arrobas #6

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Staff Editora @TrinidadRomero Trinidad Romero Argüello

Redactores @loplau

@RocBlanco

Laureana Lopez

Rocío Blanco

Arte

Fotografía

@poncho_poderoso

@sacchcasale Sabrina Casale

Gonzalo Argüello

Producción Digital

Maquillaje Fiamma Ruffo

@elgildegerard Gerardo Gil

Humor @Javilafont

@JulietaArroquy

Javier de la Fuente

@Ornitorrincus

Julieta Arroquy

Ornitorrincus

Colaboran en este número @damicoscia

@Bigote_Falso

@guaschetti

@Ms_MacPhisto

@DelCorrector

@ismestre

@ElTopoErudito

@unServidor

Damián Coscia

Delco

Sebastián Culp

Ignacio Sánchez Mestre

@Mic_y_Mouse Santiago Vallesi

@mauroribot Mauro Ribot

Javier Guaschetti

Catriona

El Topo Erudito

@Ciudadilustre

Pablo

@cristianturdera

Ciudadano Ilustre

Cristian Turdera

@Razaneth

Nazareth Benuzio


Sumario Número 6 - Año 2 - Junio de 2013

Editorial  /  4 #CuentoCorto  /  8 #PosicionesTextuales / 12 #LugaresComunes  /  16 #ListoLoDijo  /  20 #EnLaVidaReal  /  38 #InvitadoEspecial  /  40 #UnaBuenaObra  /  42 #Cuestionario

/ 46

#Pocofologüers

/ 50

#EsTodoRisas  /  52 Muchas gracias

/55


arrobas

Editorial arrobas #6 En el número pasado dije que no sabía escribir editoriales. En este, confieso algo distinto: no quiero escribir editoriales. Contrariada por esta situación -al fin y al cabo soy la editora de esta revista y, por ende, quien tiene esa responsabilidad-, le comenté mi problema a algunos amigos. Uno me ofreció de escribirla por mí, pero no me pareció muy ético. A otro le hablé por Facebook pero no me contestó, aunque decía “Visto”. El último me dijo que me dejara de romper las pelotas y la hiciera igual. Me pareció una recomendación acertada así que la seguí y acá estoy, escribiendo la editorial de la sexta edición de esta revista íntegramente twittera. Como por estos días está cumpliendo su primer año, en realidad, esta es una editorial que nunca podría haber dejado de escribir. Porque necesito aprovechar este cumpleaños para decirles muchas, muchas gracias a todos los que nos leen, colaboran, siguen, apoyan y alientan este proyecto. Porque sin ustedes no habría nosotros. Ahora sí: ¡arrobas las copas!

Por @TrinidadRomero Trinidad Romero

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arrobas

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Decir “hdp” no t alguno. Hay que DE PUTA, con br y si es posible, e -6-


tiene impacto e decir HIJO ronca en la jota escupiendo. / @Ms_MacPhisto

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#CuentoCorto

celos Por

@eltopoerudito El Topo Erudito

―No conozco los celos, pero tampoco la confianza.

nuestros diálogos y volví a darle importancia, pero en sen-

Fue lo primero que me dijo cuando nos sentamos frente a

tido inverso. Yo nunca había sentido celos, sí desconfianza,

frente, en una mesa demasiado chica de un bar enorme y

y no quería vivir en un estado policial dentro de mi casa.

desierto. Pensé que había elegido ese sitio por temor a que

Por eso me dio un salto el corazón cuando Mara bajó la voz:

yo fuese un fiasco. No era una cita completamente a ciegas,

―¿Son celosos?

porque nos habíamos visto en fotos y teníamos amigos en

Estábamos cenando los tres en esa hora indecente en la que

común. Pero nunca nos habíamos cruzado ni hablado más

cenan los norteamericanos, con el sol aún arriba y los sen-

que unas palabras por teléfono. Aún no llovía.

tidos despiertos. Era en nuestro comedor-estudio-living.

Otra tarde me dijo que me amaba. Yo no supe qué decir ni

Contestamos al unísono que no. Nos miramos. Sonreímos.

qué creer. No parecía una mujer solitaria, ni dependiente,

―A mí los celos me dan morbo ―completó. Yo miré hacia

ni necesariamente desequilibrada. Algunos meses después

mi plato y mi esposa hacia mí.

nos casamos. Dejamos la ciudad primero, el país luego,

Pasó la noche y por la mañana, mientras nos alistábamos,

para que ella pudiera terminar sus estudios. Yo decía que

pregunté si esa tarde regresaría temprano. Siempre contes-

mi trabajo podía ser hecho desde cualquier parte. Eso fue

taba lo mismo:

verdad hasta que tuve que dejar mi escritorio para seguir-

―Lo antes que pueda, Amor.

la por el mundo. Lo cierto es que nos instalamos cerca de

«Amor» había reemplazado a mi nombre. Me molestaba,

Boston. El plan era estar allí dos años, que se hicieron casi

pero lo tomaba como un crédito a mi favor. Sabía que esa

cuatro.

respuesta era un eufemismo para «tarde». Me dispuse a

Yo salía poco del departamento de una habitación que nos

encontrar a Mara en los pasillos a la hora del almuerzo.

alquilaba la Universidad. El idioma no era un

Mi plan era reemplazar la caminata diaria por una entre

problema pero sí las distancias, el calor o el frío y mi vo-

la puerta de nuestro departamento y la de entrada, por la

luntad. Teníamos vecinos. En su mayoría eran más grandes

escalera. Eso me obligaba a pasar por delante del departa-

que nosotros, parejas extranjeras o de estados remotos. En

mento de Mara quien, por cierto, jamás usaba el ascensor.

el piso de arriba vivía una especie de adolescente tardío que

Cuando temí que pudiera escapárseme mientras subía al

estudiaba física teórica o lógica. En el de abajo, una mujer

segundo piso y bajaba de nuevo, limité mi trayecto a unos

chilena, Mara.

siete u ocho escalones de ese tramo. A la media hora ya es-

Mara me gustó de inmediato. No era baja, ni alta, ni her-

taba sentado, listo para pararme si escuchaba pasos en el

mosa. Un gesto, un movimiento de su boca, me perturbó en

vestíbulo de la planta baja. Nunca fue ella. Cuando la hora

cuanto lo vi y aunque no era algo que hiciera con frecuen-

se volvió imprudente, entré a mi casa de mal humor. Poco

cia, me provocó añorarlo. Comencé a pensar en Mara a es-

más tarde llegó mi esposa. Cenamos y fuimos a la cama. Tal

condidas de mi mujer. Tenía presente la frase que inauguró

vez nos abrazamos. Dormí mal.

