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Edición 19 - COMPOLITIK
GUATEMALA
NICARAGUA “Por el momento está estancada”
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ENTREVISTA EXCLUSIVA
POR: EQUIPO DE COMPOLITIK
José Dávila es actual miembro del consejo
editorial de nuestra revista Compolitik, acompañó a la candidata de oposición Cristiana Chamarro en su frustrada candidatura a la presidencia de ese país.
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Dávila nos da una panorámica política de lo que el dictador Daniel Ortega tenía preparado para las elecciones que se llevaron a cabo en noviembre del 2021.
Todo comienza con el cambio de leyes que Ortega realizó en el Congreso, con una oposición muy débil, donde le permitió el control total de las ONG´s, así como del dinero que recibían y acusar a todo aquel que estuviera en contra del gobierno de traidor y golpista.
La primera candidata de oposición con notable apoyo ciudadano, Cristiana Chamorro, hija de la ex presidente, Violeta Chamorro, se perfilaba como ganadora de esas elecciones.
CP: Compolitik JD: José Dávila
Ante ese miedo por parte de Ortega y Murillo, su esposa, la acusan de varios delitos para lograr su no participación en las elecciones y neutralizar así el apoyo que los ciudadanos, hartos de las arrogancias del dictador.
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CP: ¿Cómo se fraguó que en la campaña electoral, Ortega llegara a impedir la participación de la oposición?
JD: Después del retorno de Ortega al poder en 2007, se notó claramente su tendencia dictatorial, y luego de una serie de elecciones fraudulentas, incluyendo la de 2016 que eliminó a la oposición de un plumazo un par de meses previo a las elecciones, cuando ya tenía su candidato, y en buena posición.
El país reclamaba cívicamente la democratización del país, pero fueron los estudiantes universitarios quienes encendieron en abril de 2018 la chispa de protestas cívicas masivas contra una reforma de seguridad social que perjudicaba a los pensionados, e incendios en las reservas forestales, que el gobierno no atendía por razones de negocios, y que estaban perjudicando el medio ambiente.
Los estudiantes tomaron las universidades, y las fuerzas del régimen de Ortega respondieron con violencia extrema, asesinando estudiantes, situación que se prolongó hasta que la protesta se extendió a todo el país, hubo un diálogo nacional promovido por la Iglesia católica, y se acordó dar pasos para la democratización, se pidió adelantar elecciones; Ortega no aceptó, pues dijo que la Constitución señalaba noviembre de 2021 para las elecciones y aceptó la idea de reformas electorales.
Desde entonces la oposición comenzó a prepararse para las elecciones, propuso reformas, y trabajaban como si irían a unas elecciones mejores que las anteriores. A la par, el régimen aprobó rápidamente una serie de leyes que tendían a limitar la movilidad de la oposición, señalando delitos que claramente iba a aplicar a la oposición, para maniatarla.
Entre esas leyes estaba la de Agentes Extranjeros, la de Ciberdelitos, la de Menoscabo de la integralidad del país, Traición a la Patria, y otras leyes represivas. Así comenzó el ahogamiento de unas posibles elecciones libres.
CP: ¿Cómo Cristiana Chamorro llegó a ser tan rápido la pre candidata presidencial de mayor aceptación?
JD: Cristiana Chamorro, hija de la expresidenta democrática Violeta Chamorro y del Mártir de las Libertades Públicas Pedro Joaquín Chamorro, asesinado en plena calle en 1978 por sicarios ligados a la dictadura de Somoza, se convirtió
repentinamente, apenas se comenzó a hablar de candidaturas, en la figura favorita para enfrentar y derrotar a Ortega.
Resurgió la figura icónica de doña Violeta Chamorro y su histórica derrota electoral a Ortega en 1990; de inmediato vino el imaginario popular y proyectó una nueva derrota para Ortega, esta vez de manos de la hija de Doña Violeta, planteándose el escenario que Cristiana le propinara una segunda derrota, madre e hija, que finalmente terminaría con la carrera política del dictador.
Esto llenó de pánico al régimen, sobre todo a Rosario Murillo, esposa de Ortega, que desarrolló una campaña agresiva e incisiva contra la familia Chamorro con la que ella misma había trabajado como secretaria de Pedro Joaquín Chamorro, cuando este era director del diario La Prensa, el principal opositor a la dictadura de los Somoza.
Esta campaña contra Cristiana Chamorro, la consolidó aún más como la posible candidata presidencial ganadora para las elecciones de noviembre de 2021, sobresaliendo sobre las otras precandidaturas. La dictadura se aterrorizó ante la idea de permitir elecciones libres, y que Ortega las perdiera frente a esta candidata.
CP: La única manera de impedir su participación, fue acusarla de una serie de delitos, ¿Se imaginaron eso?
No, ella era la directora ejecutiva de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, creada por la expresidenta para promover las libertades públicas, capacitar periodistas con la tecnología actualizada para la comunicación pública, y defender los derechos humanos, labor que era apoyada a nivel internacional por la USAID, la Unión Europea, países individuales, dentro de un contexto de fortalecer a la sociedad civil y prepararla para un desarrollo democrático.
