MALVIAJE
SINOPSIS
MALVIAJE es un diario íntimo que cuenta una aventura: escaparse de la ciudad, volver al pueblo natal y reencontrarse con nuestras deudas. 4 intérpretes hacen las veces de voz, espacio y música en este recital que cruza la poesía, el teatro y la danza, formando un sólo cuerpo de nostalgia y energía. La (re)construcción del pasado, lejos de estar idealizada, toma la forma de cultura pop: el menemismo como telón fondo, los hits de la radio que nos hacen llorar, una publicidad Arnet, o las celebridades de la revista Gente. Consumo, con ironía y con amor, MALVIAJE hace un autorretrato colectivo, montando un collage con pedacitos de basura, de la generación que todavía no alcanzó los 30.
BIOS “El proyecto trabaja sobre la poesía en tanto fisicalidad, pensando la escritura desde una perspectiva performática. Si escribir es una operación física, del
contacto de los dedos con la tecla, una actividad duracional que produce un flujo de circulación/dis-
posición de la palabra, ¿qué puede un cuerpo al
Alberto Antonio Romero /director/
Gael policano rossi /autor/
Esquel, Chubut 1988. Egresado de la carrera de Dramaturgia de EMAD. Estudió con Luis Bertero, Ariel Farace, Alejandro Tantanián, Mauricio Kartún, Florencia Vecino, y Alejandro Catalán. Obtuvo una mención especial por Chongo Triste, en el IX Premio Rozenmacher. Su poemario Teatra fue editado por Ediciones Desde un Tacho. Trabajó como performer en Under de Sí (BP015), Mareaciones (Ruth Benzacar), Ensayo de Eros (MAMBA) y OBRA (Pasto, Galería). Fue asistente de Alejandro Tantanián y Silvio Lang. Actúa en Descenso, con dirección de Jorge Eiro. Seleccionado para el Programa de Artistas 017 de CIA (Centro de Investigaciones Artísticas). Participó de la Residencia FILBA 2016. Seleccionado para participar de la residencia de escritura de la UAEM (México). Dirigió: Canadá, 3., El Convite, Malviaje y Alwe. En 2017, participa en Bienal Arte Joven Buenos Aires como director de Malviaje.
Gael Policano Rossi (1987) Posgrado en Dramaturgia (UNA 2017). Autor de las obras Saturnalia (2013), Liturgia (2014), Neptunistas (2016). En poesía publicó vosiyo (2009) (2014) y los journals malviaje (2015) y amor brujo (2013). En 2017 publicó su primera novela Gualicho.
momento de apropiarse de un poema? Se trata de un recital con canciones y poemas alternados, que bucea estéticamente en la cultura pop de los 90´s.
Busca operar generando corrimientos de signos muy reconocibles para su reutilización / resignifi-
cación. Con el kitsch como ideal estético de toda política, y los 90´s como experiencia que espeja de
lleno esa premisa. En el problema del cliché como categoría y potencia. Una falsa banda pop conformada por actores, montada con baratijas del once y recortes de revistas. Precaria y frágil en su mate-
rialidad. Malviaje es un poemario de Gael Policano
Rossi, parte del proyecto fue su edición en papel por Milena Caserola, que es entregado al público al momento de ingresar a la sala.” Alberto Antonio Romero
PRÓLOGO DEL LIBRO Con Gael compartimos muchas cosas. Cliché arrancar diciendo esto, y sí. Creo que los lugares comunes son los mejores lugares. Tenemos una carta natal parecida y una infancia sin padre, somos santacruceños, putos, emos y teatras dramaburguers. Su libro llegó en pdf a mi gmail, después de un domingo de charlas y fue descubrir una poesía en la que me encontraba, pero no por reflejo, porque hablara necesariamente de mí –más allá de las obvias coincidencias biográficas- se trataba de otra cosa. De un tiempo y de la forma en que la palabra punzaba. Me surgió automáticamente la necesidad de dar voz a esa letra escrita, de otorgarle entidad, leía o intuía en esa poesía una voluntad física, ¿escénica? O tal vez me la invente para tener un pretexto (otro). En términos más generales puedo decir que siempre me interesó abordar textos ajenos, lo siento liberador, me divierte, esa distancia me permite operar de otra manera. En el libro el tiempo son los 90´s y automáticamente con ellos aparece toda una experiencia política: el menemismo. El show mediático, los tapado de visón, los desnudos cuidados, los viajes a la estratósfera, el champagne, la pizza, el dabke, la convertibilidad. Un pueblo que explota entero para disfrazar el mamarracho. Un pueblo que es Río Tercero, y en el que no casualmente encontramos a este padre, al de Gael, o a esa ausencia. Un espacio literalmente estallado habilita un encuentro que es una esquirla salpicada en la pared. Una huella vacía. Yo también le vi la cara a mi padre por primera vez siendo ya un pibe grande, y también fracasé en el intento de acercarme a eso que después entendí como un desconocido.
