Distribución variable de válvulas Los fabricantes trabajan continuamente en mejorar las prestaciones de los vehículos para bajar las emisiones de contaminantes, hacer motores más potentes y disminuir el consumo de combustible. Uno de esos sistemas es la distribución variable de válvulas, que permiten cambiar el tiempo mecánico del motor y modificar el grado de apertura y cierre de las válvulas. Si nuestro vehículo lleva las siglas VVT-i, VTEC o Ti-VTC o parecidas, quiere decir que tiene un sistema de distribución variable de válvulas y su denominación dependerá del fabricante. Su importancia radica en que al avanzar o retroceder la apertura y cierre de válvulas el motor obtiene siempre la cantidad requerida de la mezcla de aire y combustible que se necesita en cada rango de revoluciones. Cómo funciona Normalmente la mezcla de aire y combustible que entra en el motor depende del tiempo en que se abren y cierran las válvulas de admisión y escape, de ellas deriva en gran parte el rendimiento del motor. El cruce de válvulas es el tiempo que transcurre entre la apertura de la válvula de admisión y el cierre de la válvula de escape, es el periodo en que las dos permanecen abiertas para que la salida de los gases de escape facilite la entrada de la mezcla. El problema es que si ese cruce de válvulas es excesivo, el funcionamiento del motor resulta muy eficaz a elevadas revoluciones pero muy irregular en los regímenes bajos. Por el contrario si el cruce es pequeño, se limita la entrada de mezcla a alto régimen. La distribución variable de válvulas permite que ese problema del cruce de válvulas desaparezca mejorando el rendimiento en el rango de funcionamiento del motor, porque al modificar el tiempo de apertura y cierre varía el llenado de la mezcla de aire y combustible, así se tiene lo mejor en bajas y altas revoluciones para tener una combustión óptima que permita un mayor aprovechamiento del combustible, emisiones de escape más limpias y máximo par motor. Ventajas de la distribución variable de válvulas -Permite una mayor admisión de aire cuando el vehículo está en altas revoluciones, pero conservando la estabilidad cuando estamos al ralentí o en bajas velocidades. -Como la eficiencia de llenado es superior, tendremos un consumo más eficiente de combustible. -Reduce los ruidos del motor en situaciones específicas como las desaceleraciones. -Mediante un mejor cruce de válvulas es posible realizar una mejor recirculación de gases de escape. -Mejor desempeño en velocidades de crucero. Por el momento la distribución variable de válvulas es una buena manera de lograr un mejor aprovechamiento de combustible en nuestro vehículo, pero los fabricantes siguen trabajando y desarrollando motores de combustión interna en los que desaparecerá el tren de válvulas, el árbol de levas y por lo tanto este sistema.
Por. Adriana GutiĂŠrrez