El gobierno quiso obligar a Cristiana Chamorro a declarase Agente Extranjero, según la nueva ley, y como tal, abstenerse de participar en política nacional o aspirar a un cargo público. Cristiana se negó a ello, y optó mejor por cerrar la Fundación Violeta Chamorro, y se dedicó a buscar la unidad de la oposición, y a denunciar internacionalmente los atropellos del régimen.
Al regresar de un viaje fue citada por el Ministerio Público, y fue interrogada sobre los fondos de la Fundación, y ella explicó la transparencia del manejo de sus fondos, y lo informado que estaba el propio gobierno de sus actividades.
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Sin embargo, el dos de junio de 2021, fue acusada públicamente de lavado de dinero por recibir fondos extranjeros y utilizarlos en programas que trataban de desestabilizar al gobierno, y con gran despliegue policial allanan su casa con la orden de llevarla presa, sin embargo, horas después de intentar detenerla, decidió el régimen darle su casa por cárcel, en total aislamiento, rodeada de policías, y con la autorización de recibir una visita familiar cada quince días. Fue la primera detenida de los “presos electorales”, y en los próximos días será su juicio sumario, y estará condenada a prisión.
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CP: ¿Cómo vivió usted y los opositores en general la persecución política?
JD: En Nicaragua, ser opositor es delito, el régimen se ha radicalizado hasta reprimir a todo aquel que no coincida con su pensamiento o concepciones de la política, ha llegado a ser delito portar una bandera nacional, con cuyos colores azul y blanco se ha llegado a identificar la oposición, contrario a los colores rojo y negro de la bandera sandinista, se llegó a catalogar las protestas pacíficas de 2018, como terrorismo e intento de golpe de estado, y la represión y violencia del Estado se institucionalizó, toda persona identificada de haber participado en las demostraciones masivas exigiendo la renuncia de Ortega, se vio asediada, perseguida, y los identificados como más activos en dichas protestas fueron apresados, llegando en un momento a haber 800 presos políticos, la mayoría de los cuales, recibieron una amnistía que más bien favoreció a los paramilitares y fuerzas del gobierno, responsables de las masacres de 2018, y señaladas ahora por la Comisión Interameri-cana de Derechos Humanos, CIDH, como responsables de crímenes de lesa humanidad.
CP: ¿Cómo ve la situación, desde el punto de vista de los exiliados, que son decenas de miles?
JD: A estas alturas, febrero de 2022, se ve muy gris la situación en Nicaragua; el régimen no para en su represión, está aislado internacionalmente, decenas de sus funcionarios están sancionados por USA, la Unión Europea y otros países a nivel individual como Suiza, Canadá a Gran Bretaña, tiene presiones de la OEA para liberar los 170 presos políticos y planear elecciones libres. Entre los presos 40 prominentes líderes de todos los sectores, incluyendo siete precandidatos presidenciales, capturados entre junio y septiembre de 2021.
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La crisis política, que es también social y económica se ha profundizado, prácticamente se ha paralizado el proceso de normalización, está lejos la estabilidad política, y el exilio, que pasa muchas dificultades en los distintos países donde han hallado refugio, espera el momento de un retorno seguro al país, que garantice el ejercicio de sus derechos y deberes ciudadanos.
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Por el momento la población nicaragüense se encuentra atemorizada, vive un estado policial, y el régimen se ha erigido como un régimen totalitario que trata de ahogar los restos de libertades públicas que han quedado.
CP: Su visión de Nicaragua, con una oposición neutralizada
JD: Claramente Ortega al negarse a liberar a los presos políticos, sobre todo a los precandidatos presidenciales y otros líderes, y más bien haber estar realizando unos juicios secretos en la cárcel preventiva de El Chipote, sin respeto a toda norma jurídica nacional o internacional, está buscando construir con ellos una moneda de cambio ya con todos esos presos condenados a penas entre 10 y 25 años de cárcel, para buscar una negociación que el gobierno prefiere sea bilateral con los Estados Unidos y no con organismos multilaterales como la OEA o la Unión Europea, y que en esas negociaciones le sean quitadas las sanciones, le reconozcan su “triunfo” electoral, y lo saquen del delicado aislamiento internacional en que se encuentra.
Un agravante más se ha suscitado, al echarse Ortega en brazos de China continental luego de romper abruptamente en diciembre pasado sus relaciones diplomáticas con Taiwán, fortaleciendo además su alianza con Rusia, también en el plano militar, entrando de pleno al juego de geopolítica mundial, para sentirse más fuerte, protegido, y así evadir y despegarse de la impu nidad en que está sumido, por violación masiva de los derechos humanos.
¿Será que busca Ortega con su interés de ser peón de la geopolítica mundial, instaurar una especie de Corea del Norte en Centroamérica? O dándose cuenta que necesita sobrevivir en América, ¿Estará dispuesto a alguna apertura democrática para buscar cierta estabilidad? ¿Habrá salida a corto plazo a la grave crisis política de Nicaragua? Debemos esperar un poco, para ver hacia dónde va Nicaragua, por el momento está estancada.
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