo por drogas, aumentando el número de contactos sexuales y de prácticas de riesgo.

8. Factores Ambientales Existe una gran influencia por parte de los medios de comunicación social (cine, televisión, revistas, cómics, publicidad…), en donde se bombardea a los adolescentes con mensajes sobre lo atractivo del sexo sin orientar en los aspectos preventivos. Los compañeros ejercen una gran presión sobre el adolescente, aplicando a las relaciones sexuales una serie de valores superiores: placer, sexo.

Las ETS son un problema importante de salud a nivel mundial. Al estar ligadas al comportamiento humano y a su sexualidad determinan que, si bien su erradicación es prácticamente imposible, no lo es poder conseguir disminuir su incidencia y sus complicaciones. La Prevención Primaria, consiste en evitar la ocurrencia de nuevos casos de ETS previos a la aparición de la infección mediante la reducción o eliminación de los factores de riesgo o exposición al riesgo. Comprende varias medidas: 

Vigilancia epidemiológica

Sin la adecuada información sobre datos de incidencias y prevalencias de las ETS que permitan el conocimiento del riesgo para que se produzca una infección, no se pueden desarrollar programas preventivos. La obtención de esta información es difícil, compleja y costosa por lo que se debe trabajar en mejorar estos sistemas de información e implantarlos a todos los niveles. 

Educación para la salud

Es uno de los elementos preventivos más útiles y debería realizarse de forma sistemática y universal en las escuelas, iniciándola antes del inicio de la actividad sexual, cuando no se han comenzado las conductas de riesgo (antes de los 15-16 años), ya que es más fácil enseñar conductas positivas que intentar cambiar conductas de riesgo arraigadas y a partir de esa edad toda intervención sería poco eficaz. 

Consejo médico

Implica una mayor interacción del médico con el paciente, ayudándole a identificar sus factores de riesgo y a desarrollar un plan personal para su reducción. Este consejo debe ser práctico, específico y simple, incluyendo la abstinencia sexual o compañero/a mutuamente monógamo, uso de preservativo ante una práctica sexual de riesgo, solicitud de atención médica inmediata ante síntoma de ETS y caso de presentar infección asegurar que los compañeros sexuales sean examinados y tratados. 23


Campañas de promoción sanitaria

Es difícil establecer relación de causalidad directa entre las campañas de información y las modificaciones efectivas del comportamiento. Sólo el conocimiento es insuficiente para lograr influir en las actitudes, la intención de conducta y el comportamiento objetivo. Es necesario promover la reflexión personal sobre las propias concepciones, la capacidad y habilidad para llevar a cabo conductas preventivas. Las campañas de información o de educación sanitaria deben segmentarse bien dentro de la población diana a quien se quiere alcanzar con el mensaje, puesto que las campañas generales inciden poco en los colectivos de alto riesgo. Se deben elegir los segmentos que sean significativos. Para que las campañas sean eficaces, el receptor debe ser sensible al mensaje y éste debe ofrecer una credibilidad suficiente. Utilizar el miedo como arma a la hora de buscar cambios positivos ante un tema/amenaza que se ve lejano e incierto frente a la obtención de placer mediante las relaciones sexuales que se ven próximas e impulsivas, no consigue nada. Las campañas actuales que fomentan el uso del preservativo lo asocian a algo deseable: prueba de amor, un objeto de placer, de seducción, de complicidad, de fidelidad y confianza en las personas. La promoción del preservativo debe ofertar aspectos positivos como el disfrute del placer sexual, ya que mejora la tranquilidad, libera el miedo, aporta un elemento más al juego erótico y prolonga el tiempo de la relación sexual. Deben darse habilidades para convencer a los compañeros sexuales de la necesidad de usar el preservativo de forma que se asocie su uso a conductas y calidades de vida deseables. La mejor arma contra las enfermedades de transmisión sexual y para que el sexo sea seguro es la información. Los padres, profesores y tutores de adolescentes deben dar información sexual a los chicos y chicas. Esa información debe ser cierta, fácil de comprender y suficiente para lo que necesiten en cada etapa. Es fundamental que todo lo que deben saber sobre las enfermedades de transmisión sexual esté en su conocimiento antes de que comiencen a ser sexualmente activos.

La edad de inicio de las relaciones sexuales coitales en España3, al igual que en otros países europeos y EEUU, ha ido disminuyendo en estas últimas décadas y, actualmente, se sitúa alrededor de los 16 años en la población general. Mientras que entre los universitarios tiene lugar algunos años más tarde. Durante este tiempo se ha incrementado el uso de métodos anticonceptivos y también su grado de eficacia, entre ellos cabe destacar la píldora, cuyo empleo comenzó a generalizarse a finales de los 60 aunque en nuestro país no fue legalmente autorizada hasta unos diez años después. Paralelamente a estos cambios se ha observado un incremento en el número de embarazos no deseados en las adolescentes. Así mismo las tasas de aborto en este colectivo son más elevadas que las de mujeres de otras edades y presentan una tendencia al alza. 24


La prevención de los comportamientos sexuales de riesgo en nuestro país durante muchos años se ha orientado, principalmente, hacia la anticoncepción y, muy en segundo término, a evitar las enfermedades de transmisión sexual. Igualmente, la política sanitaria ha venido prestando una atención preferente a reducir los embarazos no deseados que, han aumentado de manera progresiva entre las jóvenes. Pero ese incremento también se ha producido, al igual que en otros países desarrollados, en la incidencia de enfermedades de transmisión sexual en el mismo grupo. Aunque con frecuencia se escucha hablar de los malos hábitos sexuales de muchos jóvenes, las malas costumbres sexuales se pueden evitar. El sexo seguro comienza por una información suficiente y científica. Suficiente será cuando responda a todas sus dudas y los provea de los recursos que necesiten en todo momento. Habrá adolescentes de quince años que quizá no necesiten saber cómo se usa o dónde se compra un preservativo, pero habrá otros que ya necesiten esa información incluso antes de esa edad. Los referentes educativos con los que la adolescencia cuenta para enfrentarse de una forma saludable y positiva a estas tareas evolutivas son escasos.

Por una parte está la educación que se recibe por parte de los padres, teniendo en cuenta las diferentes clases sociales y los distintos niveles de estatus social, no todos los jóvenes reciben la misma educación. Incluso poniéndonos en el caso de padres modernos con un cierto nivel de formación, la información que éstos puedan trasladar a sus hijos resulta escasa, por varios motivos. En primer lugar porque puede que no tengan la formación adecuada, en segundo lugar porque diversos estudios demuestran que los jóvenes atienden mejor para este tema de la sexualidad a profesionales o a personal externo3. Digamos que lo padres podrán trasladar unas nociones básicas, y por supuesto asentar unos valores, pero no dejemos de lado el hecho que hablar sobre sexualidad sigue siendo un tema tabú, y para que los jóvenes se sientan en total libertad de poder expresar todas sus dudas y curiosidades resulta mucho más efectiva una formación sexual externa.

