upward
La vida de
DUA LIPA
Hija de inmigrantes kosovares, se dio a conocer a los 15 años cuando subió un vídeo en el que versionaba a Joss Stone. El que sería su manager, Ben Mawson, la metió en un estudio de grabación antes de tener un contrato. Publicó Hotter Than Hell de manera independiente y varias discográficas comenzaron a llamar a su puerta.
L
anzó entonces su primer álbum, de nombre homónimo, y pasó de tener unos pocos miles de seguidores a acumular millones en sus redes, que dejó de gestionar ella misma. El vídeo de su single, New Rules, una canción de pop electrónico que se publicó en el año 2017, se ha convertido en un himno femenino que acumula miles de millones de escuchas en Youtube y que la convirtió en la artista con más reproducciones ese año en Spotify. En su breve pero intenso currículum hay premios Grammy, Brit y un puñado de jugosas colaboraciones con artistas como Calvin Harris, Martin Garrix, Diplo o Mark Ronson. Asegura no tener un estilo musical definido, ni como consumidora ni como compositora.
“Me gusta no tener prejuicios sobre qué géneros son buenos y malos, disfruto de todo por rachas”, confesaba. También que escribe sobre las cosas por las que ha pasado: “Nunca escribo con la intención de convertirme en un altavoz de empoderamiento femenino. Es más una terapia”. Comprometida con la causa feminista, con la inmigración y con la lucha contra la pobreza, creó una fundación, Sunny Hill, dedicada a combatir esto último en las comunidades vulnerables de su país. También un festival de música, con el mismo nombre, que se celebra en Pristina, capital de Kosovo, y en el que actuaron Miley Cyrus o Justin Bieber. “En Kosovo la variedad musical brillaba por su ausencia. Cuando hablé con mi padre de qué podríamos hacer para darle un poco más de riqueza al panorama de conciertos allí..
«Bueno, estoy demasiado ocupada para tus asuntos».
FUTURE
NOSTALGIA “Tú quieres una canción atemporal, yo quiero cambiar el juego”. Más claro, agua. Las primeras palabras frase que Dua Lipa pronuncia en Future Nostalgia, su primer álbum de estudio desde su debut homónimo en 2017, son la mejor forma de resumir un ambicioso proyecto que nació destinado para ver la luz en octubre del año pasado, pero que tras varios ajustes y una filtración que la obligó a adelantar la fecha oficial de publicación, este 27 de marzo se descubría al mundo en una situación que la cantante británica de origen kosovar jamás habría alcanzado a imaginar. “Ni siquiera sé si estoy haciendo lo correcto”, adelantaba en sus redes. “He tenido mucho conflicto en torno a si debía lanzar este disco en un momento en el que tanta gente sufre, pero creo que una de las mejores cosas que tenemos ahora mismo ese la música. Necesitamos algo de escape, y necesitamos pensar que en algún momento llegará la luz”.
Del pasado, la música disco y múltiples guiños a Kylie Mi-
En pocas horas y a juzgar por las reacciones, en su caso la luz es más bien un rayo: “lúdico”, “disfrutable”, y “enormemente ambicioso” son los adjetivos más suaves que los medios musicales han usado para describir la estocada de pop de Future Nostalgia, mientras los más espléndidos hablan, sin reservas, del mejor disco de música pop en lo que llevamos de década. Con todo, una sola escucha basta para saber que estamos ante una deliberada estocada pop libre de prejuicios. Sus 11 himnos antipesimistas y despreocupados harán que el más hastiado quiera saltar en la cama con el pijama más refinado que encuentre en el armario a falta de la opción de zambullirse en una pista de baile. En su labor, además, se esconde una misión con la que Lipa ya había fantaseado en algunas entrevistas, como la que concedió a Vogue España en octubre de 2019: “Creo que cuando escuches mi disco de corrido te encontrarás con una mezcla de ritmos y temas que no vienen de un mismo lugar. Eso se aplica a la música actual: donde antes había géneros ahora hay una fusión constante, y despreciar el pop es ridículo, porque, de algún modo, hoy lo empapa todo. El futuro del pop pasa por cambiar las reglas de juego”, decía. Más que géneros, de lo que puede presumir Future Nostalgia es de un juego magistral entre tiempos.
tro salón una pista de baile, así que es muy probable que
nogue, Moloko y Giorgio Moroder. Del presente, ese pop sin complejos genéricos que tan bien ha moldeado junto a sus productores (Stephen “Koz” Kozmeniuk, Ian Kirkpatrick, Stuart Price, Jeff Bhasker o The Monsters and The Strangerz) y compositores invitados como Julia Michaels o Tove Lo, haciéndose con una escala cromática que oscila entre el funk y el pop pasado por un tamiz disco. Y del futuro, una distópica apariencia de pelo dividido entre el negro y el rubio (contentos estarán los fanáticos de Mónica Naranjo) que se despliega en los visuales del disco (a veces tan cercano al Confessions on a dancefloor de Madonna) con la ayuda de nombres como el fotógrafo Hugo Comte ejerciendo también de director de arte, la productora barcelonesa CANADA o el estilista italiano Lorenzo Posocco. Quién sabe cuánto tiempo tendremos que hacer de nuesel de Dua Lipa será un disco que acabe siendo recordado como un himno generacional contra el pesimismo a puerta cerrada. De la misma forma en que ha conseguido que con el paso de los años una presencia seria y algo apática en el escenario se haya transformado en un halo distante e indiferente, sus pequeñas píldoras de 3 minutos contra el hastío son capaces de convertir la melodía más lisérgica de los 90 en un clásico de baile instantáneo. Y si no, escuchen Love again; aquí se esconde la melodía de trompeta de My Woman de Al Bowlly, que White Town hiciera mundialmente conocida al usarla como base de Your woman en 1997. De hecho, este no es el único tema que juega con nuestra memoria musical en Future nostalgia: en Pretty please uno se acordará de Parade, la banda sonora que Prince firmaba para la película Bajo la luna de cereza (1986)y en Break my heart ocurre igual con el riff de Need you tonight, el éxito de INXS de 1987, tan bien acoplado y tan afín a un videoclip que parece sacado de un cruce entre Clueless (Amy Heckerling, 1995) y Regreso al futuro (Robert Zemeckis, 1985).