EL ALCOHOLISMO Y SUS CONSECUENCIAS

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Pensamiento Da Vinciano III

EL ALCOHOLISMO Y

SUS CONSECUENCIAS

EN LA SALUD EL ALCOHOLISMO Y

SUS CONSECUENCIAS

EN LA FAMILIA EL ALCOHOLISMO Y

SUS CONSECUENCIAS

EN LOS ACCIDENTES

VEHICULARES


CRÉDITOS INVESTIGACIÓN Y

REDACCIÓN

Cuque Hernández, Ana Gabriela Gabriel Contreras, Mario Alejandro Fredman Jubini Aatán Pacay Galindo DISEÑO Y

DIAGRAMACIÓN Gabriel Contreras, Mario Alejandro PUBLICACIÓN

DEL MATERIAL Gabriel Contreras, Mario Alejandro FOTOGRAFÍAS DE: www.pexels.com


El alcohol puede ser parte de un estilo de vida saludable si bebe con moderación y también si se hace ejercicio y se tiene una buena dieta.

Muchos de nosotros bebemos alcohol para relajarnos y socializar. El alcohol puede ser parte de un estilo de vida saludable si bebe con moderación y también si se hace ejercicio y se tiene una buena dieta. Pero beber demasiado puede afectar nuestra salud física y mental. El uso nocivo del alcohol tiene un efecto grave en la salud pública y se considera uno de los principales factores de riesgo para la mala salud a nivel mundial. El uso nocivo del alcohol es un contribuyente significativo a la carga mundial de la enfermedad y está catalogado como el tercer factor de riesgo principal para muertes prematuras y discapacidades en el mundo. Las conclusiones de varios estudios son claras y sin ambigüedades: el alcohol es un problema de salud global colosal. El grado de riesgo para el uso nocivo del alcohol varía con la edad, el sexo y otras características biológicas del consumidor, así como

con el entorno y el contexto en el que se bebe. Algunos grupos e individuos vulnerables o en riesgo han aumentado. Especialmente en una sociedad latina donde el alcohol forma parte en su mayoría de veces como un invitado más en las reuniones de amigos o familiares el consumo de estas sustancias llega a la vida de las personas a una temprana edad y la exposición a esto se incrementa con una cultura donde si no hay alcohol entonces no se celebra de verdad, las personas que se vuelven adictas incrementan en cantidades que se superan cada año. Como se mencionaba anteriormente si se consumen bebidas alcohólicas con moderación y acompañadas de una vida saludable la calidad de vida de la persona puede seguir sin ningún tipo de riesgo, pero una dieta poco saludable combinada con un consumo excesivo de alcohol puede llegar a aumentar un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, hipertensión y diabetes tipo 2. El alcohol de

cualquier tipo puede dañar seriamente el sistema digestivo, cerebro, corazón, hígado, estómago y otros órganos vitales, lo que a su vez puede acortar la vida por varios años. Pero a pesar de todos esos riesgos para la salud, las personas aún beberán. Eso hace que el consumo de alcohol sea un problema de salud complejo, que requiere una mejor comprensión de cómo el alcohol puede afectar nuestros cuerpos. Y también se debe tener una mejor compresión del contexto cultural de la región, ciudad o espacio en el que se quiera hacer un cambio de hábito en las personas pues todos los lugares son diferentes y cuentan con elementos que los hacen mundos únicos a los que se debe acercar de manera diferente.


Parte de las soluciones que se pueden dar a para solucionar el deterioro de la salud de las personas sería la de crear conciencia sobre el daño a otros y entre los grupos vulnerables causados por el consumo de alcohol, evitar la estigmatización y desalentar activamente la discriminación contra los grupos e individuos afectados, pues las personas que forman parte de dichos grupos no buscan ayuda porque son discriminados por la misma sociedad a la que pertenecen, a su vez los medios colaboran con esta estigmatización mostrando solo las consecuencias pero no colaborando también mostrando las causas ni cómo actuar cuando ya se sufre de las consecuencias de la enfermedad, siempre estos buscando lo que llame la atención a su medio de comunicación pero esto a largo y corto plazo también contribuye a que el problema persista pues no comparten información de organizaciones cuya misión es combatir el alcoholismo en la sociedad. Otra solución que cabe mencionar es que los servicios de salud son fundamentales para abordar el daño a nivel individual entre aquellos con trastornos por consumo de alcohol y otras afecciones de salud causadas por el uso nocivo del alcohol. Los servicios de salud deben proporcionar intervenciones de prevención y tratamiento a individuos y familias en riesgo o afectados por trastornos por consumo de alcohol y afecciones asociadas, pero como se mencionaba anteriormente los medios no dan seguimiento o algún tipo de publicidad a los mismos. Otro papel importante de los servicios de salud y los profesionales de la salud es informar a las sociedades sobre la salud pública y las consecuencias sociales del uso nocivo del alcohol, apoyar a las comunidades en sus esfuerzos por reducir el uso nocivo del alcohol y abogar por respuestas sociales efectivas.


