Lengua Castellana
2015-2016
5ยบ B
SOY UN GUSANO Yo era un niño normal y un día haciendo los deberes de la ikastola, de repente, me convertí en un gusano. Después mi madre me llamó a cenar y como no le respondía fue a mi habitación y no me encontró, solo encontró a un gusano. Ella al principio no sabía qué pasaba hasta que se lo escribí en un papel y entonces lo entendió todo. Me llevó a cenar, pero en vez de albóndigas, que teníamos para cenar, bajó a la calle y me dio hierba para cenar. Después me metió en la cama y al día siguiente me puso ropa y me llevó al trabajo con ella. Yo iba arrastrándome hasta el coche y claro, no podía hablar porque un gusano. Cuando llegó la noche, a la misma hora que el día anterior, empecé a transformarme en una persona normal.
Autor: Kimetz A. R.
SOY UN PEZ Hace poco me convertí en un pez, y junto a mis amigos me sortearon en las barracas. A una chica le tocó el premio, que era yo. Me cuidaba muy bien hasta que se fue de vacaciones, y entonces vino su sobrina a cuidarme. Y esto es lo que me hacía: Me ponía el agua muy caliente, jugaba conmigo hasta dejarme sin agua, no me cambiaba mucho el agua… ¡Me trataba muy mal! ¡Y eso no les gusta a los peces, no nos gusta! Pero por fin vino Nahia (mi dueña) y me vio casi muerta porque Aitziber (su sobrina) me dejó sin agua, así que Nahia le echó la bronca y nunca más me cuidó Aitziber.
FIN
AUTORA: ALAZNE 5º B
SOY UNA TORTUGA Yo estaba con mis amigos, y de repente me convertí en una tortuga. Fue muy raro me llevaron al mar. En una familia me acogieron con ellos y también hice amigos. Mi mejor amigo se llamaba Edwin. Yo le dije: -Edwin, ¿y si vamos donde nuestro amigo Edison? El me respondió así: -No estoy muy seguro de ir, porque por ahí están los tiburones. Pero yo fui a buscarle. Cuando estuve allí había tiburones pero no me hicieron caso. Edison y yo salimos rápido para no tener problemas. Estábamos nadando y vino Edwin. Vinieron unos peces muy grandes y tuvimos que meternos en nuestros caparazones. Estábamos corriendo para huir de los peces. Nosotros les llamábamos “Rápidos Furiosos” porque corrían mucho y estaban enfadados. Volviendo a casa íbamos hablando de la aventura. La cena era la mejor, unas gambas muy ricas. Autor: Oier
Soy una gata Un día que iba con mi mejor amigo, ya estaba convertida en gata, fuimos a jugar. Después de haber jugado pasamos por delante de una tienda de animales. Cuando nos vio el dueño de la tienda nos cogió. Estuvimos unos días en la tienda, hasta que vino una niña y adoptó a mi amigo. Se lo llevaron y me quedé muy triste y asustada, porque desde que me convertí en gata era el único gato que conocía. A mí me adoptaron unos días después. Cuando llegamos a la casa del que me había adoptado, resultó que había un perro y un ratón viviendo en esa casa. Al ser una gata, el perro y el ratón me odiaban. Pasó una semana y el perro y el ratón estuvieron toda la semana fastidiándome. Estaba harta y decidí escaparme. Cuando estaba por la calle, asustada y perdida, me encontré con mi amigo. Nos alegramos de vernos. Estuvimos hablando y él también se había escapado porque la niña de la casa le trataba como una muñeca. Le duchaba, le ponía coletitas y le tiraba para que cayera a cuatro patas, porque dicen que los gatos caen a cuatro patas. La niña le hizo todo lo que él odiaba. Entonces, después de hablar, decidimos ser gatos vagabundos, pero muy felices, juntos para siempre. Autora: Maien Blasco Olano
SOY UN DELFÍN Estaba en el mar y lo que no sabía era cómo me había convertido en un delfín. Empecé a nadar y a hacer piruetas, saltos… al principio era difícil, pero, le iba cogiendo el truquillo. Pensé que podría conocer los mares, nadar, saltar, de todo. Pero de repente vi un lugar del mar que era muy oscuro y pensé ir a investigar. No veía muy bien, lo único fue que noté una sensación rara y molesta en la aleta de atrás. No podía nadar ni moverme. Intenté pedir ayuda pero no veía a nadie, solo oía a otros delfines pidiendo ayuda. En ese momento me sentía muy mal, no solo porque no me pudiera mover y me estuviera muriendo, sino porque por la culpa de los humanos pasa esto. Pero eso, sí he aprendido lo que se siente y que no tenemos que ensuciar los mares ni otras cosas. Pensaba que me iba a morir pero no fue así, un grupo de humanos que rescataban animales marinos me rescataron.
