Enero - Febrero - Marzo 2019 Nro. 77 Distribución Gratuita Tiraje: 10.000 ejemplares
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Cuerpo, familia y esencias florales cuando las relaciones y la familia se hacen cuerpo por Eduardo Grecco
El cuerpo y la familia son sistemas análogos. De hecho, los campos de información de la memoria familiar se graba en nuestro cuerpo. De tal manera que, para comprender la dinámica de los conflictos familiares y ancestrales que nos afectan, alcanza con observar como los secretos, exclusiones, abusos, expiaciones y demás procesos de la dinámica familiar se hace síntoma en el cuerpo. La comprensión de este proceso no resulta siempre una evidencia clara, en muchas oportunidades los recuerdos son escasos pero, aun así, el cuerpo siempre habla. Y, no solo el cuerpo narra los afectos que han quedado fuera de la consciencia reprimidos sino que, también, enseña, da lecciones de vida. Tomemos un ejemplo: la labor del estómago. Este órgano que rige los destinos del sistema digestivo cumple tres misiones significativas: transforma lo complejo en simple, lo ácido en alcalino y lo diferente en semejante. Partamos del punto que no nos alimenta lo que comemos sino lo que el estómago hace con lo que comemos. Para nutrirnos el estómago transforma lo que llega a su seno. Es una estructura que posee dos rasgos singulares: es muy fuerte (soporta el fuego de los jugos ácidos que disuelven la comida) y se expande. Pero ¿Qué hacemos nosotros con nuestras relaciones? ¿Son fuertes, crecen? Todo lo inverso del estómago somos expertos en hacer complejo lo simple, ácido lo alcalino, separar en lugar de unir. Implicamos poder en lugar de amor, crítica y reclamo en lugar de lenguaje apreciativo y colaborativo, no nos sintonizamos ante la circunstancia de comprender nuestras semejanzas tanto como nuestras diferencias. ¿Cómo salir de este enredo?¿Cómo aprender d ela sabiduría del cuerpo? Ocurre que, en general, sobre estas conductas vinculares hay un peso de memoria familiar que nos lleva a reiterar patrones que hemos aprendido o con los cuales nos conectamos asumiendo historias
que no son nuestras pero que las asumimos por lealtades o presiones constelares. Entonces, no solo se trata de cambiar desde nosotros estas historias sino liberarnos de la prisión de la memoria disfuncional familiar para abrirnos a la energía sanadora, que también habita en el campo ancestral. Y, para eso no solo basta recurrir al escenario del trabajo constelar sino es necesario contar con el recurso de las esencias florales. De modo, que a la propuesta de comprender como la familia habita en nuestro cuerpo, de cómo los órganos, vísceras y glándulas que lo conforman, representan a los personajes que integran nuestra familia, de cómo los sistemas corporales representan modos de relaciones, de cómo los conflictos familiares se hacen síntomas en el cuerpo, hay que sumar la herramienta concreta para sanar los enredos vinculares y los gritos del cuerpo: esencias florales. Articular este trabajo es una posibilidad poderosa que implica darnos cuenta del potencial curativo que mora en unir remedios florales, cuerpo y la familia. Es necesario despertar esta percepción que hoy tenemos dormida y disfrutar de los beneficios que brinda
Taller Internacional “Cuerpo, familia y esencias florales” Cuando las relaciones y la familia se hacen cuerpo por Eduardo H. Grecco Día: Sábado 16 y domingo 17 de marzo info@ambardelalma.net / 6984048 / 2412876 / 987244021