“El Proceso Psicoterapéutico: dos almas en encuentro” Análisis de la Película “Almas al desnudo” (Prendimi l’anima) Trabajo de análisis realizado dentro de la materia de Ética Profesional en el curso de la Licenciatura en Psicología, sobre la relación paciente-analista que se desencadena entre Carl Gustav Jung y Sabina Spielrein a inicios del Siglo XX, y que es personificada en la cinta cinematográfica Almas al desnudo (Prendimi l’anima).
Psic. Ariattna Alvarado Romero Fecha de Realización: 4/12/2009 Fecha de Publicación: 21/10/2011
“El amor es lo más cercano a una psicosis” Fragmento de la película Almas al desnudo
(Prendimi l’anima)
La naturaleza humana no permite la concepción de la persona como un ser antisocial o asocial, sino que desde la misma gestación, nacimiento y desarrollo vital de la persona, el Otro se encuentra a su lado, dando y recibiendo, influenciando o ignorando, hablando o escuchando, amando u odiando.
Es así que las relaciones suministran a la existencia humana de significados y significantes, de historia, deseo y esperanza; pero también las enriquecen o las determinan. Cómo lo expresaría López Quintás1 “todo ser personal es un ser de encuentro: vive como persona, se desarrolla y madura como tal creando toda suerte de encuentros”…la riqueza de una relación están en el crecimiento que puede generar en los individuos que la entablan; es decir, ir más allá de un simple intercambio o un vínculo pactado en el tiempo y espacio determinado; es darle un significado a la unión, es permitir que la otra persona crezca al mismo tiempo que uno crece con ella.
Las relaciones son tan diversas como diversas son las personas en el mundo, las características pueden ser tan distantes entre una relación y otra, y sus complicaciones, aun más, pueden deberse a disímiles causas o generar distintas consecuencias. Y es que las relaciones no están exentas de alteraciones, así como pueden surgir, pueden terminar intempestivamente, sin llegar a representar un verdadero encuentro; pero cuando lo hacen, cuando se forjan tan fuertemente, tan significativa, íntima y humanamente; los fenómenos que de ella surgen pueden ser
1
1990, citado en León, O. E. M. (2009). El concepto Encuentro de Alfonso López Quintás a través de
la Hermenéutica. Tesis Doctoral. Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla. Puebla, México.
tan sorprendentes como el amor…la existencia humana se hace plenamente humana a través de las relaciones con los demás, a través del amor.2 Este trabajo tratará, sin aires de pretensión, de analizar un tipo de encuentro, que si bien ha sido estereotipado, aún esconde muchos misterios, tras los silencios forzosos que hacen presente la figura de autoridad, tras los largos momentos de convivencia sin “intimidad”, tras las largas historias contadas, que se prefieren ahogar en lo profundo del olvido; me estoy refiriendo a la relación psicoterapeutapaciente, que profesionalmente guarda un código ético, pero que humanamente puede entretejer elementos tan peligrosos para la naturaleza misma del encuentro; y es aquí, en la delgada y, hasta en ocasiones, difusa línea entre lo profesionalmente aceptado y la reacción del ser humano ante el contacto con el otro, donde la reflexión podrá encontrar su lugar. La relación paciente-terapeuta presentada en la cinta “Almas al desnudo”3 nos servirá como base para analizar, inicialmente, los diversos fenómenos que surgieron a razón de su encuentro; a la par de ir incluyendo las cuestiones éticas que se juegan en el caso.
Retomando la idea de encuentro, el hombre es un ser que se constituye, desarrolla y perfecciona fundando ámbitos de encuentro riguroso con otros seres personales, con valores de todo orden, con instituciones, con la tradición cultural4; en lugares y momentos determinados, en situaciones concretas y persiguiendo objetivos, que comunes o no, encaminan la relación.
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Marcel; citado en Cruz, P. A. (2ª ed.) (1991). Historia de la Filosofía Contemporánea. Pamplona: EUNSA.
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Prendimi l’anima, 2002, Director: Faenza, R.
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León, O. E. M. (2009). El concepto Encuentro
de Alfonso López Quintás a través de la
Hermenéutica. Tesis Doctoral. Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla. Puebla, México.
En la psicología, y más precisamente en el trabajo psicoterapéutico, desde el psicoanálisis, el encuentro entre el analizado y el analista, es tan importante, que el mismo proceso psicoanalítico se entiende como fundamentalmente un vínculo entre dos personas: …el psicoanálisis debe ser estudiado como una situación entre dos5.
