MARÍA JESÚS HUME HURTADO

Mayu como la conocen sus amigos, es una mujer que ha dirigido más de 20 empresas. Su camino inició en la universidad. Estudió Ingeniería Civil, pero, sin pensarlo, descubrió que su pasión se encontraba en la Economía. A sus 31 años, ingresó a trabajar al sector público, y un año después se convirtió en la primera viceministra mujer que tuvo el Perú. Actualmente es presidenta de directorio del fondo de pensiones AFP Integra, del Banco Falabella y de Austral Empresa Pesquera. Mayu siempre recuerda su infancia en Tacna, los difíciles inicios de la vida universitaria y su paso por las instituciones públicas y privadas. Estos eventos la han forjado para ser hoy una mujer exitosa. Es una Exalumna Distinguida PUCP.

¿Cómo imaginaba su futuro profesional al ingresar a la universidad?

Yo no había tenido alguna influencia cercana que me empujara a estudiar Ingeniería, solo el hecho de que era una excelente alumna en matemáticas. Cuando entré a la universidad, yo me veía en el tema de diseño de estructuras. Dentro de las clases, nuestros profesores nos decían que para ser un buen calculista, es decir la persona que diseña estructuras, teníamos que trabajar directamente en las obras de construcción. Al egresar, a pesar de tener muchísimas ofertas de trabajo, en ninguno de los casos me dejaban ir a las obras porque las mujeres no lo tenían permitido. Pero, luego se me presentó la oportunidad de trabajar en una investigación que realizaba la facultad de Ingeniería sobre resistencia sísmica de construcciones de tierra. Acepté el trabajo con el plan de terminar mi tesis y salir a trabajar a una empresa de diseño estructural, porque en las obras nadie me iba a admitir.

¿En qué momento se decide por estudiar Economía?

El ingeniero Giuffra, entonces decano de la facultad de Ingeniería y director universitario de Planeamiento, me ofreció que fuera Jefe de la Oficina de Planeamiento. Fue un trabajo de disfruté muchísimo y que cambió mi orientación profesional de manera circunstancial.

¿Qué cambios trajo en su vida el estudiar Economía?

Los estudios de Economía me llevaron en el tiempo a algo que nunca imaginé. En los 80, cuando vino el advenimiento de la democracia después de los 12 años de gobierno militar, mucha gente joven fue llamada a trabajar al gobierno, entre ellos dos profesores míos de Economía: el doctor Richard Webb, que entró a ser presidente del Banco Central, y Roberto Busaga que entró a ser viceministro de Comercio. Ambos me ofrecieron trabajo y en una decisión muy rápida empecé a trabajar en la Avenida Abancay. Un año después, Manuel Ulloa, ministro de Economía y primer ministro, me ofreció el viceministerio. Me tocó ser la primera viceministra mujer.

Trabajar dentro del sector público fue un proceso de constante aprendizaje. Aún no se ha roto el cielo de cristal para muchas mujeres, pero ahora el camino está un poco desglosado, en ese entonces era mucho más difícil empezar para muchas mujeres”.

¿Qué significó para usted ser la primera viceministra del Perú?

Te miraban mucho más. Era mucho más fácil criticar a una mujer que a un hombre. No era tan agradable. Pero, por otro lado, tuve la oportunidad de hacer las cosas bien para que alguien más piense: si ella llegó ahí, yo también puedo. Trabajar en el sector público fue un proceso de constante aprendizaje. Aún no se ha roto el cielo de cristal para muchas mujeres, pero ahora el camino está un poco desglosado, en ese entonces era mucho más difícil empezar para muchas mujeres. Pero aquí estoy. Mucha gente me pregunta si yo creo que perdí el tiempo estudiando Ingeniería por cinco años para luego dedicarme a la Economía, yo digo que lo haría exactamente igual.

Pero, si tuviera que volver a alguna etapa de su vida, ¿cuál sería?

Mi niñez y juventud en Tacna fueron felices. Pero, también volvería a mi etapa en el sector público. Hubo cosas que debía hacer y no hice, errores que cometí y no debí come- ter. Creo que volver a esta etapa tendría mucha más trascendencia.