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arrobas

Al día siguiente repetí la rutina. En una de las primeras

―No creo en la culpa. Hablemos.

subidas me topé con Mara. Iba apurada. Me saludó con un

―¿Ahora?

beso y siguió su camino. La seguí. Balbuceé. No recuerdo la

―Ahora.

excusa, pero era algo de unas impresiones. Cuando seguir

―No digo que no lo haya pensado.

reteniéndola era demasiado forzado, la dejé ir. Supe que se

―No lo digas.

había inquietado. Fui hacia el parque, contento.

―Cuando estás nervioso te da la verborragia.

Pasaron dos o tres días y Mara volvió a cenar con nosotros.

―Sí. Pero no estoy nervioso.

Mi esposa se fue a la cama a estudiar y la música permitía

―Está bien. ¿Qué propones?

hablar sin que ella escuchara.

―Lo que quieras. Pero que sea enseguida.

―¿Qué fue lo del vestíbulo?

El diálogo terminó sin estridencias y cada uno se fue. Al día

―¿Qué cosa?

siguiente yo estaba apocado. Traté de disimularlo, pero mi

―Vamos.

mujer lo notó y me endilgó un resfrío incipiente. Era mar-

―Sabés lo que fue.

zo y yo nunca me enfermo en otoño. El arrepentimiento

―Claro, por eso lo pregunto.

asume formas raras, pero la de esta vez era inédita. O quizás

―Te confundes.

no fuese arrepentimiento, sino ansias. Siempre me angus-

―No creo.

tiaron los deseos cumpliéndose.

―No digo que no sea por mi culpa.

Las torturas se sufren en el cuerpo, pero ―esto lo leí en alguna parte― se perpetúan en la mente. Es más profundo el miedo que el dolor. No hice más que pensar en los planteos eventuales de mi mujer, durante todo el día. Me preocupaba menos mentir que no advertir sus sospechas. Quería evitar a todo costo un reproche inesperado. Hice y destejí decenas de conversaciones. Lloré. Respiré hondo. Me sentí un imbécil y un superhombre. No pude leer, ni escuchar la televisión, ni cocinar. Dejé que las horas me traspasaran. No vi a Mara sino hasta dos mañanas después. Nunca sabré si nos evitamos o fue casualidad. El encuentro fue en el ascensor. Ninguno de los dos solía usarlo. Yo arrastraba una molestia en el metatarso derecho y ella no sé. Más tarde eso abonó la teoría de la evitación, pero en ese momento solo me puse contento, o nervioso. Mara me saludó de palabra. Yo no atiné a besarla. Ella bajó en su piso y yo continué hacia el mío, pero no bajé. Presioné el botón para cerrar las puertas y luego el del primer piso. Golpeé su puerta. Abrió mi esposa.

El escritor (@eltopoerudito) y el ilustrador (@cristianturdera) de este cuento, de lunes a viernes comparten una viñeta en @ElTopoIlustrado.

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¿Te gustó? ¿Y sin tilde

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? e?. / @eltopoerudito

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#PosicionesTextuales

MÁS ABURRIDO QUE TWEET PATROCINADO Por

@damiancoscia Damián Coscia

Desde que los medios son un negocio, hay más. Desde los más grandes y masivos hasta los caseros. Así las cosas, las marcas tienen que entrar en la realidad de alguien que no sólo cambia la cerradura a cada rato sino también las puertas, porque se mueve libremente entre sus 3 pantallas, eligiendo cuándo, cómo y qué. El famoso target nunca se movió tanto.

pudo conectar con los usuarios de una manera más orgánica: En Inglaterra, cuando la barra de chocolate Snickers abrió su cuenta oficial @SnickersUK, no pasaba de los 825 followers. De manera que bajo un nuevo concepto: “NO SOS VOS CUANDO ESTAS HAMBRIENTO” lanzaron una campaña que inyectó vitalidad y dio pertenencia a la marca en un medio que, hasta ese momento, le había resultado ajeno. Lo lograron con la ayuda de dos celebridades, ambos con un tono y una personalidad pública muy definidos, percepción que se veía reflejaba en cada uno de sus tuits. Ellos fueron la modelo Katie Price (en ese momento con 1.5 millones de followers) y el futbolista Rio Ferdinand (con más de 1.9 millones). La idea se puso en marcha con un simple tuit de cada uno:

Puntualmente en Twitter, el desafío es aún más difícil. Las marcas buscan la atención de personas que eligieron ir por más, asumiendo el rol de emisores y, en muchos casos, haciéndolo muy bien. De hecho y si comparamos por cantidad de followers, lo hacen con más éxito que muchas cuentas oficiales de marcas masivas. Un hecho que no es extraño cuando observamos que las marcas tienen un lenguaje que no siempre, ni necesariamente, concilia con el tono de Twitter y menos con el de los tuiteros. Esta brecha, más o menos grande según el caso, mantiene sólo por ahora a la mayoría de las marcas en un lugar frío de Twitter.

Katie Price/Jordan@MissKatiePrice Large scale quantitative easing in 2012 could distort liquidity of govt. bond market.#justsayin

Aún en estas condiciones, hay productos ubicados en un plano de realidad soñada. Para nombrar algunos ejemplos: Branca, Coca Cola, Don Satur, Toddy, Campari. Todos productos de marcas líderes, con mucha historia, privilegiados que son mencionados habitualmente en forma espontánea y positiva. Pero son pocos; para todo el resto los riesgos son grandes, complicados y más bien jodidos. No hay zona segura para nadie en este espacio donde nació y creció el jugador que, poco a poco, convierte a su @ en su propio medio.

