Castilla un domingo por la tarde. Una revista del corazón o un café en martes. Un caramelo regalado o el tipo en la entrada de un garage público. Lo mismo me da que me da lo mismo: No nos acordaríamos de esas cosas como no nos acordamos luego nunca de nada. Yo quería hacer un fanzine de fotografía sobre algo tan fútil como para no querer dedicarle más de cuatro días al proyecto. Un fanzine sobre una de esas pequeñeces en el universo de lo irrelevante. Que es el mismo universo al que nos referimos genéricamente. Lo hubiera hecho con fotos de un viaje cualquiera en domingo y en coche a través de Castilla, pero hace rato que no bajo a Málaga. Además, eso -como la revista, el café, el caramelo o el tipo- ni tiene importancia ni tiene difícil reemplazo. Estas son imágenes tomadas el domingo 18 de marzo de 2018 entre las 16:39h y las 18:33h en la Calle Castilla de Madrid. En su imagen de una España popular, sus luces y sombras duras e, incluso, en su punto un poco pop, la Calle Castilla bien parece la Castilla que yo dejé de atravesar. Alberto T. Wilson