Teniendo conocimiento de la importancia que supone esta formación antes del inicio de las relaciones sexuales no sería eficaz dejarla solo en manos de la educación los padres, ya que existirán casos en los que sí se reciban unos conocimientos suficientes, pero la mayoría no alcanzarían un nivel adecuado. Puesto que en España se establece la ESO como la enseñanza secundaria obligatoria y suponiendo que todo joven va a recibirla, sería el lugar desde donde deberíamos plantearnos impartir esta educación sexual. De manera que aseguraríamos así que todos los chicos y chicas reciban unos conocimientos adecuados.

25


En general en la Educación Secundaria baja el rendimiento académico de los chicos y chicas así como su motivación por la escuela, puesto que están en plena adolescencia4, periodo en el desarrollo biológico, psicológico, sexual y social inmediatamente posterior a la niñez y que comienza con la pubertad. Su rango de duración varía según las diferentes fuentes y opiniones médicas, científicas y psicológicas, pero generalmente se enmarca su inicio entre los 10 y 12 años, y su finalización a los 19 o 20. Para la Organización Mundial de la Salud, la adolescencia es el período comprendido entre los 10 y 19 años y está comprendida dentro del período de la juventud (entre los 10 y los 24 años). La pubertad o adolescencia inicial es la primera fase, comienza normalmente a los 10 años en las niñas y a los 11 en los niños y llega hasta los 14-15 años. La adolescencia media y tardía se extiende, hasta los 19 años. A la adolescencia le sigue la juventud plena, desde los 20 hasta los 24 años. La adolescencia puede ser definida biológicamente, como la transición física marcada por el inicio de la pubertad y la terminación del crecimiento físico, cognitivo, como los cambios en la capacidad de pensamiento abstracto y multi-dimensional, o socialmente, como un período de preparación para los roles adultos. De aquí la importancia de ser a este nivel en el que hay que empezar a impartir Educación para la salud, como método de Promoción de la Salud. Entendemos por Educación para la salud, como las oportunidades de aprendizaje creadas conscientemente con vistas a facilitar cambios de conducta encaminadas a una meta predeterminada, o inculcar una serie de conocimientos y valores para que los jóvenes dispongan de herramientas suficientes a la hora de enfrentarse ante situaciones determinadas. En España, la reforma educativa puesta en marcha con la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE), considera

la Educación para la Salud5, un área de conocimiento

transversal, es decir, no es una asignatura en sí misma, sino que debe impregnar los contenidos de todo el resto de asignaturas. La Educación para la Salud es responsabilidad del equipo educativo en su conjunto. Por eso la formación en este campo para profesionales de la educación es fundamental. También podría recurrirse a personal externo. Cuanta más información tengan los adolescentes sobre las enfermedades de transmisión sexual, mejor podrán evitarlas.

26


Veamos y analicemos todo tipo de información relacionada con el tema que se encuentra al alcance de los jóvenes. Desde el año 1994, el Instituto Andaluz de la Juventud a través del Teléfono de Información Sexual presta información y asesoramiento a la juventud andaluza en materia de sexualidad. Su utilidad y la calidad en la atención prestada han favorecido que se consolide como un servicio de información sexual pionero, que posteriormente fue adoptado por otras Comunidades Autónomas. Desde su puesta en funcionamiento, se convirtió en un magnífico observatorio de la evolución de la sexualidad de la juventud andaluza en los últimos años. Una media de 30 llamadas diarias han servido para dibujar un panorama completo de cómo se relacionan los y las jóvenes andaluces con el hecho sexual. Otra de las opciones para obtener información son los Centros de Planificación Familiar. En éstos, además de asesorar sobre la forma correcta de cómo utilizar los métodos anticonceptivos, también ofrecen asesoramiento sobre ETS o educación sobre sexualidad. Aunque todo el mundo puede acudir a un centro de planificación familiar, estos resultan especialmente útiles para adolescentes, ya que les permiten acudir al ginecólogo o a consultar dudas con un experto en sexología sin que sus padres se enteren, ya que no es necesario que pasen por el médico de cabecera. Si quieren pedir la ayuda de los expertos que trabajan en un centro de planificación familiar, pueden hacerlo acudiendo a uno de ellos o realizando una llamada telefónica para que aclaren todas tus dudas. Aquí en estos centros se hace todo de forma anónima y la intimidad es una de sus premisas fundamentales.

Una de las formas o métodos más utilizados en prevención, son las campañas publicitarias6. Desde hace ya algún tiempo se vienen realizando campañas de prevención contra embarazos no deseados, Sida y ETS. Han transcurrido unos 20 años de una de las mayores campañas de prevención en ETS y que dio mucho que hablar, la llamada “Póntelo, pónselo”, en la que se promovía el uso del preservativo. Hace 20 años no se hablaba de éste tan abiertamente, fue una campaña muy ruidosa que hizo de un furtivo objeto de deseo algo mucho más cotidiano y común. Incitaba a sacar el preservativo escondido en un cajón, para llevarlo encima como la cosa más natural del mundo, y lo cierto es, que 20 después vemos el impacto social de aquella campaña y realmente marcó un momento importante. Ahora es algo natural, incluso indicativo de persona precavida llevarlo encima. Ese gesto de sacar de la cartera un condón como la cosa más normal del mundo. Destacar también que el famoso “póntelo, pónselo”, fue una atrevida invitación a que las chicas, las mujeres, llevaran la iniciativa en un terreno en el que el hombre estaba acostumbrado a mandar, al menos simbólicamente. La campaña asumía la igualdad del hombre y la mujer, un gran salto para aquel momento, aunque no fue 27


intencionado. No entraremos en el debate de la polémica social creada en los sectores más conservadores.

Otras campañas fueron, "contra el SIDA presérvate",

“1000 caminos para el amor, uno para

protegerte”, “Condonéate. Placer sin riesgo”…en las que la idea central es fomentar una actitud positiva hacia el uso del preservativo como método de prevención eficaz contra el VIH y otras infecciones de transmisión sexual. Es decir, trabajar la erotización del preservativo reforzando las consecuencias positivas que supone una relación sexual con protección. Otras ideas que intentan trasladar estas campañas son: 

Trabajar las habilidades personales y fomento de la asertividad.

Trabajar desde las emociones en el marco de la educación afectivo sexual.

Tener en cuenta la perspectiva de género: que las mujeres se impliquen más a la hora de plantear el uso del preservativo.

Potenciar el grupo de iguales como espacio para el debate y la reflexión.

Favorecer las acciones preventivas dirigidas a la población juvenil más vulnerable, especialmente los y las jóvenes con país de origen diferente a España.

