As a social animal, man is a ritual animal. (Mary Douglas, Purity and Danger. An Analysis of Concepts of Pollution and Taboo, 1966 )
Faſcj ˇ cu ˇlus II _ _ _ _ – — –– — — —
Ficha catalográfica
Echando una ojeada a la educación tradicional : una exploración de su ascendente en la infancia y la juventud /
[Agrupación socioeducativa ’âl-May’ârî-Valmadrid ; Virginia Martínez González (ed.)]. –[Zaragoza] : [Agrupación socioeducativa ’âl-May’ârî-Valmadrid], [2021].
2 v. (212, 182 p.). : il. ; 16 ú 20 cm – (Taller de literatura experimental ; 18, 19, 20,21,22,23)
c.d.u.: 37.017(072)
< tallerdeliteratura.es>
< issuu.com/al-mayari-valmadrid/docs>
< tallerdeliteraturaexperimental almayari.wordpress>
1
Figura
Asociación ’âl-May’ârî-Valmadrid. Taller de literatura experimental 23
Ciertas aglomeraciones rituales de personas no se celebran en el interior de un edificio público.
¿La más evidente? cuando nos congregamos de forma atomizada ante la tele. Se hace por separado: cada cual en su domicilio, cafetería o centro de la tercera edad.
¡Ay, que fácil es hablar mal de la tv ! Televisión: la ignorancia compartida. Allí se ofrecen magacines (los llaman «programas» 37) de una discutible calidad. De colores exacerbados. Conceptos y contenidos que no valen gran cosa. Enunciados e información expresados con chata fraseología y una deplorable dicción; lo mismo que textos y gráficos generados electrónicamente. Cháchara catódica, inventada por los europeos del Norte en años pretéritos.
37. Denominados así, acaso, porque se escriben antes de ser emitidos ( pro + gramma). Pero no es del todo correcto.
Otra modalidad son las clases a distancia, de las que pudimos disfrutar en el año de la peste. Las llaman «clases telemáticas» o «clases on line». Menudo rollo. Un infierno. Estás como hablando a la pared: no ves a nadie. Tú estás en tu cuarto y empiezas la disertación.
Aquello parece un estudio de tv. Porque tienes que trabajar con 3 ó 4 monitores Un0, para ver la vídeo-conferencia; otro, para escribir; y otro más, para el power-point. Esto último es horrible: presentaciones en las que salen diapositivas Les programas su tiempo, su fusión con la siguiente imagen. Traen unas letras que van apareciendo y cambian de colores. Chorradas modernas. De vez en cuando, preguntas: «¿Alguien tiene dudas?».
12 c
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxii Na˘ser (9 años) \
Fig. 143
Z Fig. 144 Na˘ser (11 años)
Z
Fig. 146 a
[
Fig. 145a
Pero nadie te contesta. Esperas un rato prudencial y continúas con lo tuyo.
Así, todos los lunes, martes, miércoles, jueves y viernes (que son los peores días, porque tocan prácticas)
Allí no se hace nada bien. Es como una película de los hermanos Marx.
Las clases a distancia se combinaban con una especie de terapia de grupo Porque, aunque los estudiantes estaban encerrados, cada cual en su casa, podías hablar con alguien: ver caras nuevas. Mientras tanto, otros, en el exterior, sacaban unos altavoces a la ventana y ponían música a todo volumen. O daban caceroladas para protestar contra el gobierno.
13 c
Fig. 146 b. ’ãsm'mã. Extender las manos Y (que a lo mejor cae algo: ya lo dijimos antes).
[
Fig. 147. Damien (13 años)
Z Fig. 149
Vicky (12 años)
ZFig. 148 ’ãm’ãl (8 años)
[
Fig. 145b
solemnidades (ii)
El modo de honrar al generoso 38 con actos exteriores se llamó ceremonia o cerimonia39. Lo mismo Sebastián de Covarrubias que el latinista D. Raimundo de Miguel nos dicen que el palabro tomó su nombre de Cere 40, ciudad antigua de la Etruria donde los romanos se recogieron en grave aprieto a causa de la invasión de unos galos belicosos. Allí se pondrían a salvo y celebrarían las necesarias rogativas a sus multímodos dioses de la gentilidad.
38 ’ãl-karı¯ m, ﻢـــــﺮـــﻜـﻟا , cuadragésimo segundo «nombre hermoso».
39. Lat. Cærı˘mo˜nium
40. Cære, o también Ceres: la actual Cervetere, en la Toscana.
41. Isidoro (570-636), en Orı˜gı˘num seu Ety˘mo˘lo˘gio˘rum lı˘bri xx Cronista, gramático y uno de los eruditos que más honran a su patria. Oráculo de España, era hijo de Severiano, gobernador visigodo de Cartagena (tiene una plaza dedicada allí); y pariente, por lo demás, de varios santos. La cosa debía venirle de familia.
42. Un ejemplo: «—¡Cuerpo de cien mil espingardas!... —exclamó—. Me parece haber vivido cien años en unos pocos minutos. No habría dado ni una piastra por nuestro pellejo. Si aquel soldado se hubiese estirado un poco, nos habría descubierto. Podemos encender un cirio
Pero: hay que ser precavido con estos antiguos, de férvida y más grande fantasía que la nuestra. S. Isidoro hispalense, por ejemplo, arguye 41 que se llaman cerimonias por las candelas, velas o cirios de cera 42 que en ellas se gastan. Son éstas como luminarias de júbilo y alegría; significando el alumbramiento del género humano, de quien se han desterrado las tinieblas. Donde los latinos ponen custodia, sagrario u ostensorio del perforado por una lanza 43 se tiene perpetua luz.
a N.tra S.ra de El Pilar [...]. Ahora no tenemos nada que temer [...] Sandokán, hincándose las uñas en el pecho, exhaló un profundo suspiro »
Yáñez de Gomera en Salgari, Emilio Carlo Giuseppe Maria: Le tigri di Mompracem, A. Donath Editores, Génova, 1900.
43 Cor Iesu, láncea perforátum: vigésimo octava invocación de la Letanía del S.gdo Corazón de Jesús
d
(12 años) Iglesia de S. Gil, en Zaragoza
14 a
b c
Z Fig. 150a
Fig. 151. Sin firma (11 años)
Y
Fig. 153
[
Fig. 155. El cuaderno mudéjar iii A la izquierda: Lorena
\
Fig. 154. ’ãsm'mã (9 años)
(12 años) Iglesia de S. Miguel de los Navarros, en Zaragoza
(8 años) Iglesia de El Grado
Usan los agarenos de otro boato. Que es vestirse con pulidísimos atuendos 44 Entre ellos llámase ‘ídun (ﺪــْﻴــﻋ ) el regocijo público y fiesta bulliciosa. Cuando concurran sólo negros, dirás dárdba˘ tun ( ٌﺔـــﺑدرد ). La ceremonia es h . a˘fla˘ tun ( ٌﺔـــــــﻠــــْﻔــَﺣ ) 45 o ’ı¯htı˘fá’l un (
44. Qu˜r’ãn, azora 7 (Los lugares elevados):31.
45. Que expresa la alegría
46. Que expresa la celebración, pero más respetuosamente.
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxiii Estephaniya (9 años)
Ceremonioso, para acabar ya, es el hombre demasiadamente remirado en cortesías y cumplimientos:
Como, e. g , el cumpleaños del profeta: que muchos arabófonos discuten porfiadamente si se ha de «celebrar» o tan sólo «recordar » Son matices, oiga Vd.
ٌلﺎــــَﻔــِﺘــْﺣإ
) 46 .
15 a
Fig. 158. También los latinos gustan \ en sus ceremonias de los ricos capisayos. Cófrades de la piedad (Zaragoza, 1952)
[
Z Fig. 150e
Y
[ [
Fig. 152. Sin firma (10 años)
Fig. 157. Abajo:: Serena
Fig. 156. Abajo, al centro: Óscar
.
