Revista de distribución gratuita Año 1 No 1 / Febrero 2010
• La Prevención de la Contaminación
• DIROX S.A. Como conducir una transformación sostenible • Prepararse para el cambio permanente
• El éxito de un enfoque integral del ambiente
2 / NĂşmero 1 / Febrero 2010
Editorial
Importancia de la Sustentabilidad y la Responsabilidad Social Empresaria Hacer ingeniería compatible con el medio ambiente, permite armonizar el desarrollo social y económico con la preservación de los recursos ambientales. Se entiende el ejercicio profesional, como un compromiso ético en el uso del conocimiento a favor del desarrollo de la comunidad, por lo que integrar a esta visión el compromiso ético con el medio ambiente, parecía un cambio en el mismo sentido. La incorporación del concepto de “Desarrollo Sustentable”, que surgió hacia fines de los 80, permitió definir a la gestión ambiental en términos de un compromiso con las generaciones futuras, lo que hizo del concepto de Sustentabilidad un camino a seguir. Bajo esta premisa la Sustentabilidad es el leit motiv del nuevo modelo de desarrollo, buscando soluciones que contemplaran los criterios de conservación ambiental, sin que signifiquen obstáculos insalvables en otras actividades. Esto implica no solo el desarrollo de la ingeniería aplicada a temas ambientales, sino trabajar sobre aspectos sociales y culturales, que permitieran el éxito de estas soluciones. Queda claro que las mejores tecnologías que se implementen no van a producir una mejora del desempeño ambiental de una empresa, si quienes trabajan con ellas no tienen conciencia de los efectos ambientales que éstas producen. Esto llevó a ver la Sustentabilidad más allá de las soluciones técnicas como tales y visualizarla en una triple dimensión: económica, ambiental y sociocultural. Queda ya lejos el tiempo en que el tema ambiental solo tenía que ver con la protección de la flora y la fauna y los ecosistemas, se fue incorporando al concepto de Sustentabilidad, la vida de las poblaciones actuales y futuras, la preservación de los patrimonios históricos y culturales y la protección de la salud. En los últimos años, con la aparición de los Sistemas de Gestión, la Sustentabilidad como concepto rector de la gestión de una empresa, ha integrado a la calidad de los servicios, la salud ocupacional, la seguridad industrial y la comunicación con la comunidad. La última dimensión que se integra a la Sustentabilidad es la de Responsabilidad Social, la que si bien aparece como algo totalmente diferente a todo lo anterior, desde el punto de vista del compromiso ético, no es más que la profundización de todo lo anterior, haciendo cada vez más de la Sustentabilidad el eje de la gestión empresarial en su globalidad. Pero, la experiencia nos dice que llevar a la práctica la Sustentabilidad, no era tan fácil como asumirla y que hay mucho trabajo que hacer, tanto técnico como didáctico en la implementación de soluciones prácticas y que permitieran dejar satisfechos a todas la partes involucradas. l
Para publicar en Uruguay Sustentable comuníquese al cel.: 099 453060. Uruguay Sustentable es una publicación de Estudio Ingeniería Ambiental. Av. del Libertador J. A. Lavalleja 1532/801. Tel.Fax: (02) 9031191. Publicación trimestral. Distribución gratuita. Está prohibida su reproducción parcial, total o de cualquier otra índole que se considere. Redactor Responsable Ing. Civ. Carlos Amorín. Coordinación General Oceanógrafa Ana Perdomo. Director Comercial Sr. Germán Fernández. Supervisor Sr. Alvaro Rodríguez. Diseño Gráfico DG José Prieto. Uruguay Sustentable no se hace responsable por daños y perjuicios originados por el contenido de los avisos publicados en la misma. Las opiniones vertidas en los artículos o notas reflejan exclusivamente el punto de vista de las personas que las expresan y son de su total responsabilidad.
3 / Número 1 / Febrero 2010
Objetivos y Alcances
Presentación Uruguay Sustentable nace para transformarse en un actor importante en la tarea de integrar la Sustentabilidad Ambiental en todas las dimensiones del quehacer empresarial de nuestro país. Ser un canal para la promoción y difusión de sus principios, como se entienden hoy en día, integrando no solo los aspectos biológicos y ecológicos, sino que también, sociales, culturales, patrimoniales, de seguridad, calidad y responsabilidad social. Uruguay Sustentable quiere contribuir a construir este nuevo paradigma, estando abierta a la participación de todos aquellos que se sientan identificados con la propuesta. Buscamos insertar en sus páginas las experiencias exitosas en la aplicación de la gestión ambiental en nuestro país, como aquellas que no han colmado las expectativas, con el fin de aprender de nuestros errores como comunidad. Queremos que sirva para encuadrar los debates sobre el tema y armonizar las distintas visiones e intereses que los diferentes actores genuinamente puedan tener. Buscamos que todos los actores sociales: industriales, profesionales, estado, organizaciones civiles, universidad, etc, puedan presentar sus puntos de vistas y marcar tanto sus acuerdos como sus diferencias, a los efectos de que todos puedan conocer estas visiones. Hemos aprendidos que, muchas veces las posiciones frente a un debate se pueden acercar cuando ambos oponentes pueden exponer sus puntos de vista en forma franca. Hoy hablar de la Sustentabilidad de una organización es visualizarla en el corto, medio y largo plazo midiendo las consecuencias de su actividad en todos los ámbitos de la comunidad en que está inserta, tratando de buscar ejemplos exitosos en la comunidad empresaria. Pero también sabemos que no es algo que pueda ser dado sin que cada comunidad la construya, en función de su realidad tanto social como ambiental inmediata. La Sustentabilidad no puede imponerse, debe surgir del compromiso de todos los actores sociales para definir qué tipo de sociedad quiere construir para su presente y legarlo a las generaciones futuras. Porque sabemos que la construcción de la Sustentabilidad no es una tarea sencilla, aspiramos a que Uruguay Sustentable puede ser un instrumento positivo en la construcción de ésta en nuestra sociedad. l
4 / Número 1 / Febrero 2010
La prevención de la Contaminación en el Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo y en el Estatuto del Río Uruguay
Introducción El 19 de noviembre se cumplieron 36 años de la firma del Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo y este acuerdo, tan trascendente que puso fin a disputas centenarias entre la República Argentina y la República Oriental del Uruguay sobre cuestiones limítrofes en ese espejo de aguas, constituyó un instrumento muy importante para el uso y aprovechamiento racional del ámbito acuático compartido entre ambos países. Ello se logró, fundamentalmente, por las vías de convenir un verdadero estatuto, con 92 artículos por lo que este tratado va mucho más allá que un mero acuerdo en materia de límites. Siguiendo algunos parámetros de este Tratado, el 26 de Febrero de 1975 se firmó, por ambos países platenses, el Estatuto del Río Uruguay que incorporó algunas normas innovadoras en diversos aspectos del uso racional de ese curso fluvial incluyendo algunas referidas a la prevención de las acciones contaminantes. La prevención de la contaminación El Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo, tuvo un interés especial, en preservar, a través de diferentes disposiciones, los aspectos medioambientales pero por el objeto del mismo, se refirió exclusivamente al medio acuático, dejando de lado otras formas de la contaminación transfronteriza. Y lo hizo teniendo en cuenta los desarrollos que, a esta altura, se venían procesando a nivel internacional. En ese sentido el artículo 47 establece: “ A los efectos del presente Tratado se entiende por contaminación la introducción directa o indirecta, por el hombre, en el medio acuático, de sustancias o energía de las que resulten efectos nocivos”.
En esta definición, se tomaron en cuenta los que en aquel entonces eran los más modernos desarrollos en la materia, en particular, los efectuados por la International Law Association en su reunión de Helsinski de 1966, el Código Nacional de Recursos Renovables y de Protección del Medio Ambiente de Colombia adoptado en 1974, pero cuyo proyecto obraba desde 1971, en poder de los negociadores , la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Humano de Estockolmo de 1972, así como los de las distintas reuniones de la Conferencia de Derecho del Mar convocadas por las Naciones Unidas que había tenido lugar hasta esa fecha.
5 / Número 1 / Febrero 2010
En su artículo 48 el Tratado consagró el deber de las Partes de proteger y preservar el medio acuático y, “en particular, a prevenir su contaminación dictando las normas y adoptando las medidas apropiadas, de conformidad a los convenios internacionales aplicables y con adecuación en lo pertinente a las pautas y recomendaciones de los organismos técnicos internacionales”. El Tratado, partiendo de la premisa de que las Partes poseen, en sus respectivas legislaciones, normas referidas a combatir la contaminación les impone el deber de no disminuir las mismas exigencias técnicas en vigor
Zonas definidas por el Tratado de Límites del Río de la Plata . para la prevención de este tipo de actividades (art. 49 inc.a) y la severidad de las sanciones establecidas en los casos de infracción (inc.b). Asimismo, estableció, la obligación recíproca de informarse sobre las normas que ambos Estados puedan dictar en la materia (art. 50), y reguló lo relativo a la jurisdicción competente y a la responsabilidad internacional que pudiera resultar por daños causados por acciones contaminantes. La responsabilidad Con respecto a este aspecto, el artículo 51 establece: “Cada Parte será responsable frente a la otra por los daños inferidos como consecuencia de la contaminación causada por sus propias actividades o por las personas físicas o jurídicas domiciliadas en su territorio”. Para su época, esta norma tuvo un claro carácter innovador ya que implica el establecimiento de un criterio de responsabilidad internacional por actos contaminantes, con la particularidad, de que estos actos sólo pueden ser el resultado de la acción directa o indirecta del hombre afectando el medio acuático. Como puede apreciarse de la lectura de esa disposición, se prevén tres hipótesis distintas: a) Que la contaminación sea el resultado de la propia actividad de una de las partes. b) Que dicha acción haya sido realizada por personas físicas domiciliadas en el territorio de una de las Partes y que cause perjuicio a la otra y c) Que la contaminación haya sido causada por personas jurídicas domiciliadas en el territorio de las Partes.
Como puede apreciarse, se consagró un criterio de responsabilidad, no sólo por las acciones que los gobiernos puedan desarrollar con efectos contaminantes transfronterizos, sino que los hace responsable por la conducta que en ese sentido hayan podido tener, las personas físicas y jurídicas domiciliadas en su territorio. En otras palabras, el Estado tiene “culpa in comittendo” y “culpa in vigilando”. La jurisdicción competente Por último el art. 52 dispone que “La jurisdicción de cada Parte respecto de toda infracción cometida en materia de contaminación se ejercerá sin perjuicio de los derechos de la otra Parte a resarcirse de los daños que haya sufrido, a su vez, como consecuencia de la misma infracción. A esos efectos, las Partes se prestarán mutua cooperación”. Esta disposición tiene por objeto principal el evitar eventuales conflictos de competencia jurisdicción que puedan surgir como consecuencia de la doble responsabilidad prevista en el Tratado teniendo en cuenta que una acción contaminante puede derivarse por un lado, de la conducta de una persona o personas físicas, por el otro de la actividad de personas jurídicas y por último, de la actividad del propio Estado. La contaminación en el frente marítimo Las normas relacionadas con la contaminación en el frente oceánico son mucho más esquemáticas que las previstas con respecto al Río donde la problemática tiene mayor gravedad. En efecto, fundamentalmente, el Tratado tiende a limitar determinado tipo de operaciones que, normalmente, implican efectos contaminantes y
6 / Número 1 / Febrero 2010
así el art. 78 prohibe “el vertimiento de hidrocarburos provenientes del lavado de tanques, achique de sentinas y de lastre y, en general cualquier otra acción capaz de tener efectos contaminantes” dentro de una zona determinada por un cuadrilátero que tiene por lateral oeste la línea delimitativa exterior del Río de la Plata con un ancho de 118 millas y un altura de 118”. Las comisiones El Tratado prevé la constitución y el funcionamiento de dos comisiones: la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP) y la Comisión Técnica Mixta del Frente Marítimo (CTMFM), con importantes cometidos y competencias en sus respectivas áreas de jurisdicción. En cuanto a la primera o CARP, tiene entre sus diversos cometidos el “Promover la realización conjunta, con especial relevancia a la evaluación, conservación y preservación de los recursos vivos y su racional explotación y la prevención y eliminación de la contaminación y otros efectos nocivos que puedan derivar del uso, exploración y explotación de las aguas del Río” (art. 66, inc.a). En el marco de esa competencia, esta Comisión ha llevado a cabo importante estudios sobre la problemática de la contaminación otorgándole a esa tarea una muy especial relevancia. En lo que refiere a la segunda o CTMFM, el art. 82 (inc.b ) le otorga análogos cometidos a los asignados a la CARP. Ambas comisiones con la colaboración con el Fondo Mundial para el Medio Ambiente y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo han desarrollado un programa de
Momentos que el Presidente de la República Argentina Juan Domingo Perón saluda al Dr. Edison González Lapeyre, en el marco de la firma de Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo, el 19 de noviembre de 1973.
acción estratégica para la protección ambiental del Río de la Plata y su Frente Marítimo de particular valía (FREPLATA) El Estatuto del Río Uruguay El Tratado denominado Estatuto del Río Uruguay, firmado en la ciudad de Salto el 26.2.1975, fue negociado y redactado por delegaciones de ambos países platenses que, en su mayoría, estaban integradas por los mismos que habíamos participado en la elaboración del Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo del 19 de Noviembre de 1973. En materia de prevención de la contaminación guarda pues. con el anterior tratado, algunas similitudes, incluso recoge la misma definición de lo que se debe entender por acciones contaminantes en el art. 40 y consagra la misma obligación de las Partes de proteger y preservar el medio acuático y, en particular, el de prevenir su contaminación, dictando las normas y adoptando las medidas apropiadas “de conformidad a los convenios internacionales..”(art, 41 inc. a), pero en otros aspectos ofrece algunas diferencias y establece mecanismos mucho más afinados y eficaces para lograr esos resultados. En materia de jurisdicción y responsabilidad por las acciones contaminantes de tipo transfronterizo, mientras que en el Tratado del Río de la Plata se hacía referencia a las personas físicas o jurídicas “domiciliadas” en el territorio de donde partía la acción, en el Estatuto del Río Uruguay, en su art. 42, se hace referencia a la contaminación causada por las actividades del Estado “o por las que en su territorio realicen personas físicas o jurídicas”.