Además de las campañas publicitarias para transmitir información con la finalidad que alcanzar unos objetivos, encontramos también talleres, jornadas formativas, organizados por el gobierno o instituciones educativas, sanitarias, sociales, como Ministerio de Sanidad, Ministerio de Educación o Asuntos Sociales, Consejerías, a nivel de comunidad autónoma, Diputaciones a nivel provincial , Ayuntamientos a nivel municipal, etc. De las campañas publicitarias en general es importante resaltar el efecto diferencial en cuanto al “sexo”. Se evidencia que en las mujeres se logra un impacto persuasivo mayor, tanto afectivo, como cognitivo y de intención de conducta, tras la recepción de información preventiva. Sin embargo, los datos de vigilancia epidemiológica indican un aumento de ETS, especialmente en mujeres adolescentes-jóvenes (Ministerio de Sanidad y Consumo 2003; ONUSIDA 2004). Por lo que hace pensar en la posibilidad de que haya algún proceso que interrumpa la predisposición a adoptar conductas preventivas. Algunos estudios han teorizado sobre la importancia de la negociación sexual con la pareja heterosexual para tener relaciones sexuales seguras. Esta variable adquiere una enorme importancia en el marco de unos roles de género distintos y unas normas sociales diferentes establecidas en función del sexo y que pueden mediar en el proceso de adopción de conductas de salud. Ante esta situación, el control de la mujer de métodos anticonceptivos y, en especial, aquellos que previenen el contagio las ETS, supone un papel a destacar. Como alternativa está el preservativo femenino, que 28


junto a su papel anticonceptivo, se convierte en el único método que permite la prevención de ETS (no todas). También destacaremos que tras diversos estudios que evalúan los resultados de las campañas publicitarias, se concluye que la medición de variables dependientes como “Impacto Afectivo”, “Impacto Cognitivo”, “Impacto sobre Intención de Conducta”, inmediatamente después de visualizar los anuncios publicitarios de la campaña, conlleva a tener cautela en la consideración de estabilidad de los resultados obtenidos. Por lo que podemos considerar las campañas publicitarias como un instrumento informativo, que puede crear un impacto en un momento determinado, pero que no alcanzarían a inculcar unos valores sólidos en cuanto a educación sexual en los adolescentes. Podrían utilizarse como instrumentos recordatorios, de apoyo a otros métodos que asienten desde el principio de la educación estos valores.6 Profundizando aún más, encontramos que la educación sexual se contempla en diferentes programas formativos organizados desde distintas instituciones públicas. Por ejemplo en Andalucía existe el Programa “Forma Joven”7, es una estrategia de salud dirigida a promover entornos y conductas saludables entre la gente joven de Andalucía. Basado en la acción intersectorial, en su desarrollo cooperan varias Consejerías de la Junta de Andalucía (Salud, Educación, Igualdad y Bienestar Social) así como otras instituciones y agentes sociales como ayuntamientos, asociaciones de madres y padres. La estrategia consiste en acercar las actividades de promoción de la salud y de prevención de los riesgos asociados a la salud, a los entornos donde conviven jóvenes y adolescentes y otorgarles, además, un papel activo y central en dichas actividades. Pretende capacitar a los jóvenes para que elijan las opciones más saludables en cuanto a los estilos de vida: entre ellas la sexualidad. Se desarrolla en los Puntos Forma Joven, ubicados en los diversos espacios frecuentados por la población adolescente como son institutos de enseñanza secundaria, escuelas taller, universidades, espacios de ocio, comunitarios, etc. Se presenta como un instrumento educativo de apoyo al desarrollo de las competencias básicas de la ESO.

Como tal deberá integrarse en el Proyecto Educativo, apoyarse en el desarrollo curricular de las respectivas áreas y engranarse como recurso con todos los demás elementos del centro. La concreción en el territorio de Forma Joven ha de establecerse con un compromiso formal de adhesión al proyecto por parte de la institución con la que se va a trabajar. El proyecto que se vaya a poner en marcha ha de estar recogido en el Plan de Centro de los centros educativos.

29


Forma Joven se desarrolla a través de varios tipos de acciones complementarias: -Asesorías, en las que se oferta información, asesoramiento, formación, orientación, consejo básico, etc. y pueden ser realizadas por distintas personas formadas previamente: profesionales de educación, de salud o de otros sectores). -Los proyectos, que implican una programación y tienen como destinatarios siempre a “grupos” definidos: grupo de clase, grupo natural en el barrio, asociaciones... -Las actividades didácticas, que consisten en el desarrollo de propuestas docentes sobre diversos contenidos para ser realizadas en clase durante el horario lectivo y están relacionadas con los objetivos y contenidos de las distintas áreas de aprendizaje. Estas actividades aportan significado funcional y lógico al currículum ordinario y contribuyen especialmente al desarrollo de las competencias básicas. Son las actividades más potentes para la prevención y para el aprendizaje. Aunque en ocasiones es necesario ampliar algunas áreas para poder abordar un problema de gran relevancia, como es el caso de la sexualidad. -Otras actividades como concursos, charlas, etc. Que han de ser complementarias con la estrategia global. Este tipo de actuaciones realizadas de manera puntual no tienen ningún impacto sobre los estilos de vida. Forma Joven se oferta, por el momento, a centros públicos dependientes de las diferentes Consejerías, fundamentalmente Institutos de Enseñanza Secundaria. Para que un Equipo Forma Joven se constituya, será siempre condición necesaria que exista una coordinación entre la institución o entidad en la que se crea el Punto Forma Joven y el Centro de Salud, materializándose ésta en la constitución de un equipo formado por una persona de la institución o entidad y otra del centro de salud; Esta gran iniciativa que es una realidad en Andalucía, solo se imparte en aquellos centros públicos que lo solicitan y hacen convenio con Sanidad, por lo que no asegura la formación en todos los jóvenes, y en muchas ocasiones son asesorías, por lo que en aquellos centros en los se lleva cabo, tampoco daría cobertura al 100% de los alumnos y alumnas. Evaluando esta iniciativa directamente con los profesionales sanitarios que la imparten, éstos trasladan como debilidad que no se imparten las horas necesarias, ya que depende de la disponibilidad de éstos, y suele ser escasa. Es un tiempo que tendrían que restar a sus servicios en el centro de salud. El dar la charla también conlleva una preparación, una formación previa. Además se quejan de que ellos mismos no reciben la formación necesaria para impartir estas materias. Imparten algunas nociones de educación afectivo-sexual, pero sin entrar en profundidad en las ETS. Dentro de la formación reglada Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), las asignaturas que encontramos relacionadas con el tema que nos ocupa son, en 3º de ESO, Educación para la ciudadanía y en 4º de ESO Educación Ético-Cívica. Vienen establecidas en el (Real Decreto 1631/2006 de 29 de