Llamativas aglomeraciones: la demostración cívica y patriótica. La manifestación contestataria O el mitin demagógico:
ademanes del respeto y la amistad son tan sencillos, transparentes, universales como el que aquí nos hace Muh . am'med: agitar la mano bien abierta (para que se vea que no vas armado)
En las antiguas culturas del creciente fértil —sumerios, babilonios, asirios y demás— se hacía este mismo gesto para presentarse uno, reverente, ante la todopoderosa divinidad. Lo vemos en relieves, sigilografías y otras reliquias que han rescatado para nosotros los arqueólogos.
14
b
\Fig. 159b
\
Fig. 161
Z Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxiva Ra˘yˆa˘n (9 años)
Y
Fig. 162. Esther (13 años)
Fig. 163.Algunos
Y
Fig. 160 Y
[ \
Fig. 159a
xxivb
Pero en las páginas 12-13c hablábamos de cómo la gente se congrega ante la tv
A los sociólogos este tipo de reuniones les parece, a simple vista, amorfo , policéntrico , o espacialmente desintegrado. Como en la novela Gran hermano (1984) . No por ello dejan de ser exitosas. A su manera, claro está.
Ahí van unos ejemplos:
Y (1) la sociedad mercantil anónima, financiada en el mercado de valores.
Y (2) La corporación multinacional apoyada visualmente por sencillos logotipos heráldicos, con sus redes de mercadotecnia global e invasiva.
Y (3) El boicot y otros actos de repulsa colectiva contra el statu quo: que abominan de las mercancías de un país o de una gran compañía.
Y (4) La comunidad juvenil del programa europeo Erasmus
Y (5) O —acaso— el gran atasco de tráfico rodado.
15 b û Y
\
Fig. 159c
Fig. 159c
Y
Fig. 164. Edurne (13 años)
Y
Fig. 165. Gonzalo (13 años)
Y
Fig. 167. Fa˘tu˜ (13 años)
Y
Fig. 166. Ya Lin (10 años) Y xxivb
Esta forma de saludo respetuoso les da un poco de risa; aunque ellas saben disimularlo muy bien.
Hay muchos más modelos de reuniones, que podemos representar de una manera aproximada y fantasiosa mediante diagramas geométricos Lineal, radial, reticular, lo que se te ocurra. O, como dijo alguien: ni ancho ni largo, sino agüevado 47 .
47. Como el huevo primigenio del que nos hablan los herméticos y los antropólogos de la religión, o el de Pascua que trasiegan los conejos. Como el famoso despacho oval de la Casa Blanca en Washington d. c
Allí se expresa muy libremente una gran diversidad de opiniones o, por el contrario, sólo una es la dominante
YA
C B D
Emisor Receptor
xxvia.
R’ãhil (9 años)
Emisor
Y14 c
Z Fig. 169a
Fig. 170. Janet y Paula nos explican cómo besar el anillo de un importante dignatario cuando ese pez gordo te reciba en una audiencia.
Y
Fig. 168. María (13 años)
[
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxva Luciano(9 años)
Porque ocurre, insistamos en ello una vez más, que la gente es muy teatrera
Y ahora que mencionamos eso, podríamos hablar aquí de otra cosa que se hace en el interior del edificio público. Es la,
Representación de dramas piadosos
Éstos combinan los motivos tradicionales con el deseo de diversión; la instrucción de los iletrados y su entretenimiento; una enseñanza sobre el destino y el conflicto moral.
Soberbios espectáculos que hoy van siendo substituidos por manifestaciones culturales de más tosco pelaje: como los cuenta-cuentos, o como vestirse de «medievales» (sea eso lo que sea). O como la tele-novela, si lo hace uno en diferido.
El drama piadoso es, por el contrario, otro tipo de negocio ; tema de conversación apasionante que relegamos para una futura, y quizá improbable, lección N.o 11. Se titulará:
15 c
Z
Z Fig. 169b
Fig. 171. Muham'med (10 años)
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxvib R’ãhil (9 años)[
Z
Z Fig. 172c
Fig. 172d
\
Z Fig. 172b
Fig. 172a
\
xxvb
Fig. 173 Y
acatamiento y honra (i)
Aclaremos aquí algunos conceptos especiosos —y también crudos— sobre aquello que se hace en el interior del edificio público. También se anotará, de paso, lo que no se hace. Primero:
Y16 a
Fig. 176. Este es Emmanuel Y
Fig. 175. Serena (8 años) Catedral de Roda de Isábena
xxvc \
\ xxvib Y
Fig. 174
\
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxvia ’ã‘a˘y’ãyi(9 años)
«Acatar» vale tratar con reverencia, mesura y compostura a alguna persona; porque la miramos con recato y cuidado de no ofenderla, ni aun con la vista. Como en la mili. Es el obsequio de la servidumbre 48 (más o menos voluntaria)
48. vid Qu˜r’ãn, azora 13 (El trueno):13-15.O nuestro «Obedézcase pero no se cumpla»: expresión legal usada allá por el s. xvii al otro lado del Atlántico, cuando los decretos regios eran, dadas las circunstancias, de difícil aplicación. Una muestra del genio español. Aplíqueselo Vd. Pues ocurre que esto también es una forma de latría (græce λάτρον, «salario», «servicio a la merced», la «ganancia», «adquisición», el «cuidado que se tiene en adquirir»). Y sepa el lector que la latréutica es aquello relativo a la latría
Segundo: «honrar», ¿qué es?
Y (1) De uno menor a otro mayor es cortesía que mostramos a la virtud y a la potestad. O es sumisión, por completo sustentada en la desconfianza hacia uno mismo 49 .
Y (2) De uno mayor a otro menor es acariciar y recibir con benignidad.
Y (3) Algunas veces se hace honra al dinero
Y (4) Los petimetres —especie muy latosa— ponen su honrilla en impertinencias y nonadas
49. Cosa que se llama humildad. Es la «virtud por la que uno se abaja gracias al exacto conocimiento de sí mismo» (s Bernardo de Clairvaux, 1090-1148: De gradibus humilitatis Ù superbiæ tractãtus, i. ii; dedicado a su amigo Godofredo de Fontenay) La humildad reviste un extraordinario valor educativo
17 a
xxvd\
Fig. 181. El cuaderno mudéjar iv ’ãda˘m’ã (12 años) Y
xxvid\ Z
\
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxvic
Fig. 177
Fig. 179 Y
Fig. 180 Y
\
Fig. 178
«Lava las iniquidades, no sólo la cara».
Inscripción anacíclica, o reversible, o capicúa (aplícase a versos y frases que se leen lo mismo al derecho que al revés), como esta que leemos en el baptisterio de S.ta Sofía de Constantinopla
(*)
Todos somos culpables, ¡qué soponcio! Porque:
Indignidad ≈ Culpa ≈ Suciedad.
Cuando uno faltó en hacer lo que debía, el agua lava la culpa 50 ; aunque muchos no la purgarán con cuanta lleva el Duero
La humildad . Vale. No somos nadie . Tan pobres que por no tener, no tenemos ni hambre. Humildad es como abajarnos hacia la tierra (Lat. hu˘mus). Por ese motivo, cuando entramos en el edificio público nos tiramos por los suelos
Bueno: no directamente por los suelos. Los agarenos se ponen sobre una alfombra. Los latinos tienen sus reclinatorios 51. Y quienes no son ni una cosa ni la otra, que a lo peor sólo están haciendo una visita turística, pues soportan con paciencia una audio-guía; que es otra forma de masoquismo adormecedor. Algo pa vagos o pa tontos.
’ãl-yd ’ã t a˘la˘t ma˘ra˘t, ’ãl-fu˘m t a˘la˘t ˉ ma˘ra˘t, ’ãl-’ı˜nf t a˘la˘t ˉ ma˘ra˘t, ’ãl-wa˘ˆy t a˘la˘t ˉ ma˘ra˘t, ’ãl-y ad ’ı˜l’ã´mrfı˘qn t a˘la˘t ma˘ra˘t, ’ãl-sˇa˘‘a˘r ma˘ra˘t wãh . ı˘da˘, ’ı˜lwãdna˘ı˘n mara wash ida, ’ ãl-rˆyla˘ı˜n t a˘la˘t ˉ ma˘ra˘t. ’ı˜qa˘ma˘t u ’ãs.'s a˘la˘t s u˘ra˘t u ’ãl-fatı˘ha˘ wa˘ su˘ra˘t u ’u˜jra˘, ’ãl-ru˘ku˘‘, ’ãl-su˘ˆyu˘d wa˘ ’ãt'tasbı˘h.
