¿Cambiar o reparar piezas del carro? Tener un vehículo para muchos es realmente una necesidad, pero eso implica también responsabilidades para que circule seguro o sin contaminar, lo que se traduce en mantenimientos y visitas al taller que suponen un desembolso importante. Por eso en ocasiones preferimos reparar una pieza y no cambiarla, aunque no siempre es conveniente. Según nuestro manual de propietario hay elementos que deben sustituirse por tiempo o por kilómetros para que el vehículo no pierda su eficacia y rendimiento y no se deben reparar. En otras ocasiones podemos pensar en reparar parcialmente un sistema y ahorrarnos una buena cantidad de dinero, lo que debemos tener claro es dónde están los límites y qué es más adecuado en cada caso. Factores a tener en cuenta para reparar o cambiar Como usuarios de vehículos siempre queremos que nuestra factura del taller sea lo más económica posible, sin necesidad de cambiar todo un sistema cuando solamente falla un elemento sencillo y tampoco sustituir una pieza sabiendo que el carro volverá a fallar en poco tiempo porque el resto del conjunto también está desgastado. Por eso a la hora de reparar o cambiar, debemos tener en cuenta algunos factores que nos ayudarán a tomar una decisión. Daños. Ya sea por una colisión o porque nos hemos retrasado en el mantenimiento, debemos saber cuántas piezas están afectadas. Posibilidades técnicas. Hay piezas en los carros que de ninguna manera se pueden reparar, elementos que han sido fabricados para sustituirse cuando se desgastan y que no se pueden intentar soldar o arreglar de alguna forma. Calidad. Es inútil reparar una pieza que volverá a dar problemas en poco tiempo, a la larga ahorraremos más sustituyéndola que haciéndole arreglos. Accesibilidad. Hay piezas del vehículo a las que es muy difícil llegar, como todas aquellas que son internas o estructurales que requieren más tiempo en mano de obra. Desmontaje. Va unido al punto anterior, una pieza a la que es difícil acceder y requiere desmontar prácticamente todo el motor, es mejor reemplazarla para que dure más tiempo en lugar de arreglarla, porque económicamente no compensa reparar. Repuestos. Si reparar una pieza tiene un precio alto y sustituirla cuesta menos del doble, lo más recomendable será cambiarla. Ante todo es importante que el problema que tenemos con nuestro vehículo sea diagnosticado de forma adecuada, de manera que la reparación o el cambio de la pieza sea una solución duradera. Cuando sustituir Es imprescindible que se sustituyan las piezas que afectan de manera directa la seguridad del vehículo y sus ocupantes, en este caso no valen los arreglos temporales ya que estaremos jugando a la ruleta rusa cada vez que usamos el carro.
También debemos cambiar y no reparar los elementos eléctricos o electrónicos, porque son elementos delicados que pueden generar un corto circuito que termine en incendio del vehículo. Cuando reparar Incluso en una reparación de motor, muchas veces no es necesario sustituirlo completamente, se puede conservar el bloque motor y repararlo o rectificarlo. También en el caso de la carrocería, si la deformación del área afectada no supera el 50%, podemos optar por reparar. Para tomar la decisión de cambiar o reparar debemos considerar todos los factores técnicos y también la garantía, además del coste económico. Lo importante es que en caso de reparación se alcancen unos estándares de calidad óptimos. Por. Adriana Gutiérrez