Los servicios de salud deben llegar, movilizar e involucrar a una amplia gama de actores fuera del sector de la salud, todo esto puede lograrse con estrategias de comunicación que abarquen varios medios específicamente en medios donde la población joven tenga contacto pues son ellos los que sufrirán o sufren ya las consecuencias del alcoholismo. La respuesta de los servicios de salud debe ser suficientemente fortalecida y financiada de manera acorde con la magnitud de los problemas de salud pública causados por el uso nocivo del alcohol, se le debe pedir a las autoridades que se le dé seguimiento a estos casos y apoyo a las instituciones pues su obligación velar por la salud física y mental del pueblo. Este llamado de atención puede lograrse mediante manifestaciones físicas o por redes sociales siempre siguiendo una estrategia que garantice que las demandas sean escuchadas. Para concluir podemos decir que este es un problema que nos atañe a todos independientemente si conocemos a alguien que sufre de problemas de salud por el consumo excesivo de alcohol o no, pues es una cadena de desastre la cual puede detenerse si como una sociedad nos unimos para combatirlo sea con acciones pequeñas como compartir información de instituciones que ayuden a las personas o manifestando nuestra inconformidad a las autoridades del gobierno sobre cómo no se está haciendo caso a este problema que si no se atiende seguirá cobrando la salud de una sociedad que ha caído en las manos del alcohol y a la cual su gobierno, instituciones, medios y personas no muestran el interés o no saben cómo actuar para contribuir a su recuperación, cada acción cuenta por muy pequeña que parezca.


El alcohol ha sido reconocido como un factor de integración social y favorecedor de la convivencia la cual se obtiene con fácil acceso, el mismo se ha convertido en un verdadero problema social en alrededor de todo el mundo y en todas las edades a partir de la adolescencia. El alcoholismo es una enfermedad crónica y progresiva que a menudo es mortal, todo esto se debe a una variedad de factores donde influye, además de producir cambios en la persona que afectan no sólo su aspecto personal, sino también sus relaciones en el trabajo y con el medio en que realiza sus actividades cotidianas o incluso en la familia. La mayoría de la gente no reconoce que el alcohol es una droga la cual puede ser adictiva. Ha sido comprobado que los hombres consumen más alcohol que la mujer. Aunque el alcoholismo sea un problema que afecta al individual, perjudica más a la familia y sociedad. La persona culpable de esto es la persona dominante en el hogar, el hombre. Unos de los usos más comunes entre la comunidad

latina es el alcoholismo en el hombre, la cual se tiene que poner en alto por medio de aumentar las tarifas del alcohol para evitar la destrucción de la familia. El alcoholismo en la familia genera varias dificultades para sus miembros, sobre todo perjudica a los más pequeños, ya que crecen en un ambiente conflictivo y toxico, ya que para ellos no es fácil entender las situaciones que el consumo y abuso del alcohol que se genera en los padres. El alcoholismo de los padres genera una enorme perturbación en el ambiente familiar, en general provoca que haya

más conflictos familiares y menos supervisión o atención con respecto a los hijos y una relación distante entre padres e hijos. Otro factor que genera el alcohol en una familia es que surjan pleitos y agresiones entre los miembros de esta, ya que la tensión del problema se traduce en violencia física, emocional y mental que generalmente es desencadenada entre los enfrentados y contra los hijos u otros miembros. El ocio familiar también se ve resentido por las actuaciones del alcohólico, sus indisposiciones o sus comportamientos anómalos. La familia se encierra en si misma, restringe su actividad social y se perpetua el consumo.