Básicamente, Katie Price estaba tuiteando sobre temas muy complejos de finanzas y economía: “Alivio cuantitativo a gran escala en 2012 podría distorsionar la liquidez del mercado gubernamental de bonos. #SoloUnDecir”. El contraste del tuit con el tono habitual de la cuenta generó un efecto viral inmediato. Tanto, que además de ser catapultado en los principales diarios y programas de TV el tema llegó a ser motivo de bromas en el Parlamento inglés.

Si bien a gran escala, aquí va un ejemplo de una idea que entendió mejor la red y sus tensiones, por lo que

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#InvitadoEspecial

Por su parte, Rio Ferdinand tuiteaba sobre tejido:

último tuit, el mismo del lema de la campaña: “No sos vos cuando estás hambriento.@SnickersUK” y de esa simple manera revelaron que habían sido parte de la estrategia de marketing.

Rio Ferdinand @rioferdy5 Can’t wait 2 get home from training and finish that cardigan.

La campaña fue un éxito en muchos y valiosos sentidos. Snickers entendió el medio y lo hizo desde un pensamiento integrado, demostrando que en Twitter una marca crece mejor desde sus propios usuarios, haciendo un uso ingenioso, espontáneo y genuino de la red. Y además entendió que lo que más le gusta consumir a Twitter, es realidad.

El futbolista escribía: “No puedo esperar a llegar a casa después del entrenamiento y terminar ese cardigan.” El efecto fue el mismo que con Katie: los medios masivos amplificaron el tema a escala nacional. En este punto se hizo propicio el cierre de la campaña. Desde sus cuentas oficiales, ambos mediáticos postearon un

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Si sos de los haciendo com dedos, no sĂŠ por que me incline cuando digo alg - 14 -


s que hablan millas con los r quĂŠ te molesta e a un costado go en itĂĄlicas. / @unServidor - 15 -


#LugaresComunes

DESDE DÓND

No te pelees con un creativo publicitario; dicen que siempre revista, que de un día para el otro hacen genialidades como es

Este es el centro de operaciones de la dupla más codiciada de la publicidad argentina. Y cuando ellos se van, nos prestan las reposeras. Muchos envidiarán mi oficina (EN SUS CARAS, BANDA DE MONOSABIOS), pero no paso todo el día acá. Además, a los obreros de enfrente se les ve la raya del culo. Me gusta trabajar y tuitear desde la terraza especialmente en verano, cuando las vecinas salen a tomar sol. Digamos que esa es mi fuente de inspiración: bikinis. Sí. Bikinis y culos de albañil.

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@mauroribot

La felicidad es un invento del hombre para explicar por qué los perros Follow

mueven la cola. 39 minutes ago vía @arrobasmag

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arrobas

DE TWITTEAN

saben cómo disculparse. Mejor, pediles que participen en tu sta. Con ustedes, la dupla creativa @razaneth y @mauroribot.

Todo lo que escribió Mauro es mentira.

@razaneth

En realidad, somos fisicoculturistas e hijos de Maru Botana como vos, como todos. Cada tanto nos juntamos en la terraza de un lujoso edificio (que por contrato no puedo nombrar), para pensar formas de hacernos millonarios sin hacer nada, pero terminamos haciendo nada. Casi todos los tuits se me ocurren mientras trabajo, por eso tuiteo poco.

—Amor, ¿cómo te fue en el curso de buenos modales? Follow

—Como el orto. 39 minutes ago vía @arrobasmag

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Es «o sea», no « «en serio», no « «a través», no « «através». Es « «aveces». / - 18 -


«osea». Es «enserio». Es «a travez» ni «a veces», no @DelCorrector

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Por Trinidad Romero Argüello

Ph Ariel y Sebastián Vocalino

@TrinidadRomero

@LosVocalino

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#ListoLoDijo

Carolina llega tarde a la producción de fotos. Se ríe, se muerde el labio de abajo, se toca el pelo, camina, deja sus cosas. Habla y lo primero que pide son disculpas. Después, sigue hablando de esto, de aquello, de lo otro, de cualquier cosa. Es extraordinario: es exactamente lo que uno se imagina al leerla bajo el arroba @Ms_McPhisto en Twitter. Un dato para sus más de catorce mil followers: su voz es áspera, gruesa y bien definida. Tiene 25 años y hace un par que estudia para ser traductora de inglés. Cada dos o tres oraciones suelta alguna muletilla en ese idioma. No conoce a ninguna de las personas que estamos en el set ni tampoco había visto la ropa que en unos minutos se tiene que poner. Sin embargo, no parece intimidada. Así, suelta, cuenta que sus inicios en Twitter coincidieron con la época en la que salía con un chico que, tiempo después, la dejó. Allá por 2010, todo lo que ella sentía, o le molestaba, o le gustaba de ese chico, lo escribía en la red social. Incluso, una vez escribió que había estado con otro. Lo que no tuvo en cuenta es que él podía haber estado leyéndola. Lo que pasó fue que él la estaba leyendo. ¿Podemos hablar sobre tu ex? Sí, por supuesto. Contabas que tu historia con él tuvo mucho que ver con tus comienzos en Twitter. Lo conocí justo cuando abrí la cuenta. Usaba el hashtag #pito para contar mis desventuras, al mejor estilo Bridget Jones. Era como una metáfora, ponía “#pito” para no decir su nombre. Nunca lo voy a decir. Salimos un año y un día me dejó. Me hizo mierda. ¿Cómo te enteraste de que te leía? Tenía (todavía la tiene) una cuenta que manejaba con otro amigo para hacerle publicidad a su blog de crítica de cine. Cuando estábamos en el ocaso de la relación y yo hablaba mucho sobre nosotros, él me espiaba. Yo no estaba al tanto de eso. Así se enteró de muchas cosas que yo a él no le decía en la cara. Hacía catarsis en Twitter porque creía que él nunca me iba a leer. Pero me leyó. Una vez, mientras todavía salíamos, conté que había ido a un cumpleaños y me había apretado a un twittero. Un mes después me confesó que me leía. “Yo sé todo”, me dijo. Después, cuando me leía, se tenía que comer mucho la bronca que le daban las cosas que yo escribía. Pobre. En realidad, no está mal lo que hizo, el dejarme. En todo caso, fui yo la que se portó