Así fue como el Dr. Jung entra en contacto con Sabina Spielrein, bajo circunstancias concretas, un proceso terapéutico; en un lugar y tiempo determinado, un hospital psiquiátrico a inicios del siglo XX, y con el objetivo, por un lado, de probar la eficacia de un nuevo método de cura psicoanalítica, y por otro, sumergido en sus síntomas manifiestos, el de ser amada; llegando más allá de la presencia física entre ambos, pues el encuentro no es producto de un mero acercamiento físico; es fruto de un ensamblamiento paciente y generoso de dos ámbitos de vida que "saben lo que buscan"6. No era necesario que el objetivo fuese compartido en un inicio, o que se tuviera el preciso establecimiento del contrato, pues ambos corrían por caminos diferentes, que a posteriori convergieron, pero que no llegaron a un fin igual.
El psicoanálisis es el marco terapéutico que matizará la relación, y en esta, no nada más se da un intercambio o un servicio, sino que se juegan diversos elementos psíquicos y emocionales, que posibilitan o limitan el proceso hacia la cura. Uno de ellos es la transferencia, que según Jung surgía en el proceso, generando otros fenómenos: “La relación entre médico y paciente puede conducir en ocasiones a fenómenos de naturaleza parapsicológica, especialmente cuando se produce una transferencia del paciente o una identificación más o menos inconsciente entre médico y paciente”7.
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Lacan, J. (s/f). ¿Quién analiza hoy? En La dirección de la cura y los principios de su poder. Documento recuperado el 31 de octubre de 2009 en http://www.bibliotheka.org/?/ver/5997/ 6
León, O. E. M. (2009). El concepto Encuentro de Alfonso López Quintás a través de la Hermenéutica. Tesis Doctoral. Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla. Puebla, México. 7
Jung, C.G. (2002). Recuerdos, sueños, pensamientos. Buenos Aires, Argentina: Planeta S.A.I.C. / Seix Barral.
A relación de esto, Lacan8 nos habla de la inherente utilidad de la transferencia en el proceso de la cura, donde el terapeuta controla y maneja la situación, empero cuando ese control se pierde o se difumina en los intereses propios del analista, las acciones pueden tornarse más a la satisfacción de sus necesidades, representando un riesgo o el surgimiento de <<fenómenos de naturaleza parapsicológica>>, que complican y que apelan a la terminación del proceso: “Si el terapeuta promueve que el paciente confunda y mezcle los atributos bajo los que el segundo lo está viendo, con atributos y características propias, la transferencia puede llegar a ser tan complicada que no se pueda entender ni analizar”9.
Y, ¿acaso no los intereses podrían llevar el mismo título de “deseo o amor” para ambas personas inmersas en una relación psicoterapéutica?...Si nos quedamos en el enfoque psicoanalítico de principio de siglo pasado, el amor es lo que le falta al sujeto de análisis, es esa falta lo que lo encamina a buscar al otro, es lo que alienta, conduce y mantiene una relación humana. Pero si nos situamos en la idea de que eI encuentro supone un ir y venir entre los seres que interactúan: una interpelación10, la exigencia es de ambas partes, de ambos seres que se encuentran, que se descubren y se enriquecen a partir de la preocupación recíproca. Sin referirme a la connotación romántica y erótica del amor, la relación terapéutica tiene un sentido de crecimiento y desarrollo del otro, una preocupación y ocupación por el otro; que en gran medida (mientras así lo quiera uno) puede dejarnos un crecimiento propio.
8
Lacan, J. (s/f). ¿Quién analiza hoy? En La dirección de la cura y los principios de su poder. Documento recuperado el 31 de octubre de 2009 en http://www.bibliotheka.org/?/ver/5997/ 9
Freud, 1915, citado en López, L.D. y Wortman, A. (s/f) El enemigo entre nosotros: cuando lo no ético parece bueno. En Gómez, A. A. (coord) (s/f). Ética en el diván. México: Lumen, p. 143. 10
León, O. E. M. (2009). El concepto Encuentro de Alfonso López Quintás a través de la Hermenéutica. Tesis Doctoral. Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla. Puebla, México.