Es decir, se incluye no sólo los domiciliados sino a cualquier particular o sociedad que la pudiera causar, lo que resulta mucho más apropiado y comprehensivo.
que se sustancia actualmente ante la Corte Internacional de Justicia por la construcción y funcionamiento de la planta de pasta de celulosa en la zona de Fray Bentos.
Mientras que el Tratado del Río de la Plata estableció en sus artículos 17 a 22 un sistema de consultas, para la Parte que proyecte la construcción de nuevos canales, la modificación o alteración significativa de las ya existentes o la realización de cualesquiera otras obras que pudieran causar perjuicio sensible “al interés de la navegación de la otra Parte o al régimen del Río” (art. 17), lo que no incluye las acciones contaminantes, el Estatuto del Río Uruguay, en sus artículos 7 a 13, lo hizo incluyendo a las obras a llevarse a cabo por una de las Partes de entidad suficiente “para afectar la navegación, el régimen del Río o la calidad de sus aguas...”(art. 7.).
Pero además, el Estatuto del Río Uruguay, le otorga a la Comisión Administradora de ese curso fluvial (CARU) entre otras funciones, la de dictar normas reglamentarias en materia de “Prevención de la contaminación”(art. 56 inc.4) y el de efectuar investigaciones de carácter científico (art. 56, ap.5 inc.b)
Precisamente, esas disposiciones son las que han generado el litigio
7 / Número 1 / Febrero 2010
En el marco de esa potestad la CARU ha ido elaborando sobre diversos temas un verdadero Digesto del Río Uruguay que incluye un capítulo sobre prevención de la contaminación y ha desarrollado, desde 1987, un plan de monitoreo de la calidad de las aguas (PROCON), en el tramo compartido entre ambos países de ese curso fluvial que, lamentablemente, se ha interrumpido como conse-
Edison González Lapeyre El Dr. Edison González Lapeyre fue uno de los dos juristas uruguayos que integraron la delegación de nuestro país en la negociación y redacción del Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo. Ha sido Catedrático de Derecho Internacional Privado, Derecho Internacional Público y Derecho Diplomático de la Facultad de Derecho de la UDELAR y profesor de la Academia de Derecho Internacional de La Haya.
cuencia del conflicto mencionado precedentemente. Comentario final Si bien ambos tratados fueron, en su momento, innovadores y tomaron en consideración los últimos desarrollos que tenía el derecho medioambiental en aquella época , el tiempo transcurrido, con el rápido e importan-
te proceso evolutivo que ha tenido esta disciplina, justificaría que, ambos Estados, arribaran a un nuevo acuerdo que tomara en cuenta los cambios que se han producido, incorporando a la normativa otros aspectos de la preservación del medio ambiente, como por ejemplo, la prevención de la contaminación atmosférica. l
3 of August of 1999 Image NOAA 14 Composition RGB 1.2.3.
8 / Número 1 / Febrero 2010
El éxito de un enfoque Integral del ambiente Formado en 1994 para brindar servicios de consultoría y asesoramiento, Estudio Ingeniería Ambiental, EIA, ha venido creciendo y consolidándose con un atípico desempeño para el sector, dado que ha ido diversificando sus actividades y ampliando su radio de acción con rigurosos niveles de excelencia y la incorporación de recursos humanos altamente calificados. Con un staff que integran más de quince personas, cinco de ellos profesionales full time, se ha consolidado en el asesoramiento a empresas internacionales de gran porte que invirtieron en el país, además de organizaciones locales. Balbi cuenta con entusiasmo algunos de los hitos de ese proceso. El Ing. Balbi recuerda que el estudio se fundó con técnicos que venían de la actividad pública, formada en los organismos de control ambiental y que habían cumplido el proceso de maduración necesario para incursionar en un mercado en el que prácticamente todo estaba por hacerse y al que aún hoy le hace falta recorrer mucho camino para desarrollarse.
Asegura que a partir de la práctica profesional que ellos llevaron adelante, “la propia Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA) empezó a utilizar los PGA como herramienta, un mapa de ruta que asegurara a la administración qué camino iba a seguir la obra, es decir, las herramientas e instrumentos que se utilizarían para una buena gestión ambiental de la Obra.”
Un antes y un después de Botnia La elaboración de estudios de impacto ambiental por parte de EIA fue acompañando el crecimiento del sector ambiental. “Estos estudios son necesarios para obtener la Autorización Ambiental Previa (AAP) para poner en marcha un emprendimiento. Esta autorización brinda, desde luego, un marco acotado”.
Posteriormente, explica, se gestiona “una nueva autorización, la Autorización Ambiental de Operación (AAO), cuando a través de los resultados del PGA la empresa pueda demostrar que su desempeño ambiental cumplió con los requisitos de su autorización ambiental previa, especificando cómo administra y gestiona ambientalmente la Operación del emprendimiento”.
Como nunca antes, los proyectos deben considerar previamente sus Planes de Gestión Ambiental (PGA). “Estos planes comprenden las buenas prácticas para que la obra no tenga impacto o estos estén mitigados”. Balbi comenta cómo el país carecía, a principios de los noventa, de una normativa que regulara los posibles o hipotéticos impactos sobre el ambiente que pudiera generar un emprendimiento.
Reflexiona el especialista en que todavía “al empresario se lo ve muy reactivo frente a estos temas. Es necesario que el tema ambiental se contemple más como un aspecto de competitividad en el país”. En tal sentido, considera que ha habido “un antes y un después de Botnia en Uruguay, en cuanto a los estándares de exigencia, ya que las empresas internacionales (sobre todo aquellas, como en el caso al que nos referimos, acostumbradas a trabajar bajo leyes muy rigurosas como las de la Unión Europea) tienen otra cultura, sus planes en materia
9 / Número 1 / Febrero 2010
Ing. Gustavo Balbi Cáceres Ing. Civil opción Hidráulica-Sanitaria, especializado en medio ambiente. Desde 1994 es parte de la sociedad profesional Estudio Ingeniería Ambiental, siendo parte de su directorio.
Modelo de emisiones a la atmósfera.
ambiental para el proyecto ya están comprendidos desde el principio al planificar una inversión. La instalación de Botnia mejoró toda la industria papelera uruguaya”. Admite que “a nivel nacional todavía nos cuesta mucho tener la misma perspectiva”. Ofrecer al mercado las herramientas necesarias Por otra parte, “el plan de gestión ambiental le ayuda al empresario a ordenar su emprendimiento. Al disponer de este insumo, puede saber de antemano qué va a hacer con la disposición de los residuos de la producción, qué puede reciclar y de qué manera va a utilizar la energía o como va a enfrentar un accidente ambiental”. En este punto, enfatiza en que “los aspectos del uso de la energía, los eventuales ahorros en su consumo, las formas de economizar el uso de recursos naturales o de minimizar las emisiones al ambiente, todos esos son
factores implicados en un proceso productivo, que deben considerarse como prioritarios y eso es algo que se busca hoy por parte de las empresas. Es un enfoque de Gestión Ambiental Rentable (ganar-ganar)”. Narra Balbi cómo el Estudio incorporó tecnología de medición y modelos matemáticos para predecir emisiones. “Estas tecnologías que manejamos para el monitoreo ambiental, permiten tener un panorama cuantificable, dimensionable, de cual es el rango de las emisiones de cualquier índole que un proyecto puede tener cuando esté operativo. Uruguay no ha desarrollado totalmente estándares propios, al menos hasta el momento y ha intentado incorporar estándares internacionales, normalmente rigurosos para los proyectos que se instalan”. En tal sentido hace referencia a las normas en elaboración. “Muchas veces no se han aprobado por problemas de adaptación de las industrias. Tenemos muchas industrias pequeñas.
Segregación de residuos para disposición final.
10 / Número 1 / Febrero 2010
Sin embargo, el tema ambiental va a seguir aumentando las exigencias, tal como se ve constantemente en el mundo, donde la preocupación por el ambiente es palpable. Nosotros tratamos de ofrecer al mercado las herramientas necesarias”. Segregación de residuos para reciclado o reuso.
Un enorme potencial El director expresa que el trabajo con la Terminal de Contenedores de Cuenca del Plata “fue una tarea multidisciplinaria y de gran aprendizaje para todos los implicados en ella. Trabajamos muy bien con Saceem, y el esfuerzo les posibilitó a ellos obtener resultados muy interesantes. Nosotros oficiamos como auditores, brindamos seguimiento y apoyo. En un esfuerzo realmente multidisciplinario, donde ingenieros tuvieron que trabajar en forma conjunta con arqueólogos, tanto internacionales como locales”. Comenta que en la actualidad, los proyectos de envergadura que pueden instalarse en el país, además de traer sus propias exigencias desde sus países de origen, deben contemplar las exigencias de los bancos internacionales, que son los que normalmente financian estas obras.
Cuando el empresario perciba como un beneficio más lo que paga por mejora de su gestión ambiental frente al costo de disposición final de residuos, incorporándolo como condición de competitividad, esta situación se va a ir dando”. Ve el futuro con optimismo, sin embargo. “De 2002 a la fecha (desde la crisis), no hemos dejado de crecer. Una de las líneas futuras que consideramos es desarrollar productos que posibiliten a las empresas que estén comprometidas con un desarrollo sostenible y su responsabilidad social diferenciarse y conviertan este compro-
“La banca internacional, que en su mayoría es signataria de los Principios de Ecuador, tienen que cumplir con exigencias ambientales importantes. De modo que también por el lado del financiamiento los empresarios son conscientes de que es un tema incorporado a cualquier proyecto de gran escala”. Balbi es firme partidario de que el mercado local de la industria ambiental crezca. “Queremos que se desarrolle, que se diversifique, que exista una oferta importante, ya que hoy las empresas son pequeñas y marginales.
11 / Número 1 / Febrero 2010
miso en una ventaja competitiva, por ejemplo mediante la incorporación de sellos verdes que permitan consolidar una comunicación exitosa con sus clientes y entorno social. También apoyar a la industria exportadora que apunte a la participación en nichos del mercado verde internacional es un objetivo para EIA ya que la producción y exportación de productos amigables con el ambiente puede ser una oportunidad real para la industria nacional. Por ejemplo, el país tiene una matriz agroindustrial que no va a cambiar (al menos en muchos años) y en el mundo aumenta el consumo de alimentos orgánicos. Por tanto, existen áreas de certificación que se van a ir incorporando al Uruguay y para que esta certificación tenga éxito se deberá incorporar tecnología “verde”. Aquí existe un desarrollo potencial importantísimo”.
Una nómina de los principales clientes del estudio puede dar una idea de las empresas y organizaciones que han trabajado y trabajan con EIA : ISUSA, Terminal Cuenca del Plata, Chipper, UTE, ANCAP, DIROX S.A., American Chemical, Colier, Grupo Forestal, Urupanel, Botnia, Arrozur, Puertas del Sur, CIUPSA, DESPRO, Techint, Ramon Alvarez S.A., Jesús Gonzales Ltda., Dirección Nacional de Vialidad, Dirección Nacional de Hidrografía, Intendencia Municipal de Maldonado, OSE, Novabarca, Fabex, Costa Oriental, PIG Uruguay.