Sin embargo, saliendo del sector público tuvo una carrera exitosa

Fui directora de más de 20 empresas. Debo admitir que tener directorios variados me permitió aprender distintos sectores, por ejemplo, del financiero, pesquero o de energía. Eso ha sido emocionante para mí: involucrarme en un sector nuevo y aprender desde cero. Otro trabajo que he disfrutado mucho y me ha permitido aprender se relaciona con la banca e inversión. He trabajado para dos bancos extranjeros: uno europeo y otro norteamericano. Básicamente, el negocio que trabajamos es fusiones y adquisiciones. Uno de los trabajos fue buscar un socio estratégico para el puerto de Chancay. Entonces, a pesar de tener especialistas en el sector, tienes que empezar a saber de puertos. Después de trabajar en un negocio de esta naturaleza, tan grande e importante por tres años, aprendes.

¿Cuál es el sector del que más ha disfrutado aprender?

Donde me he sentido más cómoda y donde me he mantenido los últimos 25 años es en el sector financiero. Una de las actividades que me dio gran satisfacción personal fue estar en PROMUJER, una empresa de microfinanzas cuyo objetivo fundamental era el empoderamiento de mujeres en zonas marginales en el Perú. Tienen actividades en Estados Unidos, Nicaragua, México, Bolivia y otros países.

Desde hace veinticinco años trabajo en AFP Integra, es el fondo líder de pensiones en Perú. Sin embargo, en los últimos nueve años me he desempeñado como presidenta. También soy directora del Banco Falabella, y de Austral Empresa Pesquera. Me gusta el sector. Aprendo cosas nuevas todos los días y estoy contenta. Sin embargo, es tiempo de ir dejando las cosas. No me veo sin trabajar, pero sé que encontraré otras cosas estimulantes.

¿Qué le gustaría hacer pero aún no ha tenido el tiempo?

Me gustaría volver a leer de la forma en que leía antes. Mi autora favorita es Marguerite Yourcenar. Y, un libro que recomendaría de ella se titula Las memorias de Adriano. Trata sobre el poder y su decadencia. La segunda cosa que me gustaría hacer es viajar, visitar a los amigos y volver a Tacna.

Mayu Hume, como la conocen sus amigos, es una mujer que a lo largo de su trayectoria profesional ha dirigido más de 35 empresas. Su camino inició en la universidad. Estudió Ingeniería Civil, pero con el tiempo y sin planearlo, descubrió que su pasión se encontraba en la Economía. Decidió, entonces, también estudiar dicha carrera. A sus 31 años, ingresó a trabajar al sector público. Un año después, se convirtió en la primera viceministra mujer en el Perú. Desde entonces se ha enfocado al liderazgo. Actualmente es presidenta de directorio del fondo de pensiones AFP Integra, del Banco Falabella y de Austral Group. Mayu siempre recuerda su infancia en Tacna, los difíciles inicios en la vida universitaria y su paso por las instituciones públicas y privadas. Son eventos que la han forjado para ser hoy una mujer exitosa y feliz con cada tema nuevo que aprende.

Mayu Hume, como la conocen sus amigos, es una mujer que a lo largo de su trayectoria profesional ha dirigido más de 35 empresas. Su camino inició en la universidad. Estudió Ingeniería Civil, pero con el tiempo y sin planearlo, descubrió que su pasión se encontraba en la Economía. Decidió, entonces, también estudiar dicha carrera. A sus 31 años, ingresó a trabajar al sector público. Un año después, se convirtió en la primera viceministra mujer en el Perú. Desde entonces se ha enfocado al liderazgo. Actualmente es presidenta de directorio del fondo de pensiones AFP Integra, del Banco Falabella y de Austral Group. Mayu siempre recuerda su infancia en Tacna, los difíciles inicios en la vida universitaria y su paso por las instituciones públicas y privadas. Son eventos que la han forjado para ser hoy una mujer exitosa y feliz con cada tema nuevo que aprende.

HUmE HUrTAdo mArÍA JESÚS