mal con él. Lo que pasa es que él nunca se hizo cargo de que yo era su novia. Si lo hubiese hecho, me hubiese portado de diez. ¿Lo volviste a ver? Lo crucé unos meses después y me hice la linda. Dijimos cosas como “Ey, ¡qué hacés! Hace mucho que no te veo”. El otro día me apareció en gtalk y me agarró una crisis de minita, de llorisquear. Lo llamé a mi mejor amigo, Augusto, que vive a una cuadra de mi casa, para que me atara las manos y no me dejara hablarle. No lo tenés superado. No. Igual es muy reciente y fue el único hombre que me dejó. Suena a diva, pero es en serio. Siempre dejé yo y no sabía lo que se sentía al revés. El dejador se siente más culpable y no le da para demostrar que está pasándola bien. En cambio, el dejado, como es mi caso, tiene licencia para mandarse cualquiera. En ese sentido, tiene su parte divertida. ¿Saliste con cualquiera? ¿Con twitteros? Salí con cualquiera, pero no con gente de Twitter. Soy virgen de twitteros y me enorgullece decirlo. Estoy invicta.

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arrobas

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#ListoLoDijo

¿Por qué que te enorgullece? He conocido mucha gente que estuvo con algún arroba. De hecho, todos mis amigos se comieron a alguno/a y son pocos los que la hacen bien, “con candadito”, como dicen algunos. Otros, en cambio, ventilan su historia “en la tele”, en el TL, y todo el mundo se entera y comenta. Actualmente, hay un triángulo amoroso que hasta hace poco se estuvieron tirando muchos palos. Yo tengo a los tres en la misma lista y leo todo.

¿Quiénes son? No se puede contar, pero son muy conocidos los tres. Son dos mujeres y un hombre. Retomando lo de por qué estoy orgullosa de no haber estado con twitteros, es más que nada por eso de haber vivenciado historias que terminaron saliendo muy mal. Obvio que hay otras que salieron bien, como la de @Sin_Nanita y @melllo_m.

Carolina cuenta que, a diferencia de muchos otros, su primer tweet no fue “no entiendo esto”. Abrió la cuenta por recomendación de una amiga y, al principio, escribía todo en inglés, por lo que sus seguidores eran casi todos norteamericanos. ¿Cómo te fuiste involucrando con los twitteros de acá? Empecé a ver que había argentinos que estaban en Twitter y me puse a leerlos. A mis followings más viejos todavía los sigo siguiendo: Lady Gaga, Malena Pichot, a mi mejor amigo Augusto y después a los que yo llamo “los veteranos de Twitter”, que son @MatiildaxD, @Coculo, @Vendodestino y @QuijoteConserva. Cuando abrí mi cuenta, @MatiildaxD era la bomba. Fue la primera en llegar a diez mil seguidores. Lideraba. Todavía sigue teniendo un poco ese rol. Creo que fue porque supo conservar el halo del misterio. No se sabe quién es, si es uno o varios. Nunca dio la cara. Más adelante, empecé a seguir a twitteros más pendejos, con otro estilo. Descubrí a @cebolleti y a @gabuleta. Siempre cuento la génesis de que @DAMIEN__empezó siendo fan mío, yo de @cebolleti y ella de él. Un día nos conocimos y fue como “seamos amigos para siempre”. ¿Cómo fue ese primer encuentro? A Mariano (@DAMIEN__) lo conocí en una Rispé y, muchísimo tiempo después, conocí a @cebolleti porque vino a mi casa con @Babicho. Después de eso nos empezamos a juntar siempre. Cuando vengo a Capital, paro en lo de Mariano. Cuando nos empezaron a pagar Favstar a @cebolleti y a mí… ¿Cómo es eso? ¿Quién se los paga? Una persona que es muy fan. El arroba es @srita_pao. Es una chica de Formosa. Yo no la conozco pero me dijo que me iba a pagar Favstar porque quería que yo tuviera copitas para dar. Creo que podés hacerlo durante seis meses. Todavía me dura. Le doy todas las copitas a @Cebolleti. Hay mucho clientelismo ahí. (Risas.)

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Evidentemente, en Twitter encontraste personas con las que tenés mucha afinidad. ¿Contabas con ese tipo de gente en tu vida antes de abrirte la cuenta? Pensaba que contaba con algunas personas, que eran mis amigos, pero no. Twitter exacerbó mucho lo que yo ya era, pero a mis amigos de la vida real no les gustó mi estilo de twittear, no se la bancaron más. Me decían que me zarpaba mucho. Es gente que me la careteó toda la vida porque, para qué sos amigo mío si yo siempre fui así. ¿Cómo es? ¿De repente te das cuenta de que tengo un humor muy negro? Siempre hablo de ellos como “la gente a la que le pegué una patada en el culo de mi vida”. Pienso que hay cosas con las que sí no se jode y no lo hago. Leí lo que dijo al respecto María Carámbula en el número pasado de Arrobas y estoy de acuerdo. No es que yo le voy a poner un límite a alguien, simplemente elijo no prenderme. Una vez leí un tweet donde se reían del bebé de Carolina Píparo. El hashtag era #palabrasnuncadichas y habían puesto “Mamá, me duele”. No me causó nada de gracia. Ése fue mi límite. Pero me lo puse yo. De lo que otro decida escribir, lo único que puedo hacer si me cae mal, es no seguirlo. Dijiste que lo del bebé de Piparo era tu límite. ¿Todas las muertes lo son? No. Una vez escribí un tweet que no gustó sobre la hija de Pampita. Fue una comparación entre mi computadora que no andaba y lo que le pasó a ella. Escribí que sin mi computadora me sentía como Pampita sin su hija. Fue una comparación pésima, no daba. Lo borré. Me mongomencionaron, me dieron unfollows y me lo merecí. Pero la muerte del Facha Martell, ¡por favor! Con eso sí me causó gracia joder. La verdad es que nunca está bien festejar una muerte, pero Twitter es Twitter.


En 140 caracteres Trinidad Romero Tres twitteros que no hay que seguir. Catriona Fakes de “famosos” que todos saben que no tienen twitter, como Iorio o Lanata. Están vistiendo santos de madera viejo (??).