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxviii Z Daríus (15 años)
Lavar las manos, tres veces.
Lavar la boca, tres veces.
Lavar la nariz, tres veces.
Lavar la cara, tres veces.
Lavar los brazos, tres veces.
Lavar la cabeza, tres veces.
Lavar las orejas, tres veces.
Lavar los pies, tres veces.
50. La pena y el pecado. Qué sea eso ya se verá más adelante.
51. Vean, vean Vds. este práctico mueble en el Vol. i de la obra: lección 1a, Págs. 4 y 5b
Comenzar el rezo con la madre del libro»
[ llamada ’ãl-fa˘tı˜h . a, primera azora del Alcorán. El nombre le viene a esta plegaria porque se dice que contiene lo esencial.].
Y después, otra azora.
16 b ΝΙΨΟΝ ΑΝΟΜΗΜΑΤΑΜΗ ΜΟΝΑΝ ΟΨΙΝ
\Fig. 182 Sandra (12 años)
(*
)
(*)
Fig. 186. Andrea (9 años) Y
[
Fig. 185. ‘o˘tm’ãne (9 años)
Fig. 184. Se˘ı˜f (9 años)
\
«
\ \
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxvii
\
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxix. Sandra (15 años)
\
Fig. 183 (12 años)
Fig. 187 Lucía (12 años)
« A mí, a jumilde
Humildad, a veces un poquito soberbia 50: no me gana naide
, dijo uno.
Y aquí viene un inciso. Porque este espacio público del que hablamos es apto , además, para ejercer un derecho: el de asilo
Y, ¿qué es eso? Pues el a˘sy˜lum vel άσυλον, locus sacrosanctus, inviolabilis, sacer, inspoliatus. El verbo
συλάω («quitar», «arrancar», «despojar») produce
«a + silo»: lugar privilegiado e inviolable del cual no puede ser arrebatado o sacado el delincuente
Está muy difundida la costumbre de marcar ciertos lugares —un templo, un bosquecillo sagrado, una sepultura— para que en ellos puedan ponerse a salvo ciertos individuos, habitualmente criminales; e incluso ciertas especies animales
Entre los gentiles, el primero que hubo fue en la Atenas . A éste imitó Rómulo haciendo otro tal. Para el antiguo Israel tenían derecho de asilo el altar y, mas tarde, ciertas ciudades (Deuteronomio Cap. iv:41ss.). En el Libro de Josué (Cap. xx), la divinidad señala seis ciudades de refugio y amparo; de lo cual tenía prevenido antes a Moysén (Numerorum, Cap. xxxv; y en el Dt., Cap. xix: Tres civitates separabis tibi in medio terræ, &c.)
En ellas, un homicida (accidental o imprudente) podía esquivar la venganza de los deudos del difunto. Los caminos de acceso a tales ciudades debían estar claramente señalizados y gozaban de mantenimiento público a cargo de aquella antigua teocracia
Entre fenicios, sirios, griegos y romanos; entre eslavos y teutones antiguos hubo asilos. ¡Si es que la moda llegó hasta la India, Hawai y Australia!
El cristianismo no podía ser menos: adoptó también la institución, y muchas iglesias ostentaban este derecho de santuario. Aunque con el tiempo, poco a poco, haya ido restringiéndose a casi nada
El derecho canónico latino le asigna un cierto período (quedando exceptuados el sacrilegio y la traición)
En Inglaterra, quien se aforase a este derecho de refugio podía optar al destierro voluntario. El rey Enrique viii (aquel gran entrometido) ya lo limitó a Derby, Launceston, Manchester (transferido luego a Chester), Northampton, Wells, Westminster y York. Estos santuarios para los criminales no serían abolidos hasta el año 1623; aunque para los casos civiles todavía persistieran durante unos cien años.
.»
17 b
50. O refinadamente hipócrita. Según los entendidos, hay que estar atentos a los siguientes síntomas (macharronice Lat.): inclinatio capitis tortitio morris Ù facet suam sanctam uoluntatem
Fig. 191 Emmanuel se descubre al saludar Y respetuosamente (si lleva sombrero) Como en el vodevil.
Fig. 189. Adriana Sofía (9 años)
Y
[
Fig. 188. Valeria (9 años)
[
Fig. 192. Diana (12 años)
\
Fig. 190
YY los agarenos, por supuesto, también han disfrutado de esta costumbre de los lugares santos
La misteriosa divinidad, en cuya casa o santuario buscaban asilo aquellos refugiados, los consideraba naturalmente sus huéspedes. Y la gente creía que ellos se beneficiaban de las sagradas leyes de la hospitalidad.
Ahora, volvamos a lo nuestro
La participación en este salón de actos comunal es, para latinos y arabófonos, un ejercicio de humildad colectiva. Cualquiera puede admitir allí que se equivoca, que es tonto o malvado. Pero no lo es él solo. Sino todos. La culpa, así, queda diluida. Porque o nos reímos de todos o de ninguno.
16 c
\
Fig. 194. Dalia (6 años) Plaza Mayor de Aínsa
Fig. 195. Y Jefferson (7 años).
Fig. 196. Cristopher (7 años)
Fig. 193. Nicole (9 años)
Tampoco es cosa baladí que este edificio tenga la factura y las dimensiones de un palacio. Todos pueden entrar. Una vez allí dentro, todos son como príncipes. Incluso la gente 51 que habita en sus departamentos subterráneos. Mucho más podría decirse acerca de este asunto tan interesante
51. En los sótanos de Luxor, ¡vaya pedazo de museo que sacaron en las excavaciones! Porque en Egipto, las estatuas votivas de dioses y faraones, cuando ya no cabían de tantas que había y/o habían muerto aquellos reyes, eran sepultadas en las profundidades del templo. Ya que, como imágenes de realidades espirituales (o lo que sea), no podían circular a la manera en que lo hacen los materiales para la construcción; o las piedras con que se levanta un dique
\
17 c
Fig. 198.\ Marta (9 años).
YFig. 197. Cuando la profesora entra en el aula, Haw'w’ã‘ se pone en pie (si estaba sentada)
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxx. Dania (10 años)
Z Fig. 199b Vanessa (12 años)
ZFig. 200
(*) (**) (*) (
Fig. 199a
Z
**)
Ut sa˘lu˜taret, inclı˜nãri et oscu˘lantur ma˘nu.
Honõrı˘cis verbis mãjõres allõquitur, re˘ve˘rentı˜a magna monstrabant eos. [Et qua˘si me˘tum.]
acatamiento y honra. La reverencia (ii)
Es el respeto 52 que alguien tiene a otro: estando en su presencia con los ojos bajos , postura hones ta , palabras humildes y comedidas. Hablamos de un instinto: los lobos lo hacen, para reconocer al jefe de su manada. Lo contrario es la descompostura, el denuesto, la afrenta, disfavor e insolencia.
La reverencia nos parece de lo más corriente cuando la vemos en las series anglosajonas que echan por la tv. Y que, cuando toca hacerlas en el edificio público para reunirse, mucha gente se las toma por el pito del sereno 53 .
52. V. Lat. respı˘cı˘o, is pe¯xi, pe¯ctum: «volver a mirar», «dirigir la vista con atención y cuidado», «contemplar».
53. Que a lo peor asisten al funeral de un pariente en camiseta, bermudas y maripís. Como si tal cosa. «Oiga Vd.: ¡es que estamos en verano!».
18 a \Fig. 202b
Z \Fig. 202a (*) Pu˘to æquum non esse ut hostı˘as in terram iecerint. Et
(*) [
Fig. 204. Byron (9 años).
æquum pu˘to esse fu˜res deprehensi ut ne ı˘te˘rum fu˜rentur.
