"Estan alli" by Luis Brito by Jorge Hulian

Estan allĂ

Photography by Luis Brito

Estan allĂ Reveron hiberna la noche a la espera de la luz promisoria Un tumulto de rocas y lodo, premonitoriamente, sepulta El Castillete. Estan AllĂ, su luz , su aire. Ellas estĂĄn allI. Sabia la Naturaleza Sabio Reveron. Luis Brito

Armando Reveron. Self Portrait Armando Reveron. Autoretrato

ARMANDO REVERON 1889-1954 Por Alexis Trujillo Armando Reverón fue un hombre que se permitió a sí mismo escapar de sus quebrantos através de la pintura. Si bien se le consideró un buen pintor desde muy joven, fue su latente esquizofrenia la única guía para ver las cosas. La terquedad y la miseria también le acompañaron, empeorando las cosas casi siempre. En su rancho de Macuto, El Castillete, mientras se improvisaba un lienzo con una pieza de tela de coleto que alguien le había regalado, tuvo una visión. Cosió y cortó, hasta que nació su primera muñeca, su modelo. A esa le seguirían otras y así se convertírian en sus compañeras, a quienes la imaginación de Reverón les impuso rasgos y carácter únicos. Quienes conocieron al pintor en el entonces tuvieron a bien reconocer que esas muñecas vivían a través de él y, a veces, mucho más allá. El fotógrafo venezolano Luis Brito nos muestra de nuevo la humanidad en estas muñecas. La vida que les diera Reverón en algún momento es evidente en un conjunto de piezas fotográficas que devuelve la dignidad al conjunto creado más olvidado del pintor.

Luis Brito Por Antolin Sanchez La obra fotográfica de Luis Enrique Brito (Río Caribe, Venezuela, 1945) constituye una reflexión sobre el ser humano y algunas de sus obsesiones más profundas: la religión, la muerte y la locura. Durante casi cuatro décadas de actividad fotográfica, este autor ha abordado estos temas en forma continua. Su primera serie, denominada Los Desterrados, muestra las procesiones de Semana Santa en Caracas. El dramatismo de esas imágenes iniciales proviene más del tratamiento visual realizado por Brito que del ritual en sí: el fotógrafo trabajó en gran angular, revelando los negativos y copiando las imágenes buscando obtener un contraste muy fuerte. Esta conjunción entre la intención del autor y el recurso técnico utilizado marcará el resto de su obra, tanto las series realizadas en blanco y negro como las producidas en color. En 1976 viaja a Italia con el fin de estudiar cine. Sin embargo, la gravitación hacia la fotografía se impone. Entre ese año y 1985, Brito vivió y trabajó en Italia y España. Allí su obra madura, destacando la realización de las series A ras de tierra, Geografía Humana y Segundo piso, tercera sección, las cuales conforman una reflexión sobre el ser humano a partir de la observación de, respectivamente, pies, rostros y manos. En 1986 retorna a Venezuela y prosigue su evolución, desarrollando trabajos en color sobre zonas rurales del país. Su trayectoria ha sido reconocida con el Premio Nacional de Fotografía correspondiente a 1996. Durante el año 2004 fotografía las muñecas de Armando Reverón, realizando una lectura que las dimensiona en una forma sorprendente. En el presente Brito prosigue su trabajo, añadiendo la producción de videos y proyecciones en formato digital. En ambos casos utiliza la fotografía como elemento compositivo a través del cual se arma la estructura de estas propuestas, las cuales poseen una intención poética y política antes que narrativa.

Reveronâ&#x20AC;&#x2122;s Dolls posing at El Castillete Las MuĂąecas de Reveron posando en El Castillete