Trinidad Romero Cualidad que más valorás en un twitter Catriona Que me haga reír en voz alta. No sé si es una cualidad, pero yo busco eso.

Trinidad Romero Dónde desearías vivir. Catriona En Escocia, casada con Mark Renton #doroga

Trinidad Romero Qué es la belleza. Catriona Una pregunta muy Majul, ¿eh? Belleza es mirar I.Sat en pantuflas.

Trinidad Romero ¿Somos tiburones? Catriona Nos creemos tiburones pero somos surubíes.

¿Qué querés decir con eso? Vas a encontrar humor negro que no vas a encontrar en Facebook. Yo twitteo muchas cosas que, en realidad, no diría. En mi casa sí, pero en una reunión con gente que no conozco, hay ciertos chistes que la verdad no haría. Twitter saca lo mejor que tenés porque podés ser más gracioso, tal vez estando cara a cara con gente que no conocés no sos así de divertido porque no te da. Pero también saca lo peor de vos porque estás con un nombre de arroba que no es el verdadero, con una foto que muchas veces no es tuya. A mí me dicen que soy cobarde porque me escondo en el anonimato y tienen razón. No lo voy a negar. Me escondo en el anonimato y desde ahí digo lo que quiero. Pero no lastimo a nadie.

Una vez, hace mucho tiempo, te peleaste feo con @celeross. Ella tenía pica con @gabuleta y con @PiesReef y yo me llevo bien con las dos. En ese momento, @celeross tenía de avatar una foto de unas tetas que bajó de internet. Como yo no la seguía ni leía, no estaba al tanto de que había blanqueado que esas tetas no eran suyas. Entonces, con Gabuleta y Pies nos pusimos el mismo avatar. Ahí ella empezó a agitar con su bando de gente que la defendía, yo tenía el mío. La bloqueé pero igual nos seguíamos tirando golpes muy bajos. Yo sabía muchas cosas de ella, algunos trapos sucios le tiré. Me guardé un montón más que la podrían haber incendiado. A mí no me divirtió para nada toda la pelea.

¿Cómo te enteraste de esos trapos sucios que decís que sabías sobre ella? Había mucho espionaje. Gente que te la careteaba a vos y después iba y le contaba cosas a ella, y al revés. Después, cuando me amigué con ella, blanqueamos todo y toda esta gente quedó pegada.

Trinidad Romero ¿Volverías con #Pito? Catriona No. Ansori for you, querido.

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#ListoLoDijo

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arrobas

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#ListoLoDijo

“Gracias a la intervención de @FedeFFs y @kstabholz que nos seguían a las dos y nos mandaban DMs de “amíguense” nos amigamos”, recuerda. Primero hicieron un pacto de no agresión y después se desbloquearon. Se empezaron a seguir y terminaron chateando durante varias horas seguidas. “Nos dimos cuenta de que estamos obsesionadas por las mismas cosas, de que somos muy separadas al nacer”, dice. ¿Cuánto hay de @Ms_McPhisto en tu personalidad real? Obviamente que Twitter facilita que me lleve más puesto a todo el mundo. Pero soy muy parecida a cómo soy realmente. A mí no me da la cabeza para pensar en un personaje. Hago de mí misma, mi propio personaje. Tal vez algunas cosas que cuento no son verídicas. Lo hago para exagerar al tweet y que impacte más, no porque quiera convertirme en otra persona. Cuando pongo el hashtag #real es porque eso sí me pasó a mí de verdad, no es un chiste. Digamos que escribo un poco lo que me pasa y otro poco lo que me gustaría que me pase. Pero no tuve que componer a @ms_McPhisto. Yo vivo con bronca y así es como twitteo. ¿Por qué vivís con bronca? Porque tengo esa personalidad. Vivo mal. Antes, las cosas negativas del mundo de Twitter me afectaban mucho más. Ahora me tomo todo más para la chacota. Fui al psiquiatra, eso me calmó bastante. Sigo haciendo berrinches porque soy así, pero al menos ahora no me quedo angustiada. Pelearme en su momento con @celeross me ponía muy mal. Se metía mucha gente, de pronto leía un párrafo enorme que había escrito alguien desconocido hablando mal de mí. No me metí nunca más en esa de pelearme así. Si al ver las fotos que salen acá en Arrobas alguno me dice “saliste re gorda”, no me voy a amargar. ¿Quién es el que me agrede? ¿Salió en Arrobas? Porque yo sí. Me gusta agitar, pero después resulto ser una cosita mínima que ni en pedo se la banca.

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¿Empezaste terapia a raíz de los conflictos que surgían de Twitter? Por todo lo que había pasado con Pito y por mi pelea con esos que habían sido mis amigos de toda la vida y de pronto ya no lo fueron más. En ese momento me quedé muy sola. Vivía lejos de mi familia y no tenía a quién ir a llorarle. Estuve tres días sin comer y sin salir de mi casa. Lloraba. Ahí fue cuando empecé terapia. La psiquiatra me dio unas pastillas, pero el mayor trabajo lo hice con la terapia. Hablando. Las pastillas ayudaron, obviamente, pero hasta ahí nomás. Era muy loco contarle a la médica sobre las cuestiones que tienen que ver con Twitter. Bizarro. Pero eso era parte de mi vida y las personas de las que hablaba, las conocí por ahí. Sonaba tonto, pero resulta que esos arrobas ahora son parte de mi vida. Twitter ya es la vida real, para vos. Y sí. Un montón de gente traspasó la pantalla y forma parte de mi vida ahora. Me dejó algo bueno. Algunos piensan que esto es un jueguito. Para mí es algo que leo todos los días, es en donde trato con gente que tiene importancia real en mi vida. Es una red social, no es un juego. Hay mucha gente que se abrió una cuenta hace un par de años y ya le empezó a perder el interés. Hay otra que recién ahora lo está descubriendo. ¿Cómo ves a Twitter de acá a un tiempo? Yo pensé que iba a pasar de moda más rápido. Sigue durando y me sorprende. Creo que da para rato, tal vez para cinco años más. No me gustaría perder el material de lectura que encontré en Twitter. Ahí me entero de todo y más rápido.


