ÁLVARO PALMA MOCHÓN
CONSIDERACIONES SOBRE EL EMPLEO EN ESPAÑA
En estos últimos años hemos visto cómo las políticas en materia de empleo, a pesar de las medidas económicas y laborales que se han tomado desde los distintos gobiernos españoles, han fracasado. Son diversas las causas a las que podemos atribuir el aumento de desempleados en nuestros país. Los dos indicadores que se usan indican lo mismo, tanto la Encuesta de Población Activa (EPA) como los datos de Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE o antiguo INEM) coinciden en estos datos. El tanto por ciento de los parados en nuestro país y concretamente en Andalucía es enorme:
Si nos centramos en los jóvenes y los comparamos con algunos países de nuestra zona, es abrumador:
En este sentido tenemos que ver el gran crecimiento que tuvo la economía española a través de la burbuja inmobiliaria, demostró ésta ser una gran estimuladora del crecimiento económico español. Son varios los estudios que indican que el gran problema actual español deriva principalmente de dicha burbuja. Si bien estamos de acuerdo en parte, no podemos focalizar solamente en el ladrillo nuestra situación actual. Los problemas de nuestra regulación laboral son profundos, pero cuando hemos visto necesario hacer cambios solamente hemos tratado de poner parches; no se trata de reformas coyunturales, nuestra economía y legislación laboral tienen problemas estructurales sobre los que hay que tener la valentía de legislar. Hagámonos una sencilla pregunta: ¿a quienes contratan los empresarios
españoles? Para responder hemos de considerar la cantidad de ayudas a la contratación que hay para distintos colectivos y la dualidad entre contratación temporal e indefinida. Ahora estamos en condiciones de responder a dicha pregunta: es España se contrata al trabajador que salga más barato a la empresa; si según el colectivo al que se pertenezca hay una buena subvención o exenciones o bonificaciones fiscales entonces se contrata. Si firmando un contrato temporal le sale a la empresa mucho más barato despedir al trabajador, no hay que dudar en que la empresa hará este tipo de contrato. Si la legislación impone un número determinado de contratos temporales hasta que sea indefinido, el empresario tenderá a echar al trabajador a la calle o a otra empresa de su grupo de empresas antes que hacerlo indefinido, ¿por qué? Una razón muy sencilla, el coste de despedir a un trabajador temporal es mucho menor que si se tratase de un trabajador indefinido. Entonces llegamos a la situación en que en España no se contrata al mejor trabajador, sino, como antes hemos dicho, al que sea más barato para la empresa. ¿Cómo pretendemos que un trabajador se sienta parte de la empresa si sabe que cuando deje de otorgar a la empresa beneficios fiscales o le sea más caro su despido van a prescindir de él? Aconsejamos la lectura de la siguiente recomendación del FMI (pulsar en el botón de la esquina inferior derecha de esta página)
Antes hemos comentado que España necesita reformas estructurales, pues efectivamente, una de ellas en materia de empleo sería adoptar un contrato indefinido único, de forma que si trabajador y empresario están contentos con su relación contractual la indemnización sea progresiva según el tiempo de trabajo que se está en la empresa. Se trata de una indemnización que es muy baja cuando se lleva poco tiempo en la empresa y que va subiendo conforme se va adquiriendo antigüedad en la misma. Así pues, la empresa no tiene que pagar poco si se trata de un contrato temporal, ni mucho más si se trata de un trabajador con varios años en la empresa, sino que será progresiva dicha indemnización. Este modelo está dando resultados en varios países del norte de Europa, puesto que da tranquilidad y confianza a las dos partes; el trabajador sabe que si hace bien su trabajo seguirá en la empresa; y el empleador tiene tiempo para saber si ese trabajador vale y puede formarlo para que haga mejor su trabajo, entenderá al trabajador no como una carga, sino como un bien de la empresa.
Otro de los problemas principales a los que se enfrenta España es la falta de presupuesto en I+D+i, ya sea desde las instituciones públicas como desde las empresas privadas la mentalidad no ha sido la evolución continua de búsqueda de nuevos conocimientos y desarrollos, nos hemos visto lastrados por ese sentimiento de “que inventen otros”. Podemos ver cómo países como India y Corea del Sur han
tenido un crecimiento espectacular en sus economías. Este desarrollo gigantesco ha tenido como base la innovación y, sobre todo, la educación. En este sentido han sido ingentes las cantidades económicas que anualmente se ha gastado en estos países en la educación de sus ciudadanos. Si lo comparamos con España no podemos sino abochornarnos, piense el lector cuántas reformas educativas ha tenido España desde la democracia. Estas reformas, además, no han sido consensuadas entre los distintos representantes políticos posiblemente por intereses partidistas. En España se ha usado la educación como piedra para lanzársela al rival que gobierna. Es esa falta de madurez, de compromiso y responsabilidad por aquellos a quienes votamos una de las principales causas de que nuestros estudiantes sean los mejor formados de la historia de nuestro país, pero comparativamente hemos bajado significativamente en comparación con el resto de países. No se trata de partidas presupuestarias gigantescas, sino de aprovechar los recursos que da el sistema educativo. Si el profesor carece de autoridad frente a sus alumnos, si es siempre el eslabón débil y no se siente respaldado por las instituciones públicas, si la sociedad se ha venido riendo sistemáticamente de aquéllos que estudiaban porque daba mucho más dinero un trabajo poco cualificado en la construcción, si nuestras políticas educativas están marcadas por el cortoplacismo (máximo de cuatro años hasta las siguientes elecciones) ¿cómo pretendemos salir adelante como país?. ¿Acaso España tiene ingentes cantidades de recursos naturales que podamos explotar? ¿Quizás podemos fabricar más barato o mejor que otros países? Obviamente no. ¿Cómo pretendemos ser los primeros en algo si no tenemos (o dejamos que se vayan) a los mejores profesionales?