Fig. 201a [
Fig. 203
Eccle˜sı˘a ra˘pı˜næ erat pulchra eccle˜sı˘a.
Sa˘cerdos ma˘le sensit. Missam de˘i
amplı˘us ce˘le˘brare non pote˘rat.
Fu˜r non potu˘it eccle˜sı˘am fu˜ra˜ri et e˜vit .
Es característico de los latinos, cuando ellos hacen sus reverencias al uno y trino 54, el canto de himnos y otras ofrendas. Los arabófonos recitan el Qu˜r’ãn con este mismo fin: y es inexcusable obligación diaria. Todo este asunto será visto más adelante 55 con detalle.
54. Sancta trínitas, unus deus: tercera invocación de la Letanía del S.gdo Corazón de Jesús
55. En la lección N.o 3, intitulada Buzón de voz, Pág. 20c passim
Hæc est
fa˜bu˘la galli eccle˜sı˘æ cathedra˜lis
Nunquam bı˘be˘re noctu quia lı˜beros ha˘bemus et eos afı˜ge˘re possumus, nec non uxo˜ri.
Alı˘quot nause˘ant et cadent in terram.
19 a
Z Fig. 205. Fernanda (7 años)
Z Fig. 206
Z (**) (**)
Fig. 207
(
(
\
***)
***)
Fig. 208
[
Fig. 201b
[
Fig. 201c
Nosotros estamos investigando por qué se junta la gente allí. Y los sentimientos de pertenencia a un grupo. En el edificio público, donde latinos y arabófonos celebran sus reuniones, se proclaman normas protocolarias para la vida. Pautas para evitar molestos desórdenes públicos, y para asegurarnos el futuro.
No es posible desafiar estas consignas, ¿o sí?
18 b
Vamos a ver. Esto es como cantar en un coro. Es preciso ajustarse muy bien todos, con la vista puesta en un n superior.
Fig. 209a Y
[
Fig. 212. Jenni (7 años)
Fig. 210. Sin firma (10 años) Y
Fig. 211. Zi’ãn (12 años) Y
Se hace delante del general, del emperador, del santísimo, en el sentido de ofrecerse inerme ante el superior. O, quizá, para que te pasen revista: y comprueben si el arma de marras está limpia y bien engrasada
Modernamente, esta presentación se hace con armas de fuego: mediante la ceremonia colectiva del desfile o parada militar Presten Vds. la máxima atención: pues existe una modalidad femenina de semejante alarde. Vamos a desarrollarla con el necesario detenimiento en la figura 215 (iii) de la página siguiente.
19 b
Fig. 213 (ii). Y
[
Fig. 209b. Sin firma (10 años)
YZFig. 213 (i) El saludo militar consiste —según nos ilustra Varvãra en presentar el arma; que también se puede decir «rendir armas».
Fig. 215. Iván (12 años) Y
Fig. 214. Monalisa (7 años)
Fig. 216. Maryam (9 años)
(* Entre los antiguos semitas, preislámicos de la y ˆ’ãhil’ı˜y’ya
, o «edad de la ignorancia») y también en la Arabia hijrí, estas jóvenes acompañaban,
Si la respuesta es afirmativa, siempre habrá quien prefiera estarse en su casa tan tranquilo. O en un ribazo. Desde esa posición es fácil resbalar a un abierto rechazo del edificio público. Ya hacia 1116, Enrique el Monje le negaba cualquier utilidad.
Su contemporáneo Pedro de Bruys (un extremista recalcitrante) lo condenaba sin miramientos. Y otro más, Tanquelim de Amberes «El Iracundo», equiparaba en sus soflamas el edificio de marras con una casa de lenocinio 56
trata de tres agitadores de imaginación fantástica y algo desequilibrada. Así les fue.
Enrique sería reducido, encadenado y conducido ante el obispo (S. Bernardo, Vita prima, pl, clxxxv, col. 313) Pedro era un oscuro párroco montañés que, curiosamente, tiene un santuario homónimo en el Sobrarbe oscense: N.tra S.ra de Bruis. Terminó sus días desastradamente Hacia 1115, una carta del capítulo catedralicio de Utrech nos informa de que las gentes crédulas del pueblo reverenciaban a Tanquelim hasta el extremo de beberse el agua en que se bañaba; lo cual no le libró de ser asesinado por un sacerdote.
Por otra parte: a los tres les disgustaban, por superfluos, el canto, la música y la numismática
Presentación del armamento:
Una variante alegre y divertida es el coro de danzas populares, donde se dan cita beldades doncellescas.
Estamos hablando de asuntos misteriosos.
En razón del tema (como hicimos, e. g.,en la Pág. 22c y ss. de nuestra primera lección), vamos a tratarlo en una serie de escolios o notas marginales El que quiera aprenderlo que se las lea. Y quien no, que pase adelante. jaleándolo, al palladium tribal. Mediante la técnica de corear gritos de guerra. Cada grupo tenía el suyo propio. Nos referimos a un santuario portátil: litera, especie de palanquín de manos o tienda de cuero rojo.
(**) Entre los beduinos recibió nombres distintos. ‘utfa o ‘awt afa (
, el «estandarte»), merkab ( ةـــــــَﺒــــَﻛْرــــَﻣ, el «carruaje»), o ’ãbu-du˜r ( روذ وــﺑإ ); y la más moderna qu˜b’ba (ةـــــﱠﺑوــﻗ, el «fortín», que es allí palabra femenina), pabellón de campaña que usa el sultán y que, para mayor intimidad, se dispone rodeado por el alfaneque o ’ãfr’ãg ( گارــــﻓا ), una amplia muralla de ricos lienzos.
Ojito, que no vale cualquier tela.
Tiene que ser de pelo impermeable de cabra. En la antigüedad grecolatina, Diodoro Sículo (20, 65, 1) vio uno de estos. El venerable dispositivo oracular era una tienda sagrada en el campo de los cartagineses, próxima a la del jefe. Servía para consultar a la superioridad, quien, descendiendo en forma de nube, visitaba allí al político de turno para comunicarle sus instrucciones, tõrõt (singular tõrãh , ה־ רוֹתּ ); que él guardará «como la niña de sus ojos» (Prov. vii:2).
56. Lambert Malcolm D.: La herejía medieval. Movimientos populares de los bogomilos a los husitas Trad. de Castro Alfín Demetrio, Taurus, Madrid 1986, Págs. 66-72. Se
18 c \
Fig. 213 (iii)
ةـــــﻔــــطوــﻋ
( ةــﱠﻴــﻠِــِﻫاـَﺠـﻟا
Fig. 217 Y
[ Z
Fig. 218a
Fig. 219. Ionut (12 años)
Y
Fig. 221a Luis (12 años)
Dos
Abajo:
En la tradición vecina hay también una mezquita «mala», «dañina» o «de la discordia» 57 ( masyˆid Dir’ãr, رارِد ﺪـــِﺠـْﺴـَﻤـْﻟا ), construida por los seguidores de ’ãbu˜ ’ãmr el Monje ( ﺮــﻤـَﻋ ﻮــﺑأ ) en el noveno año hiyˆrí: para hacer daño, promoviendo las dudas y la disensión. Lectisternio de oprobio, construído «sobre el arenal» de la hipocresía y la mala fe, «que se desploma». Sólo es bueno si se quema y se destruye
El profeta, diplomáticamente, se excusó de rezar allí.
Y ahora pasa la página; que esto se anima
57. Qu˜r’ãn, azora 9 (El arrepentimiento):107-110.
19 c
\
Fig. 220
vistas de la masyˆid Dir’ãr en Lübeck (1942)
en forma de Domo. Arriba: Marienkirch.
Fig. 222a ¿Otro saludo militar? Y No: es la zalema
Y
Fig. 223. Noelia (12 años)
Z Fig. 224. Sin firma (13 años)
[
Fig. 225. Sin firma (13 años)
\
Fig. 221b Luis (12 años)
Z Fig. 218b
***)Entre los hebreos, Números xxv:8 la menciona como ’ohel mõ‘ed ( ד ֶ עוֹמּ לֶהוֹא, «tienda de la reunión»
o «del encuentro»); y también miškãn ( ן ָ כּשּׁׁימּ , «morada»).
