Razones por la que la caja CVT es perezosa en subida La caja CVT (Transmisión Continuamente Variable) es uno de los tipos de transmisión automática que encontramos en el mercado. Su funcionamiento se basa en que en lugar de tener cinco o seis cambios tiene una cantidad ilimitada. Esto se logra porque no tiene unos cambios establecidos e inmóviles entre el giro del motor y las llantas, trabaja haciendo un cambio gradual que optimiza la relación de caja según la velocidad y las necesidades del vehículo. La caja CVT viene a solucionar el problema de pérdida de aceleración y por lo tanto de rendimiento y eficiencia cuando tenemos que pisar el embrague para meter el cambio, porque en ese momento hay una discontinuidad en la transmisión. Cómo funciona En una caja CVT no hay engranajes sino una banda metálica conectando dos poleas, una de ellas con un diámetro variable que permite a la transmisión ajustar la relación de forma infinita para que siempre estemos en el cambio perfecto. La relación de cambio más adecuada en cada momento depende de factores como la velocidad del vehículo, el nivel de presión sobre el acelerador, el esfuerzo que debe hacer el motor o el modo de conducción seleccionado, entre otros. Ventajas La primera es que la caja CVT tiene un costo más bajo porque usa menos componentes que una manual o cualquier otro tipo de transmisión automática. Aunque es una ventaja al momento de comprar, en caso de sufrir cualquier daño el mantenimiento es bastante costoso porque su reparación es muy difícil y muchas veces se debe montar una nueva. Su aceleración es mejor y hay menos gasto en combustible gracias a que es capaz de mantener óptimos la potencia y el torque. Porqué es perezosa en una subida Los que han usado vehículos con caja CVT dicen que le cuesta mucho ganar velocidad en las subidas y su funcionamiento parece perezoso. Es verdad, en zonas urbanas trabaja perfectamente, sortea vehículos en los trancones con facilidad y es cómodo y suave, pero no va tan bien en otro tipo de vías. En principio la caja CVT nos entrega el cambio más adecuado en cada momento, pero presenta cierta lentitud en la respuesta al acelerar a fondo en situaciones como la subida de una cuesta, porque la banda metálica tiende a deslizarse cuando la potencia es muy alta, sobre todo en transmisiones más antiguas. En las más modernas, seguramente las relaciones que traen memorizadas no son las más adecuadas y no aprovechan la potencia del motor. Las cajas CVT funcionan perfectamente en ciudad, pero todavía no tienen la tecnología adecuada para mostrar el rendimiento de las mecánicas. Para los que estén pensando en comprar un vehículo con Transmisión Continuamente Variable, es importante que tengan en cuenta el uso que van a darle, mirar las ventajas para transitar
por la ciudad y las desventajas en caso de utilizarlo principalmente en carreteras con subidas pronunciadas. Por: Adriana GutiĂŠrrez