30


diciembre)8, por el que se establecen las enseñanzas mínimas correspondientes a la Educación Secundaria Obligatoria. Estas son las enseñanzas mínimas, y entre sus contenidos no encontramos la Educación sexual como tal. Existen colegios que desarrollan programas, introducen contenidos y profundizan más sobre el tema, aunque la mayoría no dedican el tiempo suficiente. Algunos declaran que no le dedican el tiempo suficiente por la falta de recursos del colegio y por la falta de preparación por parte del profesorado. Hay excepciones y algunos colegios integran la educación sexual en su proyecto curricular, dedicándole un número mayor de horas, pero en términos generales la dedicación a esta materia tiende a ser escasa9. En conclusión de todas las actividades revisadas, ni la formación reglada ni los programas de apoyo a la educación de los jóvenes dedican el tiempo necesario a la educación sexual, siendo los contenidos de muchos de ellos escasos, a veces por falta de recursos, tanto materiales como de personal. Encontramos siempre que el personal no tiene la suficiente especialización para impartir este tipo de actividades y se tocan de manera superficial. Puesto que las actividades didácticas son las acciones que han demostrado conseguir un mayor impacto sobre habilidades y conductas saludables respecto a la sexualidad de los jóvenes, y la educación sexual continúa siendo un desafío para los profesionales, el presente proyecto propone como intervención la introducción de la Educación Sexual de forma obligatoria en la ESO. Se pretende poner en marcha una acción formativa rigurosa, y con ello inculcar unos valores en los jóvenes desde temprana edad, cuando comienzan a forjarse los patrones de conducta, de forma que adquieran las herramientas necesarias para desarrollar conductas saludables para proteger su propia salud y la de los demás. Puesto que la ESO es obligatoria, se pretende alcanzar a todo el colectivo de adolescentes posibles. La intervención será dirigida a los cursos 3º y 4º de ESO. En estos cursos la media de edad es de 14 -16 años, justo antes del inicio de las relaciones sexuales. Este es uno de los puntos clave para la prevención, que los adolescentes adquieran los conocimientos antes de iniciarse en las relaciones sexuales. Ya que en las acciones realizadas con anterioridad una de las debilidades era la formación del personal docente, esta intervención se llevará a cabo por profesionales especializados en la materia, que serán contratados específicamente para impartir estos conocimientos.

31


32


2. OBJETIVOS El objetivo principal de la intervención es la Prevención de ETS en adolescentes. Como objetivos específicos señalamos: 

Integrar la promoción de salud en los lugares que frecuentan habitualmente la mayoría de los jóvenes.

Contribuir a dotarles de recursos y capacidades para afrontar los riesgos derivados de conductas sexuales no saludables.

Incentivar la posibilidad de compatibilizar salud y diversión.

Favorecer la elección de las conductas más saludables en cuanto a estilos de vida.

Contribuir al desarrollo, en la población joven y adolescente, de las competencias básicas necesarias para su crecimiento personal y social.

Incentivar la comunicación entre jóvenes y profesionales con el fin de que aquellos participen en las actividades didácticas.

Integrar la Educación Sexual como un derecho humano.

Inculcar valores éticos y morales que ayuden a los jóvenes a optar por patrones de conducta saludables.

Analizar si existen diferencias en la realización de comportamientos heterosexuales de riesgo en función del sexo, de la edad y del grado de experiencia sexual (número de parejas).

Conocer en qué medida se conocen los distintos métodos anticonceptivos con el fin de evaluar el nivel de riesgo de infección por ETS y embarazos no deseados.

Promover el uso de métodos anticonceptivos.

Mejorar los sistemas de vigilancia de ETS y crear registros de aquellas enfermedades que no siendo EDO, podrían aportar datos muy significativos, como por ejemplo, Virus del Papiloma Humano.

Crear más Sistemas Centinela con el fin de evaluar mejor los nuevos casos.

33


34


3. METODOLOGÍA 3.1. Ámbito de la intervención La intervención está dirigida al ámbito escolar y se llevará a cabo en la ciudad de Granada. Tendrá una duración aproximada de un año escolar. Para llevar a cabo el presente proyecto necesitamos un número de centros de educación que nos proporcionen la población diana a la que va dirigidos. Esta población diana debe presentar características similares en cuanto a nivel económico, estatus social. Será necesario contar con el compromiso formal de los centros que van a participar en la intervención. Se contactará con los distintos centros de enseñanza secundaria obligatoria de la ciudad de Granada, tanto públicos, privados o concertados. En la selección se tendrá en cuenta si son públicos, privados o concertados. Se trata de seleccionar una muestra representativa de cada uno de ellos, por lo que todos han de estar representados para comparar resultados. Una vez seleccionados los centros, se contactará con los padres de los alumnos a los que va dirigida la intervención, para informarles de todo el contenido del proyecto y será necesario obtener un permiso de consentimiento por parte de éstos. En el caso de que los padres pongan objeción a que sus hijos participen en la intervención, estos alumnos serán rechazados del grupo final constituido. Se considerará un criterio de exclusión por tanto, el consentimiento de los padres. Se realizará un cuestionario inicial3 para valorar los conocimientos de los alumnos al inicio de la intervención. Se realizará una selección de profesionales que han de acreditar una formación adecuada tanto en salud como en educación, y que serán los que impartan las actividades didácticas. Además serán los que evalúen los resultados de la intervención al final del curso escolar. Estos profesionales sanitarios han de dedicar las horas lectivas que se establezcan, teniendo en cuenta el tiempo que además requieran para preparar sus intervenciones y el tiempo que dediquen a las evaluaciones, siendo éstos en horario no lectivo. En el ámbito de la intervención se incluyen los adolescentes pertenecientes a los centros seleccionados, los profesionales que impartirán las clases de educación afectivo-sexual, los centros educativos en cuestión y la dirección de los centros.

3.2. Descripción de la Intervención Al frente del proyecto se ha constituido un equipo de dirección formado por cinco integrantes, un farmacéutico-docente que lo preside, un psicólogo, dos de los profesionales sanitarios que van a participar en las labores docentes y uno de los directores de los centros seleccionados, elegido al azar 35