La tienda resguarda, tras un velo, aquella conocida «arca del testimonio», «decreto» o «ley solemne» ( ’arõn hã-‘edût, «alianza», תֹּוד ֶ ע-ָה ןוֹרא); también llamada «de la pertenencia» ( ’arõn h˜abber˜ıt ,
Su poder es temible. Cuenta el Libro primero de Samuel (vi:7) que un buen montón de betsemitas fueron abatidos «por no regocijarse en su presencia». Y esto, según el contexto, viene a signicar: «quedársela mirando como unos pasmarotes, sin danzar con todas sus fuerzas ».
El texto masorético para nada nos aclara si fueron «70» ó «50.000» los damnicados Ocurre como en esas manifestaciones en las que, según
ac atamientos
≠ Deso bediencias (iii)
Hay a quienes les da por llevar la contraria:
«Rebelde» es quien, soberbio, desoye el mandato de un superior58 . Saliéndose de tiesto, ¡vaya por dios! «Rebelión», el tal levantamiento; delito de quienes contrarían a su rey y señor59. Es el alboroto 60 , alteración de gente, ruido, vocería, pendencia irracional, polvareda que se levanta, pasión y enojo inquieto. ¡Qué mascarada! ¡Hasta aquí podíamos llegar!
58. Se castiga in fo˘ro ju˜dı˘ciãrı˘o 59. Lat. re˘be˜llis, qui semel uictus [...] bellum instau˜rat [...] imperium detrectat 60. Lat. tu˘mu˜ltus
preguntemos a los organizadores o a la policía, nunca vamos a estar seguros de la cifra exacta de sus asistentes.
Ezequiel xxxxiii:7 nos describe este «arca» como el trono o escabel donde la divinidad posa las plantas de sus pies Allí se conservan pactos, leyes, juramentos inviolables. E interesa recordar, para acabar con esto, que su custodia era conada a hermosas muchachas (vid. Exodus xxxviii:8)
20 a
תּיִרְבּ-ָה ןוֹרא
)
Fig. 226Y
Fig. 227c Y
Fig. 227b (12 años) Y
Fig. 227d [
Fig. 227e Y [
Fig. 227a. (12 años) Y
Fig. 227a Y
El santo patrón a que se acogen estos desventurados es el príncipe de los desobedientes. Los latinos lo llaman Lucifer 61 (o «portador de luz»); los arabófonos, iblı¯ ´ sun (
62. Según dicen, él se comunica al mundo mediante la prensa 63 .
Es la aspiración de muchos: pensar por uno mismo. ¿La realidad? Un adversario y un engañador. Tan grande es su astucia, tan extraordinaria su habilidad, que es menester vigilarlo a perpetuidad.
61. Que hasta tiene una serie de muchos capítulos en la tv intitulada así mismo: Lucifer. Es muy variada su iconografía. Ordinariamente era representado en forma humana, de color negro ¡Buuuu!
62 Qu˜r’ãn, azora 7 (Los lugares elevados):11 y ss. Cuando los ángeles recibieron la orden de arrodillarse delante del recién creado Adán, ’iblı¯ ´ sun rehusó hacerlo; al parecer porque a él, que estaba hecho de fuego (sin humo), no le daba la gana de postrarse ante semejante monigote (fabricado con barro) ¿O es que era el único amante leal del generoso? Porque ya se sabe: había prohibido inclinarse ante nadie que no fuera él mismo.
63. Como el obispo M.ons D. Jacinto M.a Martínez Sáez o.f.m., integrista y algo chocarrero pastor de La Habana; quien, al participar en la xxviii congregación de padres conciliares del Vaticano i (21 de febrero de 1870) anunció que ya era llegado el anticristo, y que no era otro que el periodismo: esos ochocientos diarios que todos los días salen en la Europa «para predicar la palabra del diablo»
Hasta el s. xvii se discutía seriamente la existencia de diablos machos y hembras. ¿Qué sabremos nosotros?
Lo que sí podemos decir es que son innumerables sus nombres: Leviathan, Ballena, Calumniador, Zascandil insolente, diantre, demontre, chaquetero oportunista y charlatán palabrero, Tarasco demonche, don Demoñu o Demongu, Entremetido, Murmurón, Moscamuerta, malo y mendaz, Fabulero incorregible, Adulador, Fingido y engañoso, Faramallero, Avieso malaidea y aguafiestas, Nocivo malsín, Sicalíptico, Dañoso, Malaje avinagrado, Sierpe contrahecha, Tigre rabioso, Fiera, Malasombra, Renieblas.
Y —en la cordillera andina— éste otro, más familiar que todos ellos: el Tío
21 a
ﺲــــْﻴـــﻠِــْﻧإ
)
Y
Fig. 227f
Fig. 227g Y
Fig. 227h Y
Z Fig. 227i
Fig. 228 Y
Estamos hablando de la sementera de todos los males. Por poner algunos casos: hablar feamente de alguien. Tener el cuarto como una leonera. O esas locas ideas de salir tanto por las noches. Que ya se sabe: «A las seis, en la cama estéis». Y otras gamberradas aún peores. «La humanidad marcha a su ruina, obstinándose en seguir falsos derroteros y veredas tortuosas»64 .
64. Machado, Antonio (firmado Cabellera) en La Caricatura, segundo y último año, Madrid 1893.
Comunidades pintorescas
No se trata de rebeldes. Sino, más bien, independientes: que lo son, y mucho. Van un poco a su aire.
Las hay entre los latinos. Como la Iglesia Kimbangui de Cristo en la Tierra65 , en el antiguo Congo Belga. Que rechaza la poligamia, el tabaco, la cerveza, la danza, la magia y todo tipo de violencia No debe confundírsela con otras que son distintas. Quizá, no sé, la Iglesia Etíope de la Restitución de la Teocracia Apostólica Tribal en la Santa Fuente; por citar alguna.
Aunque tienen en común cierta desenvoltura en sus libres adaptaciones de la tradición. Por ejemplo: la conocida parábola de las vírgenes necias y las vírgenes prudentes puede leerse así:
«Habían diez vírgenes negras y diez blancas. Las blancas eran tontas».
65. Aceptada en en 1959 en el World Council of Churches con la denominación de ejcsk : siglas francófonas de la Église de Jésus-Christ sur la Terre par le Prophète Simón Kimbangu (1889-1951)
20 b
[
Fig. 229. Elías (12 años)
Y
Fig. 230a Patricia (12 años)
Y
Fig. 230b
[
Fig. 230c
Fig. 231. Raquel (12 años) Y Y
Pero, ¡mucho ojo! Conviene no reírse de estas iglesias algo extravagantes. Y, ¿por qué? Por la importancia numérica de sus seguidores. En África se cuentan algo más de 400 millones de feligreses. Y las hay igualmente entre los arabófonos. Como la Mu˜rı˜diy'ya 66 ( يِّﺪﻳِرﻮﻣ) o «noviciado»: hermandad mística de jornaleros del pueblo wolof fundada por un santo marabout 67, el «profesor de Tou˜ba » ( se’rı˜nh Tou˜ba, ﺔﺑﻮُﺗ ةﻦﻳِرﺎﺴﻟا )
Amadou Bamba (c. 1850-1927, ﺔﺒْﻣﺎ َﺑ وُدﺎﻣا ) en el Senegal.
Entre otras peculiaridades: se dice que sus miembros, cuando recitan la oración, no miran a La Meca
66. «Tirocinio», «aprendizaje». Del árabe murı˜d: «discípulo o aspirante», «novato».
67. Morabito mrábet, murábit ( ﻄِﺑاﺮﻣ ): el mahometano que profesa vida austera y penitente. Fray J. Lerchundi advierte que, ya desde 1870, la palabra designa en Marruecos al «fatuo o tonto a nativitate».Por su pretensión de santidad (op. cit. en nuestro prefacio a estas lecciones) Consulta, lector, la figura 90 en la página 8b de esta misma lección: gran mezquita de Tou˜ba
La zalema, ma‘a ’ãs’sal’ãma (
) Un saludo elegante. Se usa cuando, por ejemplo, tú te vas a otra ciudad. Nos vamos a separar La zalema sirve para que viajes protegido Esta es su segunda posición: si la primera señalaba a los buenos pensamientos, la presente indica buenos sentimientos.