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Si nunca muere, creo que será precisamente por eso último. Muchos periodistas hacen que te enteres de las noticias antes de que aparezcan en los diarios online. Con mi vieja tenemos una competencia constante de anunciarnos las muertes de los famosos. Siempre gano porque me entero por Twitter y ella no lo termina de entender. Pero no solamente leo para informarme. También lo hago para divertirme, que es lo que más me gusta. Me encanta la gente ocurrente, entender la mente de otros, como la de @cebolleti, que es genial. En Twitter aprendí a cagarme de risa de mí misma. A que me agredan y que no me importe. Me llegan mil puteadas por día y estoy muy acostumbrada, ya me resbalan. En gran medida, la red social hizo que arrancaras una terapia. Después se convirtió en parte de la propia terapia, en una ayuda. Como un medicamento muy fuerte que primero te hace mal y después te cura. Me volví mucho más impermeable a la agresión. Bardeo con las miserias que a mí también me tocan. Eso es tener sentido del humor. Hay gente que no lo entiende de la misma manera. Si jodo con las recientes inundaciones es porque me estoy riendo de mí misma, que vivo en La Plata. Igual, así como hay gente que te agrede, hay gente que te chupa las medias.

¿Eso también te resbala? No, pero lo odio porque me incomoda. Lo hacen como si yo fuese alguien. ¿No sos alguien? No alguien como para que me chupen las medias. No soy famosa, en todo caso tengo difusión. Y no soy de las más grosas ni de las más conocidas, como sí lo es tal vez @gabuleta. Una vez abrieron una cuenta de un club de fans mío. Le pedí a quien sea que la haya hecho que la dé de baja porque me dio mucha vergüenza. Lo que sí es real es que existe alguien que eligió leerte y eso por algo debe ser. Si volvieses a estar con alguien, ¿volverías a usar Twitter como medio de desahogo? ¡Pues claro! No me hagan elegir entre un macho y Twitter porque pierden los machos.

Agradecimientos a Chinita http://www.chinitaba.com.ar/

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La gente que si gente de los qu tiene el coraz贸n

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igue a mรกs ue la siguen, n re grande. / @ismestre

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#EnLaVidaReal

@equelago y compañía

Hay equipo

@nomandóelarroba

@FacuQuezada

Alejandro Errázuriz

Autofoto

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arrobas

@MascariniMarce y Ayelén

Tatoo para Marce

@otroquenomandóelarroba

@SoyRaimunda

Fabián Jara

Buen día de pelo

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#InvitadoEspecial

¿Qué es el #BirdwatchingTuitero? Por

@unServidor Pablo

Cuenta la leyenda que el tuitero no tiene vida.

sonas para avistamientos (insisto: no hagan cuentas).

Lo cuenta vía Twitter, porque ante todo, coherencia. Y

Más que eso, conocimos gente y compartimos nuestros

hasta tiene razón, si antes definimos al tuitero como un

modestos saberes. Porque las aves tienen eso: ense-

ser que vive en Twitter, o sea, si la perogrullada es enci-

ñan, aunque no lo sepamos antes de haberlo aprendido

ma sobre un ser irreal. Como sea, si Twitter es un lugar,

(?). Por ejemplo, cualquier postura puede ser defen-

el @COAtuiter resulta ser el primer Club de Observa-

dida con un ave autóctona: la fidelidad con el albatros,

dores de Aves que no responde a un sitio geográfico sino

que un macho tenga varias hembras, con el ñandú,

virtual. Y detrás de nuestras cuentas (títeres que si viven

lo opuesto con la jacana, la infidelidad con el baila-

o no, creo inútil discutir) hay titiriteros de carne y hue-

rín (el ave, otro no sé), etc. Y así en cualquier tema.

so juntándose en la naturaleza a observar y reconocer

Aún queda gente que cree que las aves silvestres no

especies en libertad, entreteniéndose allí donde quien

pasan de palomas y gorriones, ambos llegados a la

no tenga vida se aburriría. Porque la no-vida es ante-

ciudad desde el viejo mundo. Sin embargo, Argentina

rior a Twitter, y hasta le sobrevivirá, pese a la paradoja.

suma un millar de especies nativas, cifra más que interesante si consideramos que en un país tradicional-

Todo empezó en pleno auge de convocatorias a even-

mente birdwatcher como Inglaterra residen tantas

tos nocturnos bajo techo, cuando con @franalverja y

como todas las vistas solamente en Costanera Sur.

@tuvedengueyque osamos invitar públicamente a una

De países como aquél (donde la actividad supo ser di-

salida matutina al aire libre. A las 8 de la mañana del

fundida por Guillermo Hudson, nacido en la actual

sábado 3/3/12, aquella búsqueda de otras rara avis en-

Florencio Varela) vienen observadores a conocer el

tre tantos huevos había sido todo un éxito: éramos cua-

nido de nuestro hornero o a ver aves latinoamericanas

tro. Meses después, ya para la tercera reunión de inte-

como el picaflor (que no es ese que te manda DMs).

resados en conocer la belleza del bichofeo o el nombre del que les canta en la madrugada, no me hagan sacar

Aprender a observar sólo cuesta prender nuestros

porcentajes de crecimiento pero ya éramos cinco. Vea-

radares. Y saber tener paciencia: al año de la prime-

mos el lado bueno: duplicamos el número ideal de per-

ra juntada, el #BirdwatchingTuitero ya reunía a casi

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arrobas

“Las aves tienen eso: enseñan, aunque no lo sepamos antes de haberlo aprendido (?) ”

40 personas como en la última salida anterior a esta

que queda mucho por aprender a sus símiles humanos.

nota. Gente sin necesidad de conocimientos previos, apenas con curiosidad por distinguir un chingolo o

Allí, desarrobados, no importa la cantidad de follo-

descubrir cómo puede vivir una tacuarita azul a me-

wers de nadie. Y los de @COAtuiter sólo son miem-

tros del microcentro, se suma a estas salidas gratui-

bros de un Club pasando un buen rato, empezando a

tas donde disfrutar de jilgueros sin jaulas, formando

conocer (primera condición para amar), y tomando

parejas, alimentando pichones, relacionándose con la

noción de la variedad de vida natural que la ciudad es-

flora nativa y compartiendo la libertad con corbatitas,

conde y la red de un frágil ecosistema. Y las estrellas no

cabecitas negras o cardenales, en una armonía de la

son los pajarones sino otros pájaros, de tuits sonoros.