Modelación Batimétrica 3D Finalmente indica que “también incorporamos al Estudio la dimensión social, con metodologías de evaluación de impacto social en el ambiente, la evaluación medio ambiente-sociedad. Salimos del esquema de la consultora convencional y tenemos una concepción bastante holística, que es la visión obligada para poder dar respuestas a problemáticas complejas”. Servicios y clientes El Estudio Ingeniería Ambiental divide su gama de servicios en cuatro grandes áreas que abarcan diferentes aspectos de la gestión ambiental. El área de apoyo a Proyectos incluye los estudios de impacto ambiental; los planes de gestión; las evaluaciones de sitio y los estudios de impacto arqueológicos. Una segunda área corresponde a la gestión y control de operaciones, comprendiendo las auditorías ambientales, la gestión de mercaderías peligrosas y la gestión de residuos industriales. Por su parte el área tecnológica implica el tratamiento de emisiones, el diseño de sitios de disposición final de residuos y el saneamiento y drenaje. Finalmente el área de monitoreo reúne los monitoreos de aire y emisiones gaseosas, los monitoreos de calidad de agua y sedimentos y los que refieren a suelos y aguas subterráneas.
Los Principios de Ecuador Los Principios de Ecuador, aprobados en 2003, proporcionan un conjunto de lineamientos de adopción voluntaria, que toman como base las mejores prácticas, para ayudar a las instituciones financieras y a sus clientes a minimizar estos impactos. Constituyen hoy día, una referencia sine qua non para la aprobación financiera de proyectos de infraestructura de gran escala por parte de los organismos financieros internacionales, como la construcción de un aeropuerto, una planta generadora o una refinería de petróleo, obras que pueden involucrar riesgos ambientales y sociales de consideración. l
Calidad de agua Calidad del suelo Calidad de aire
12 / Número 1 / Febrero 2010
Cabo Polonio Un pasado Cargado de Historia A 275 kilómetros de Montevideo, escondido entre los extensos arenales y el atlántico se encuentra una de las mayores atracciones del Este uruguayo, con sus construcciones rústicas y espontáneas que fueron surgiendo cuando promediaba el siglo pasado. Mientras el atlántico golpeaba con fuerza la costa petrificada fueron surgiendo los primeros ranchos que le otorgarían al Cabo un entorno especial. Los pescadores, lobos y gaviotas disfrutaron durante mucho tiempo del espacio marino y la belleza agreste de la zona. Sin embargo un día apareció el HOMBRE con su mochila llena de “civilización” para alterar el orden natural y la tranquilidad de la zona. El contacto con los pescadores de la zona hace surgir viejas historias de naufragios que trajeron a las costas rochenses los primeros “gringos” que poblaron la zona. El pasado y el presente que conviven hoy junto al ojo giratorio del faro nunca se pusieron de acuerdo sobre el verdadero origen del nombre. Para la gran mayoría el mismo proviene
de un barco llegado de España el 31 de enero de 1735 naufragando en esta región, mientras para otros entre los que se encuentra el profesor Jesús Perdomo, la realidad es otra muy distinta: no solamente no fue en 1735, no había tormenta ni tampoco el navío se llama Polonio. Para el profesor Perdomo el 11 de noviembre de 1752 habría zarpado del puerto de Cádiz el barco llamado “Nuestra Señora del Rosario, Señor San José y las Ánimas” con un cargamento para Buenos Aires a cargo de un joven capitán de tan solo 25 años de edad llamado José Poloni. Señalaba Perdomo que en el camarote del Capitán y con la presencia infaltable del primer piloto José de Arturo, se realizaban algunas cenas regadas abundantemente con licores y vinos de Chipre. De esta manera y como consecuencia de una comida bien acompañada por el alcohol en la noche del 31 de enero de 1753 y con buen tiempo, el barco golpeo en algún arrecife, abriéndose un rombo que provocó el naufragio. Los momentos
13 / Número 1 / Febrero 2010
de angustia que vivía la tripulación fueron aprovechados por el piloto de Arturo culpable de la tragedia para darse a la fuga. De acuerdo a las declaraciones de algunos tripulantes el joven piloto se encontraba en avanzado estado de ebriedad la noche del naufragio. Posteriormente fue detenido y conducido a la ciudadela donde en un final novelesco logra fugarse y nunca más se supo de su destino. Posteriormente el vecino José Galván Solicita al Gobernador la autorización correspondiente para retirar restos del navío Polonio. Esta solicitud le fue concedida haciéndole notar que se trataba del barco “Nuestra Señora del Rosario, Señor San José y las Ánimas” a las ordenes del capitán José Poloni. Cabo Polonio, nombre del barco o del capitán continuará siendo el lugar preferido por muchos uruguayos y extranjeros que disfrutan anualmente de sus encantos naturales. Todo esto mientras la “civilización” no atraviese definitivamente los extensos arenales”.l Por Julio Dornel
El Ambiente como oportunidad para el desarrollo La responsable de la Dirección Nacional de Medio Ambiente, Ing. Agr. Alicia Torres, asegura con una sonrisa a su interlocutor, que su período al frente de DINAMA finaliza al culminar la gestión, por estos días, de la administración de Tabaré Vázquez. A lo largo de estos cinco años, la Dirección cobró visibilidad y protagonismo a nivel social y mediático (no solamente por el conflicto suscitado con la instalación de Botnia) y muchos de los emprendimientos puestos en marcha fueron impulsados y desarrollados por esta jerarca campechana y cordial. De esos y otros desafíos, como lo que ella considera queda por hacer, habló con Uruguay Sustentable.
Es indudable que muchos de los retos y desafíos que la institución tenía hace cinco años han ido afrontándose, sentando las bases no solamente a nivel académico y en la colaboración del Estado con privados, sino también a nivel de difusión y de concientización pública sobre el cuidado del ambiente. En tal sentido cabe mencionar la Ley de Envases, los acuerdos para gestionar un mejor uso de residuos y bolsas plásticas, el trabajo con la cooperación japonesa (JICA) para la mejor gestión de la Cuenca del Santa Lucía o el desempeño en el litigio de la calidad de aguas del río Uruguay. Las resistencias que genera el cambio “El balance de estos cinco años es positivo”, asevera la jerarca. “La gestión de DINAMA se posicionó a
nivel nacional y se logró articular la tarea con las intendencias, los productores privados, la industria. Un aspecto muy importante es el vinculado a convencer de que la salud ambiental es una oportunidad para el desarrollo, porque existía la falsa dicotomía de que se elegía una alternativa u otra”, indica. Respecto a lo que entiende que queda por hacer, explica que el débito “está vinculado a la Reforma del Estado. Entendemos que se debe dotar a DINAMA de mayores recursos, si bien se ha hecho un esfuerzo presupuestal importante en este período. También es pertinente una reestructura de los recursos humanos”. Admite, sin embargo, que en la institución no se verifica lo que ocurre en otras instituciones estatales: “El promedio de edad de los funcionarios es relativamente joven, es el adecuado. Es necesario, sin embargo, contar con mayor capacidad técnica, con más personal calificado para concretar la descentralización y articular mejor con los gobiernos departamentales y con la población de todo el país”. Por estos día se celebró el Día Mundial de los Humedales y Alicia Torres estuvo al frente de PROBIDES (Programa de la Conservación de la Biodiversidad y Desarrollo Sustentable de los Humedales del Este), antes de asumir en DINAMA. También durante su gestión se ha potenciado el número de Áreas Protegidas del país.
14 / Número 1 / Febrero 2010
Con la Ing. Agr. Alicia Torres
En tal sentido recuerda “que son siete Áreas Protegidas en el momento actual y solamente dos son netamente públicas, en las otras cinco existen numerosos predios productivos privados”, justamente para enfatizar el concepto de que los productores han comenzado a comprender que el cuidado del entorno es una oportunidad para sus emprendimientos. Reflexiona en que “naturalmente, como todo lo nuevo que se instala, como todo cambio, genera miedos y resistencias. Sin embargo, una vez que se hace evidente que la protección de esas áreas conlleva conservar recursos que tienen una finalidad económica, de uso sustentable, esas resistencias se vencen naturalmente”. Comenta que en tal sentido “se ha podido capacitar para la gestión a mucha gente e interactuar con varios sectores e instituciones” y explica que un punto fundamental al respecto fue “el viaje que realizaron técnicos de la institución acompañando a productores rurales para visitar áreas protegidas en Francia. Fue una experiencia muy valiosa, ya que ellos pudieron apreciar in situ las posibilidades que se manejan en otros países”. De todas maneras, se tiene la idea de potenciar, hacia el futuro, la mejora en la participación privada : “La idea es ofrecer incentivos, compensaciones económicas a quienes están participando en la protección de éstas áreas”.
“Es un mundo difícil” Alicia Torres no elude la consulta respecto a las relaciones con Argentina que en los últimos años han provocado tanta confrontación mediática. “En DINAMA apoyamos técnicamente las estrategias de la Cancillería y con ellas nos alineamos. Uruguay ha defendido, con argumentos sólidos, su posición en la Corte Internacional de La Haya y está a la espera de una solución que le permita superar ese desencuentro”. Manifiesta igualmente su optimismo en el sentido de que el veredicto emergente del organismo internacional habrá de ser favorable. Por otra parte, destaca que “con Argentina se ha trabajado bien en otros aspectos ambientales. En el MERCOSUR existe un subgrupo de trabajo para el medio ambiente (SGT6), y en ese marco aprobamos una estrategia de certificación de sustancias químicas y avanzamos en temas vinculados al Cambio Climático”. Uruguay Sustentable quiere saber su posición respecto al comercio de bonos de carbono o bonos verdes, un mercado reciente, en el cual ha ingresado el país a través del BROU (con financiamiento) y la Intendencia Municipal de Montevideo, con un proyecto de tratamiento de residuos de dos millones de dólares. “Se trata de una oportunidad que se debe aprovechar por parte del
país. Nosotros contamos con residuos de biomasa, como la cáscara del arroz o los residuos de los aserraderos y empezamos (ya se está haciendo) a utilizarlos para producir energía, lo que nos resuelve un problema ambiental al tiempo que uno energético en el camino a diversificar la matriz. Si además de hacer esto (que ya pensábamos hacer), logramos insertarnos en ese mercado, bienvenido sea, en un plus. Claro está, el problema es lo que va a ocurrir en los acuerdos postKyoto, en 2012”. Consultada sobre los (magros) resultados de la Cumbre de Copenhague, en la cual estuvo presente, Torres reflexiona en que “es un mundo difícil, muy difícil. Viéndolo por el lado positivo, una constata la enorme conciencia puesta de manifiesto en esa reunión de la necesidad de resolver el problema y que lo resolvemos entre todos o no lo resolvemos. Sin embargo, lo que queda por ver es cómo se negocia pos-Kyoto, cómo se logra articular respuestas comunes”.
Cuidando el río Santa Lucía Muy recientemente se elevó un alerta amarilla respecto al nivel de un herbicida agrícola (atrazina) en la Cuenca del río Santa Lucía. Esta Cuenca ha sido objeto de especial preocupación por la Dirección a cargo de Alicia Torres. Rememora que “la Cuenca está ya en la preocupación de DINAMA desde antes de mi gestión, en 2003, ya que es estratégica por la calidad de sus aguas. No hay que olvidar que brinda agua potable a más de la mitad de la población y cuenta con las áreas metropolitanas de cinco departamentos. Es una Cuenca en la que se producen muchos vertidos”. Explica entonces que “trabajamos mucho en grupos interinstitucionales, en la coordinación con las intendencias, para prevenir problemas y forta-
15 / Número 1 / Febrero 2010
lecer el monitoreo en toda la zona. Pudimos recoger muchísima información y la cooperación japonesa ayudó también para establecer controles eficientes. Hay dos tipos de fuentes de contaminación, unas son las puntuales y otras las difusas, para las cuales el proyecto con JICA aportó lo suyo para analizar estas fuentes de contaminación. Si no hubiéramos hecho ese trabajo no hubiéramos podido detectar (ahora) ese aumento de la presencia de Atrazina en las aguas”. Aclara que el Ministro Colacce se puso al frente de la situación, en conjunto con DINAMA y la OSE, invitando a participar al MGAP para poder tener mecanismos de verificación del uso agrícola de este herbicida en la zona. “Estudiamos igualmente las medidas complementarias que podemos tomar de futuro. Es importante aclarar, de todos modos, que el nivel encontrado está muy por debajo del umbral de riesgo previsto por la Organización Mundial de la Salud”. Finalmente, hablamos de la Red de Laboratorios Ambientales que logró establecerse en el país, con la participación de 60 laboratorios (privados, el LATU, la Universidad de la República, entre otros). Alicia Torres muestra con orgullo la publicación del Manual de Procedimientos Analíticos para Normas Ambientales, lista para ser lanzada por DINAMA y el MVOTMA. “La Red es una gran fortaleza que hemos logrado en este período. Esta Guía, dice, señalando la publicación, permitirá la intercalibración, esto es, homogeneizar una metodología de análisis, de modo que la Red va a poder ser utilizada para analizar parámetros en todo el país. Por otra parte ha servido para capacitar, intercambiar información entre los laboratorios, comprar insumos de modo conjunto. Ha sido un gran paso adelante”, resalta, con satisfacción. l
Con Maurizio Rista, Vicepresidente de DIROX S.A.