21 b
Fig. 222b
ةـــــــﻣﻼــــــﱠﺴــــﻟا
Y
عـــــَﻣ
Fig. 230dY
Fig. 232. Álvaro (12 años)
Y
Repasemos. La gente acude allí:
Y Para homenajear al que toma nota y lleva la cuenta 68 ,
Y para hacer el sacrificio,
Y para juntarse con los vecinos.
Y Algunos van a cotillear, que en casa se aburren
Pues la rutina es como un veneno. Y esta reunión, tan alegre, movida y jacarandosa, se sale por completo de ella. En la edad de piedra, las personas ya se congregaban en un campo, bajo un árbol especial o en una cueva.
El moderno edificio es, por supuesto, mucho más civilizado; mejor que aquellos agujeros llenos de bichos y serpientes.
20 c
68. ’ãl-Hası¯b ﺐــﻴــﺴـﺤﻟا , cuadragésimo «nombre hermoso».
Fig. 237. Breviario de Isabel la Católica: las doce sibilas \ (c. 1495, British Library, Add. Ms. 18851, f.8v)
\
Fig. 235. ’ı˜li’ãs (12 años)
\
Fig. 234
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Fig. 236
Fig. 233a. Celia (12 años)
\
Fig. 233b
Cualquier población antigua era tan pequeña que cabía confortablemente en este tipo de instalaciones. Donde era posible, de paso, tratar algunos asuntos comunitarios.
Pero es que la reunión no es sólo una kermesse social, política u organizativa; ni tan siquiera una especie de rifa benéfica. También es algo referido a uno mismo.
Porque tú estás agobiado en tu casa: te acercas allí y encuentras un sitio para pensar y relajarte. O para ver a determinadas personas y hablar con ellas con tiempo y con recogimiento. Mucho más tranquilo que en la calle.
Y en aquel lugar también se impartía una especie de educación. No había otra entonces. Te contaban historias moralizantes. Cómo actuar
Hay otra cosa más. Los administradores de estos lugares de encuentro eran los burócratas del cielo 69. Tenían poderes. Y manejar tales cosas entraña su pizca de peligro
Es el árbol de la ciencia del bien y del mal
21 c
69. Amengual, Lorenzo: Cartas a Goya. Correspondencia ilustrada Ed. del A., Buenos Aires, 2019, Pág. 52.
[ Y
Figs. 222c y 238. La zalema, tercera posición (las buenas palabras); y Dalia (6 años) Y Iglesia de La Puebla de Castro Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxxi Sandra (15 años)
Fig. 233c
Peristilo (quién lo hace)
Vamos a ver quiénes son éstos que se juntan en el recogedero. Aquí nos fijaremos únicamente, y muy por encima, en las personas jurídicas 70 .
Son cofradías. Colectivos. Esto es: entidades corporativas sujetas a lealtades, a derechos y obligaciones.
70. Las perso˜næ ju˜rı˘dı˘cæ no son seres humanos sino, según Carnelutti, sujetos compuestos o complejos, muy elásticos: persona repræsentata uel ficta, uel mystica, uel imaginata, pia corpo˘ra, u˜nı˘uersı˘tates rerum uel perso˜narum. Hablamos de entidades más que de individuos sueltos. O de una expresión sintética, quizá confusa, de fenómenos dispersos. Para el Estagirita carecerían de existencia real. Pues lo que verdaderamente existe es, e. g. el soldado, y no el ejército
En su monumental obra sobre teología política medieval Los dos cuerpos del rey (Pág. 196), E. H. Kantorowicz se refiere a esta «noción sociológica, organológica o jurídica, un tanto incolora»
Puro derecho romano. Fraternidades simbólicas, como la masonería 71. Una especie de familia externa, «cultural».
Para su justa inteligencia, nosotros seguiremos la teoría de la ficción; enunciada primero por aquellos retorcidos leguleyos bajomedievales como Baldo de Ubaldis sobre el antiguo derecho romano (Codex Justiniani, Decretum de Graciano) y ratificada luego dogmáticamente, como es sabido, por Snibaldo Fieschi —que luego fue Inocencio iv en 1243: La persona jurídica no es real; sino que los legisperitos, para determinados casos, atribuyen personalidad a algo que no es una persona. Eran unos tipos muy divertidos. En ocasiones, la persona jurídica no es sino mera cortina de humo que oculta los verdaderos sujetos del derecho, como puede verse en las modernas sociedades anónimas mercantiles. Su disolución tiene lugar por muerte de todos sus miembros o renuncia de su condición de tales; por realización del fin o utilidad pública —digna de protección— que persigue estatutariamente; o por orden de la autoridad.
71. Y como aquellas hermandades universitarias de las películas de Norteamérica, con sus pintorescas iniciaciones y novatadas: ver Crime Scene Investigation, episodio N.º 1, 4ª temporada, Los requisitos del Sr. Johnson, Dir. Lewis, R. J. guión de Berhan, J. y Zuker, A. E., cbs Worldwide Inc. y Alliance Atlantis Productions Inc., 2000.
22 a
Fig. 241. Manuela (7 años)
Fig. 239a
Fig. 239b
Fig. 239c
[ [
Fig. 240a y b
Y
Fig. 239d
Fig. 238e
[
Fig. 242. Dalia (6 años) Iglesia de Capella
Las personas físicas 72 —Vd., yo, el vecino— quedan para otro lugar 73 .
72. Perso˜næ phy˘sı˘cæ, «no un instrumento, ni una mercancía, ni la pobre rueda de una gran máquina, ni simple unidad de producción» (mensaje radiofónico navideño de S. S. Juan xxiii, 1959)
Los agarenos dicen «persona física» de tres o más maneras: Fardiy´y un ( ﱞيدْﺮـــــــَﻓ , Qu˜r’ãn 6:94; 19:80 y 95; 21:89 ): «impar», por oposición a «plural».
Sajsiy´y un ( ﻲ ﺼ ـْﺨ ـَﺷ , id. 14:42 y 21:97):
«persona», «ser elevado», «que sobresale», «tiene importancia», «aparece» o «mira fijamente».
También wayˆhu ( ــــــــْﺟَو , id. 12:92), la cara o«rostro».
Para terminar, jurídicamente hablando, la persona es una voluntad y una facultad de obrar Un sujeto gramatical. Guiado por un derecho «natural», que no se refiere tanto a relaciones sociales cuanto al tratamiento que ha de recibir un ser humano; sólo por wserlo; e impuesto por igual a súbditos y a gerifaltes (Vallet de Goytisolo, J.: Panorama del derecho civil Bosch, Barcelona 1963, tema iii, Pág. 89)
73. La lección N.o 5, Recursos humanos; donde vamos a tratar este asunto de la manera más adecuada.
23 a
[
Fig. 239i
[
Fig. 243a y b
[
Fig. 244
[
Z Fig. 239g-h Y
[ \
Fig. 246
Fig. 245
Z Fig. 239f
Esta hermandad tiene por nombre «eccle˜sı˘a» (si nos referimos a los latinos) o «’u˜m´ma tun» ( ٌﺔـــــــﻣأ ), si hablan los arabófonos). Intentaremos dar a Vds. más detalles en la lección N.o 3, Buzón de voz
En la presente nos basta con apuntar que, cuando se apelotonan unos con otros, los diferentes individuos dibujan la figura de una pirámide: clarísimo emblema de la jerarquía
Aseguran que está organizada al milímetro. Como una máquina formidable, perfectamente engrasada. O que es algo chirriante, dicen otros. ¿Son habladurías? Aquí viene el testimonio de un veterano trabajador allí.