Naroa
SOY UN PASTOR ALEMÁN
Cuando me desperté me vi en una cama que no era la mía, era pequeña y estrecha...me asusté porque me di cuenta de que ya no era una persona. Miré a mi alrededor y vi a unos policías, y me dijeron: Vamos Toby -con una voz muy gruesa-. Sonó la alarma y me subieron al coche. Yo me eché en al asiento y fuimos al sitio donde había ocurrido la desgracia. Uno de los policías me dijo: Toby, olfatea. Yo por no hacerle el feo me puse a oler. Me había convertido en un gran olfateador, podía oler cosas que estaban muy lejos con facilidad. Me dieron un pasamontañas que era del chico, lo olí un poco y me puse a andar a donde mi nariz me llevaba y me llevó hasta el criminal. Después de acabar volvimos hasta el cuartel y me dijeron: Toma Toby, te lo mereces -y me dieron lo que para un perro normal sería un premio, un hueso. A mí nunca me habían gustado los huesos, pero lo cogí y me fui hasta mi cama, y lo dejé. Me preguntaba a ver si ahora que no era un humano me gustarían nuevas cosas y me dejaran de gustar otras, así que lo probé, me encantó. Me gustaba mi nueva vida, era buena porque no tenía que trabajar mucho, podía descansar a menudo, lo único que no me gustaba de mi nueva vida, era que no estaba con mi familia y eso me hacía para atrás. Pero en fin estaba contento, era una alegría ser un perro.
Autor: Alejandro 5º B
Soy un pájaro azul El otro día estaba en el tejado con mi amiga Rakel, es un pájaro como yo, nuestra diferencia es que yo vivo con mis padres humanos, como yo lo era antes, y ella no. Mis padres no saben quién soy yo, pero creo que me quieren. -Estoy harta de que me obliguen a comer tanto-me dijo Rakel. -Tienes que avisarles de alguna manera, si no, te vas a morir. -Lo sé, he intentado decírselo pero, no me entienden y me dan más. Esa tarde me contó todo lo que comía cada día y era mucho. Al día siguiente Rakel no vino a verme, ni al siguiente, ni una semana después. ``-A lo mejor se ha aburrido de mí-pensé.´´ Pero un día, dando uno de mis paseos, sobrevolando un parque, vi un pájaro muy triste al lado de un montón de tierra. -¿Qué te pasa?-le pregunté. -Mi amiga Rakel, que es un pájaro como yo, se ha muerto porque le han dado demasiado de comer. Sus amos la han enterrado aquí- dijo muy triste él pájaro. -Yo también tengo un amigo que es un pájaro, se llama Rakel y le dan mucho de comer, que casualidad. -¿Es un pájaro amarillo? -Si. ¡Oh no! ¡Es mi amiga Rakel la que se ha muerto! -Lo siento-dijo el otro pájaro. Pero yo no le preste atención, tenía que convertirme en humana de nuevo, si no, me moriría yo! Cuando llegué a casa, estaba mi madre en la cocina. Yo intenté hacerle algún tipo de seña para que comprendiera que yo era su hija, pero, no me comprendió. Me eché encima de la mesa sin saber qué hacer. De repente, a mi madre se le iluminó la cara, me cogió muy suavemente en las manos y me susurró: -Sé que eres tú, tranquila, te ayudaré. ``-¿Sabrá que soy yo?´´pensé. El veterinario me observó y cuando me levantó el ala, vio algo que le confundió la expresión. Note un pequeño pinchazo y me quitó una diminuta bala. Una semana más tarde llegó una carta para mi madre. (Hay que decir que durante esa semana mi padre y mi hermana le llamaron loca y lunática 4 veces cada hora por lo menos. Después de que dijera que sabía que yo era su hija creían que se había vuelto loca.) En la carta decía: Hola:
Sabemos que esa bala es de un científico loco que ha inventado un artilugio y ha ido disparando por la calle. Venid a nuestra consulta mañana, el 25 de agosto a las 4:45 de la tarde. Escrito por el veterinario. -¡Pero si es dentro de media hora!¡Vamos!-dijo y me cogió en mi jaula. De camino al veterinario noté que mi madre estaba muy contenta pues yo llevaba 3 meses desaparecida. En el veterinario me durmieron y lo que para mí fue 1 segundo resultó ser una especie de operación. Cuando abrí los ojos era una niña otra vez y estaba tan contenta que me fui en brazos de mi madre. En casa se disculparon y me abrazaron. Y todo volvió a la normalidad.
