EL ECONOMISTA - HP 655

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una selección de

viernes 26 de febrero del 2016

nº 6954

$10

eleconomista.mx

Los afectados serán 200 empresarios deL ramo, reportó adigas

Los industriales comercializan la tercera parte del total del combustible en el mercado nacional, reportó la Asociación de Distribuidores de Gas Interior Karol García el economista

CerCa de 200 empresarios de gas licuado de petróleo (LP) en el país, que son la tercera parte del total que comercializa este combustible hoy en día, podrían quedarse fuera del mercado en cuanto se materialicen las importaciones para privados, ya que sólo quienes pertenecen a cuatro

¡A parir!

grandes grupos, Tomza, Nieto, Global Gas y Soni, contarán con posibilidades de comprar en el exterior y el resto seguirá adquiriendo el combustible de Petróleos Mexicanos (Pemex), hasta 30% más caro, lo cual generará una concentración. Lo anterior, lo explicó a el economista, Víctor Figueroa, presidente de la asociación de distribuidores de Gas del Interior (adigas), quien

PERUJO

aseguró que: “esto sería contrario al espíritu de la reforma energética, de generar mayor competencia, y por un afán de acelerar las cosas, generaría concentración y sacaría del mercado a muchas empresas mexicanas”, dijo. CONSUMO EN MEXICO DE GAS LP

en México se consumen 710,000 toneladas mensuales de gas LP, de las cuales 70% son producto de la refinación de crudo y el procesamiento de gas natural de Pemex; el resto viene de importaciones que hasta ahora realiza la estatal. Para comprar gas en el extranjero, Pemex cuenta con infraestructura propia, pero también arrienda a empresarios de estos cuatro grupos, al menos, 10 terminales terrestres y marítimas, junto con el ducto Tuxpan-atotonilco.

foto: cuartoscuro

Apertura eliminaría un tercio de gaseros

En méxico se consumen 710,000 toneladas de gas Lp mensuales. aunque desde el 1 de enero de este año, se abrió legalmente la libre importación de gas LP; los empresarios que cuentan con la infraestructura la tienen subarrendada a Pemex mediante contratos que todavía tendrán vigencias por entre uno y ocho años, por lo que tampoco podrán materializar de manera inmediata las compras en el mercado estadounidense Mont Belvieu, que tiene un costo de la molécula 70% inferior al de Pemex hoy en día. en cuanto concluyan los contratos, o si el gobierno determina acelerar el proceso como lo está haciendo con las gasolinas, sólo los grandes, que concentran además 45% del suministro al público, podrán acceder a este beneficio y el resto quedará en una situación desfavorable. kgarcia@eleconomista.mx

“Seguro agropecuario debe tener mejor competencia” La Cofece propone crear un buró de información Elizabeth Albarrán el economista

eN La medida en que las aseguradoras cuenten con mayor información sobre los riesgos que enfrenta el sector agropecuario del país, como sequías, inundaciones o heladas, podrían mejorar el diseño de sus productos, costos y primas, indica en un reporte la Comisión Federal de Competencia económica (Cofece). “el costo neto promedio de adquisición de los seguros agropecuarios fue de 28,300 pesos en el 2013, lo que significó 11 veces más que el seguro de incendio y 12 veces más que el seguro de terremoto”, expone el “re-

porte sobre las condiciones de competencia del sector agroalimentario”. destaca que la falta de información disponible para las aseguradoras sobre el verdadero nivel de riesgo que enfrentan los productores conduce a que las primas sean altas y el nivel de aseguramiento sea menor. “ello se resolvería con la creación de un buró de información, donde los participantes en el mercado, principalmente agroasemex, compartan información sobre siniestralidad, bien asegurado, variables meteorológicas y ubicación georreferenciada de los beneficiarios”, expuso el informe. elizabeth.albarran@eleconomista.mx


una selección de

signos vitales foto: shutterstock

Alberto Aguirre

aam@mexico.com

Los caminos de Duarte

De enero a noviembre pasado, este calzado registró una producción de 62.2 millones de pares.

Botas vaqueras pisan fuerte en mercado de EU Se exportaron más de 3.2 millones de pares en el 2015, detalló Cofoce Xóchitl Larios EL ECONOMiSTA

León, Gto. LAS EMPRESAS guanajuatenses productoras de bota vaquera están dominado el mercado anglosajón e hispano de Estados Unidos, a través de la maquila de grandes marcas y la apertura de canales de comercialización de producto propio. Marcas como Steve Madden, Boulet, Lucchese, Justin Boots, Old West y Dan Post, de origen estadounidense y canadiense, se están produciendo en fábricas de origen guanajuatense . Estas compañías dirigidas a la atención del mercado anglosajón tienen un acercamiento con fabricantes mexicanos de bota vaquera —única en el mundo por su tipo de construcción artesanal—, con el propósito de hacer alianzas y convertir a las empresas mexicanas en sus principales proveedores, refirió José Christian Calderón, jefe de promoción del sector cuero – calzado de la Coordinadora de Fomento al Comercio Exterior (Cofoce). Los consumidores anglosajones gastan en promedio 600 dólares en un par de botas vaqueras, a diferencia del mercado hispano, donde los compradores gastan menos. “En el anglosajón, la moda marca una tendencia especial, porque se promueven marcas muy específicas y de alto valor”. De acuerdo con registros de Prospecta, de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato (CICEG), los fabricantes de bota vaquera participan con 3% del total de la producción de zapato, que en el periodo de enero a noviembre registraba más de 62.2 millones de pares. El rubro de la bota vaquera registró un incremento en el valor de producción de 17.4 por ciento. Los precios para distribuidores oscilan en un mínimo de 35 dólares y hasta 160 dólares por par, de acuerdo con cifras de la Cofoce. A noviembre del año pasado, 47 empresas de León, una de Abasolo y una más de Guanajuato, exportaron 3 millones 277,586 pares, equivalentes a 243 millones de dólares. Empresas que son generadoras de 6,182 empleos. xochitl.larios@eleconomista.mx

