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SIN ALFOMBRA ROJA, PERO CON MUCHA CUMBIA

SIN ALFOMBRA ROJA, PERO CON MUCHA CUMBIA

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La entrega 62 del Ariel estuvo marcada por la austeridad que impuso la pandemia por el COVID-19, y desde su casa, los ganadores agradecieron el reconocimiento a lo mejor del cine mexicano

Por segundo año consecutivo Netflix es gran protagonista en la entrega el Ariel. El año pasado la plataforma de streaming triunfó en grande con “Roma” y ahora repite su éxito gracias a “Ya no estoy aquí” que obtuvo 10 de los 13 premios a los que aspiraba.

La cinta rodada en Monterrey y Nueva York se llevó las principales categorías, incluida Mejor Película, Director y Guión Original.

El filme que tuvo poca distribución en las salas de cine fue uno de los grandes éxitos veraniegos de Netflix que, durante la ceremonia 62 del Ariel, fue mencionada como la posible fuente de distribución del cine mexicano de calidad.

Marcada por la crisis provocada por el coronavirus, pero manteniendo el espíritu de premiar a lo mejor del Séptimo Arte, la 62 entrega del Ariel se realizó de forma virtual la noche del domingo desde los estudios de Canal 22.

Este año no hubo alfombra roja y el glamour quedó de lado. La llegada de nominados e invitados fue sustituída por agradecimientos a través de Zoom y los ganadores manifestaron, desde su casa, vistiendo de manera informal, su felicidad por obtener el premio.

La pandemia del COVID-19 también fue mencionada, especialmente por Mónica Lozano, presidenta de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas.

“Atravesamos tiempos difíciles, la pandemia está causando estragos, muerte, enfermedad, desazón e incertidumbre y una crisis en todos los niveles. ¿Cómo lograremos cruzar el túnel?, ¿cómo habremos cambiado como sociedad?, lo sabremos cuando alcancemos la salida”, indicó Lozano.

La presidenta del organismo señaló que el cine ha debido reinventarse a través de múltiples pantallas de uso casero y personal.

“Se exploran narrativas digitales, escenarios virtuales, conversaciones y reflexiones en el ciber espacio. La cultura está en todas partes, no deber despreciarse la producción cultural de nadie, nadie debe ser excluido”.

Conducida por Roberto Fiesco y Verónica Toussaint, durante la ceremonia de poco más de tres horas de duración, Luis Alberti fue galardonado como Mejor Actor por la película “Mano de obra”, cuyo director David Zozana también obtuvo el Ariel por Ópera Prima.

Edwarda Gurrola triunfó en el apartado de Mejor Actriz. Sumamente emocionada reflexionó sobre cómo la gente debería cambiar para bien al final de la pandemia.

coestelares fueron Raúl Briones y Mónica del Carmen, ambos por “Asfixia”.

“Ya no estoy aquí” obtuvo también reconocimientos por Vestuario, Maquillaje, Sonido, Fotografía, Diseño de Arte y Edición.

Otra ganadora fue “Belzebuth” que triunfó en categorías técnicas: Efectos especiales y Efectos visuales.

También con dos Arieles terminó “Sonora”: Mejor Guión Adaptado y Mejor Música Original.

“Dolor y gloria”, de Pedro Almodóvar consiguió un galardón más, ahora en el rubro de Mejor Película Iberoamericana.

La músico Lucía Álvarez y la actriz María Rojo fueron condecoradas con el Ariel de Oro por sus respectivas trayectorias.

Rojo, quien obtuvo la estatuilla de manos del cineasta Felipe Cazals, admitió que sin el apoyo de grandes directores, ella jamás hubiera podido lograr una carrera de más de 60 años.

“Yo no sé cómo, pero ellos dijeron: ‘ Que vengan las actrices’. Eso no significa que antes no las hubiera, pero se abrió una nueva puerta a que mujeres como yo, mujeres como cualquier otra, pudieran hacer su sueño realidad”, expresó.

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