Autora: Malen Esnaola Villate
SOY UN MURCIÉLAGO Me desperté y me convertí en un murciélago. -¡Mis padres me han echado de casa!- dije yo. Entonces me llevaron a una cueva y allí conocí otros amigos. - Hola ¿Qué tal estás? ¿Tú eres nuevo por aquí, no? - Sí y no sé mucho, yo al principio era un humano y no sé cómo me he convertido en un murciélago, y no les puedo decir nada porque no me van a entender.-Mira solo tienes que cazar algunos bichos para comerlos luego y también tienes que dormir boca abajo ¿Eso ya lo sabrás, no?- dijo su amigo. -Sí, algo ya sé.- dije yo. -Mi vida es muy divertida, puedo volar y ser libre sin ninguna preocupación por los deberes o por el colegio. Es muy divertido, solo que echo un poco de menos mi familia, y no es muy rico comer insectos. Volar por la noche me da miedo, pero por lo menos puedo ver en la oscuridad. Las alas tampoco están mal, y me gusta volar y ser tan pequeñita. También tengo un buen oído ya que también me ayuda para orientarme en la oscuridad. Ser un animal no está mal, pero ser un humano, tampoco. Ver la tele, jugar a videojuegos, comer comida comprada en la tienda, no cazada por ti mismo… -Hay muchas cosas que echo de menos, aunque las puedo ir olvidando, porque cuando vuelva no me van a reconocer.Un día fueron unos montañeros a una expedición a la cueva, y yo tenía un collar con mi nombre y cuando lo abrías estaban las fotos de mi madre y mi padre. Me llevaron a la policía para que ellos me llevasen a mi casa, pero ellos no me querían a mí como un animal si no como una persona normal, pero no me iban a abandonar. Me acogieron muy bien en casa y yo me quedé muy contenta al saber que todavía me querían.
Autora: Amalur 5º B
SOY UN TIGRE Un día que estaba con mis amigos, de repente empecé a convertirme en un tigre. La gente que estaba en la calle, igual que yo, se asustó. Mis amigos, sorprendidos de lo sucedido, llamaron a los cuidadores de animales y me llevaron al zoo en un camión. Llegamos al zoo y me metieron en una celda con otros tigres, yo, con hambre, rugí pensando que me traerían comida y así es, me trajeron un buen chuletón de carne. Estaba muy bueno y cambiando de idea pensé que no estaría tan mal vivir allí. Poco a poco empecé a hacer nuevos amigos algunos eran blancos y otros de mi especie pero una vez me escapé de la celda rompiéndola con mis dientes y fui a buscar diferentes animales. Había de todo, pero lo que más me sorprendió fueron las cebras, ellas me vieron a mí y nos hicimos muy amigos. ¡Me lo estaba pasando tan bien allí!. Pero un día que estaba comiendo carne con mis amigos los tigres, desapareció mi pelo naranja y negro y volví a convertirme en humano.
AUTOR: Danel Garrote
SOY UN TIGRE
Estaba en mi casa. Estaba dormida y de repente me desperté y vi que era un tigre. Asustada salí de casa y me fui a la calle. La policía me encontró y me llevó a la selva. Empecé a caminar y a caminar hasta encontrarme con otros tigres. Era increíble, podía entender el idioma de los tigres tanto como el de los humanos, pero el tigre era el animal que más me asustaba por ser carnívoro. Seguí caminando hasta que encontré una manada de tigres. No me sentía cómoda allí y quería volver con mi verdadera familia. Al volver a casa miré por la ventana y me habían sustituido por una gatita. Le trataban como a mí: le echaban colonia, le ponían lacitos y no le paraban de decir “te quiero te quiero”. Pasaron unos cuanto años. Me volví carnívora, aprendí a vivir en la naturaleza, a atacar a los depredadores a vivir con otros tigres, pero nunca olvidaré cuánto me quería mi madre.