Cómo conducir
Una transformación sostenible En unos pocos años, la empresa DIROX S.A., con su planta industrial próxima a la ciudad de Libertad, departamento de San José, cambió una imagen polémica y negativa, transformándola en una de las más positivas y ejemplares de la industria uruguaya. Buena parte del mérito de esa tarea es de Maurizio Rista, un empresario joven, con firmes certezas, quien se apoyó en la tarea de un calificado y comprometido equipo de colaboradores y consultores entre los cuales se destaca el Estudio Ingeniería Ambiental (EIA), cuyo asesoramiento fue importante en la consolidación del cambio de actitud de la empresa y la transformación de su gestión ambiental. La operativa de DIROX S.A.se inició en 1998. La principal empresa de capitales italianos en Uruguay, produce sulfato de cromo, taninos sintéticos (ambos productos para el tratamiento de cueros para la industria de tapicería automotriz, vestimenta y calzado) y vitamina K3, de uso zootécnico, en pre-mezclas y raciones para animales monogástricos (aves y cerdos) y para peces como el salmón. Significativamente (es uno de los tantos aspectos de las empresas uruguayas que no se conocen) hay apenas 6 productores mundiales de este producto, en cinco países, Canadá, Turquía, India, China y Uruguay. Y lo más destacable es que el 25% del consumo mundial se elabora en nuestro país y se exporta “con la etiqueta Made in Uruguay”, señala Rista.
tiene una capacidad instalada para elaborar 1.100 toneladas de vitamina K3 por año. Con entusiasta locuacidad, Rista es un empresario que expresa un fuerte sentido de identidad y compromiso con la evolución de la empresa, en la cual se desempeña desde 1999, cuando ingresó como Jefe de Control de Calidad. Luego fue Jefe de Producción en 2001, Gerente Industrial desde mayo de 2003 y Gerente General a partir de 2005, cargo que actualmente desempeña complementariamente al de Vice-Presidente en el Directorio de DIROX S.A. Rápidamente se percibe su capacidad para ejercer un liderazgo natural. Hace unos cuantos años, DIROX S.A. estuvo en el centro de la polémica, cuando su planta de producción en San José concitó la atención de los medios con acusaciones de contaminar el medio ambiente. El trabajo de todos estos años, cuyos frutos están a la vista, es sintetizado por este empresario como un trabajo evolutivo buscando el paradigma de la excelencia, con objetivos e hitos estratégicos, priorizando la “comunicación” a la simple “información”, ya que a su en-
tender, la primera implica un diálogo, un ida y vuelta, una interacción con la comunidad y los stakeholders, que el concepto de (mera) información no comprende en su totalidad. Este trabajo de comunicación tiene su punto de partida en un intenso esfuerzo colectivo que parte del interior de la planta de producción y convirtió la gestión ambiental (dentro de un Sistema de Gestión Integrado, junto a la calidad y a la seguridad y salud ocupacional) en un pilar básico de sus procesos manufactureros. Comunión con los trabajadores El aporte del Estudio de Ingeniería Ambiental se concretó en 1998, cuando los asesores del EIA elaboraron para DIROX S.A. el primer Plan de Gestión Ambiental (aprobado en Setiembre 1998) para una empresa industrial en el país. El esfuerzo fue la respuesta a las exigencias planteadas por la Dirección Nacional de Medio Ambiente, DI.NA.M.A. Fue el impulso inicial para un enfoque sustancialmente diferente de los procesos productivos. El trabajo de EIA se reactualizó unos años más tarde y como resultado se produjo la integración de la gestión ambiental a la producción. Hoy la empresa cuanta con la cuarta versión actualizada de su PGA (Plan de Gestión Ambiental). Comenta que un punto a destacar es el funcionamiento de una Comisión de Seguridad y Salud Ocupacional, interna y bipartita, creada en el 2004, que posibilita la participación activa de asesores técnicos, operarios y especialistas (Médico laboralista y, Técnicos Prevencionista: interno y externo), para evaluar aportes y sugeren-
El 95% de la producción de DIROX S.A. se exporta a los 5 continentes (Donde como países destino, se destacan; Brasil, Estados Unidos, México, Venezuela, Italia, España, Nigeria y Singapur) y un 5% es para el mercado local. La planta industrial
16 / Número 1 / Febrero 2010
cias, definir prioridades e implementar cambios y mejoras. “La formación y capacitación continua de nuestro personal, constituye un elemento primordial para detectar e identificar cualquier hipotética dificultad u oportunidad de mejora”. También se han implementado regímenes de pasantías con estudiantes de educación terciaria y jóvenes profesionales (Facultad de Química e Ingeniería) con el objetivo de promover la relación academia-industria, potenciando el intercambio teórico-práctico en ámbitos concretos de actividad. Asevera que la política de apertura y comunicación transformó, interna y externamente a la empresa y su relación con el medio. Se realizan actividades de extensión a la comunidad trabajando en coordinación con la ONG Repapel (de marcada acción social y medioambiental, ya que los
insumos producidos con papel y cartón reciclado, llegan a la Escuelas Públicas de la ANEP), recibiendo visitas en el marco de actividades curriculares de grupos de estudio de primaria, secundaria o universitarios, de Libertad, San José, Montevideo u otras zonas. Esta política de puertas abiertas y transparencia, aunada a un riguroso y autoexigente nivel de eficiencia y calidad, son parte importante del éxito en esta materia Los informes de desempeño ambiental La evolución constante de todos los factores implícitos en las formas de producción, y respetando su política de Calidad, Inocuidad, Seguridad, Salud y Medio Ambiente, a partir de 2006 la empresa inició la publicación de los informes de desempeño ambiental (IDA), siguiendo los lineamien-
17 / Número 1 / Febrero 2010
tos de la norma ISO 14.031, para la divulgación de la evaluación de desempeño ambiental (EDA-Directrices), que propone indicadores adaptados a la característica del proceso industrial y sus impactos. “Estas memorias”, dice el ejecutivo, “detallan lo que hacemos y cómo lo hacemos y es otra forma de comunicar, de ser proactivo, en particular con la comunidad y todos los interesados; el Estado, fuerzas vivas, clientes y proveedores”. El Sistema de Gestión Ambiental se transformó en un Sistema de Gestión Integrado (SGI), como resultado de la sistematización de todos los procesos claves, basándose en la integración de los componentes de la empresa, con la necesaria coherencia entre sus unidades para lograr el desempeño adecuado de la organización.
grama implica implementar un proceso continuo, con un balance entre la disponibilidad y el consumo de materiales y recursos como el agua y la energía, produciendo bienes y servicios minimizando los impactos ambientales. Todo supervisado con calificados técnicos nacionales y otros referentes de la región”.
En agosto y setiembre de 2006, como consecuencia de este extensa tarea, iniciada con el Plan de Gestión Ambiental de 1998, se obtuvo la doble certificación del Sistema de Gestión Ambiental según la norma ISO 14.001:2004, a través de auditorias de UNIT y LATU (LSQA). “Fuimos la primer industria que obtuvieran la doble certificación ISO 14.001 en nuestro país”, comenta. En 2007 se certificó el Sistema de Seguridad y Salud Ocupacional, según las normas OHSAS 18.001. También cuentan con certificación ISO 9.001, de su Sistema de Gestión de Calidad. DIROX S.A., por otra parte, conforma desde 2001 el núcleo de industrias químicas que adhieren al Programa de Cuidado Responsable del Medio Ambiente, que tiene la responsabilidad de coordinar ASIQUR, y que cuenta con auditorías de LATU Sistemas. En 2005 DIROX S.A. se integró al Programa de Producción más Limpia, promovido por la Universidad de Montevideo, con el apoyo del FOMIN/BID, para la promoción de la producción eco-eficiente. “Este pro-
En tal sentido, Rista comenta que las actuales políticas impulsadas desde el Estado en materia de producción y consumo sustentable “ha hecho primar el principio de equidad y responsabilidad, ya que todas las empresas, públicas y privadas por igual, tienen la posibilidad y los incentivos necesarios no solo para cumplir de normas ambientales sino para optimizar el uso de los recursos naturales no renovables. Como ejemplo, la ley 16.906, por la cual se promueven proyectos industriales, especifica que se accede a beneficios en la medida que incluyan indicadores como: generar más puestos de trabajo, agregar valor a través de innovación tecnológica, promover actividades en Producción más Limpia y/o aumentar la capacidad productiva”. Debido a que la mayor parte de su producción se exporta, DIROX S.A. ha adoptado las normas de calidad más estrictas en materia de inocuidad, para acceder a los requerimientos exigidos en la Unión Europea (por intermedio de la FEFANA: Federación Europea de Fabricantes de Aditivos para Animales), certificando su planta industrial según la norma FAMIQS (Feed Additives and pre-Mixtures Quality System), donde se audita la trazabilidad e inocuidad de cada insumo que pueda eventualmente terminar en la cadena alimenticia (en el consumo humano, como es el caso
18 / Número 1 / Febrero 2010
de las raciones para animales). “Las únicas empresas certificadas FAMIQS en el MERCOSUR, hasta ahora son cuatro. Además de la nuestra hay dos en Brasil y una en Chile, si bien otras esperan para ser certificadas en los próximos meses”, aclara. Por último, consultado respecto a las dificultades que le planteó a la empresa la actual crisis internacional, Rista comenta que, efectivamente, los drásticos cambios de precios de materias primas estratégicas y la caída de la demanda internacional verificada desde octubre 2008 los afectó significativamente. Sin embargo, la respuesta ha sido la utilización del “desarrollo sostenible para amortiguar los efectos de la crisis”. Explica que varias instalaciones de la planta (comedor, vestuarios, oficinas y laboratorio) cuentan con agua caliente acondicionada a través de paneles solares térmicos, utilizando como fuente de energía la radiación solar y para la iluminación fabril se inicia a fines de este año la implementación del sistema LEDs solar. “A pesar de la crisis, estamos en fase de estudio de otra mejora sustancial, como es el cambio en la matriz energética, para utilizar biomasa en lugar de fueloil (como actualmente) para nuestros procesos productivos”. l
Prepararse
para el Cambio Permanente En tiempos en que nos hemos acostumbrado a que el cambio climático, sus peripecias y la proyección de escenarios futuros más o menos pesimistas aparezcan en los medios, vale la pena considerar una opinión autorizada. El Doctor en Oceanología Gustavo Nagy es una de ellas. El hecho inusual para Uruguay, es que haya sido uno de los co-laureados con el Premio Nobel como integrante del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, (IPPC por su sigla en inglés), establecido en 1988 por la Organización Meteorológica Mundial y el Programa Ambiental de las Naciones Unidas. En 2007, el Panel recibió el Premio Nobel de la Paz conjuntamente con el ex vicepresidente norteamericano Al Gore.
19 / Número 1 / Febrero 2010
Con el Dr. Gustavo Nagy
A pesar de que, tácitamente, Nagy represente a Uruguay en el IPCC, su actividad científica no solo no ha obtenido reconocimiento en el ámbito universitario, sino que en cierta manera no ha sido reconocido luego de la recepción del premio. El lo atribuye básicamente a la ignorancia del valor que en otros lados se reconoce a los integrantes del IPCC y su publicación. El experto es consultor inter-
nacional jefe de la CEPAL en Adaptación al Cambio Climático y autor del anexo Latinoamérica y Caribe Informe Stern. Sus recomendaciones son, sin duda, un importante insumo a tener en cuenta para la toma de decisiones en la esfera política sobre la gestión ambiental futura del país. “El impulso decisivo para estos estudios, así llamados por el economista Sir Nicholas Stern, quien elaboró un informe sobre el impacto del cambio climático sobre la economía mundial, en 2006, fue dado sobre todo por Gordon Brown, por entonces Secretario del Tesoro. Concomitantemente, el Reino Unido es el principal financiador del Proyecto Estudio Regional de la Economía del Cambio Climático en Sudamérica (ERECC-SA) de la CEPAL, cuya presentación se realizó el 11 de diciembre del presente año”, explica Nagy. Copenhague y después Sobre la convención prevista en Copenhague, el científico afirma que “su importancia radica en que en ella deben definirse pautas importantes de cara al futuro, dado que es la última oportunidad en que deben acordarse las estrategias respecto al Protocolo de Kyoto. Los acuerdos signados en este protocolo vencen en 2012 y hay que renovarlos”. En relación a las posibilidades de entendimientos, sobre todo considerando la posición de las potencias (Estados Unidos, China) más involucradas en las generación de emisiones que contribuyen al cambio global, entiende que “la expectativa de la comunidad científica es muy limitada en relación a lo que se puede lograr. En términos sencillos va de “nada”, “muy poco” o “poco”.