de entre los 3 centros participantes en la intervención. Los profesionales que van a impartir la docencia será personal formado tanto en salud como en educación, serán educadores sexuales. En primer lugar, en el mes de junio del curso anterior a la intervención, 2 de los miembros del equipo de dirección se personarán en los 14 centros de ESO ubicados en la ciudad de Granada para entrevistarse con el director del centro y presentarle la intervención propuesta. Se facilitará además de material escrito una explicación verbal y se concederá el plazo de 2 meses para que el centro pueda dar una respuesta, aceptando o rechazando la intervención. En este tiempo el centro pondrá a disposición de los padres de los alumnos la información escrita facilitada y le trasladará la verbal mediante reunión explicativa. La información escrita que se facilita al centro detallará, el tipo de intervención, la población diana, el objetivo general y los específicos de la intervención, los métodos y actividades docentes a impartir y los modelos de evaluación final. Aquellos padres que estén de acuerdo darán su consentimiento por escrito. A primeros del mes de Septiembre los centros darán una respuesta al equipo de dirección, y éste, de entre aquellos que estén interesados en participar hará una selección de 6 centros. La selección se hará de la siguiente manera, 2 centros serán públicos, 2 centros serán privados y los otros 2 serán concertados. Del total de centros se tendrá en cuenta también el número de chicas y chicos por aula, intentando que sea lo más equitativo posible, para que ambos sexos estén representados por igual. De cada centro se seleccionará un curso de 3º de ESO y otro de 4ª de ESO. Tras el proceso de selección nos encontramos con un total de 135 alumnos, de los que el 53,33% son chicas. La media de edad es de 15,59. Antes de empezar la intervención que comienza con el curso escolar, se impartirá una charla por parte del equipo de dirección a los padres de los alumnos seleccionados. Las actuaciones comenzarán con el curso escolar y finalizarán con éste. Al finalizar el curso se llevará a cabo la evaluación, mediante el tratamiento de datos y el análisis de resultados, aunque se harán evaluaciones periódicas coincidiendo con las evaluaciones escolares, serán 3 en total. Primera evaluación en el mes de diciembre, segunda evaluación en el mes de abril y tercera evaluación y final en el mes de junio. Contaremos con un consentimiento firmado por parte de los padres de los jóvenes implicados, así como un compromiso formal de confidencialidad por parte del equipo que dirige la intervención, en cuanto a la protección de datos de los jóvenes participantes, ya que con los datos finales obtenidos se realizará el correspondiente estudio siendo posible su publicación en revista científica o de interés socio-cultural.

36


Al inicio del curso se realizará un cuestionario3 a todos los alumnos seleccionados para saber el nivel de conocimientos que tienen, y así detallar los profesionales los contenidos que van a impartir durante el curso. Antes de realizar este cuestionario se hará una prueba piloto a 15 adolescentes para valorar su inteligibilidad y aceptación. Durante el curso se realizarán además de las clases docentes, talleres, charlas y coloquios, aunque las clases en sí ya se proyecta que sean participativas, en las que los alumnos se impliquen de forma activa y exista una interacción entre profesional-alumno/a fluida. También mediante los coloquios se propicia la interacción entre los propios jóvenes. Se definirán los contenidos a impartir en cada uno de los cursos, por una parte 3º y a continuación 4º donde se amplían los conocimientos de tercer curso y se profundiza aún más en la materia. A final de curso se realizará un cuestionario para valorar los conocimientos adquiridos.

3.3. Plan de Trabajo La intervención es diseñada por los profesionales del equipo de dirección, pertenecientes a las Consejerías de Salud y a Educación. Entre ellas se realiza un convenio de colaboración para llevar a cabo el proyecto, y son las que facilitan los fondos necesarios para materializar la intervención. Facilitan los recursos personales y materiales necesarios. Con los 6 cursos seleccionados de los 3 centros elegidos comenzamos nuestra intervención. Antes de iniciar el curso se imparte una charla informativa a los padres de los alumnos elegidos. El primer día de curso comenzará con una presentación del programa docente que se pretende impartir, y ese mismo día se repartirá un cuestionario a los alumnos para valorar sus conocimientos al inicio de la intervención. La realización del cuestionario será parte fundamental del estudio. También se repartirá al final de la intervención, al concluir el curso escolar para extraer resultados y conclusiones y poder evaluar los cambios producidos tras la intervención en la conducta y actitudes de los adolescentes. Este cuestionario3 contiene una serie de ítems agrupados en 3 áreas, (de conocimiento general, actitudes hacia la anticoncepción y de información). Veamos los ítems de cada área. De conocimiento general (respuesta verdadero/falso): -El hombre que tiene un pene grande tiene mayor potencia sexual -El mejor momento para que una mujer se quede embarazada es durante la menstruación -Haciendo el amor en algunas posturas, la chica no se puede quedar embarazada -El alcohol y otras drogas son excitantes y mejoran las relaciones sexuales -La masturbación es propia de personas inmaduras -Si la mujer se lava la vagina después de hacer el amor no se quedará embarazada 37


-La homosexualidad es un trastorno sexual o una enfermedad -El preservativo es seguro si se coloca justo antes de “correrse”, aunque antes haya habido penetración -Para usar el DIU la chica debe ir a que se lo ponga un médico -El diafragma es como el condón, de quita y pon -Si se usa diafragma hay que utilizar además crema espermicida -Si la mujer orina inmediatamente después del acto sexual no quedará embarazada -Casi todos los anticonceptivos sirven tanto para evitar embarazos como infecciones sexuales (p.ej. SIDA) -El SIDA sólo puede contagiarse cuando un chico y una chica hacen el amor -El coito interrumpido es un método que evita que la chica quede embarazada -El clítoris está situado en el útero” -El mejor momento para que una chica quede embarazada es en los quince días después de la regla -Si la mujer no llega al orgasmo no quedará embarazada -La masturbación provoca problemas físicos -No es posible que una chica quede embarazada la primera vez que hace el amor -Las enfermedades de trasmisión sexual sólo se cogen si se tienen relaciones con prostitutas -Si una chica tiene relaciones sexuales sin utilizar ningún método puede evitar quedar embarazada tomando una píldora que le da el médico cuando vea que no le baja la regla -La función de los ovarios es proporcionar placer sexual a la mujer -Los métodos anticonceptivos no son necesarios si se tienen pocas relaciones sexuales Área de actitudes hacia la anticoncepción (respuestas: NS/NC, nada de acuerdo, de acuerdo): -Las relaciones sexuales programadas y planificadas pierden su valor al no ser espontaneas -Los métodos anticonceptivos fallan mucho -Los métodos anticonceptivos hacen que se disfrute menos de la relación sexual -Utilizar métodos anticonceptivos quita espontaneidad a la relación -Los métodos anticonceptivos son difíciles de conseguir por los jóvenes -Los métodos anticonceptivos pueden causar problemas en el hombre o la mujer que los use -Yo paso mucho de usar anticonceptivos -No me importaría llevar condones encima aunque pensaran mal de mí -Si estamos los dos excitados y apunto de hacer el amor me da corte decirle que utilicemos preservativos 38


-Las chicas que usan métodos anticonceptivos son “fáciles” -Me cortaría mucho ir a la farmacia a comprar pastillas o condones -La primera vez, ¿qué anticonceptivo utilizasteis? (posibles respuestas: marcha atrás/ nada/preservativo/ píldora/ durante la regla). -En tus relaciones con penetración ¿Qué método anticonceptivo sueles usar? Respuestas :(marcha atrás/píldora/ antes o después dela regla) -Si has tenido relaciones sexuales sin utilizar ningún método, lee las siguientes frases y señala los motivos que has podido tener : (No tengo relaciones frecuentes/ hacen la relación menos natural / no había pensado la posibilidad de tenerlas/ es un rollo si se entera la familia / son peligrosos / hacen que disfrutemos menos / no sabía dónde informarme/ los debe usar el chico (si es chica) / sabemos controlar sin utilizar anticonceptivos / no me importa quedarme embarazada (o dejarla embarazada)