Autora: Naiara 5º B
SOY UN GATO Un día me levanté de la cama, fui al espejo y vi un gato, me tocó la cabeza y, ¡Yo soy el gato! Fui corriendo a la cocina pero todavía eran las 7:30, y me metí a la cama y me puse a pensar muy nervioso: -¿Cómo hablo con la familia y con los amigos?¿Cómo voy a la ikas?¿Cómo juego a rugby? Más tarde, me enteré de que no había ikastola ni rugby, y la verdad me tranquilicé un poco. Ya habían pasado dos horas, y fui a la cocina y encontré a mi aita buscándome como un loco, intenté gritar, hacer señas, saltar… Pero al final mi padre se quedó quieto y vio dos gatos, “yo y el mío. Después pensé: -¡Voy a intentar escribir! Pero tenía una letra horrible y mi aita me llevó a otra casa. Luego me levanté rápido y me enteré de que todo era un sueño y fui llorando y corriendo a donde mi padre y le di un beso enorme
Fin Autor: Xabier G. 5º B
SOY UN OSO PANDA Estaba en China y me puse de negro y blanco para sustraer el extracto de de la caña de azúcar, cuando me convertí en un hambriento y muy obeso oso panda. Todo era muy divertido hasta que oí cinco disparos, uno de ellos me alcanzó, los otros cuatro los oí después, y en vez de ser los furtivos los que se acercaban a mí, eran los de Greenpeace. Entonces me llevaron a un veterinario entonces me metieron al quirófano, me administraron anestesia y me dormí, de todas maneras estuve en coma dos meses y cuando me desperté el poni mágico que vuela por el cielo y la mina tortuga me llevaron al fantabuloso mundo de la imaginación donde vi a la cobra taka-taka y portales a todos los mundos de videojuegos y todo lo que se le ocurriera a mí, el oso panda. Fin (Parece mentira pero esto todo lo he soñado hoy)
Autor: Oihan
SOY UNA TORTUGA Un día soleado, fui a la playa, yo era una niña normal y corriente pero ese día me metí a bañarme al mar y de pronto me convertí en una tortuga, perdí el conocimiento y se me enganchó una bolsa de plástico en la aleta. No podía moverme. Al día siguiente llegué hasta la orilla de la playa arrastrada por las corrientes del mar y un niño que fue a bañarse me rescató me quitó la bolsa de la aleta y me metí otra vez al agua, porque el niño me quería llevar a su casa. Yo no sabía qué hacer, porque tenía mucho miedo, fui a donde estaba mi familia y les conté lo sucedido, me dijeron que no saliera de casa porque había muchos tiburones que ya se había comido varios miembros de mi familia. Yo no les hice caso y salí, me comí una bolsa de plástico pensando que era una medusa y era tan grande que me quedé atrapada dentro, no me podía mover. Vino un tiburón, me quitó la bolsa y cuando iba a comerme salió mi padre y me rescató. Nunca volví a convertirme en humano. AUTORA: June
Soy un gato
Me desperté, estaba todo estaba oscuro, salí del pijama entonces vino mi hermano corriendo por el pasillo y saltó a donde mí diciendo: aquí está mi gato. Mi madre gritó ¡¡¡¡ASIER!!!!, yo intenté decirle algo pero solo me salía ¡Miau, miau, miau! Entonces dijo ¿Por qué hay dos gatos? y mi hermano me decía que tenía que hacer pis en una caja de arena. Me llevaron a una tienda de animales, allí me metieron en una vitrina. Pasó un mes y me cogió una pareja, parecían majos. Pero luego se portaban muy mal conmigo. Al final mi madre se dio cuenta de que me había transformado en gato. Me cogió y al darme un beso me volví a transformar en niño.
¡¡¡FIN!!!
Autor: Asier
SOY UN CERDO Soy un cerdo que vivía en una granja al lado de un pueblo, que se llama Campezo. Un granjero, me daba de comer una comida basura, para él todo lo bueno, y para mí una sopa de bruja que hacía él. Él podía salir y pasear por toda la granja, sin embargo, a mí, me tenía metido en una valla. Alguna vez conseguía escaparme y perseguía a las gallinas, cosa que me encanta, tanto como revolcarme en el barro. Ahora mi vida ha cambiado, el granjero me vendió y una chica llamada María me acogió. Vivo en una ciudad llamada Madrid. No me gusta nada, es peor que estar rodeado por una valla. Cuando vamos de paseo me lleva con una correa, se cree que soy un perro, solo falta que me tire un palo y que pretenda que lo recoja. Me lleva al parque, y como no le gusta que haga agujeros en la tierra, me puso un piercing muy bonito en la nariz. Creo que es porque cuando voy a hacer un agujero me molesta y así es como he dejado de hacer agujeros en el parque. Aunque me quiere mucho, añoro el revolcarme en el barro, perseguir las gallinas y todos mis amigos de la granja.