«En las diferentes estancias del edificio teníamos como mil sillas viejas, cada cual de su padre y de su madre: que aquello parecía la casa de tócame roque . Es lo que suele ocurrir en una parroquia pobre. Me esforcé durante años, intentando mantenerlas recogidas con uniformidad. Puse enormes letreros en todos los salones:
Por una parte, hablamos de creencias y pensamientos. Algo muy personal, interior por naturaleza y completamente impenetrable a nuestra observación. Por otra parte, todo lo anterior supone algún tipo de participación en prácticas colectivas: que sí nos es posible analizar. Y que siguen el vetusto modelo de la aclamación al líder imperial.
«Me pasé siglos, en fin, ordenándolo todo y volviéndolo a ordenar. Pero nada. Nada de nada. Tal vez no sabían leer. O no les daba la gana de hacer caso a todos aquellos carteles.»
22 b
Z Fig. 250 Sin firma (12 años)
Z Fig. 247
Fig. 249b Y
Fig. 252a Marta (12 años) Y
Z Fig. 251 Julia (15 años)
Fig. 253 Anaglifos devocionales
Y
Fig. 248
Y
Fig. 249a Estafa piramidal i
Z
When funding runs out, the scheme collapses.
Cites Advises Advises
Faculty convinces young scholars to work in their field. In order to survive, each scholar must recruit new scholars to follow in their footsteps.
¡Ah, la comunidad !
«... maestra en producir visiones, elaborar mitos y proponer ritos 74.»
Intentamos describirla y nos salió un rollazo. Así:
Tuvimos que repetir estas páginas por lo menos tres veces. Es que hay demasiadas preguntas interesantes, de esas que chiflan a los ingenieros sociales.
Quiénes y cómo son.
Y Sus criterios de pertenencia ¿Cómo se los reconoce desde fuera? ¿Qué se dice de la cofradía en los foros de opinión pública, periodística y televisiva?
Y Criterios de procedencia La competencia profesional. La promoción interna.
Y Criterios institucionales, de adscripción e interacción política. Complicidad y otros pasteleos con las autoridades seculares. Los mandamases. ¿Viven en palacios?
Y Criterios de modernización y puesta al día
Y Criterios funcionales o socio-sanitarios, relativos a algo pedestre: la economía. Saber, por ejemplo, la procedencia y cuantía del respectivo sueldo (si lo hay)
Y Criterios de conflicto y división interna. ¿Percibimos en ella corrillos, cenáculos y mentideros? ¿O tal vez esa ideal unidad carente de fisuras?75
74. Botti, Alfonso: Cielo y dinero. El nacionalcatolicismo en España (1881-1975) Alianza Editorial, Col. Universidad, Madrid 1992, Pág. 142.
Y
Y, ¿qué hacen? Cualquiera sabe.
Y Dicho de una manera elemental: Salen allí delante disfrazados. Con unas sayas o especie de ropón, y un gorro76 lleno de adornos.
75. Hay divisiones. Como debe ser. «Las cabras, a la izquierda; las ovejas, a la derecha» (Mateo xxv:31-46) Nam oportet ¸ hæreses inter uos esse ( i Cor xi:19) Vid Qu˜r’ãn azora 2 (La vaca):213: 30 (Los bizantinos):32; 42 (La consulta):13-14; 43 (Los adornos):67.
¡Y lo que se dividirán! Dice un hadiz: «Se partirán los hebreos en 71 banderías; se partirán los latinos en 72; y se partirán los agarenos en 73. Todas ellas merecen el fuego».
76. El jefe de los jerarcas se quita el gorro Se lo da a un chaval que tiene al lado. Esconden el gorro; lo sacan. Lo vuelven a esconder. El señor disfrazado dice cosas. Como: «Mi gorro», «¿Dónde está mi gorro?». Todo el mundo se tira por los suelos para buscarlo. El resto es en ese mismo plan.
Al final, el chaval se lo devuelve. «Aquí está el gorro». «Pues ya podéis marcharos». Y eso mismo es lo que hacen.
23 b
û ——————————Y
Fig. 254
Fig. 256
Y
Leo (7 años)
Y
Fig. 252b
Z Fig. 255 Raquel (12 años) Y
Y
Fig. 257
Arriba\:
de la sociedad industrial
«...mudas Pyrámides»
Nada. Nos saldría otro mamotreto 77. ¿Cómo explicarlo en pocas palabras? Con un diagrama, un dibujo bien sencillo.
Tradicionalmente se ha dicho que un conjunto de personas puede representarse mediante la enigmática figura de una pirámide. En eso, cosa rara, encontramos algún consenso
En la cima, los reyes: aquellos que mandan, vamos. Debajo, los cortesanos y el clero (una clase especial de administradores educados que saben leer y escribir). Hacia la base, el común de los mortales. Una gradación o escalera de menestrales.
Sancta plebs
Gente de bonete, o aristocracia. Les puede venir de familia. Gente de lo más preparada Especialistas que saben mucho: y si no lo saben, se lo inventan Son los herederos del brujo de la tribu. Conocen a un ser invisible 78. Les da instrucciones Les promete cosas... (Cf. nuestra próxima lección N.o 3, Pág. 29b)
Peones. Una corporación organizada de técnicos Ofrecen consuelo, a la manera que hacen ahora los psicólogos O explican por qué todo va mal Clientela tradicional.
A la derecha: Y jerarquía piramidal de las necesidades humanas propuesta en 1943 por Abraham Maslow
i Aragón, en Zaragoza, / En el Hospital Real, i General de / nuestra Señora de Gracia, / Año 1634, ¶ 80.81.
77. Nos olvidamos de todos estos detalles para estudiarlos a fondo en lecciones sucesivas: Recursos humanos y Pase de modelos
ZInfantería (sin acreditación formal). Saben muy poco, pero les atrae lo misterioso. Se creen lo que les cuentan los de arriba (o no). Van, en fin, a lo suyo
78. Un ser, por cierto, de lo más extravagante (vean Vds. la Pág. 28 c de la lección N.o 3). Ofrece consejos legales e indicaciones como «Si os dan una bofetada, presentad el otro carrrillo». Pueden ser harto extrañas:
«No penséis en mañana, ni aréis ni sembréis. Haced como los pájaros del campo».
De seguir estos consejos, la gente no viviría muchos años.
22 c
Fig. 260
Estima/ reconocimiento Habilidades sociales Seguridad Fisiología
Autorrealización
Fig. 259
pirámide
.
70
70. Del Nilo. Un verso de Canción, en Rimas / de Lvpercio / i del dotor / Bartolomé / Leonardo de Argensola; con licencia i privilegio / de la Corona de Castilla
Z Fig. 258
Aristocracia
Clase media Proletariado Fisiología
\ Fig. 261
Fig. 263a Z Izquierda: Alejandro (12 años)
Fig. 262 Tracy (12 años)
Fig. 264
Los ricos
los de en medio
Los pobres
Arriba\: 2a Pirámide de la sociedad industrial según va (más o menos) desarrollándose.
El dibujo imita a su modelo original celeste: es la jerarquía79 o «gobierno sagrado». También puede plasmarse en un gráfico de círculos concéntricos. Hay poca gente arriba. Parte de los que están en la base tratan de subir; y a veces lo consiguen. Entonces, nuestra clásica pirámide se abomba. Le salen barrigas por el medio. Lo dicen, entre otros, Rosanvallon (un francés); y muchos youtubers
79. Primero de todos en explicarnos este invento fue un neoplatónico denominado Pseudo-Dionisio Areopagita (¿circa 300-500?)
Los sociólogos, actuales herederos de aquellos viejos monjes —también saben leer y escribir— cubren amplísimos arcos teóricos, configurando otras lindas figuras piramidales. Hay de todo allí. En la base nos encontramos, por ejemplo, con el «meta-análisis» propugnado por el P.rof A Serrano Maíllo80 . Una técnica admirable que él aplica a sesudos estudios sociales intentando comprender si existe algún tipo de causalidad entre diferentes variables. ¿Habrá correlaciones no causales? Este profesor revisa atentamente todos los estudios que se han hecho hasta hoy. ¿El resultado? Un revoltijo morrocotudo. Aunque él trata de extraer sus conclusiones.