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Para opinar sob cosa hay que te conocimiento, a moral o Twitter

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obre cualquier ener autoridad r. / @Mic_y_Mouse

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#UnaObraBuena

Los Talentos de Agustín Mendilaharzu y Walter Jacob

Miércoles 20:30 y Sábados 23 horas - ElKafka (@elkafka) Lambaré 866, tel. 4862-5439 Entrada general $70

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arrobas

¡TIEMPO, EH! Por

@ismestre

Ignacio Sánchez Mestre

Dos chicos de veintipico, concentrados. Lo primero que escuchamos de la boca de uno de ellos es esa palabra, tiempo. La dice Lucas, mientras Ignacio le responde que ya está. Están jugando pero muy en serio. Una pizarra blanca, un marcador y un soneto que se va construyendo, estrofa por estrofa. Y por supuesto hay reglas, que si no son cumplidas vendrán algunos empujones, insultos y un poco de furia efímera, típica de muy amigos. También hay una especie de relojito que pareciera medir eso mismo, el tiempo. Mientras, toman vino y fuman pipa. Están en el departamento de un amigo, Pedro. El departamento tiene un estilo antiguo y si miramos cómo están vestidos ellos dos, podríamos decir que estamos en otro tiempo, también antiguo. Pero son las palabras que se dicen o las que se escriben las que nos dejan en claro que esta historia no transcurre hace muchos años, es casi actual, quizás de la época en la que estaban llegando los celulares, pero no mucho más. Según el diccionario, talento es el potencial que puede tener una persona en el desarrollo de un conjunto de habilidades. El título es perfecto. En la obra de Agustín Mendilaharzu y Walter Jakob, los protagonistas de esta historia son talentosos sin ninguna duda. Y este potencial va más alla de crear sonetos. Son dos chicos que además de leer, investigar y crear no paran de interrogarse sobre algunas cosas que hacen a la vida diaria. Saben un montón. Tanto, que a Pedro, el tercer amigo, le parece que hay que hacer algo con eso. Mostrarlo, sacarlo afuera. Pero ellos no lo entienden. ¿A quién le podría interesar? Se trata entonces de un talento encerrado. Como si ese departamento gris y sin mucha ventilación hablara también un poco de ellos. Los talentos es una obra llena de capas. De textos, de información, de detalles y de códigos. Es una obra con cuatro personajes y con dos mundos. El de los talentos y el de afuera. Y ese afuera es el que genera tensión. En este caso el afuera lo trae Denise, la hermana de Pedro que llegó luego de dos años de “exilio” en París. Y quizás esta llegada hace que algo en el universo de los talentos empiece a tomar otras formas, no tan perfectas. Y llegan las preguntas. Desde la simples que tendrán que ver con qué hacer un sábado por la noche o cómo acercarse a las chicas sin necesidad de meterse en un boliche a las más complejas que quizás no se enuncian, las que tienen que ver con el conocimiento, los tiempos propios y esa realidad de afuera. Los talentos lleva un tiempo en cartelera, se estrenó en 2010 en Elkafka y desde el sábado 4 de mayo de 2013 inauguró su cuarta temporada. Se presenta los míercoles a las 20.30 y los sábados a las 23, con actuaciones de Julián Larquier Tellarini, Julián Tello, Pablo Sigal y Carolina Martín Ferro y con dramaturgia y dirección de Agustín Mendilaharzu y Walter Jakob. Todos talentosos.

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Verg端enza no e Verg端enza es tr la ventallina de hacer fuerza y n - 46 -


es robar. ratar de abrir e un bondi, no poder. / @Guachetti

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#Cuestionario

CHATEAND

Con @Del @arrobasmag Arrobas

¿Por qué prefiere el anonimato si lo que hace es muy noble? @DelCorrector DelCorrector

Porque me divierte. Además, ¿para qué querrían saber quién soy? @arrobasmag Arrobas

¿En la vida real se expresa tan bien como escribe? @DelCorrector DelCorrector

El habla y la escritura son cosas diferentes. Escribo lo mejor que puedo en todos lados. No hablo como escribo, eso seguro. @arrobasmag Arrobas

¿Cuál es el famoso al que más le corrige los tuits? @DelCorrector DelCorrector

Si respondo eso, expongo a alguien. No lo haré. Lo que sí les comento es que son pocos los que escriben sin errores. @arrobasmag Arrobas

Exponga a los buenos, entonces. Nombre dos, por favor. @DelCorrector DelCorrector

Varios que para mí escriben perfecto: @ElTopoErudito, @FernandoSalceda, @aleberco, @sommelierdecafe y @Angelalerena. @arrobasmag Arrobas

¿Cuál es el plural de semen? @DelCorrector DelCorrector

Por lógica, “sémenes”. No sé la respuesta precisa. @arrobasmag Arrobas

¿Por qué se dice “caries” aunque sea una sola? @DelCorrector DelCorrector

Calculo que tendrá que ver con la etimología. Hay muchas palabras que se mantienen igual tanto en singular como en plural.