Reflexiona al respecto: “ ¿Cómo se juzga el éxito? ¿En función de falsas expectativas? ¿Qué significa un fracaso para Copenhague? Cualquier eventual acuerdo que se logre es más que cero, pero todo lo que se haga va a ser menos que lo necesario. Ahora bien, hay dos cosas claras : Los anuncios de China de reducción de sus emisiones en paralelo con los de Estados Unidos. Cualquier esfuerzo que implique un reconocimiento hacia una tasa de reducción como variable del PBI puede ser positivo. Después habrá que ver si esa reducción está por encima o por debajo de las posibilidades que se desprenden de los informes del IPCC”. Las costas uruguayas Nagy es enfático al aclarar que “las actuales inundaciones y las sequías de unos meses atrás no son propiamente efectos demostrados del cambio climático. Eran previsibles, tanto que la omisión o inacción a su respecto es grave”. Aclara que “eran previsibles en cuanto a que se sabía que se iban a desencadenar. Lo que no era (ni es) previsible es el rango de su intensidad. Pero cualquier persona por internet podía saber, en el segundo trimestre del año, que éstas anomalías climáticas (las inundaciones) y
20 / Número 1 / Febrero 2010
crecidas del Río Uruguay se iban a producir en la primavera”. Explica que estos fenómenos se vinculan a El Niño y el incremento de las temperaturas en el océano Pacífico, una situación que está bien estudiada desde hace décadas. De cualquier modo “tampoco se puede decir que no sean parte del cambio climático. Son parte de la variabilidad que produce eventos extremos. Lo que el IPCC prevé es una probable intensificación de la variabilidad y de la ocurrencia de eventos extremos meteorológicos y climáticos”. En relación a Uruguay, el científico expresa que “entre 1902 y 2003, el nivel de las aguas sobre la costa montevideana creció once centímetros, algo por debajo de la media mundial, que se ubica en 17 centímetros, en un rango de 10 a 20 centímetros en el mundo”. No da para mucho optimismo en relación al futuro: “Los escenarios que pueden manejarse (no son pronósticos sino escenarios, aclara) plantean visiones de una situación plausible en un futuro dado. Después de cuatro o cinco décadas, la situación de la costa uruguaya puede tornarse en una amenaza real y sin lugar a dudas que
para fin de siglo esta amenaza será mayor”. Comenta que una zona “mayormente amenazada en menos de ese tiempo, la más vulnerable actualmente, son los Humedales del Santa Lucía, ya que es una costa de San José, entre la desembocadura del Santa Lucía y Playa Pascual”. Esto es debido al aumento del nivel del mar, tormentas, y serias amenazas a la biodiversidad. Consultado respecto a las medidas que puedan tomarse, señala que en primer lugar “hay que asumir el riesgo, tomar conciencia, no negarlo. En segundo, se debe disponer del principio precautorio del derecho ambiental. Hay que manejarse con escenarios pesimistas. Luego, lo importante es introducir una gestión del riesgo, evaluando medidas eventuales de adaptación física, reducien-
do además todos los otros impactos ambientales. El objetivo es reducir la vulnerabilidad”. La mejor adaptación El experto argumenta con fuerza respecto a la necesidad “de prepararse para el cambio permanente”. Respecto a la situación en que una sequía antecede a una inundación, recuerda a un hidrólogo norteamericano, Robert Horton, quien “ya en 1898, guiándose simplemente por métodos empíricos, de observación y utilizando el sentido común, algo que subvalora la Academia, señaló que era altamente posible que el año siguiente a una sequía se produjera una inundación, un porcentaje que superaba las posibilidades de que saliera cara o cruz una moneda arrojada
21 / Número 1 / Febrero 2010
al aire (esto es, un porcentaje mayor al 50%). De modo que la gestión del riesgo debe tomar en cuenta todos los aspectos, los académicos, los técnicos y el sentido común llevado al juicio experto”. Finalmente, reafirma que “cuando se habla de décadas, se habla de un estado plausible, una tendencia, un sentido. Lo que se puede saber es si esta tendencia es robusta o no para visualizar un escenario. Jamás se puede situar en un año preciso el escenario a futuro. Más que nada es una guía, un rumbo”. Nagy recomienda realizar un medido proceso de adaptación. “Tener una mayor capacidad de adaptación en cada lustro que transcurre, ya que manejamos una mayor cantidad de observaciones sobre el pasado y mejores modelos, que se traducen en una mayor calidad de conocimiento para entender el futuro, hay que saber internalizar la experiencia”. Manifiesta que “las medidas de adaptación son un proceso político, participativo, consensuado, con la Academia, los técnicos, la gente del lugar, todos los actores y los representantes de los sectores y sistemas involucrados. Se deben tomar los principios básicos, una relación de costo-beneficio de la adaptación. La mejor adaptación casi nunca es la mejor técnicamente sino aquella que es más fácil, de mejor costo-beneficio y la más aceptada por la gente”. l
El ángulo Creativo de la
Responsabilidad Social Empresarial En un confortable y magnífico salón en la casona de la calle Buenos Aires al 275, una de esas calles del casco viejo de la ciudad que dan al mar, cuya fachada no permite al visitante prever la belleza decimonónica de su estilo, el Ing. Rodolfo Laporta, Gerente de Proyectos de la empresa , Terminal Cuenca del Plata S.A., desgrana con afable sencillez una historia inusual de significativo aporte a la comunidad, que es al mismo tiempo, parte de una profusa obra de Responsabilidad Social Empresarial.
Los dos pisos albergan más de mil metros cuadrados, con patios e instalaciones anexas que sorprenden. No se sabe la fecha exacta de su construcción, pero sí que hacia 1783 el predio perteneció a Don Francisco Loores, Regidor Decano Alférez de la Corona Española. La casa fue ocupada luego por Jean Marie Raymond Baradére, el primer cónsul francés de carrera en Uruguay, en 1835. Los De Arteaga la adquirieron en la segunda mitad del siglo XIX. Hoy, refaccionada y reciclada para oficinas y salones de trabajo, mantiene la decoración casi barroca de sus cielorrasos, la impresionante
22 / Número 1 / Febrero 2010
estufa del salón principal (importada de Bélgica en 1890), los vitraux franceses al tiempo que la imprescindible funcionalidad del siglo XXI. La Atrevida en el infierno de los navegantes El grupo belga Katoen Natie es líder mundial en servicios logísticos, con operaciones en 22 países, que brinda trabajo a 8.000 funcionarios. En el puerto de Montevideo ha sido un importante factor de modernización y tecnología, donde ha realizado obras de extensión del Muelle de Escala y ampliación de la terminal especializada de contenedores que han tenido
un fuerte impacto en la economía nacional, permitiendo convertir al puerto en uno de los más importantes puertos hub de la región.
ragoza, quien vino con un equipo de geofísicos de España (ESGEMAR). Se trata de una autoridad mundial en la materia”, explica el gerente.
Entre sus muchas acciones de responsabilidad social como empresa y su inserción en el medio, llevó adelante una tarea sumamente singular, inhabitual en el país y en la región, como es la recuperación del mascarón de proa de un navío español encallado en el Río de la Plata, río que era denominado “el infierno de los navegantes” por la furia de sus aguas en el pasado.
“Con el apoyo logístico del Servicio de Oceanografía Hidrografía y Meteorología de la Armada (SOHMA) y del Grupo de Buceo de la Armada (GRUBU), el Prof. Martín Bueno y ESGEMAR trabajaron en el terreno con perfiladores de fondos, magnetómetros, Sonar de Barrido Lateral (SBL) y otros equipos. Con el empleo de sorbonas y retirando el barro de adentro de un cilindro metálico de 2m de diámetro y 4m de altura , los buzos lograron retirar todo el lodo hasta la roca en el lugar que había sido definido por Ruben Collado (recordado como buscador de tesoros, que también se querelló con el estado uruguayo) como el punto donde se encontraba el casco entero de la Loreto”.
Laporta cuenta que “se sabía que el área de la Bahía de implantación de las obras de ampliación de la terminal estaba condicionada por una declaración de Monumento Histórico, ya que en la misma habían sido declarados como hallados los restos del navío “Nuestra Señora del Loreto”. En la primera expansión de la terminal, había otro elemento considerado Monumento Histórico, que nuestros arqueólogos debieron demostrar que no era parte de las defensas de la ciudad para que las autoridades de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación autorizaran la ejecución de las obras”. La premisa con que se partía en estos trabajos, obligó a tomar todas las precauciones posibles, acompañadas de un fuerte rigor científico. “En esta tarea contamos con la invalorable colaboración del arqueólogo Roberto Bracco, como parte del equipo de Estudio Ingeniería Ambiental, excelentes asesores ambientales de nuestra empresa. Y para apoyar al Lic. Bracco, también contamos con el asesoramiento del Prof. Manuel Martín Bueno, catedrático de arqueología subacuática de la Universidad de Za-
“Se trataba de evitar potenciales daños ambientales”, continúa diciendo, “ya que se sostenía que había 25 toneladas de mercurio en recipientes (estaban en tonelitos de madera forrados de cuero, dentro de cajones). Si eso realmente estaba en el lugar y durante el trabajo de dragado se rompían los recipientes y desparramábamos mercurio, hubiéramos causado un desastre ecológico irreparable”. Laporta comenta que “luego de la culminación de investigación en el local de la obra se llegó a la conclusión de la inexistencia en esa zona del casco de la Nuestra Señora del Loreto y luego de la presentación de los informes arqueológicos y de Estudio de Impacto Ambiental, recibimos la autorización de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación y DINAMA resolvió dar la Autorización Ambiental Previa al proyecto”.
Imagen de Sonar de Barrido Lateral. Se observa la silueta de una embarcación hundida: una lancha del Neptuno
23 / Número 1 / Febrero 2010
Piezas talladas y fotomontaje sobre león engallado en un Mascarón de Proa de un navío español de fines del siglo XVIII. “Luego, durante la etapa de dragado”, explica, “en la cual se extrajeron 1.800.000 metros cúbicos de barro, llegando hasta la roca o el material resistente, se desarrolló una importante acompañamiento arqueológico. Cada quince días, con el SOHMA se hacía una pasada con el sonar de barrido lateral (SBL), instrumento con el que se obtiene una imagen del fondo. El resultado de estos trabajos fue la verificación de la inexistencia de cascos históricos, tal cual había sido adelantado por los estudios previos”. Sin embargo, y considerando que el área en cuestión ha sido utilizada como fondeadero desde la fecha en que Juan Días de Solís descubrió el Río de la Plata en el año 1516, no se podía descartar que en la misma se encontraran restos diversos, habituales en cualquier área portuaria.
Motón de 3 ojos. Botijuela. “En particular, en parte del área que debió ser dragada, debido a su escasa profundidad (menos de 7 metros hasta la roca) fue necesario, para llevar adelante la obra, utilizar una herramienta montada sobre un remolcador (un “bulldozer marino”) que mediante chorros de agua iba aflojando el barro del fondo para trasladarlo hacia las zonas más profundas donde podía operar la draga de succión. Durante estos trabajos se fueron liberando piezas que durante años habían estado atrapadas en el lodo. Entre estas piezas logramos recuperar piezas de madera talladas, otras no menos valiosas como lo es una pequeña botijuela de cerámica que apareció flotando, sana y aún ce-
24 / Número 1 / Febrero 2010
Botijuela para aceite de oliva. Periodo 1585 – 1800. Goggin´s, John, 1960.rrada con su tapón original!! además de algunas vigotas y cuadernales propios de los velámenes de la época”. Más allá de la obra Ante estos hallazgos, Terminal Cuenca del Plata asumió la responsabilidad inmediata de garantizar que estas piezas talladas, de valor testimonial para nuestro país, fueran mantenidas en las condiciones adecuadas para su recuperación y preservación, mientras que realizó todas comunicaciones pertinentes a las autoridades nacionales competentes, además de llevar adelante un Plan de Divulgación de los hallazgos a diferentes niveles de la sociedad.
colonias de la corona en el Atlántico Sudoccidental, mientras una de ellas llevaba víveres y estaba en las Islas Malvinas, la otra protegía la entrada a la Bahía. En tiempos de las invasiones inglesas “la Atrevida” estaba en el puerto de Montevideo”. “Al caer la ciudad en manos de los invasores británicos, el capitán español decidió incendiar el barco”, narra Laporta, “para retrasar el ingreso de las tropas inglesas a la ciudad.