Área de Información:

-Me daría vergüenza pedirle a mis padres orientación sobre anticonceptivos: (NS/NC, nada de acuerdo, de acuerdo) -¿Quién preferirías que te informara sobre estos temas de sexualidad y anticoncepción? (mis padres/ maestros / médicos / otros jóvenes formados en el tema) -En el terreno de la sexualidad ¿qué tipo de necesidades tienes?” (Información sobre sexualidad / Información sobre métodos anticonceptivos / Obtención de métodos anticonceptivos / Exploración y revisión ginecológica / Tratamiento de infecciones y ETS / Problemas sexuales y de pareja) - ¿Dónde acudirías para obtener información sobre los métodos anticonceptivos o para empezar a utilizarlos? (Centro de planificación o ginecólogo / Médico / Farmacia / Padres / hermanos o amigos / Otros) -¿Has utilizado alguna vez los servicios de algún centro de planificación familiar o recibido orientación sobre anticonceptivos? (NS/NC, SI, NO). -¿Dónde crees que deberían estar estos centros? (Casa de la cultura o Centro de Información juvenil / Ambulatorio / Centro de planificación sólo para jóvenes / Servicio que vaya a centros educativos / Servicio que vaya a barrios o pueblos / NS/NC). -¿Quién te gustaría que te atendiera? (Médico o enfermera / Psicólogo / Educador sexual / Jóvenes formados en el tema / Otros / NS/NC). -En general, ¿quién te gustaría que te atendiera?” (NS/NC / Hombre / Mujer / No me importa si son hombres o mujeres). 39


De este primer cuestionario los formadores obtendrán mucha información para así orientar adecuadamente sus clases. Se establece una hora semanal de educación sexual a cada curso. Los formadores o educadores serán los mismos para todos los centros. Estos formadores se coordinarán con la dirección de cada centro para planificar su plan de trabajo.

Detallamos a continuación el temario10 (modificado) a impartir.

Introducción: Derecho a la educación Sexual.

Tema 1. ¿Qué es la sexualidad? 1. Sexo y sexualidad. 2. ¿Por qué somos seres sexuados?: las mediaciones de la sexualidad. 3. Aproximaciones al estudio de la sexualidad. 3.1. La sexualidad desde una perspectiva histórica. 3.2. La perspectiva biológica. 3.3. La perspectiva evolucionista. 3.4. La sexualidad en una perspectiva comparada. 3.5. La perspectiva transcultural. 3.6. La perspectiva psicológica.

Tema 2. Bases anatómicas y fisiológicas de la sexualidad. 1. Órganos sexuales externos. 2. Órganos sexuales internos. 3. Los pechos. 4. El ciclo menstrual.

Tema 3. La excitación y la respuesta sexual. 1. La sexualidad y los sentidos. 2. Afrodisíacos, drogas y respuesta sexual. 3. Las hormonas y la conducta sexual. 4. El ciclo de respuesta sexual. 5. El orgasmo. 6. ¿El punto G?

40


Tema 4. Identidad sexual y roles de género. 1. La diferenciación sexual. 2. Identidad sexual e identidad de género. 3. Estereotipos y roles de género. 4. Estereotipos y conducta sexual. 5. Androginia psicológica. 6. Identidad de género y sexualidad.

Tema 5. Conducta sexual. 1. Conducta sexual individual y social. 2. La masturbación. 3. La conducta social con otros y sus elementos. 4. Las parafilias.

Tema 6. Sexualidad e interacción social: relaciones de amistad y amor. 1. La intimidad en la relación interpersonal. 2. La atracción. 3. El amor. 3.1. El amor en la historia. 3.2. El amor en la cultura occidental. 3.3. El amor y las relaciones románticas. 4. Teorías psicológicas sobre los tipos de amor. 4.1. Modelo de amor romántico de Berscheid y Walster. 4.2. La teoría triangular de Sternberg. 4.3. El enamoramiento. 5. Teorías sobre el origen y la función del amor. 6. La amistad. 6.1. Concepto y evolución. 6.2. Etapas en el desarrollo de la amistad.

Tema 7. Sexualidad en las distintas etapas del ciclo vital. 1. Sexualidad en la infancia. 1.1. Estereotipos y roles de género. 1.2. Tipificación sexual en la niñez temprana. 2. Sexualidad en la adolescencia. 41


2.1. La sexualidad en el contexto social de los adolescentes en la actualidad. 2.2. Cambios físicos y psicológicos en la adolescencia. 2.3. Sexualidad en la adolescencia. 2.4. Embarazos en la adolescencia.

Tema 8. Métodos anticonceptivos y Enfermedades de Transmisión Sexual.

Se impartirán clases teóricas siguiendo el temario planificado. Las clases serán participativas, favoreciendo la intervención de los jóvenes en todo momento. Se proyectarán exposiciones y todo tipo de material gráfico que ayude a la comprensión. Se expondrán anuncios, imágenes que los adolescentes tienen a su alcance, para discutirlas y valorarlas con el educador sexual. Se organizarán debates participativos de cualquier tema que los propios alumnos podrán proponer. Se comentarán y argumentarán los documentales visualizados. Se propondrán tareas, actividades y trabajos a realizar por el alumno, que después serán comentadas en clase. Se realizarán análisis de lecturas propuestas en clase. Los educadores también facilitarán clases de tutorías para que los alumnos puedan hacer las consultas necesarias.

3.4. Dificultades y limitaciones Hay que diseñar la intervención teniendo en cuenta los factores limitantes con el fin de contribuir a una mayor efectividad de la misma. Puesto que el presente proyecto de intervención se diseña entre distintas partes, partimos de la idea de que todas han de ponerse de acuerdo para que pueda llevarse a cabo. En primer lugar, por parte de la Consejería de Educación que presta medios personales, además de los centros educativos como espacios físicos donde se va a desarrollar la intervención. En segundo lugar, por parte de la Consejería de Salud, que pone a disposición de la intervención profesionales con la especialización adecuada. Los alumnos son por supuesto una pieza fundamental, sin su colaboración no sería posible la intervención. Por eso a principio de curso tanto la dirección del centro como el propio equipo director de la intervención les darán una charla informativa para que tengan conocimiento de lo importante que es su colaboración y cómo va a influir positivamente en sus hábitos y actitudes personales. Se enfocará la Educación Sexual como un derecho humano11 y no solo como mejora de estilo de vida, concebida como parte del mismo derecho a la educación, como garantía y condición para el cumplimiento de otros derechos humanos fundamentales como son el derecho a la libertad, la vida, 42


la salud, los derechos sexuales y reproductivos, de no discriminación, información, etc. El comité de los derechos del niño, recomienda su inclusión en los sistemas nacionales de educación primaria y secundaria (ONU, 2004a, párrafo 54; 2006a, párrafo 54).