Desde las épocas del fidelismo, Veracruz está en el top cinco de las entidades con mayor endeudamiento público

e

xperto en el manejo del fondo de desastres naturales y en mecanismos financieros para renegociar la deuda, Javier Duarte de Ochoa es parte de una generación de jóvenes tecnócratas formada al amparo de Fidel Herrera Beltrán, que ha arrasado con la gobernabilidad de Veracruz a lo largo de la última década. Ni su cercanía con los salinistas —hasta hace poco, el expresidente pasaba largos fines de semana en playas cercanas a La Antigua— ni sus vínculos con la cúpula financiera y hacendaria o sus presuntos nexos familiares con algunos mandos castrenses resultan suficientes en estas horas críticas para su mandato. Para los calderonistas, Veracruz adquirió una relevancia estratégica, sobre todo, en la perspectiva de la elección presidencial del 2012. En una circunstancia semejante a la actual, de Los Pinos salió la orden de actuar contra Fidel Herrera, pero en la FEPADE estaba la actual procuradora, Arely Gómez González, quien se negó a actuar por consigna. El PRI derrotó al PAN en una elección muy cerrada y desde entonces comenzó a prefigurarse la salida del PAN de la presidencia. Felipe Calderón y Javier Duarte tuvieron que convivir durante dos años y, no obstante los reiterados intentos del mandatario jarocho para congraciarse con el Ejecutivo federal, nunca hubo química entre ellos. Esta mala cohabitación, en términos políticos, se reflejó en el boom de la inseguridad que se ha mantenido rampante en Veracruz, desde entonces. Desde las épocas del fidelismo, Veracruz está en el top cinco entre las entidades con mayor endeudamiento público, pero ése no es el principal pecado de Duarte de Ochoa. Al cierre del 2015, el saldo de la deuda pública de Veracruz, que incluye la contratada por el gobierno estatal y los municipios, es de escándalo y está fuera de rango de la media nacional, que es de 16,758.4 millones de pesos. Duarte de Ochoa entregó el mando de su oficina al sinaloense Enrique Jackson Ramírez y mantuvo el rumbo hasta mediados del año pasado. En el último tramo, sin embargo, parece haber perdido la brújula; sobre todo, luego de que fracasaran sus intentos por incidir en la definición del candidato a la minigubernatura. En su baraja estaban otros fidelistas: los diputados federales Jorge Carballo, Erik Lagos y Alberto Silva; además del exsecretario de finanzas, Tomás Ruiz. Enfrente, Héctor Yunes Landa, con el respaldo pleno de Manlio Fabio Beltrones y un pasado mutuo de roces entre el senador y el gobernador que se remontan a sus orígenes comunes, en términos geográficos. El hartazgo de los veracruzanos —de acuer-

do con las principales casas encuestadoras— quedó materializado en la definición de los atributos que esperan encontrar en el próximo gobernador. ¿El más apreciado? Quien castigue, con mano dura, la corrupción imperante. Entre las 12 entidades que renovarán poderes este año, Veracruz destaca por estar en el fondo en los indicadores de gobernabilidad: es el penúltimo en la valoración de la población sobre la situación económica, apenas un par de puntos arriba que Oaxaca, y es el peor en términos de seguridad. Duarte de Ochoa y el presidente Enrique Peña Nieto aparecían prácticamente empatados en el rubro de la evaluación de las autoridades. Ambos reciben apenas 37.5% de las opiniones aprobatorias. En julio del año pasado, los sondeos de opinión ubicaban al PRI y al PAN empatados en las intenciones de voto (Morena figura, desde entonces, como tercera fuerza). Al paso del tiempo, el blanquiazul comienza a despegarse; mientras que comenzaron a acumularse evidencias de que Duarte de Ochoa estaría más interesado en abrir una “tercera vía” —el triunfo de una opción independiente— que en respaldar los afanes de Yunes Landa. El escenario era adverso aun antes de la selección de los candidatos. A finales del año pasado, las mediciones mostraban que dos de cada tres votantes veracruzanos desean que el PRI ya no gobierne en la entidad. Si Javier Duarte de Ochoa fuera separado de la gubernatura de Veracruz, ¿mejoraría la intención de voto por Héctor Yunes? ¿El PRI reconectaría con un electorado irritado por la prepotencia y el valemadrismo del mandatario saliente y sus cercanos? La suerte del político cordobés está echada. A principios de la semana, mediante el dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, pudo escoger el camino que deberá transitar. Ayer, en el Palacio de Cobián, tuvo que dar una respuesta. En las vísperas, el senador panista Fernando Yunes Márquez urgió a sus colegas para emitir un exhorto a la Cámara de Diputados, con el fin de acelerar la solicitud de juicio político contra el gobernador veracruzano. Esa ruta simplemente es inviable; en cambio, acordaron llamar a la PGR para que investigue la probable comisión de delitos por el desvío de recursos públicos federales en Veracruz, denunciados por la Auditoría Superior de la Federación. Por las buenas o por las malas. Un emplazamiento similar tendrá que ser resuelto por el gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, quien, como su homólogo veracruzano, cree que haber acaparado recursos financieros y estructuras partidistas era suficiente para perpetuarse en el mando estatal.


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