En el centro de la pirámide demográfica podríamos situar al ya mencionado P.rof Rosanvallon. Y en la cúspide colocaríamos a la D.ra Rosemary Baxendale, brillante socio-estratóloga y académica de Cambridge. Buenísima. Ha estudiado el fenómeno de la desigualdad social a través de la historia.
80. Intocable santón de la sociología hispano-americana. Su manual Patrones y procesos delictivos. La naturaleza y características del delito en la sociedad contemporánea es de estudio obligatorio —y adquisición, por supuesto— en la correspondiente asignatura de la u.n.e.d.
Y
Su útil concepto de «la dualización social» nos pinta el abismo que se está abriendo entre la cima 81 y la base82 de nuestra pirámide: un resquebrajado panorama de la dependencia y la pobreza en el que intervienen no sólo factores económicos y de adscripción personal. Otros, culturales, aumentan esa brecha entre los diferentes grupos: haciendo que los del fondo sean incapaces de asimilarse a la normalidad de arriba
Y lo dejamos ya. Pasemos adelante
81. Donde hay un mercado laboral más o menos potable
82. Pozo caracterizado por una precariedad y una exclusión que parecen cercanas a las condiciones preindustriales
C lase alta Clase media Pozo de las desdichas
Arriba
pirámide de la sociedad actual, postindustrial y del conocimiento
23 c
Fig. 271
\: 3a
Fig. 265
Z Fig. 263b
Fig. 270 \
La D.ra Rosemary Baxendale Crompton (1942-2011)
Fig. 268 Lucas (13 años)
Fig. 269. Alejandra (13 años) Y
\
Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxxii
Y
Fig. 267
Y
Fig. 266
La disposición personal
Bueno: no es una merienda de amiguetes. Es otra cosa.
Mediante la cuidadosa repetición de ciertas fórmulas 83, en el edificio público se expresan:
83. Fijas y estereotipadas. Un refranero inconsciente y estulto. Como:
— Me tienes que llamar
— Sí, claro
— (Me importa un bledo)
— A ver si nos vemos
— (Estoy aquí, ¡pero tengo unas ganas de irme!)
Y La intercesión.
Y La alabanza.
Y El agradecimiento.
Y Lo que tienes que pagar Lo que te van a cobrar por una herencia. Los documentos que debes presentar allí (que siempre te falta uno)
Y sobre todo, no destaques en nada. No llames la atención. Pues si osaras atreverte, concitarías la envidieta
Hoy sospechamos de los formalismos. La espontaneidad parece mucho más atractiva. Hay una tendencia a suponer que cualquier ritual es una cáscara vacía; y que cualquier codificación de la conducta es extraña y antipática, ajena a la naturalidad.
û —————————————Y 24
a
Goal setting Study skills Time management Exam skills Focus Physics Chemistry Triangle of Subject Knowledge Skills [
Fig. 272. En ciertos momentos, las concentraciones de personas también pueden ser algo bastante peligroso: fuentes de disturbios públicos y conductas antisociales
Fig. 274 Y
Fig. 273b Y
Fig. 273a Y
Self-motivation
Achievement
Stress management
Enthusiasm
Confidence
Es algo tradicional Cuando regresa a la obediencia, el regulus —o reyezuelo antiguo— se presenta a los pies de su vencedor —el rey «grande»: rex, exsimperator con las manos entrelazadas; en figura de cautivo Un gesto de sumisión que se difundiría luego, democratizándose, entre las clases populares. Aunque hoy no se estila tanto, Ha˘w'w’ã‘ une las manos sobre el pecho:
Otra cosa son las distancias. Hay distancias. Se ponen distancias.
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La misma distribución espacial del edificio expresa un orden y una jerarquía. ¿Es posible la educación sin autoridad?
Hay que percatarse de dónde está uno. Cada cual, en su sitio, debería saber comportarse. Mucha atención: tampoco en una discoteca, en un restaurante o en un partido de fútbol te pones donde te apetece. Sino donde puedes. En el teatro y en la ópera te prohíben conectar el telefonillo celular. Que molestas.
Colectividad equivale a previsibilidad. Dentro de un orden: porque no podemos preverlo todo.
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\ Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxxiii Darius (15 años)
of Success Subject Knowledge Attitude
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Fig. 275. Serena (8 años) Iglesia de Benabarre
Fig. 277.
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Fig. 276. Marta (12 años)
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Fig. 273e
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Fig. 273d
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Fig. 273c
Caricatura en la prensa contemporánea:
Duelo ajedrecístico entre Pío Nono y el canciller Otto von Bismarck
Elementos comunes más sobresalientes de estos dos «pueblos» ’u˜m´ma e iglesia son:
Y (1) Un libro especial con historietas e instrucciones comunes y jamás cambiadas, ubérrimo de verdades; cuya autoridad es inconfutable 84
Y (2) Una poderosa identidad corporativa, reforzada con muchedumbres, coros, escenografías y,
Y (3) Una comunicación estandarizada 85 , que se dirige tanto a:
84. Pœtarum commenta vel mythica fictia non sunt (Gregorio xvi, carta Inter præcipuas machinationes; Qu˜r’ãn, azora 18, La caverna:1) Porque en él no cabe contradicción alguna, pues radicem desuper ex cælorum dómino («toma su raíz de lo alto»), se argumenta. Ver también el Syllabus, o «catálogo», errorum, (Pantheismus, naturalismus ] rationalismus absolutus: Acta Pio ix Roma 1865, Págs. 701 ss.)
Pero este crudo literalismo —casi diríamos bibliolatría— ha ido relajándose. La modernidad impone cautela y pragmatismo: The Watchtower (Vol. 99, N.o 1 de 2018), boletín internacional de los testigos de Jehová, se refiere a esas sagradas letras como «un libro muy respetado por sus sabios consejos».
85. Esto es algo bien antiguo: ya lo hacían en Altamira, con aquellas pinturas.
Ylas élites alfabetizadas cuanto a las masas depauperadas.
(De hecho, el edificio público es el único lugar donde se juntan los dos grupos).
Pío Nono inaugurando la línea de ferrocarril vaticana el 11 de mayo de 1863. Este tren fue un regalo de los
û —Y û Y 24 b
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Fig. 278c
franceses.
\ Fig. 278b
YFig. 282. Serena (8 años). Iglesia de la Asunción de N.tra S.ra, Laguarres
YFig. 278a Giovanni María Mastai-Ferratti, coronado Pío ix (1792-1878), y cuya solemnidad festejan los latinos cada 7 de febrero.
Fig. 279
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Fig. 281. Jason (12 años)
Fig. 280. Ares (12 años).
Fig. 283. Ángela (12 años)
Antaño, estas corporaciones se estratificaban en función del poder adquisitivo. Hoy, por el sistema de tramos de edad. Sencillamente, son contados los jóvenes que aparecen por allí. Nos da la impresión de que ellos prefieren otro tipo de concentraciones. ¿Donde su protagonismo es mayor? Atención: que tampoco asisten a otras actividades tradicionales, como los conciertos de esa música que llamamos «culta», o «clásica»86
86. Esto nos lo sopló el profesor de violín, colaborador nuestro en la lección N.o 1 (Págs. 20-21b) y N.o 4.
Una primera ronda de clientes invierte con la empresa «pirámide» y recibe la rentabilidad prometida. Dicha rentabilidad se financia con los recursos invertidos por estos mismos clientes.
Segunda ronda de clientes que invierte con la empresa Con estos recursos se financia la rentabilidad prometida a los clientes que no han retirado su inversión. Esta secuencia se repite y puede prolongarse durante varios años. El esquema colapsa cuando un número importante de inversionistas intenta retirar su dinero y la empresa «pirámide» carece de los recursos necesarios para responder
25 b Мы те кто ваи хозяева ! Мы те кто вамц правцм ! Мы те кто вас обманываем ! Мы те кто вас убиваем ! Мы те кто вас объедаем ! Ы те кто работает на нас ! La empresa «pirámide» ofrece rentabilidad
segura
alta y
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Fig. 284
Fig. 285
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Pirámide social de la unión de socialistas rusos
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Illu˜mı˘na˜tı˘o˜ xxxiv (17 años)