Autora: Maialen
SOY UN TIBURÓN MARTILLO Iba nadando tranquilamente por el mar y de pronto una enorme red me sacó del agua y empecé a retorcerme, conseguí escapar y me fui de allí. Al rato me encontré a una bandada de delfines y me acerque a ellos con intención de preguntarles dónde estaba. En cuanto me vieron salieron pitando aterrorizados. De pronto noté un pinchazo y me dormí. Me desperté en un acuario rodeado de peces, intenté huir pero me choqué contra algo invisible. Seguí así un buen rato chocándome contra el cristal. Cuando entraron los cuidadores a dar de comer a los demás tiburones mi instinto animal se despertó, nadé hacia los cuidadores, abrí la boca y empecé a de devorarlos, los demás tiburones se unieron. Cuando acabamos me di la vuelta, allí estaba un buzo apuntándome con un arpón y de repente me disparó. Al momento me desperté, estaba en mi cama, abrazando a mi peluche de tiburón martillo ¡había sido un sueño!
Autor: Hodei 5º B
Soy un cerdito Me desperté entre pajas en una granja. Me trajeron para desayunar agua yo de inmediato grité: -¡No es justo! ¿y mis cereales? - todo eso diciendo: ¡oink! Dos segundos me dieron para beber el agua, me cogieron en brazos y me llevaron a la feria del pueblo en un tractor. Una familia necesitada me adoptó, no como mascota, si no como comida. Esa misma noche me llevaron a la cocina, el padre fue a por el cuchillo jamonero, mientras tanto vino el niño de esa casa y me llevó al monte; me dijo que me quedase unos días que iba a casa a convencerles de que no me mataran. Un par de días después el niño vino con una correa y me dijo: -¡Bienvenido a casa cerdito!
AUTOR: ANDONI ORTIZ DE ZÁRATE.
SOY UN PANDA Me desperté y vi que tenía garras y mucho pelo negro y blanco, miré alrededor y estaba en un recinto cerrado. Yo no entendía por qué estaba ahí, pero lo estaba. Vi un reloj, en el que ponía que eran las 9:29 am y al ser y treinta, una persona me dio de comer y yo intentaba decirle que era una persona. 30 minutos después empezó a entrar gente y en ese momento comprendí que era un oso panda y que ¡estaba en el ZOO! pensé cómo les podría decir que era un humano, al final pensé que tenía que escape a una hora prevista, las 10:00 pm, después de comer hojas de bambú... Ahí empezó a él problema: esquivar a los guardias y a los cuidadores, había un niño en la salida y me vio, entonces es cuando me dormí más o menos las 11:00 pm. Al final me desperté en un entorno oscuro en el que escuché: ¡Aquí está el cargamento más frágil, un oso panda! No había duda, era yo de quien hablaban. Escuche un avión y me asusté. Abrieron la caja y me metieron en una sala acolchada de 5
***** creí, porque había de todo bambú y sus hojas,
agua, un jacuzzi… Me dejaron en un bosque de bambú donde intenté sobrevivir día a día, al atardecer encontré a otro panda que se llamaba Paco. Los dos nos hicimos amigos, y sobrevivimos juntos los dos, día a día sin parar e invernábamos cada año juntos en un agujero para no pasar frío. FIN
Autor: Hegoi
SOY UN PERRO Yo era un simple perro pastor Alemán, pero no era como los demás, no ladraba a la gente, me dejaba acariciar y era muy majo. Cada mañana iba a una escuela, allí me daban un poco de su almuerzo, me acariciaban, etc. Pero eso se terminó un día, cuando el director me echó. En ese momento se acabó mi buena vida, más o menos, comida no me daban pero caricias me seguían dando. Una adolescente de 15 años, cada día les decía a sus padres a ver si me podían adopta, que quería un perro. Pero los padres le decían que ya era demasiado mayor para pedir esas cosas. Quedé con mis amigos para hablar de la situación. Max me dijo que me rindiera pero Orhi me dijo que la adolescente salía todas las noches y que casi todas no le atropellaba un coche de milagro. Cuando llegó la noche la adolescente salió y volvió a las 3 horas. Esta vez por casualidad, le iba a atropellar el coche ya que estaba borracho el conductor. Si no me llego a pegar el ladrido, no se habría quitado la adolescente. Los padres de la adolescente me adoptaron para darme las gracias. Y volví a vivir feliz. Autor: Gorka