Se requiere la colaboración de los centros privados que vayan a participar. Algunos por su condición religiosa podrían oponerse a participar. Aquí juega un papel importante la dirección del equipo interventor, que sepa trasladar la importancia del mensaje y abordar el tema como un derecho fundamental, haciendo ver como la escuela “debe fomentar el pensamiento crítico del alumnado en torno a las diversas expresiones de la sexualidad humana y de las relaciones interpersonales, sin reducir el tema a un abordaje biológico de la reproducción “(ONU, 2010, párrafo 12).

Otra dificultad será encontrar a profesionales formados para impartir la docencia. Deberá ser personal sanitario (enfermeros, farmacéuticos, biólogos o psicólogos) con formación en sexualidad y con docencia demostrada. El perfil concreto sería Educador Sexual.

También podríamos encontrarnos con oposición a la intervención por parte de los padres de alumnos, por motivos religiosos o personales.

Otra dificultad que podríamos encontrar es la no participación de los alumnos en clase, que las clases no resulten tan participativas como se pretende. Aquí radica la capacidad del educador de llegar a despertar ese interés en el alumnado. También comentar que el tema de la sexualidad despierta mucha curiosidad en los adolescentes, puesto que están en la edad propicia donde empiezan a descubrir todo este mundo nuevo lleno de sensaciones y emociones desconocidas. Por lo que las expectativas de participación a priori son positivas.

3.5. Mecanismo de evaluación Evaluación del Proceso. En primer lugar comprobaremos en qué grado se ha cumplido el calendario que se planificó a principio de curso. Constataremos que se han impartido todas las actividades propuestas, que el temario propuesto se impartido por completo siguiendo el orden establecido. Comprobaremos la asistencia de todos los alumnos participantes en todas las actividades realizadas, y también mediremos el nivel de participación en debates, charlas…tendremos en cuenta el nivel de implicación de los chicos y chicas.

43


Se definirán como indicadores de proceso: 

Asistencia a las actividades didácticas

Nivel de Participación en charlas, coloquios, debates…

Realización de trabajos personales de investigación

Interés demostrado en proponer temas a debatir

Una limitación importante en la evaluación de proceso sería la negativa de los sujetos a participar en las distintas actividades propuestas, de forma que no podríamos llevar a cabo la intervención.

Evaluación del Impacto. Además de todo lo anterior, para evaluar a cada alumno tendremos en cuenta los exámenes continuos que realizaremos al final de cada trimestre. Los exámenes escritos puntuarán un 15% de la nota final de la asignatura, dando el mayor porcentaje de puntuación a las actividades participativas, (lecturas criticas de artículos, comentarios de proyecciones, vídeos…) puesto que creemos que estas actividades son la mejor manera de inculcar conocimientos, valores y hacer que los chicos y chicas adopten posturas saludables para su bienestar personal, teniendo a su alcance herramientas para poder juzgar ellos mismos y haciendo sus propios juicios de valor, fomentando el pensamiento crítico. Se trata de poner a su alcance toda la información necesaria, basada en la formación intelectual y la transmisión de conceptos, ideas y saberes para la comprensión del mundo.

Con todos los resultados de las diferentes evaluaciones y también de las distintas actividades, al final de la intervención, coincidiendo con el final del curso, trataremos de evaluar los cambios producidos en los participantes tras la intervención. Esta evaluación la haremos mediante cuestionarios. El cuestionario será el mismo que se cumplimentó al iniciar la intervención, con algunas cuestiones añadidas. Con los resultados obtenidos de los cuestionarios, haremos un tratamiento de datos y obtendremos unas conclusiones. Podremos medir los cambios de actitudes y conductas que se han producido en los adolescentes tras la intervención, comparando los resultados que se obtuvieron al principio con los obtenidos al final de la intervención. La descripción de los resultados se hará utilizando parámetros habituales (porcentajes, medias, etc.) con los intervalos de confianza (IC 95%) correspondientes. Para el análisis de las diferencias encontradas se empleará el test de chi cuadrado de Pearson y el de la t de Student para comparación de porcentajes y medias respectivamente.

De los resultados finales obtenidos, se hará una comparación entre los distintos centros. Así podremos medir si existen diferencias apreciables entre ellos, que puedan venir determinadas por el hecho de ser centros públicos, concertados o privados. Ya que podrían darse diferencias en cuanto a niveles 44


sociales, económicos…que podrían afectar a las conductas de los jóvenes. Tras la comparación de los resultados de los centros no privados (públicos y/o concertados) con los resultados obtenidos de los centros privados, podremos también obtener conclusiones sobre el grado de influencia que pueden ejercer las creencias religiosas sobre la conducta sexual. Compararemos el nivel de concienciación obtenido tras la intervención, así como el cambio en actitudes y conductas. También se valorará la adquisición de nuevos conocimientos. Lo haremos comparando los resultados de los cuestionarios al inicio de la intervención, con los obtenidos al final.

Se realizará también al final de la intervención una encuesta a los participantes. Así podremos medir el grado de satisfacción en cuanto a los contenidos impartidos, actividades propuestas, ritmo de las clases, ambiente entre compañeros, interacción educador-alumno, satisfacción con el grado de conocimientos adquirido, forma de abordar la materia…los resultados obtenidos de estas encuestas también nos ayudan a valorar el impacto de la intervención, y también con ellos podremos valorar posibles modificaciones en intervenciones futuras, con el fin siempre de mejorar los métodos y alcanzar resultados más satisfactorios, así como encontrar las fórmulas para poder llegar al mayor número posible de adolescentes y aumentar con ello el alcance de la intervención. Tendremos en cuenta para todo esto, 

Puntuación de las pruebas escritas, que nos indicarán el nivel de conocimiento adquirido.

Resultados de los cuestionarios finales, donde podremos medir los cambios de conducta y actitudes.

Resultados de las encuestas, con los que podremos medir el grado de satisfacción.

Una limitación importante en la evaluación del impacto sería la negativa de los participantes a cumplimentar los cuestionarios o las encuestas, así como a negarse a realizar las pruebas escritas.

Evaluación de Resultados. Esta evaluación medirá los cambios obtenidos tras la intervención a largo plazo. Puesto que el objetivo principal de la intervención es la prevención de ETS en adolescentes, un indicador de salud que nos medirá el resultado de nuestra intervención a largo plazo será la incidencia de ETS en Adolescentes pasado un tiempo considerable. La dificultad que encontramos para medir este indicador será simplemente que no podremos realizar esta medida de forma inmediata, sino que deberá transcurrir el tiempo necesario para poder medirlo.