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arrobas

DO EN EL TL

lCorrector @arrobasmag Arrobas

¿Qué palabra le anda faltando a nuestro idioma? @DelCorrector DelCorrector

Una que defina algo como “brunch”. Una especie de “desmuerzo” o “almuerzuno”. @arrobasmag Arrobas

¿A qué twittero le gustaría leer respondiendo este cuestionario? @DelCorrector DelCorrector

A @JuanIChela. @arrobasmag Arrobas

¿Cuál es el error más frecuente en la ortografía del twittero? @DelCorrector DelCorrector

No diferenciar porque, por que, por qué y porqué. Otro: escriben “llendo” en vez de “yendo”. @arrobasmag Arrobas

¿Tendría una novia que tenga muy buenos pechos pero que escriba con faltas de ortografía? @DelCorrector DelCorrector

Sí. No me molestan las faltas de ortografía. Con los pechos basta y sobra (?). @arrobasmag Arrobas

Arme una oración con las palabras: mañana, arrobas, sale, excelente, increíble, espectacular, esperada. FF. @DelCorrector DelCorrector

La esperada mañana sale a lucirse para todos nosotros y la increíble Revista Arrobas es excelente. Merecen un espectacular #FF

Cuestionario realizado vía Twitter el 5 de junio de 2013

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Para un pad jamรกs alum con la linter - 50 -


dre, un hijo mbra bien rna. / @damicoscia

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#Pocofologüers

TODOS LOS TUITSTARS VAN AL CIELO Por

@Bigote_Falso Sebastián Culp

Mi nombre es Sebastián. Soy hipertenso, adicto a la soda y nunca pude hacer “willy”* con la bici. Tengo Twitter desde el 2012. Llegué tarde, sí, lo hice cuando ya todos se llevaban sus TL al baño en tamagochis para hipsters, y hasta ya se editaban libros sobre este microblog para ansiosos y expertos en todo. Mi puerta de entrada fue Lloro de Felicidad, el portal de humor absurdo comandado por Esteban Menis. Empecé mirando, merodeando, como un león que rodea a su presa antes de atacar. No se muestra, mira, tantea y espía, evaluando la situación antes de dar el zarpazo. Leía tweets de @fieritacatalano, de @Mic_y_Mouse, de @llorodfelicidad, @trinidadromero. Los estudiaba: analizaba la redacción, el humor; espiaba las charlas, los comentarios. En fin: era un fisgón. “La Ventana Indiscreta” un poroto al lado mío. Hasta que un buen día me dije (a veces me hablo a mí mismo): “Boludo, con todo el estudio que hiciste vas a ser un campIón, hacete una cuenta nau”. Capo. No. Obvio que no. Pero le agarré el gustito, me envicié, me aburrí (en realidad me frustré) y lo dejé un poco. Pero volví, volví del futuro. Me hice amigos, pegué onda con conocidos de conocidos, con desconocidos absolutos, pero no pasó mucho más. Igual me gusta. Sigo. Llegué a 200 followers siguiendo a 200, ojo. No es lo mismo tener 345 followers mientras seguís a 1248, y encima teniendo en cuenta que los followers y los following no son los mismos tipos. O sea, no es el papelón ese de “seguime que te sigo”. Esa premisa es como mendigar por sexo o peor, es como mendigar por sexo a una exnovia que se hizo lesbiana. Con unos amigos hacemos un blog, la cuenta del Twitter nace de ahí. Con este blog de humor miserable y patologías hacemos una

columna en una radio para Internet. Un día fui a la radio vestido como siempre, en pantuflas y vincha de toalla, y de invitado estaba el mega-archi-wachi-famoso @Mic_y_Mouse. “Ohhhh, ¡y yo que no me depilé la cara!” (?). Charlamos, reímos, bebimos, oh sí. En los cortes hablábamos normalmente. Claro, ¡@Mic_y_Mouse es un chabón normal! como vos, como yo. En cada frase no bajaba el Dios de la redacción ni todo lo que decía era una masturbación para la cabeza de redactores y antropólogos de la letra impresa. No, era un tipo normal, sentado ahí. Posta, sé que es jodido de creer, pero creeme. Bueno, después del programa me compró un libro (hicimos un libro recopilatrorio del blog titulado “Obsesiones de bolsillo”), y nos fuimos cada uno por su lado. A la noche ¡Oh, shisus, me dio Follow! O sea, ¿se dan cuenta? @Mic_y_Mouse tocó el botoncito de “Seguir” a MÍ. “Ya estááá”, pensé, “listo, se me llena el Twitter de ninjas, de minas, no voy a parar de garchar, de editar libros de tweets y de comer gratis en Kentucky”. Me senté a ver como los followers caían uno tras otro, como fichas. Pero no, otra vez no. No caía nada, como cuando jugaba a las cascadas de fichas en los videos. Yo dale que dale la pateaba, la sacudía y nada. Después venía un fulano que metía una sola ficha y el hijo de puta hacía saltar la banca del “Playland” de Flores. 36 fichas. Haciendo ollita con las manos transpiradas se iba rodeado de amigos y oportunistas. Y yo miraba impávido alejarse al futuro @Mic_y_Mouse. Bueh. Me voy a jugar unos tiritos al flipper de Terminator 2. Hasta un Slam Tilt no paro.

*Willy: Andar sobre la rueda de atrás de la bicicleta.

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arrobas

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#EsTodoRisas #EsTodoRisas

Y, viste como es

@Ornitorrincus / yvistecomoes.blogspot.com

Ofelia

@JulietaArroquy / julietaarroquy.blogspot.com

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ÂżQuĂŠ foto?

@Javilafont / lapaginallamadaquefoto.tumblr.com

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MUCHAS GRACIAS A Carolina (@Ms_MacPhisto) por tanta paciencia y por mostrarse siempre predispuesta. Muchos FF para ella que es una necesaria en Twitter. A la fotógrafa de este número, Sach Casale (@sacchcasale), por ser todo. ¡Nos debíamos este reencuentro y de esta manera! A Chinita (@by_Chinita) // www.chinitaba.com.ar // y a Cata Morano por prestarnos la ropa con la que vestimos a nuestra entrevistada de tapa. Compren ahí, la ropa te hace linda. A Fiamma Ruffo // frmakeup.tumblr.com // por sumarse a la producción de fotos a ayudarnos con el make up. Una genia. A Javier Guaschetti (@guaschetti) por su colaboración en el diseño, como siempre. ¡Sos lo más! A todos los colaboradores de este número. A Santi Vallesi (@Mic_y_Mouse) // http://goo.gl/biesr//, a Ciudadano Ilustre (@Ciudadilustre) // http://goo.gl/Pmyuf // y a Cristian Turdera (@cristianturdera) // cristianturdera.com // por colaborar con las ilustraciones que están para hacerse un cuadrito. ¡¡Y muchísimas pero muchísimas gracias a todos los que nos ayudaron a llegar al primer año!!

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