Modelado del Mascarón a escala No oculta su satisfacción y su involucramiento en el proyecto, que resultó ir creciendo, ya que rápidamente se realizó una investigación histórica . “Con el apoyo del Dr. Juan Oribe Stemmer, un experto uruguayo en la materia, se armó el rompecabezas: Habíamos encontrado una parte importante ( más del 60%) de un mascarón de proa, con la forma de un león engallado. El estudio demostró que se trataba del mascarón de proa de “La Atrevida”, buque perteneciente a la expedición científica del Brigadier Malaspina quien, realizada entre 1789 y 1794, cuarenta años antes de la expedición del Beagle llevada adelante por Charles Darwin. Posteriormente, “La Atrevida”, conjuntamente con su gemela “La Descubierta”, fueron asignadas al Apostadero de Montevideo y se turnaban en la custodia y daban apoyo a las
Terminal Cuenca del Plata solicitó a la Comisión de Patrimonio Cultural de la Nación la custodia de las piezas halladas, la que le fue otorgada en setiembre de 2008. Hasta la fecha se hizo cargo de todos los costos de preservación. “Los trabajos de mantenimiento son largos”, comenta. “Luego de armar las piezas trabajadas que componían el mascarón, lo depositamos en tanques especiales, primero se desalinizaron y estabilizaron en agua dulce, proceso que llevó casi 18 meses, luego comenzó el proceso de conservación, impregnando las piezas con sacarosa, etapa que llevó 12 meses. El azúcar impregnada en la madera permite mantener la estructura evitando que al secarse se fragilice, incluso resquebrajándose. La etapa de secado, que comienza ahora, la hicimos con la colaboración del LATU”. Finalmente, anuncia que “vamos a llevar adelante una edificación, aquí al lado, para habilitar una exposición permanente de los restos”. El ejecutivo no oculta su satisfacción al indicar que “hemos hecho un estudio de primer nivel. No hay nadie en la región que haya llevado adelante algo como este emprendimiento y promovemos que futuros proyectos tengan el mismo nivel de calidad, y que nivelen “hacia arriba”. El compro-
25 / Número 1 / Febrero 2010
Arriba: fotomontaje de los hallazgos en figura completa
Estanques y equipamiento utilizados en la etapa de impregnación con sacarosa.
miso que ha asumido TCP con el Estado y con la sociedad uruguaya cumple rigurosamente las obligaciones a las que debía responder cuando se iniciaron los trabajos de prospección arqueológica. Ha velado por la calidad de los trabajos científicos y técnicos necesarios y los ha financiado, de la misma manera que actualmente está abocada a dar un paso más y dejar las piezas disponibles, en el contexto adecuado, para el disfrute de la sociedad actual y las generaciones futuras. Reflexiona igualmente en el hecho de que la familia belga dueña de la empresa tiene en la ciudad de Amberes un museo de textiles de la época de los faraones. “Ellos, que además tienen un museo de pintura en el galpón original con el que empezó la empresa, apoyan estas iniciativas. En Uruguay adquirieron la Quinta de Amézaga en Paso del Andaluz, la remozaron, refaccionaron y reciclaron, convirtiendo la residencia en un conjunto magnífico, reciclando además a la Casa de Piedra del Andaluz, segundo peaje que se estableció en el Uruguay del siglo XIX”. l
Una política de apoyo a la comunidad Las iniciativas llevadas adelante por la Terminal Cuenca del Plata en materia de responsabilidad social, son múltiples y variadas, abarcando un amplio espectro de posibilidades. La empresa construyó una torre mirador desde la cual pueden observarse los buques entrando y saliendo del puerto. También ofrece una vista maravillosa del Cerro de Montevideo. En la escollera Sarandi reconstruyeron una plaza junto con la empresa Saceem, repavimentándola e instalando luces nuevas. Ha organizado con regularidad eventos culturales (música popular, fuegos artificiales), patrocinado el desfile anual de llamadas, el Día del Patrimonio y promocionado el arte uruguayo en Bélgica, así como los vinos de este lugar del mundo. En el plano de las restauraciones, además de la Quinta de Amézaga sobre la que habla Laporta en esta entrevista, también se restauró la Casa de Piedra en el arroyo Toledo, limítrofe entre Canelones y Montevideo. Cabe consignar finalmente, que entre muchos otros proyectos, constantemente recicla papel, donando 100 cuadernos por mes a las escuelas públicas de Montevideo y lleva adelante una política muy rigorosa de salud ocupacional y seguridad.
26 / Número 1 / Febrero 2010
Turismo Sustentable
En Uruguay
La naturaleza constituye el único factor del producto turístico que no puede ser ampliado y para garantizar su sustentabilidad, se debe limitar el número de visitantes, antes de que ocurran daños al medio ambiente. La creciente conciencia ambiental de las personas y la necesidad de usufructuar de su tiempo libre en espacios que permitan el contacto directo con la naturaleza, hacen que la protección ambiental se constituya un elemento clave del desarrollo sustentable de las áreas para uso turístico y/o recreativo. La geografía uruguaya admite un abanico amplio de opciones en cuan-
to a turismo natural. No sólo la playa o la sierra se encuentran en el menú. La búsqueda de tranquilidad y el contacto con la naturaleza dan lugar al ecoturismo en sus múltiples escenarios. A lo largo y ancho del Uruguay existen numerosas estancias turísticas que permiten disfrutar de paseos a caballo, tardes pescando en la tranquilidad de un lago y un circuito gastronómico criollo, con carnes asadas de origen vacuno, ovino o porcino de primer nivel, u otras más exóticas como carne de ñandú, mulita, conejo, carpincho o jabalí. Todo en un ambiente de respeto por la naturaleza sin realizar cambios abruptos que afecten el medioambiente de la zona.
27 / Número 1 / Febrero 2010
Las opciones son muchas. Desde un fin de semana de campo en una finca rural donde usted y su familia podrán levantarse al amanecer, aprender a ordeñar una vaca y realizar actividades en contacto directo con la naturaleza; o pasar un fin de semana en un hotel rural cinco estrellas, con todas las comodidades en medio del campo. l
Evolución del concepto De gestión ambiental Ningún tema de la agenda mundial ha tenido la repercusión y desarrollo en los últimos años como lo ha hecho la temática ambiental. Actualmente no hay ningún sector ni productivo ni social, ni cultural que no haya integrado en su agenda al Medio Ambiente.
Ing. Carlos Amorín Cáceres Ingeniero Civil, especializado en Ingeniería Ambiental. Profesor Adjunto en el Instituto de Mecánica de los Fluídos en la Facultad de Ingeniería de la UDELAR. Desde 1994 es parte de la sociedad profesional Estudio Ingeniería Ambiental, siendo parte de su directorio. Durante su carrera profesional ha colaborado activamente con el desarrollo de la normativa ambiental nacional.
Todos los actores sociales han incorporado de alguna manera esta temática en sus discursos y tratan de tener posición sobre los principales problemas ambientales. Es así que, aunque aún existen sectores que aún los niegan, para la mayoría, temas como el cambio climático o la eficiencia energética, son de importancia capital y merecen ser tomados en cuenta y evaluados en función de las consecuencias que para cada sector puedan tener. Mucho se ha avanzado desde los legendarios 60 cuando los temas ambientales eran manejados solo por pequeños grupos de personas comprometidas, que dieron su lucha detrás de valores éticos en defensa de la existencia de todas las especies en el planeta. Hoy, la gestión ambiental, ya no se trata de un compromiso ético con las otras especies que conviven con nosotros en este planeta, sino que se ha transformado en un tema económico, productivo, cultural y de supervivencia de nuestra propia especie.
Tratamientos de fin de tubería
28 / Número 1 / Febrero 2010
Partiendo de la importancia que hoy tiene el medio ambiente, este artículo trata de explorar como ha sido la evolución de los conceptos que nos llevaron a esta situación y cuál ha sido el rol de los diferentes actores sociales intervinientes. Si bien se pueden encontrar preocupaciones sobre el medio ambiente con anterioridad a los 60, la mayoría de los estudiosos del tema entienden que fue en esta década donde se articula un movimiento social con fines específicamente ambientales, es decir, con preocupación por el deterioro que el ser humano estaba produciendo en importantes áreas del planeta. Hasta ese momento los daños causados por la actividad humana se consideraban solo fenómenos locales y de generación puntual. La consigna clave era “la reducción de la contaminación”, y lo que hoy llamamos gestión ambiental, se centraba básicamente sobre las industrias, a las que se les exigía que interpusieran tratamientos a sus emisiones líquidas o gaseosas, para reducir su potencial contaminante. Estos tratamientos que se aplicaban en las salidas de estas emisiones, sin alterar los procesos productivos, es lo que hoy conocemos como tecnología de “final de tubería”, y su objetivo
era dar cumplimiento a determinados estándares de emisión siendo solo un costo para los que la aplicaban. Los movimientos ambientales de los 60 comenzaron a poner énfasis además de en aquella contaminación que podía tratarse, en toda la otra contaminación que era generada por otros sectores productivos y que terminaban teniendo consecuencias más nefastas. Era el caso del uso de los plaguicidas en la agricultura y sus probados efectos sobre los seres vivos. De hecho fue el libro de Rachel Carson “Una primavera silenciosa”, donde la autora denunciaba como el abuso de los químicos a nivel agrícola podría traer la muerte no solo de las plagas sino de toda la vida silvestre, la que sirve de disparador para el movimiento ecologista de los años 60. Por esta vía, estos movimientos comenzaron a llamar la atención sobre las consecuencias que este tipo de contaminación tenía tanto en cuanto a desaparición de especies como a la pérdida de hábitat para muchas otras, poniéndolas en peligro de extinción. Ni los organismos estatales, ni los sectores productivos, ni los académicos de donde muchos de los integrantes de los movimientos ecologistas provenían, prestaron mucha atención a este tipo de reclamos considerándolas alarmistas y sin demasiado fundamento. Sin embargo los integrantes de estos movimientos no se amilanaron y siguieron acumulando información sobre los efectos que las distintas actividades productivas generaban sobre el medio ambiente. Durante los 60, los 70 y buena parte de los 80 fueron estos movimientos los que lideraron el desarrollo del pensamiento ambiental. Por esos tiempos las ONG´s, donde estos movi-
mientos se articulaban y expresaban, eran sin lugar a dudas los que más conocimiento tenían sobre los impactos ambientales producidos por las distintas actividades humanas. Desde el punto de vista operativo estos movimientos hicieron una bandera de otro instrumento de gestión ambiental, que había sido creado por la National Evironmental Protection Act (NEPA) de los Estados Unidos a fines de los 60, y que se dio en llamar la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) Este instrumento estaba más en consonancia con el pensamiento global de las ONGs ambientales ya que permitía la evaluación general de las posibles consecuencias de un proyecto, con un carácter amplio y no solo reducido a sus emisiones. La EIA había sido creada por la NEPA como un instrumento que tenía fines declarativos por medio del cual aquellos que querían emprender una acción debían dejar explícitas las consecuencias ambientales de la misma. Pero en manos del movimiento ambiental este instrumento se transformó en un requisito previo para ejecutar cualquier tipo de proyecto, donde se debían estudiar todos los impactos ambientales que pudieran producirse, y tomar las medidas necesarias para mitigarlos. Y si esto no era posible se debía desechar el proyecto.
29 / Número 1 / Febrero 2010
La EIA, que durante los 80 y los 90 se fue incorporando en todas las legislaciones del mundo, tenía como objetivo la protección de las zonas y especies sensibles, partiendo de una evaluación de los proyectos en el contexto del ambiente en que se integraban. La EIA así concebida, era vista como un estudio caso a caso, donde lo importante era la interacción entre proyecto y entorno, para lo cual no era siempre posible establecer reglas claras para la gestión específica y la discrecionalidad del evaluador y del revisor en cada caso era lo que terminaba consignando las prácticas a seguir. A medida que los movimientos sociales obtenían más información sobre consecuencias ambientales directas, su credibilidad social crecía y la preocupación por lo ambiental tomaba más cuerpo en la opinión pública informada. De esta forma, lo que antes era un movimiento romántico sin demasiado asidero científico, pronto se convirtió en un grupo de presión que exigía a las autoridades mayor intervención en la protección de medio ambiente y mayor control de las distintas actividades contaminantes.
Ambientales al sector productivo con el objetivo de que apliquen medidas de control específicas para la reducción de sus impactos ambientales.