Sin embargo, es indispensable una consideración: <<cuidado con querer demasiado el bien del paciente>>. Si bien, el psicólogo debe intentar conseguir el bienestar de aquellos con los que interactúa profesionalmente 11, no debe olvidar que muchas veces los sentimientos que se juegan en la contratransferencia, son provocados por su mundo interno, y de la interiorización del paciente con experiencias pasadas o presentes en su vida12. Los regalos simbólicos, los objetos cargados de significado, las palabras envestidas de contenido íntimo; comienzan a solidificar la relación, comienzan a intensificar el vínculo, el encuentro; y en una relación sin contexto profesional, podrían ser anclas que fortalecen la estadía segura de la relación, pero en un encuentro con otros fines (o por lo menos los fines con los que se inició la relación entre el doctor Jung y Sabina) estos objetos van más allá, son elementos significativos de pago del terapeuta13, pues no nada más paga con sus palabras, sino con su persona y lo más íntimo de su esencia: su alma en una piedra o su historia en un diario…pero en todo caso, ¿no sería el paciente el responsable de dar un pago a su terapeuta, por el servicio que de él está recibiendo? O ¿será acaso que el terapeuta, en este caso, ha cobrado sus honorarios tras una transacción sexual?... adentrándonos más a la historia de esta historia, y alejándonos un poco del romanticismo cinematográfico con el que es presentado en esta cinta, el encuentro de estos personajes se da en un hospital público, por lo que Carl Gustav Jung no recibía honorarios privados, cosa que podía hablarnos de la situación económica de la paciente; y esto no está nada alejado de muchas situaciones en las que los pacientes se acercan a un terapeuta, sin dinero, sólo con un síntoma:
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Wadeley, A. y Blasco, T. (s/f). La ética en la investigación y la práctica psicológicas. México: Ariel, p. 33.
12
López, L.D. y Wortman, A. (s/f) El enemigo entre nosotros: cuando lo no ético parece bueno. En Gómez, A. A. (coord) (s/f). Ética en el diván. México: Lumen, p.145. 13
Lacan, J. (s/f). ¿Quién analiza hoy? En La dirección de la cura y los principios de su poder. Documento recuperado el 31 de octubre de 2009 en http://www.bibliotheka.org/?/ver/5997/
“Por ende, podemos pensar los obstáculos que se presentan cuando no hay un pago mediante establecido y definido, como marco propicio para un tratamiento analítico, que incluya la implicancia del sujeto que consulta y la responsabilidad del analista, para que éste cobre en dinero y al hacerlo, el paciente no tenga que pagarle con síntomas14”. …con su deseo de ser amada y de ser madre. Además de ser una señal de alarma en sí, el hecho de compartirse en demasía al paciente15, también abre la compuerta de una corriente que desbocada se dirige a donde no debe llegar, pues la dirección de la cura ha vagado su camino en el romance apasionado de ambos, cuestión que normativamente... “El psicólogo no incurre en intimidades sexuales con pacientes o clientes actuales…Así mismo, el psicólogo no sostiene intimidades sexuales con ex pacientes o clientes de terapia, estudiantes, asistentes, supervisados o cualquier otra persona, durante por lo menos dos años después de hacer cesado o terminado su relación profesional con ellos.”16 Pero el proceso psicoanalítico en este caso no es disuelto, y prosigue en su desarrollo. El amor es una apasionada afirmación de un objeto; no es un afecto sino una tendencia activa y una conexión íntima cuyo fin reside en la felicidad, la expansión y la libertad de su objeto17, una <<maldita felicidad>> que puede llegar hasta el llanto, pero en la que el hombre puede decidir su final. La relación amorosa que el doctor Jung y su paciente continuaron, fue bajo la responsabilidad, y ¿por qué digo esto?...por la sencilla razón de que la intimidad con una persona es mucho
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Del Rosso, P. (s/f). Sabina Spielrein y Jung una historia de amor en los avatares de un análisis. Documento recuperado el 28 de noviembre de 2009 en http://www.proyectopsi.com.ar/profesional/profesion/profes_025.asp 15
López, L.D. y Wortman, A. (s/f) El enemigo entre nosotros: cuando lo no ético parece bueno. En Gómez, A. A. (coord) (s/f). Ética en el diván. México: Lumen, p. 148. 16
Art. 94. Sociedad Mexicana de Psicología (3ª. Edic). (2002). Código Ético del Psicólogo. México: Trillas, p. 76. 17
Fromm, E. (1941). El miedo a la Libertad. Buenos Aires: Paidós, p. 146.
más difícil de lograr y mantener precisamente porque las personas tenemos un poder de iniciativa mayor, ese poder que denominamos libertad18. Una libertad donde ser libre es poca cosa, no es nada, sin un <<para qué>>; pero ser responsable tampoco lo es todo sin un <<ante qué>>19…y es aquí donde se apela, dentro del encuentro terapeuta-paciente, a la postura ética del profesional; más allá de cumplir con un código, que establece que, además de un mantenimiento de la “buena imagen de la psicología y de los psicólogos”20, al establecer relaciones con los colegas; el psicólogo… “debe demostrar en su desempeño: precisión y honestidad, apertura y sinceridad, máxima objetividad y mínimo sesgo o prejuicio, y evitar conflictos de interés…Para ello, el psicólogo debe comprender y estar consciente de las circunstancias que rodean su actividad, de su propia historia y valores personales, y de la forma en que éstos afectan sus decisiones, interpretaciones, sugerencias y comportamiento, buscando siempre la máxima objetividad.”21 El ejercicio psicoterapéutico, exige un compromiso con la dignidad humana, un mantenimiento de principios éticos universales y de una conducción, a favor de la salud humana, en la que los psicólogos debemos pensar en las consecuencias de nuestra actuación profesional antes de llevarla a cabo22.