La persona en el proceso de ser alcohólico tiene problemas de comunicación, por un lado, hay un mutismo absoluto sobre este problema frente a la sociedad mientras que por otro lado el problema puede ser el único tema de conversación dentro de la familia. De acuerdo con terapeutas, el consumo del alcohol altera el estado de ánimo, puesto que es una sustancia que actúa como una anestesia sobre las emociones, donde la persona queda detenida en la edad en la que empezó a consumir, no crece ni madura, por lo cual tiene que ver un control entre el alcohol para evitar la destrucción familiar. Como es legal, la mayoría de la gente no ve el alcohol como peligroso. Es cuando empezamos a abusar de esta droga que se convierte en algo que puede dañar a uno mismo y la gente que lo rodea. Para que la persona alcohólica pueda ser ayudada hay que ponerle límites, llevarla a lugares donde puedan tratar el tema, donde la terapia que le den sea exitosa y cuenten con un grupo de apoyo que empodere a toda la familia, puesto que una adicción es un problema que afecta a todo el hogar. Además de límites, también se debe apoyar al adicto a tener disciplina y compromiso con sus metas, a fin de evitar recaídas.


El alcohol es el principal factor de accidentes de tránsito, frecuentemente escuchamos y vemos conducir a las personas bajos los efectos del alcohol; pensando y creyendo ser los dueños de las calles, sin embargo, no son conscientes de los riesgos a los que se enfrentan y al daño que pueden causarle a la sociedad. De manera que todos estos accidentes se evitarían si los conductores tomaran conciencia de sus actos.


Más que un deber ciudadano, es una obligación social y moral; La frase “Si bebes, no manejes”, se ha convertido en una frase sin sentido debido a la irresponsabilidad de muchos conductores. Alcohol + vehículo = conductas impulsivas y agresivas, es más, al estar inmerso en el mundo del alcohol, los conductores generalmente no guardan ni respeta las señales de tránsito y pierde el control de la velocidad con más facilidad, sin olvidar que la perdida de la visión y fatiga ocular producen problemas serios en la toma de decisiones vehiculares e instantáneamente pierde el equilibrio y el control de sí mismo. Cabe mencionar que el consumo excesivo de alcohol ha dejado millones de personas con traumatismo y discapacidades por los accidentes en la vía pública, este tema está íntimamente unido con el tema de la salud, puesto que, a causa de este problema, representan una enorme carga para los servicios de salud pública y economía del país. Algunos de los comportamientos de alto riesgo al conducir bajos los efectos de alcohol son el exceso de velocidad y no usar cinturón. Dos razones sumamente importantes como para tomar conciencia para evitar los accidentes automovilísticos.

Según la Organización Panamericana de la salud <<El consumo de alcohol, incluso en cantidades relativamente pequeñas, aumenta el riesgo de verse involucrado en siniestros viales>>, las victimas no siempre son las personas tras el volante, sino también sus acompañantes, peatones o usuarios de las vías públicas. Aunque la seguridad vial no estaba incluida en el programa de los ODM, las metas de seguridad vial forman parte de la nueva Agenda 2030. La meta seis del ODS 3 es reducir a la mitad el número de muertes y traumatismos causados por el tránsito en el mundo para el 2020; la meta 2 del ODS 11 es proporcionar acceso a sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos, ampliar el transporte público y mejorar la seguridad vial para el 2030. Beber y conducir, es la peor decisión que puede tomar cualquier persona, considerado como un problema no tan importante en Guatemala. Son muchos los conductores que han sido afectados por accidentes viales, pero, son aún más los que carecen de licencia para conducir. Este problema que afecta a la sociedad ha avanzado durante los años a causa del valor que, como cultura le hemos dado a las bebidas alcohólicas, poniéndolas en primer lugar en cualquier reunión o evento social.


Pensamiento Da Vinciano III

REFERENCIAS Organizaciรณn Panamericana de la Salud, (2017) Beber y Conducir. Recuperado de https://www.paho.org/hq/index.php?lang=en Objetivos de Desarrollo Sostenible, (2015) Salud y Bienestar. Recuperado de https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/health/ Montes, Y. (2015). La unidad y el apoyo son vitales cuando existe una adicciรณn. Recuperado de https://www.prensalibre.com/vida/salud-y-familia/la-unidad-y-el-apoyo-son-vitales-cuando-existe-una-adiccion/ Carbonell, J. (2019). Cรณmo afecta el alcoholismo a tu familia. Recuperado de https://www.sindrome-adicciones.es/blog/alcohol/como-afecta-el-alcohol-a-tu-familia/


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