Esto llevó a que cada vez los organismos estales tuvieran un mayor protagonismo. Y es así como a los largo de los 80 y 90 la mayoría de los países fueron creando Autoridades Ambientales específicas para la atención de este tipo de problemas. Si bien el primer instrumento incorporado por estas Autoridades fue la EIA, pronto estos organismos comenzaron a ver las limitaciones de este instrumento y comenzaron a complementar a éste con otros instrumentos más guiados a la gestión específica de los sectores productivos, defiendo así las bases del concepto de gestión ambiental. Los Organismos Ambientales a medida que avanzaban en sus competencias fueron haciendo suyas muchas de las demandas de los movimientos ambientales, incorporándolas en su quehacer. Esto lleva a que las ONGs empiecen a perder el peso que tenían en las décadas anteriores, hasta casi desaparecer, quedando activas las más extremistas por sus prácticas y sus demandas, caso de Greepeace. Comienza entonces lo que se podría considerar como el liderazgo ambiental de los Organismos Estatales que abarca desde mediados de los 80 hasta casi fines de los 90, y donde la legislación ambiental tiene su gran desarrollo. Durante estos años la gestión ambiental de las empresas surge a partir de las demandas y exigencias que van imponiendo las Autoridades
30 / Número 1 / Febrero 2010
Ya no solamente se exigía que se realizaran las EIA previo a cada proyecto sino que se comienza a exigir la incorporación en la producción de la “Mejores Tecnologías Disponible” (BAT por sus siglas en inglés) para asegurar la mitigación de ciertos impactos. Estas exigencias se realizan sin tener en cuenta los costos que implicaba la imposición de estas tecnologías en la producción, generando por esta vía distorsiones de mercado. Hasta los 90 es posible afirmar que los sectores productivos eran reactivos a todas estas políticas que les eran impuestas desde las Autoridades. Y con mayor o menor énfasis daban cumplimiento a las exigencias, sin mayores cuestionamiento viendo como los costos de la “protección ambiental” aumentaban en sus presupuestos, sin que tuvieran de por sí una contrapartida desde el punto de vista económico. Seguramente algunos dentro del sector, comenzaron a darse cuenta que una actitud reactiva a la larga significaba un riesgo real de supervivencia y comprendieron que debían tomar el tema ambiental desde una actitud más proactiva. Esta actitud, en cuyo comienzo buscó resistir a las demandas estatales, encontró nuevos enfoque en el abordaje de los problemas ambientales que se le presentaban. En primer lugar se comenzó a entender la reducción de la contaminación no se lograba solamente mediante la incorporación de tratamientos al final de los procesos, sino que había
que considerar los procesos de tratamiento como parte de la producción misma. Esto implicaba que el objetivo de la producción no era sólo la maximización de la producción con mínimos costos, sino que a esto había que agregar la minimización de las emisiones y residuos. De esta forma el control de la contaminación comenzaba a tener algún rédito económico y no solo era visto como un mero gasto. La puesta en práctica de este enfoque implicó tener que realizar cambios en los procesos productivos, no ya en la búsqueda de la eficiencia en la producción sino que además buscando reducir los impactos ambientales. La necesidad de la reducción de los residuos desde los procesos, llevó a que se investigara sobre su posible reuso, reciclaje y también se evaluara su capacidad de ser utilizados como combustibles, buscando que el resultado no fuera solo su reducción sino que implicara ahorros para la empresa tanto en materias primas, como en combustibles. Los primeros éxitos en esta línea de trabajo estimularon enormemente el desarrollo de estos enfoques de investigación desarrollando lo que ya se conoce como las “tecnologías limpias o ambientalmente amigables”.
La otra línea de acción que se produce a nivel empresarial es la implementación de programas específicos de gestión ambiental, desarrollados por ellos mismos o por grupos de organizaciones similares, buscando mostrar un desempeño ambiental cada más proactivo. Esto se lograba con las certificaciones y auditorías que luego van a darse forma en la ISO 14.000. Estos programas buscaban dos objetivos. Por un lado mostrar a las Autoridades una actitud más cooperativa en la superación de los principales problemas ambientales y por otro recuperar la iniciativa en tiempos requeridos para el mejoramiento ambiental al definirse explícitamente las pautas de sus inversiones. La aplicación tanto de las tecnologías limpias como la aplicación de los programas de gestión ambiental fue haciendo que las organizaciones tuvieran mayor conocimiento sobre los beneficios del manejo de los efectos ambientales específicos en su ámbito de acción y por ende responder al desafío de su gestión. Comienza entonces la etapa del liderazgo de las organizaciones en la temática ambiental basada una proactividad frente al tema. Lógicamente esta actitud no se encuentra totalmente expandida en todos los sectores productivos de la misma manera, y aún se pueden encontrar muchas empresas que no han comprendido bien la situación y no han incorporado el desafío ambiental dentro de su lógica empresarial. Estas empresas se encuentran aún en una etapa de resistencia pasiva respecto a las exigencias que vienen desde las Autoridades o de los mercados.
31 / Número 1 / Febrero 2010
Sin embargo esta actitud se encuentra en franco retroceso ya que solo tiene éxito en la medida que se logran dilatar inversiones en soluciones ambientales, que tarde o temprano han de tomarse si se quiere seguir en el negocio. También es cierto que existen empresas que si bien muestran una actitud ambiental proactiva, lo utilizan más un objetivo propagandístico que como una oportunidad de producir cambios profundos en su gestión productiva. Sin embargo no debe verse esto con demasiada desconfianza, aún esta actitud debe considerase como un avance de la situación anterior, y a la larga produce cambios actitudinales irreversibles en la manera que concebir la gestión ambiental de una empresa. Nuestro país, que siempre va un poco a la saga de estos procesos, se encuentra aún en una situación de transición entre el liderazgo de la Autoridad Ambiental y el de las organizaciones, tal vez porque aún pocas empresas han incorporado a fondo la dimensión ambiental en su lógica empresarial. Si bien hay grandes avances, aún la mayoría de las empresas ven al tema ambiental con desconfianza y a la Autoridad Ambiental como la única que pude marcar las reglas de juego de la gestión ambiental. Pero los tiempos se acaban, cada vez más temas ambientales golpean a la puerta y hay que darles respuesta, y cuando antes se comience a transitar la senda de una gestión ambiental proactiva, mejor se está preparado para los desafíos por venir. l
Primer sistema de Indicadores de Desarrollo Sostenible para Uruguay En los próximos meses se estará lanzando el primer sistema de indicadores de desarrollo sostenible para Uruguay. El sistema permitirá la consulta y visualización de indicadores en diferentes escalas geográficas. Esta herramienta abierta al público se presentará a través de una plataforma web dinámica e interactiva donde los usuarios podrán conocer la evolución de una serie de indicadores que darán cuenta de las tendencias de los indicadores en materia de desarrollo sostenible. Este sistema inédito en nuestro país, será enriquecido mediante un sistema de información geográfica básico (SIG) disponible en la propia plataforma web, que permitirá visualizar los indicadores mediante mapas, y que podrá ser utilizado por usuarios que no tengan conocimientos previos en el uso de las herramientas SIG. El web SIG tendrá algunas funcionalidades avanzadas que permitirán realizar ediciones de capas de información y crear capas propias resultantes de las consultas realizadas mediante el sistema. El sistema está siendo desarrollado en el marco de la iniciativa del Gobierno Nacional a través de la la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y de las Naciones Unidas por medio del Programa Unidos en la Acción. Los gestores de esta iniciativa son el Programa EcoPlata (Gestión Integrada de la Zona Costera), la Dirección Nacional de Ordenamiento Territorial y la Dirección Nacional de Medio Ambiente del MVOTMA. Cuenta con el financiamiento y coordinación del PNUMA y la OPP. En el proyecto participan múltiples instituciones y organizaciones nacionales y locales como el Instituto Nacional de Estadísticas, el Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca, el Ministerio de Desarrollo Social, Intendencias Municipales, la Universidad de la República, entre otras. Estas organizaciones han intervenido en diferentes instancias en las que se definió el concepto de desarrollo sostenible para Uruguay y se
analizó la viabilidad y pertinencia de los indicadores propuestos. Hasta el momento en nuestro país existen sistemas de información u observatorios que manejan información e indicadores sectoriales. En este nuevo sistema convergerán los diferentes aspectos que integran las dimensiones del desarrollo sostenible, como ser la calidad de vida de la población, la calidad de los recursos naturales, aspectos referentes al desarrollo económico y del ordenamiento territorial. Los indicadores podrán combinarse a nivel de las capas de información geográfica y a nivel de gráficos y cuadros. Esto permitirá analizar conjuntamente información de diferentes dimensiones en un sistema integrador. Se podrá visualizar a distintos niveles territoriales: nacional, departamental, cuencas hidrográficas, espacio costero, entre otras opciones. El sistema proveerá toda la información necesaria para su óptimo manejo y para lograr combinaciones de indicadores. A modo de ejemplo de representación gráfica se puede ver el indicador de “Discontinuidad del Desarrollo Urbano”. Este indicador que se está midiendo por primera vez tiene por objetivo monitorear el proceso de urbanización en el espacio costero y la adecuación de este desarrollo urbano a los lineamientos establecidos en la Directriz Nacional del Espacio Costero (MVOTMA – DINOT). Se considera necesario limitar y equilibrar los procesos de ocupación continúa a lo largo del Espacio Costero con el fin de evitar el desarrollo urbano lineal y continuo, fomentando así la diversidad.
32 / Número 1 / Febrero 2010
Otro ejemplo es el indicador de “Eficiencia Energética”, el mismo no se utiliza frecuentemente para medir la sostenibilidad, sin embargo la tendencia a nivel internacional es la de instrumentar indicadores de “desacople”. El mismo da cuenta de la intensidad del uso de energía en la economía nacional (medida en términos de PBI) y en cada sector de actividad. Busca evaluar las relaciones divergentes entre la mejora económica y el decremento absoluto o relativo de los consumos de factores de producción o de emisiones al ambiente. Se entiende que una economía se hace más sostenible en la medida en que incrementa el valor o la cantidad de bienes o servicios producidos mientras incrementa menos que proporcionalmente o disminuyen los factores de producción o las emisiones al ambiente. Cada indicador cuenta con su hoja metodológica y su ficha de divulgación, en la que aparecerá la forma de cálculo, las fuentes de información y los especialistas referentes que participaron en la construcción y evaluación de los mismos. Sin lugar a dudas este sistema permitirá lograr una mayor comprensión de las dinámicas de nuestra sociedad con el medio ambiente y con el sistema económico en un marco de influencias múltiples. Con la información disponible, el desafío estará dado por el análisis de la misma y la entrada en el campo de la toma de decisiones y el escenario de acciones que tiendan como objetivo último a la mejora de la calidad de vida. l
“Apoyo a la Gestión Integrada de la Zona Costera Uruguaya”
Se lanzó el Sistema de
Información Ambiental Costero Se trata de un primer aporte para los que trabajan en la gestión ambiental, en evaluaciones ambientales, y necesitan información ambiental controlada y confiable. El Sistema de Información Ambiental Costero (SIAC) tiene su ámbito de aplicación en el Espacio Costero (ambiente terrestre y acuático desde Colonia a Rocha) entendiendo como tal el espacio definido por la Directriz Nacional del Espacio Costero (MVOTMA-DINOT). En el SIAC (www.ecoplata.org) se comparte una serie de capas de información ambiental de utilidad para una gama amplia de usuarios, desde el simple curioso hasta técnicos especialistas que necesitan componer usos y ocupaciones de territorio desde los puntos de vista antrópicos y naturales. El sistema presenta una barra de utilidades que permite realizar búsquedas básicas pudiéndose activar en simultáneo las capas de información geográfica para establecer zonas donde las condiciones se cumplan al mismo tiempo. A su vez, cada capa de información geográfica contiene asociados sus metadatos y la posibilidad de descargarla en diferentes formatos. La descarga de estas capas es de libre uso y está optimizado para el sistema operativo Firefox de acceso libre. Existen diferentes categorías de capas; Información General, Hidro-
grafía, Infraestructuras, Actividades en la costa, Actividades antrópicas, Ambientes y vulnerabilidad, Áreas protegidas, Navegación, Batimetría y Biodiversidad. Se estima que el sistema puede contribuir a la realización de compilaciones de información con diversos objetivos, desde investigación hasta evaluaciones de medio receptor para Evaluaciones de Impacto Ambiental.
social y económica para enriquecer las posibilidades de cruce y análisis de información. También se pretende ir adicionando funcionalidades a la interfase web para poder visualizar la información requerida por el usuario de la manera más propicia en relación a sus intereses. Los aportes y sugerencias de los usuarios serán bienvenidos en nuestra cuenta de correo electrónico ecoplata@ecoplata.org. l
La idea del Sistema es ir agregando capas de información conforme se vayan generando y actualizando. Se podrá eventualmente, en un futuro cercano, agregar información Programa EcoPlata Dirección: Galicia 1133 piso 1 CP 11100 Teléfono: +5982 917 07 10 int. 4166 Correo: mgomez@ecoplata.org Website: www.ecoplata.org
Mónica Gómez Coordinadora
33 / Número 1 / Febrero 2010
Apostando a la Fuerza del Sol CSI Ingenieros es una empresa que brinda servicios de ingeniería y consultoría de alto nivel, involucrando desde el inicio de sus actividades, hace 30 años, a 80 profesionales y técnicos en las más diversas áreas. Sus servicios exceden el medio local, brindando asesoramiento y soluciones a empresas de diversos lugares del mundo Con el asesoramiento técnico de CSI la firma CIEMSA ha implementado luego de dos años de investigación, una línea de productos de energía renovable bajo la marca, Xinergia que se encuentran en el mercado desde hace más de 1 año. Este grupo empresarial es el pionero en el desarrollo de este tipo de aplicaciones profesionalmente respaldados por la en investigación y el ensayo en nuestro país, logrando resultados excepcionales de ahorro energético en los clientes que optaron por sus productos y cuya inversión se paga en plazos de hasta 3 años. Estas aplicaciones se basan en colectores donde la energía solar se acumula como agua caliente y que luego se utiliza tanto a la pequeña escala o residencial, hasta grandes consumos de tipo industrial y que ahorran hasta el 80 % de las energías tradicionales usadas para calentamiento.
