100 Conversaciones: la memoria es la red. Delma Rodríguez
Lanzamiento de Anilla Cultural Latinoamérica-Europa en Uruguay. El miércoles 16 de noviembre del 2011 se llevó a cabo el Lanzamiento de Anilla Cultural Latinoamérica Europa en Uruguay, en la sala de videoconferencia de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República.
¿Qué es Anilla Cultural? Anilla Cultural Latinoamérica – Europa es una red de cocreación, colaboración y participación que enlaza América Latina y Europa en el campo de la acción cultural contemporánea a partir del uso intensivo de las Tecnologías de la Información y Comunicación e Internet de segunda generación. Se articula como un esfuerzo colectivo e innovador que explora, genera y sedimenta nuevas formas de acción y conocimientos en red que potencien el acceso de personas, grupos, comunidades y países a experiencias locales e internacionales de los más variados géneros y formatos.
Participación de Uruguay en la Anilla Cultural En este marco Uruguay realizó una propuesta de participación como nodo de la Anilla Cultural a través de la ANEP, (el CoDiCen, el Consejo de Educación Secundaria y el proyecto InfoArt), con el apoyo de Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República. Dicha propuesta tiene por objetivo la democratización de contenidos educativos/culturales y la creación de proyectos educativos colaborativos inter-institucionales multiculturales en Artes, Ciencias, Tecnología y Sociedad. En el inicio de relacionamientos entre Uruguay y la Anilla Cultural LatinoaméricaEuropa, el MAC Museo de Arte Contemporáneo Santiago de Chile (socio fundador de la Anilla) invitó a Uruguay a participar en la serie de conferencias internacionales “Chile años 70 y 80. Memoria y experimentalidad”. A partir de esta iniciativa se realizó el pasado 16 de noviembre la videoconferencia “Territorios experimentales en Artes, Ciencias y Tecnología. 1º parte “Las Artes en el Uruguay de los 70’s y 80’s” con los panelistas Gabriel Peluffo Linari (director del
Museo Blanes) y Enrique Aguerre (director del Museo Nacional de Artes Visuales), la mesa estuvo moderada desde Chile por Francisco Brugnoli (director del MAC). La modalidad consistía en la conexión por Internet -a través de las redes de alta velocidad- entre las salas del MAC en Chile y la Facultad de Ingeniería en Montevideo, ambas con público como invitados representando a instituciones educativas, culturales, diplomáticas y prensa. En tiempo real se estaba realizando un streaming web 1 -en la Internet social- para todas las personas que no podían estar presentes en las dichas salas. Este dato no es menor, ya que permitió el acceso a diferentes personas (estudiantes, docentes y público en general) tanto en Uruguay, Chile, y otros países como España, Italia, Brasil, entre otros. En particular, en Uruguay estaban conectados grupos de docentes y estudiantes en el Liceo No.1 de Carmelo, Departamento de Colonia, la Escuela Técnica de Tacuarembó, varios docentes del departamento de Artigas, y otras tantas personas identificadas en el chat que se encontraban en la ciudad de Canelones, Montevideo, Salto y Colonia. El programa Ibermuseos2 difundió en su Twitter la transmisión generando otras multiplicaciones de reproducción a través de Internet. También participó online Alessandro Stillo, encargado de Relaciones Internacionales de WEYA 2012 –es el primer encuentro de jóvenes artistas a realizarse en Nottingham en setiembre del 2012- quien invitara a Uruguay a participar del evento en el año próximo. La red de redes estaba conectando a personas de diferentes espacios, territorios en un tiempo particular concreto, en el cual las conversaciones estaban en torno a la memoria. Memoria reciente de los años 70’s y 80’s de la realidad artística en el Uruguay. Los panelistas, Peluffo Linari y Aguerre fueron conformando una serie de diálogos que se extendieron entre las realidades adversas de resistencia por parte de los artistas en esa época y los diferentes registros que constituyen la memoria actual de ese contexto. Surgieron así diferentes datos, nombres de artistas (como el presente Clemente Padín, quien cediera una imagen de su obra para el cartel de invitacion), periodistas y teóricos. Esto mismo suscitó interdiálogos entre los conectados en el streaming web, quienes en forma muy espontánea preguntaban en el chat a sus pares de la red sobre algún nombre que no les había quedado claro. Actitud muy común cuando uno está en una charla presencial y le pregunta a la persona que está al lado, en este caso el de ‘al lado’ se encontraba en el espacio del chat, pero que físicamente podía estar a cientos de kilómetros de distancia. La red colocó a los participantes en una situación de igualdad y de cierta complicidad con el acontecimiento. Incluso en varias ocasiones se dieron reflexiones en el chat sobre problemáticas que estaban desarrollando los panelistas, como el vacío de contenidos en los medios de comunicación en los años 70’s y 80’s -mencionado por Aguerre- y en ese momento un participante online escribe sobre el paralelismo de similitud con la actualidad. También debido a la misma interacción suscitada en el chat, cuando anunciamos en la sala de Facultad de Ingeniería que en el streaming web había 33 dispositivos conectados (los 1
En el siguiente link pueden ver la grabación del streaming web: http://www.livestream.com/anillaculturalmac/video?clipId=pla_dd8d315c-d3bb-4087-99c2c4f467de69be (última revisión, 28.11.2011) 2
http://www.ibermuseus.org/
cuales implicaba muchas más personas viendo), alguien desde Chile escribe “somos 33 y estamos todos bien”, aludiendo a la frase escrita por los mineros chilenos, generando así un guiño simbólico por el significado de ese número tanto para Chile como para Uruguay en tiempos, circunstancias y contenidos diferentes. Al mismo tiempo en la sala de Chile y de Uruguay se realizaban las interacciones entre el moderador (Brugnoli) en Santiago y los panelistas (Aguerre y Peluffo) en Montevideo, apareciendo en cada una de las pantallas las intervenciones de aquí y de allá. Luego de la exposición se abrió el diálogo para los públicos presentes en ambas salas y los participantes de la web social a través del chat, -todos sumamos un poco más de 100 personas conectadas-, permitiendo así permanentes conformaciones de la memoria en un sentido relacional, con los otros, pero en este caso mediada a través de los nuevos medios y plausible de ser reproducida ad infinitum. Comenzó así Anilla Cultural en Uruguay, de una forma descentralizada y abierta a la creación en tecnología, como una propuesta educativa y cultural para nuestros niños, jóvenes y la sociedad en general.