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SEGUNDA VIDA

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IMPACTO DE COLOR

IMPACTO DE COLOR

VERA VELARDE CREÓ UNA VIVIENDA TRANSPORTABLE A PARTIR DE SEIS CONTENEDORES MARÍTIMOS, A LOS QUE LES DIO UNA SEGUNDA VIDA.

Todo empezó con las ganas de crear algo que pudiera romper esquemas; queríamos mostrar cómo se ha avanzado en el diseño y la arquitectura y cómo hoy es posible realizar una casa transportable, una vivienda sostenible a base de la reutilización de contenedores”, dice Vera.

Su espacio unió dos estilos en un solo lugar, alejándose totalmente del look de contenedor. “Le puse el nombre Amalgama porque en esta casa combinamos, mezclamos y fusionamos dos mundos: la ciudad y el campo; es una vivienda de aproximadamente ochenta metros cuadrados que incluye sala, comedor, cocina, un dormitorio y un baño; lo interesante es que próximamente la mudaré a Cocachacra, en la sierra de Lima, ya que la diseñé para mí y mi familia”, confiesa la arquitecta.

La fusión de lo rústico con lo moderno se hizo evidente en la utilización de acabados de tipo natural, como el techo de bambú, el mármol y las celosías de madera, junto con otros materiales de corte más actual como la piedra sinterizada, la melamina y los pisos vinílicos. Toda la decoración y los muebles provinieron de la nueva colección de Veralima, de tendencia minimalista y orgánica.

“Ha sido genial lograr la conexión con lo natural valorando los materiales básicos y las formas tradicionales combinándolos con una línea de muebles modernos, minimalistas y con una clara obsesión por las curvas. Una casa con aires de campo y de ciudad que nos transporta simultáneamente a estos dos escenarios”, concluye Vera.

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