El kitsch es el ideal estético de toda política, dice Kundera; o algo así. Vamos entonces a inaugurar una suerte de rito de celebración de la mierda, del mal gusto, porque es lo único que queda ante la derrota. Un mapa de la destrucción, facineroso y fuertemente estetizado. El pop nos sirve como soporte, lo musical como medio para desplegar energía. Pienso en much music, en los noventas y la explosión del video clip y eso me configura un formato: el recital de poemas. Nos ocupamos de tomar un espectro muy acotado de materiales y muy frágil: cinta de papel, papel revista, hojas A4, pelo de plástico, maderas que aparecieron en el depósito del CEPA. A partir de ello realizamos operaciones de uso simples en relación a la lógica que estos proponen: arrugar, estirar, superponer, observar, pisar, colgar. No mucho más. Regodearnos en el color, en la brillantina, en las baratijas del once, en la imagen paparazzi. La cuestión de lo sagrado circulaba permanentemente, y pasó por varias instancias de prueba hasta que me (re) encontré con estos catálogos berretas de arte barroco que sacaba Clarín. La pintura en tanto soporte sacramental. La pintura reducida a una tirada en papel revista, débil en su materialidad, pero resignificada en la reproducción. Recordé a mi abuela recortando al Cristo crucificado de Velazquez para después enmarcarlo y rezarle. El plano de lo sagrado atraviesa el libro: los constantes problemas de comunicación y las observaciones neuróticas, son atravesadas por una percepción que es, a mí entender, mística, ritual, un auto de fe.
ANTECEDENTES
Malviaje se estrena en 2015 como co-producción con CEPA (Centro de Producciones Artísticas), coordinado por Melina Marcow, en un sótano del microcentro. La producción incluía la edición del libro por Milena Caserola. El costo de edición se contemplaba en la entrada, cada espectador se lleva su libro, puede seguir la obra en lectura. En CEPA realizamos temporada mayo /agosto, un total de 16 funciones. Ese mismo año, en el mes de octubre reestrenamos en ILU (La Casona Iluminada) realizamos 10 funciones. En 2016 volvemos a ILU en marzo y realizamos 12 funciones más. Este año la obra fue invitada a participar de la programación de Letras del Centro Cultura Recoleta, en el Festival del más allá, donde realizamos una versión de verano del recital, al aire libre.Seleccionada para la Bienal de Arte Jóven de Buenos Aires en el 2017.
ELENCO
Ana Capalbo Marcela Dojtman Tomás Deias Spreng Gianluca Zonzini
ILUMINACIÓN Rocío Caliri
FOTOGRAFÍA Luz Soria
ASISTENCIA DE DIRECCIÓN Y MONTAJE:
Noelia Lorena Ferrario Duración: 55 minutos
PRENSA
“La puesta de Alberto Antonio Romero sobre el poemario homónimo de Gael Polícano Rossi celebra su mezcla de lenguajes en una propuesta atenta a la estética de los 90, pero capaz de dialogar con la orfandad, el crecimiento y el amor, a cargo de jóvenes actores que se arriesgan al multiformato y resultan vencedores (...) “Malviaje” no tiene nada que ver con el recital poético actuado, es una obra orgullosa de sí, dotada de una textura artesanal, donde cada retazo parece bordado en función de trazar el mapa de un viaje iniciático, con el desamparo
“Malviaje es un espectáculo marika. Pero no de esa mariconería de ópera con terciopelos bordó, tampoco de las un poco más cercanas lentejuelas que encandilan, Malviaje es de una estética marika sudaka, por lo híbrida, por lo pobre, por lo kitsch: abraza lo feo y hace de un miñoncito de pan con la incrustación de mechón de pelo sintético su identidad dislocante. Montada por Alberto Antonio Romero, con los textos de Gael Policano Rossi, estalla en procedimientos rupturistas que la hacen inclasificable. Una obra en multiformato o un recital de poemas en que la voz del poeta se
como pasaporte de áspera belleza.”
divide en cuatro -Marcela Dojtman, Ana Capalbo, Tomás Deías
EN TÉLAM
límites de la representación de la poesía a base de canciones de
por Laura Ferré
Spreng, Gianluca Zonzini-. Esta oda al rejunte de culto explora los los noventa” EN SUPLEMENTO SOY (PÀGINA12)
por Magdalena De Santo
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