45


3.6. Aplicabilidad y utilidad práctica

Aunque hemos estudiado otras experiencias educativas con resultados dispares para tratar de prevenir tanto embarazos no deseados como ETS en adolescentes, existen varias circunstancias que hacen que los mensajes educativos no lleguen de forma efectiva a los adolescentes: la escasa percepción del riesgo en este grupo de edad, la rebeldía hacia los mensajes procedentes de sus «mayores» y la consideración por parte de los jóvenes del preservativo como un «elemento externo» que resta espontaneidad a la relación. Los adolescentes siguen siendo una de las poblaciones donde la intervención comunitaria es primordial. Las relaciones sexuales y las prácticas de riesgo para ETS, se inician cada vez antes, a partir de los 14 años, haciendo necesarios los programas de prevención en estas edades. Uno de los ámbitos idóneos para el desarrollo de estas actividades preventivas son los centros educativos, ya que permiten llegar a casi todos los adolescentes y poseen importantes recursos administrativos y organizativos propios. Son las actividades didácticas las que han demostrado ser las más potentes y crear mayor impacto en los jóvenes, de aquí la intervención propuesta. De los resultados potenciales de la intervención observamos que los jóvenes prefieren que sean profesionales sanitarios o educadores sexuales los que les trasladen estos conocimientos. De los jóvenes participantes la mayoría han mantenido relaciones sexuales completas, aunque se observa que las chicas lo han hecho con mayor frecuencia. Todos han utilizado alguna vez algún método anticonceptivo, siendo el más frecuente el preservativo. Las chicas demuestran más conocimiento sobre la prevención de embarazo y rechazan una relación sexual sin protección más frecuentemente que los chicos. Tras la intervención se observa una mejoría en el uso correcto del preservativo y en el conocimiento de la capacidad preventiva frente al sida-ETS. Existe un porcentaje no despreciable de chicas que han tomado alguna vez la píldora del día después, considerándolo elevado para estas edades. Aún existe un porcentaje significativo de jóvenes que utilizan la marcha atrás arriesgando su salud y la de su pareja. Estos hechos son razones suficientes para no bajar la guardia en la prevención de ETS y de embarazos no deseados. También observamos confusión sobre las formas de contagio del sida y otras ETS, por lo que concluimos que las intervenciones son necesarias, incluso podría mejorarse si se iniciara a edades más tempranas, así, no tendrían que ir encaminadas a cambiar actitudes sino a mejorar conocimientos. Los profesionales de atención primaria hemos de involucrarnos en la educación de los adolescentes, además los mismos jóvenes prefieren recibir la información por parte de profesionales sanitarios. Pero también hay que contemplar la necesidad de formar a este personal en educación sexual, hecho que actualmente no se está llevando a cabo. Habría que empezar integrando al menos una formación sexológica elemental en la preparación universitaria de los futuros enseñantes. Para que la intervención sea eficaz es fundamental que se realice en el ámbito donde 46


normalmente se encuentran los jĂłvenes, y donde se mueven con mayor libertad, su centro de enseĂąanza.

47


48


4. BIBLIOGRAFÍA 1. García J., Pérez E., Perpiñá J. (2001). Enfermedades de transmisión sexual y Adolescentes: Generalidades y Prevención. En: Buil C, Lete I, Ros R, et al. (Coords). Manual de salud reproductiva en la adolescencia. (1ª ed. Vitoria: Sec., p. 539-580). [Actualizado ene 2001; Citado 9 sep 2013]. Disponible en: <http://www.sec.es/area_cientifica/manuales_sec/salud_reproductiva/15%20Salud%20reproductiva %20e.pdf/>.

2. Centro Nacional de Epidemiología. Instituto de Salud Carlos III. (2012). Resultados de la vigilancia epidemiológica de las enfermedades transmisibles. Informe anual 2010. Madrid. [Citado 14 Sep 2013]. Disponible

en:

<http://gesdoc.isciii.es/gesdoccontroller?action=download&id=21/01/2013-

9221d7165e/>.

3. Satín C., Torrico E., López MJ., Revilla C. (2003). Conocimiento de los métodos anticonceptivos y su relación con la prevención de las enfermedades de transmisión sexual en jóvenes. Anal. Psicología, 19(1):81-90. [Citado 15 ago 2013]. Disponible en: <http://www.um.es/analesps/v19/v19_1/0819_1.pdf/>.

4. Rodríguez A., Álvarez L. (2006). Percepciones y comportamientos de riesgos en la vida sexual y reproductiva de los adolescentes. Rev Cubana Salud Pública, 32(1):1-9. [Citado 16 sep 2013]. Disponible en: <http://www.bvs.sld.cu/revistas/spu/vol32_1_06/spu08106.pdf/>.

5. Usieto R., Sastre L. (2002). La información y educación sobre el sida como estrategia de prevención en los jóvenes. Rev Esp Drogodependencias, 27(3):445-465. [Citado 20 sep 2013]. Disponible en: <http://www.sidastudi.org/resources/inmagic-img/dd1017.pdf/>.

6. Bretón-López J., Buela-Casal G. (2005). Evaluación del efecto de las campañas publicitarias de prevención de VIH/SIDA en adolescentes. Psicothema, 17(4): 590-596. [Citado 6 Sep 2013]. Disponible en: <http://www.unioviedo.net/reunido/index.php/PST/article/download/8317/8181/>.

7. Dirección General de Salud Pública y Participación. Consejería de Salud de la Junta de Andalucía. (2004). Guía Forma Joven. Edita EASP.

49


8. Real Decreto 1631/2006 de 29 de diciembre, por el que se establecen las enseñanzas mínimas correspondientes a la Educación Secundaria Obligatoria. BOE núm 5, de 5 de enero de 2007.

9. Bataller i Perelló, V. (2002). Prevención de VIH/Sida en la adolescencia y juventud en el marco integral de la educación para la salud. Rev Esp de Drogodependencias, 27(3). [Citado 18 Ago 2013]. Disponible en: <http://www.aesed.com/descargas/revistas/v27n3_20.pdf/>.

10. Muñoz A. Educación para la Sexualidad Guía Didáctica. Granada: Universidad de Granada. [Citado 20

sep

2013].

Disponible

en:

<http://calidad.ugr.es/pages/secretariados/form_apoyo_calidad/programa-de-formacionpermante/curso_planificacion/2edicion/guias/muozantonio/!/>.

11. Malón A. (2012). ¿El derecho a una educación sexual? Entre los discursos de salvación y la ausencia del conocimiento. Educ. S. XXI. Rev. Fac. Educ, 30(2):207-228. [Citado 3 Sep 2013]. Disponible en: <http://revistas.um.es/educatio/article/download/153761/140801/>.

50


51


52


53


54


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.