SOY UN CONEJO Una bonita tarde de sábado, me fui al bosque con mi amigo el puercoespín, unas golondrinas y un castor. Ese día me surgió un pequeño imprevisto: cuando iba hacia el bosque, tuve que pasar cerca de una granja. Aquel día, el maldito granjero me divisó, y me dio una paliza, porque creía que me había comido todas las zanahorias. Pero, sin embargo… ¡fue el perro! En consecuencia de eso, llegué 20 minutos más tarde a la reunión con mis amigos. Cuando llegué al punto de encuentro, me encontré a todos mis amigos muy, muy enfadados. Nada más llegar, les informé de lo ocurrido. Tras escuchar la noticia, me perdonaron. Estuvimos hablando de lo que hicieron mientras yo no estaba. Entonces, llegó un pequeño ratón. Y dijo: -Por favor, escuchadme, acabo de ver al granjero comiéndose a un conejo. Nada más escuchar eso, me alteré. Y dije: -¡Lo veis, los humanos son unos idiotas, nos matan para comernos! Y además, ¡se creen que los conejos somos unos peluches! ¡¡¡PERO NO LO SOMOS!!! Todos los humanos son unos egoístas, están contaminando nuestro precioso hábitat, ¡el bosque! Encima, dicen que su vida es dura. Si se imaginasen como es la mía… Autor: Eneko
SOY UNA LOBA Como siempre era un día normal, yo estaba en mi cuarto, escuchando música se hizo de noche, y mi madre me llamó para cenar, después de cenar me fui a mi cuarto, y me senté en la cama para ver la tele. Me estaba quedando dormida, y de repente me empezaron a crecer las uñas, las orejas, se me alargó el morro, los dientes los tenía afilados y estaba cubierta de pelo. Cuando mis padres se dieron cuenta, me cogieron del pescuezo y me tiraron a la calle. Yo no me creía lo que estaba ocurriendo, y dije… -¡¡¡¡BIEN. Soy una loba!!!! Era una sensación de, miedo y felicidad. Empecé a andar, porque andar me ayuda a pensar, y de repente, empecé a escuchar una sirena. Pensaba que era la ambulancia, pero eran los de la perrera. Empecé a correr todo lo que pude, y sin darme cuenta, me adentré en el bosque. Encontré una manada de lobos. Les pedí ayuda pero no querían ayudarme, empezaron a arañarme, y salí por patas del bosque. Cuando mis padres se dieron cuenta de que era una loba, salieron a buscarme. Cuando estaba caminando me encontré con mis padres. Me abrazaron, me ducharon, y me quede así para siempre pero estoy feliz.
Autora: Enar Vilar Garcia 5.B
Soy un perro Me encontré con 2 perros Pastor Alemán y un Chiuaua y yo era un Bulterrier. Una vez me hice amigo de dos perros y siempre quedamos en el parque y hoy vamos a hablar sobre cómo nos tratan nuestros dueños. Empezará el chiuaua. A mí me tratan bien y me dejan hacer lo que quiera. El pastor alemán dijo: a mí me tratan bien pero comer también y no me dejan hacer lo que quiera. Ahora yo: A mí igual que el chiuaua me dejan todo.
AUTOR: AARON
SOY UN PERRO Soy un perro. Me vendieron en una tienda de animales a una familia muy feliz con dos hijos, uno de 10 años y otro de 14 años. Después de unos años compraron un gato y se olvidaron de mí. Entonces pensé escaparme de casa para hacer mejores amigos. Me fui a una granja, como no me dejaban quedarme pensé: -Me quedaré en escondidas, pero cómo conseguiré comida? Pensé que cuando se fueran a dar una vuelta...les cogería comida. Lo peor es que me tiraron de un barranco de 70 metros de altura, como yo no soy un gato no caí de pie y morí porque caí de cabeza. Unos científicos encontraron mi cuerpo e hicieron unos inventos hasta que un invento salió bien y me resucitaron, convirtiéndome en un perro robot y por lo tanto me llamaron Perro -bot. Me encantaba ser perro-bot, el héroe de la ciudad y me dije: -Ahora tengo muchos más amigos. Un día vi a mi antiguo dueño, me reconoció y me dijo: -Lur, ¿eres tú? -Sí. Le respondí con mi voz de robot. Me dio un abrazo tan fuerte que casi me rompe los tornillos. Al final me dijo que no me tendría que haber dejado que me hubiera ido de casa y me dijo: -¡Por favor, Lur , vuelve a casa! -Claro que sí. -Le respondí Y desde entonces vivo muy feliz.
Autor: Xabier U.