Pablo Medeyros Jefe de la Unidad de Energía de CSI Ingenieros SA, con amable claridad explica que “Xinergia” es una marca de productos de energía renovable para uso en la vida diaria que comercializa la firma CIEMSA y que se ha desarrollado luego de dos años de investigación, con la asistencia técnica de CSI, la mayor consultora de ingeniería del país. “Nuestra actividad regular son los servicios de ingeniería y en eso somos muy proactivos tanto en la búsqueda de nuestros clientes como en la investigación de soluciones que puedan ser de interés de nuestro mercado y de esa forma hemos ido ampliando nuestros servicios desde la agroindustria que fue nuestro origen hasta la energía que hoy tiene una fuerte demanda”. “En este proceso de desarrollo resolvimos apostar a las energías renovables y promoverlas interactuando con actores públicos y privados mostrando sus beneficios así como su capacidad de sustituir otras fuentes sin mayores costos o incluso reduciéndolos”. Comenta que “el público tiene interés en el cuidado del medio ambiente, hoy en día se trata de una cuestión que ha permeado a la sociedad y existe una amplia conciencia sobre el particular”.
34 / Número 1 / Febrero 2010
Con Pablo Medeyros de CSI Ingenieros
El paso siguiente entonces, era “encontrar los productos y servicios que tuvieran una aplicación técnica aceptable, que fueran fáciles de operar y al mismo tiempo económicamente viables”. Con esa visión, iniciaron el proceso de prospección para detectar esos productos. Un baño ecológico Medeyros aclara “nosotros no inventamos nada, integramos soluciones y buscamos las mejores tecnologías para poder plasmarlas”. Señala que “la energía solar térmica, por su desarrollo, ha llegado a ser rentable y competitiva”. La búsqueda, iniciada tres años atrás, se orientó hacia los colectores solares. Luego de la investigación se pasó a la prueba, esto es, “a ensayar el equipamiento, probarlo y ver sus desempeño antes de ponerlo a la venta”. “Hay que tener una buena ecuación económica que no se encarezca por ser una solución a medida”, dice, “por ello se debe tener paquetizada esta tecnología. En este sentido se han seleccionado equipos integrados que recogen la energía y la acumulan como agua caliente con capacidades de 100, 200 y 300 litros y que se pueden usar fácilmente en los hogares, pero para soluciones de grandes consumos se van integrando módulos que cubren cualquier necesidad de uso industrial”. “Otro elemento que afecta al precio del producto es como llega el producto al cliente final, es decir cuánto se agrega al precio por la participación de intermediarios” aclara “La actividad de venta y la publicidad encarece el producto y lo puede sacar del mercado y por ello recomendamos a CIEMSA el uso de canales existentes a través de alianzas con distribuidores que comercialicen productos afines”.
Esta estrategia implica que estos nuevos equipos se vendan en los mismos lugares donde ya se comercializan productos similares y que agregan el producto en su cartera”, pero confiesa que “contar con una amplia red comercial, que sea consistente, lleva su tiempo”. Un equipo para una familia de cuatro personas puede costar “desde algunos cientos a poco más de mil dólares”. Sin embargo, las ventajas de su instalación, son altamente beneficiosas, ya que reduce en aproximadamente un tercio la factura de la electricidad y se paga solo en unos tres años. Aparte del beneficio económico que se logra a lo largo de la vida útil del equipo esta pequeña inversión permite al consumidor la gratificación de estar contribuyendo dentro de su alcance a la protección del medioambiente. Nos comenta alguna de las soluciones industriales. “En Pinturas Inca diseñamos una instalación que desde hace 1 año da 4500 litros de agua caliente en forma diaria con energía solar. Allí se bañan más de 120 empleados todos los días y según esta empresa la solución fue reconocida como emblemática por la casa matriz europea y la mejor solución de aplicación de energías renovables y colaboración a la protección ambiental”, comenta con satisfacción.
“Parte de la investigación realizada fue probar estos equipos en tambos donde se cumplieron también las excelentes prestaciones del equipo con agua de pozo que es lo normal en Tambos y otros establecimientos agrícolas”. “El agua de pozo, es muy rica en sales minerales y va generando depósitos dentro de los equipos que inutilizan los mismos en un par de años, estos equipos se desarman y se limpian. Están fabricados especialmente para que se pueda eliminar el sarro acumulado con facilidad y restablecer su condición de funcionamiento como al inicio”. El técnico señala que “nos propusimos impulsar un producto que tuviera larga duración sin perder confort, lo que permite disponer de un ahorro muy importante, a lo largo de quince o veinte años. De este modo asesoramos al cliente para que compre lo que mejor se ajusta a su necesidad evitando crear falsas expectativas con productos de bajo precio”.
Tambos soleados Hoy existe una ley dirigida a promover el uso de la energía solar térmica que prontamente se reglamentará y que establecerá una serie de incentivos para este uso. Esto no solo se impondrá en el uso domestico e industrial sino que seguramente se extenderá en el agro ya que se trata de un tipo de solución muy adecuada para ese sector.
35 / Número 1 / Febrero 2010
Otros productos en investigación “La línea de investigación actual está enfocada al uso de energía eólica y fotovoltaica para usos puntuales donde existan ciertas restricciones con el suministro de energía eléctrica regular. “Tanto la energía solar como la eólica, requieren otra fuente para cuando no hay sol ni viento, es decir un respaldo. En este caso hay que recurrir a baterías, que son muy costosas, tienen poca vida útil y también son contaminantes”. Esta dificultad se puede reducir en algunas aplicaciones donde la demanda de energía no es inmediata sino que se puede esperar por ella. “Hay aplicaciones donde el proceso productivo se puede parar o no tiene un horario establecido (por ejemplo el riego, la acumulación de agua para animales etc.) donde el uso combinado de la energía eólica y/o fotovoltaica es muy competitiva”, dice. Estos productos, se encuentran ya en etapas de investigación y desarrollo. l
Los cinco mejores hoteles
Verdes del Mundo Hotel Rosario, La Paz, Bolivia Este colonial hotel boliviano tiene como objetivo alcanzar una máxima utilización de sus recursos. Es por eso que toda el agua caliente se logra mediante colectores solares y todas las duchas tienen ahorro de agua. Al mismo tiempo los detergentes utilizados son biodegradables y ha logrado reducir al mínimo el uso de vasos y bolsas de plástico. Sin embargo lo que más llama la atención es que todo el papel utilizado para fines administra-
Paneles solares y gastronomía orgánica son algunas de las medidas adoptadas para el cuidado del medio ambiente. La conciencia mundial sobre la conservación y del cuidado del medio ambiente ha hecho que los turistas también busquen alternativas ecológicas durantes sus vacaciones. Es por eso que el sitio web especializado en viajes HolidayCheck, hizo un ranking de los hoteles “verdes” mejor valorados por sus usuarios.
Hotel Eden Lodge, Nosy Bè, Madagascar Este hotel ubicado en la isla de Madagascar, cuenta con ocho suites que funcionan 100% en base a energía solar, y aunque está ubicado en medio de una reserva natural, el Hotel Eden Lodge lleva a cabo acciones tan simbólicas como, por ejemplo, plantar un árbol por cada cliente recibido.
36 / Número 1 / Febrero 2010
tivos es convertido después en papel higiénico. Hotel Danila, Cavalese, Italia Ubicado al sur de Tirol, en el norte de Italia, este hotel-spa busca ofrecer a sus clientes, un relax en perfecta comunión con el medio ambiente. Para ello el Hotel Danila cuenta con un biosauna, de cuales todos los materiales utilizados son de origen local o de comercio justo. Al mismo tiempo, la cocina del hotel se basa en alimentos orgánicos y de huertas propias. Hotel Venus Albir, Alicante, España La característica principal de este hotel español es su gastronomía. Y es que su restaurante ecológico sólo se abastece de productos orgánicos locales. Al mismo tiempo, la mayoría de los materiales realizados en su construcción son biológicos. Es así como los aislamientos están hechos de corcho natural y las paredes fueron pintadas con pinturas ecológicas. Hotel Ecológico Chumbera Azul, Vejer De La Frontera, España Este hotel cinco estrellas es la perfecta combinación entre lujo y respeto por la naturaleza. Completamente construido con materiales naturales y diseñado con criterios bioclamáticos, este hotel cuenta con eficientes sistemas de ahorro de energía priorizando el abastecimiento mediante energía solar. l
37 / Número 1 / Febrero 2010
Bloque del tamaño de Nueva York
Se desprende en la Antártida El bloque de Wilkins podía perder hasta 3 mil kilómetros cuadrados, tras el hundimiento del puente de hielo. Un bloque de hielo del tamaño de Nueva York, se desprendió y formó diferentes icebergs este mes tras el hundimiento de un puente de hielo, como consecuencia del calentamiento global.
“El frente helado norte del bloque Wilkins se ha vuelto inestable y se han escindido los primeros icebergs”, dijo Angelika Humbert, experta en glaciares de la Universidad de Münster, en Alemania, sobre unas imágenes de satélite facilitadas por la Agencia Espacial Europea. La científica explicó que un bloque de unos 700 kilómetros cuadrados de hielo, de tamaño superior a Singapur o Bahréin y casi tan grande como Nueva York, se desprendió del bloque Wilkins este mes, desgajándose en múltiples icebergs.
Desprendimiento La experta explicó que 370 kilómetros cuadrados de hielo se habían desprendido del bloque, el último de diez en la Antártica, de una manera que el Panel del Clima de la ONU relaciona con el calentamiento global. Los nuevos icebergs se unen a los 330 kilómetros cuadrados que se desprendieron a principios de este mes con
la ruptura de un puente de hielo que ha dejado al bloque Wilkins separado entre la isla de Charcot y la Antártica. Otros nueve bloques de hielo que flotan cerca de la costa retrocedieron o se hundieron alrededor de la Antártida en los últimos 50 años, habitualmente de manera brusca, como en el caso del Larsen A en 1995 o el Larsen B en 2002. Esta tendencia se debe al cambio climático, producido por los gases que salen de la quema de combustibles fósiles, según David Vaughan, un científico que colabora en el Estudio Antártico Europeo y que aterrizó en el bloque Wilkins con dos periodistas, en enero del presente año. Humbert dijo que, según sus cálculos, el Wilkins podía perder un total de entre 800 y 3.000 kilómetros cuadrados tras el hundimiento del puente de hielo. El Bloque Wilkins ya ha perdido aproximadamente la tercera parte de su superficie inicial, de 16.000 kilómetros cuadrados. Su hielo es tan espeso que debió tardar cientos de años en formarse. Las temperaturas en la Antártica han subido unos 3 grados Celsius este siglo, una tendencia que los científicos relacionan con el cambio climático. La pérdida de bloques de hielo no eleva el nivel del mar de manera significativa porque el hielo flota y porque ya está sumergido en el océano. Pero la gran preocupación es que su pérdida permitirá a las capas de hielo en tierra deshacerse más rápidamente, añadiendo agua a los mares. Wilkins casi no acumula glaciares tras él, pero los bloques de hielo más al sur contienen grandes cantidades de hielo. l
38 / Número 1 / Febrero 2010
39 / NĂşmero 1 / Febrero 2010
40 / NĂşmero 1 / Febrero 2010