A manera de conclusión, las relaciones, tan complicadas como su naturaleza humana misma, apela al desarrollo de los elementos más esenciales de la persona: su razón, su dignidad y su libertad. Empero, no sólo para una conducción o
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León, O. E. M. (2009). El concepto Encuentro de Alfonso López Quintás a través de la Hermenéutica. Tesis Doctoral. Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla. Puebla, México. 19
Frankl, V. (10ª ed.) (1999). La presencia ignorada de Dios. Barcelona: Herder, p. 62.
20
Art. 112. Sociedad Mexicana de Psicología (3ª. Edic). (2002). Código Ético del Psicólogo. México: Trillas, p. 81. 21
Sociedad Mexicana de Psicología (3ª. Edic). (2002). Código Ético del Psicólogo. México: Trillas, p. 41. 22
Wadeley, A. y Blasco, T. (s/f). La ética en la investigación y la práctica psicológicas. México: Ariel, p. 13.
gratificación individual, sino para el crecimiento social, en un verdadero encuentro de personas. El ejercicio terapéutico puede no situarse… “al nivel de seres impersonales, sino de personas, la persona del terapeuta y de la persona del paciente, ambos únicos, irrepetibles, singulares…igualmente partícipes de un único evento, arrastrados por la común comprensión de la problemática existencial..,. el terapeuta y el paciente no se detienen en un superficial nivel psicológico,…sino que instauran un movimiento dialéctico en el cual descubren su unicidad, individual, singularidad y originalidad”.23 Lo ético parte de lo humano a dirección de lo humano. El encuentro profesional psicoterapéutico se matiza por la ejecución de la ética, de todo aquello que permita un acercamiento virtuoso, que permita el desarrollo de la capacidad empática, de responsabilidad y dignidad en ambas personas; todo aquello que potencialice al paciente, a la persona, como a la persona misma del terapeuta; más allá de la normatividad en un código, son las letras inscritas en la PERSONA, ese ser humano, que se percata de su existencia en una responsable relación con el otro.
El amor, es una locura cuando la venda de lo impulsivo opaca el brillo de la autotrascendencia...el reto es mayúsculo al trabajar desde y para la persona, desde y para un ámbito provisto de la capacidad de sentir, de enamorarse, de encontrarse, de amarse, de permitirse ser persona frente al otro y con el otro; pero no es imposible, pues el amor no sólo arraiga la concepción erótica, sino puede ser los ojos con los que podamos ver las potencialidades en el otro, los oidos abiertos sin prejuicios a escuchar su historia, su dolor, su angustia, su sentido; y el diálogo encaminado a lograr su desarrollo integral y digno.
23
Fizzotti, E. (2006). De Freud a Frankl: el nacimiento de la Logoterapia. México, D.F.: LAG, p. 183.
Referencias Cruz, P. A. (2ª ed.) (1991). Historia de la Filosofía Contemporánea. Pamplona: EUNSA.
Del Rosso, P. (s/f). Sabina Spielrein y Jung una historia de amor en los avatares de un análisis. Documento recuperado el 28 de noviembre de 2009 en http://www.proyectopsi.com.ar/profesional/profesion/profes_025.asp
Frankl, V. (10ª ed.) (1999). La presencia ignorada de Dios. Barcelona: Herder. Fromm, E. (1941). El miedo a la Libertad. Buenos Aires: Paidós.
Jung, C.G. (2002). Recuerdos, sueños, pensamientos. Buenos Aires, Argentina: Planeta S.A.I.C. / Seix Barral.
Lacan, J. (s/f). ¿Quién analiza hoy? En La dirección de la cura y los principios de su poder. Documento recuperado el 31 de octubre de 2009 en http://www.bibliotheka.org/?/ver/5997/
León, O. E. M. (2009). El concepto Encuentro de Alfonso López Quintás a través de la Hermenéutica. Tesis Doctoral. Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla. Puebla, México.
López, L.D. y Wortman, A. (s/f). El enemigo entre nosotros: cuando lo no ético parece bueno. En Gómez, A. A. (coord) (s/f). Ética en el diván. México: Lumen.
Sociedad Mexicana de Psicología (3ª. Edic). (2002). Código Ético del Psicólogo. México: Trillas.
Wadeley, A. y Blasco, T. (s/f). La ética en la investigación y la práctica psicológicas. México: Ariel.