Caption

La luz y las tinieblas Las muñecas de Armando Reverón vistas por Luis Brito. Texto por MariaElena Huizi ¿Cuántos libros y ensayos desde la antiguedad nos hablan de los artistas de la imagen visual, partiendo de categorías sensoriales? Así encontramos excelentes interpretaciones sobre, por ejemplo, artistas de la visualidad, o de la visualidad pura, entre los que suele incluirse a Reverón; o sobre aquellos artistas que siguen el llamado del tacto. Igualmente son abundantes las sesudas reflexiones en torno el predominio de la intuición o de la razón en la obra de los creadores. ¿Dónde ubicar a Luis Brito el fotógrafo dentro de alguna de esas cómodas parcelas o plantillas prefabricadas? Esto no debería ser complicado, simplemente le adjudicamos una genial capacidad de movilidad de ojo: una intuitiva ¿O racional? -sólo él lo sabe- originalidad y belleza en los encuadres, todo esto producto, tal vez, de su curiosa forma de mirar y de percibir el mundo, el mundo infantil, el mundo adulto y la naturaleza desde que abrió los ojos en Río Caribe. Habría que añadir que, además su amplia cultura visual, posee una cultura “culta” y “popular” que se extiende hacia la música, el cine, las cosas, la conversación, la gente, la calle, el pueblo. Aunque yo diría que la suya es una sensibilidad más humanística que simplemente social. Y de allí seguiríamos hablando del ojo, de la visión, la mente o la intuición… Pero mi pregunta, ahora, es ¿Cómo ubicar a Luis Brito a la luz de su serie de fotografías de las muñecas de Armando Reverón?*. A un fotógrafo que transita, como buen peregrino del alma con su morral lleno de cámaras y lentes, desde la luz y el cielo azul de su serie de ángeles homenaje a Eleanor Rigby*, a la oscuridad de las monstruosas y grotescas damas reveronianas. Yo diría que Luis Brito es un artista “del corazón”. “El corazón es el asiento de la imaginación” ha dicho James Hillman. Esta afirmación del pensador norteamericano no es metafórica, y menos aún, para mí, una imagen más que puede ser utilizada como seudo argumento metafísico para hablar de un creador y de su obra. Porque, si algo sabemos es que el sentir del corazón y las expresiones que de él brotan son verdaderas, y palpables en cuanto palpitantes.

La Luz y las tinieblas-cont Solamente un corazón valiente, como el de Reverón o el de Orfeo, podia descender a las tinieblas en busca de lo más amado. Reverón, sin duda, fue un corazón valiente, “un corazón de león” – diría Hillman- “como el sol, redondo, pleno y compacto” ; un corazón que es”mi humanidad, mi determinación de vivir, mi fuerza y mi intensa pasión”. Luis Brito – yo tuve la maravillosa oportunidad de ser testigo de algunas de las sesiones de fotografía entre Luis y las muñecas- tuvo el corazón, o el coraje, para mirar a las muñecas en su terrible belleza y en su mundo de tinieblas: en el que flotan, se exhiben, se esconden. Reverón, como Orfeo, transitó y conoció los temibles parajes de las sombras, con el mismo valor y los padecimientos con los que emprendió su viaje hacia la luz , sin quitar la mirada del sol. Mientras muchos intentamos, desde la palabra escrita, comprender el origen y el ámbito de las muñecas de Armando Reverón, para llegar siempre, y no sin miedo e inseguridad, a verlas como seres de las tinieblas, como amores malformados de la oscuridad, Luis Brito, el fotógrafo, nos da un testimonio sobre el ser y el estar de las muñecas de Reverón, que tiene el privilegio de ser producto del talento y el corazón de un gran artista, y el de, como reza el sabio lugar común, la fuerza de la imagen visual sobre la palabra escrita. Otra, última pregunta, nos surge ¿Qué hace que desde nuestros corazones se tiendan hilos entre el arte y la vida? Y es que no podemos dejar de entreteger analogías entre las imágenes de las muñecas en la oscuridad de su misteriosa morada y la desaparición física del Castillete, la vivienda y taller de Armando Reverón, que todavía late entre las incomprensibles tinieblas de su tumba de piedras y barro. Tampoco estas son especulaciones metafisicas. Luis Brito el fotógrafo se contó entre los pocos y entrañables amigos quienes bajaban conmigo, casi a diario, a Macuto durante los días de la tragedia de 1999. Juntos vivimos el duelo, y juntos seguimos viviendo un duelo que es más triste, el del olvido y el abandono del lugar de Reverón. El trabajo sobre las muñecas de Reverón de Luis Brito se gestó y se produjo en medio de una gran desolación. De ahí que en sus fotografias de las muñecas podamos percibir, también, más con el corazón que con los sentidos, el oscuro drama de una época.

Estan Alli por Luis Brito A: ARMANDO REVERON MARIA ELENA HUIZI y a las niñas Waleska Belisario y Carolina Arnal

CREDITOS,: todas las fotografias AGRADECIMIENTOS:

Antolin Sanchez, Jorge Parra, Jorge Hulian, Eli Bravo, Maria Fernanda Briceño

SPONSORS:

Estan Allí Print Collection by Luis Brito Exclusive series of 20 Fine Art Prints. Represented in the USA by Jorge Hulian / Jorge Parra ArtDealerMiami.com 2341 SW 17 th Av. Miami FL 33145 Phone: 786-417 12 92 / 786- 222 94 05 E-mail: artdealermiami@gmail.com fineartphotography@jorgeparra.com