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Lugia CRÓNICA TRIMESTRAL DE LA CIUDAD DE VALDEPEÑAS DE JAÉN AÑo IX- N.2 32 ENERO, FEBRERO YMARZO DE 1993

ASOCIACiÓN CULTURAL "LUGIA"

C/. Bahondillo, 41 .

Valdepeñas (Jaén).

DIRECTOR Juan Infante Martínez

PRESIDENTE Domingo Malina Fuentes

SUBDIRECTOR Serafín Parra Delgado

CONSEJO DE REDACCiÓN: Emiliano P. Herrera Redondo.

Angel Infante Martínez.

Juan Milla Narváez.

Guadalupe Nieto Aceituno.

Bias Prieto Sánchez.

Rafael Rivilla Jordán Josefina Ruiz Peña.

CONSEJO DE ADMINISTRACiÓN. Pedro Barranco Extremera.

Pedro J.Castro Jiménez.

Julián Infante Delgado.

Juan deDios Marchal Jiménez.

José L. Padilla Extremera.

Juan Sánchez Serrano.

PORTADA: Privilegio deVilla (1558) (Juan Infante)

CONSEJO ASESOR: -Manuel Amezcua Martínez.

-Miguel Calvo Morillo.

-José Chamorro Lozano.

-León Herrera y Esteban.

-F élix Martínez Cabrera.

-Juan Martínez Rojas.

-Miguel Moreno Jara.

-Vicente Oya Rodríguez.

-Mercedes Torrebejano Parra.

-Ricardo Vilíegas Méndez de Vigo.

Depósito Legal J-219-1985.

IMPRIME: Gráficas Catena.

C/. Hemán Cortés, 8 y 10 - JAEN

"LUGIA" no hace necesariamente suyos los criterios y opiniones de los artículos firmados.

Sumario EDITORIAL

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CON NOMBRE PROPIO: Requiem en Valleclaro, POR JUAN MAKfiNEZROJAS Biografía de Luis Caballero, POR JUAN MARTiNEZ ROJAS

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RECUERDOS VALDEPEÑEROS: - La Parroquia de Santiago Apóstol de Valdepeñas de Jaén, POR UZARO Gtt» MEDINA - Buscando nuestra historia: Los coadjutores de la Parroquia de Valdepeñas, POR RAFAEL VALDJVL4 CASTRO -Genealogía de los Marqueses de Navasequilla, POR RAMÓN ESPANTALEóN JUBES NUESTRA PATRIA CH1CA: - El traje popular valdepeñero: La mujer, POR J. CARLOS NA VASAL HUEKfAS - Extraordinario Trío Musical de otro tiempo, POR ENRIQUEMARCHAL LEND1NEZ) - A buen entendedor, POR EMILMNO P. H ERRERA REDONDo

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LA ACTUAliDAD: - Noticias breves - Acuerdos Municipales - Movimiento Demográfico - Resumen Pluviométrico POR FRANCISCO MAKffNEz TORRES - Cuadro de Temperaturas, POR BERNARDINO MARTfNEZ VALDERAS PÁGINASABIERTAS: -Cosas de abuelo, POR ANTONIO GAllEGO ESTEPA - Anda tú si quieres, POR ENRIQUEL MARCHAL LENDiNEZ

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Ha muerto Luis Caballero.

El día 7 de enero fallecía en Alicante, a los 90 años de edad, el Socio de Honor de "Lugia", Luis Caballero Pozo. La última etapa de su vida la pasó en esa ciudad levantina desde donde envió numerosas colaboraciones que han enriquecido las páginas de nuestra crónica.

El amor por su tierra, por su "VALLECLARO", denominación con la que gustaba llamar a Valdepeñas, fue la pauta de casi toda su valiosa obra.

Cambios en "Lugia".

Al concluir el período establecido en los estatutos, y tal y como anunciábamos en el trimestre anterior, desde el 1 de enero, Domingo Malina ha dado el relevo en la presidencia de "Lugia" a Rafael Rivilla. Desde estas páginas queremos desear suerte al primero en su nueva andadura y agradecer sinceramente al segundo su entrega y dedicación a nuestra asociación en estos dos últimos años.

Con respecto a la crónica, también iniciamos en este número una serie de cambios que continuarán en números sucesivos y con los que pretendemos mejorar su forma y su contenido.

La nueva portada reproduce un códice de un valor incalculable para nuestra localidad que se encuentra en el Archivo Histórico Municipal, nos referimos al PRIVILEGIO DE VILLA, otorgado por el Rey Felipe 11 en 1958 a Valdepeñas.

Las secciones "Recuerdos veideoeñerosr y "Nuestra Patria Chica" se verán reforzadas con interesantes estudios de investigación. En este número destacan los trabajos del doctor Lerero Gila Medina sobre la parroquia, el de Ramón Espantaleón, que completa la historia Gel

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Marquesado de Navasequilla y el de J. Carlos Navasal sobre el traje típico valdepeñero. En próximos números aparecerá un -estudio antropológico de Juan Cortés, así como una comunicación de los "pasos valdepeñeros", con unas interesantes fotos de 1927.

Recuperaremos secciones que han sido reclamadas por nuestros socios, "Hace 100 años que... " y "Valdepeñeros con historia" (donde próximamente publicaremos la vida de "Gregorete'').

Aparecerán nuestras secciones, entre las que destacamos: "Colectivos valdepeñeros" por el que van desfilando diferentes asociaciones y grupos valdepeñeros y "Servicios Públicos" en el que se informará sobre los distintos servicios de nuestra localidad (sanidad, educación, bienestar social, cultura, etc.).

También y con carácter trimestral, Roger Milla, nos va mostrando con su particular óptica fotográfica, distintos aspectos de nuestra ciudad.

Para finalizar, y una vez más, solicitamos de nuestros lectores cuantas sugerencias e ideas nos permitan conseguir una mejor crónica para Valdepeñas.

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CON NOMBRE PROPIO

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Réquiem en Valleclaro Juan Martínez Rojas

Valleclaro es el lugar más precioso que existe en el valle del Susana. Es el pueblo maravilloso en que se produjo la más linda historia de amor, historia que desde los tiempos de San Francisco no se habla vuelto a conocer, cual fue la vivencia entre una jilguera y un hombre, uno de esos magnfficos hombres que nuestra tierra es tan pródiga a través de sus años, causa por la que los poetas de ALFORJAS PARA LA pOEsíA le dieron el nombre de Valdepeñas de los Jilgueros.

Es el pueblo de un hombre enamorado de su tierra y de sus rafees, el cual la ha amado hasta el instante de entregar su alma al Sumo Hacedor. Un hombre que siempre soñó y escribió recordando los rincones y parajes más pintorescos, vivencias y costumbres de esta tan dura y agreste tierra, que tan fuertemente se adhiere a nuestras entrañas. Es nuestro Valdepeñas de Jaén y nuestro Cristo de Chircales, para el que no hay colores polrticos ni posiciones sociales; para Él sólo hay seres humanos. Es un hombre al que, aun a pesar de la diferencia de edad que nos separaba y de que ambos tuviésemos diferentes concepciones polrticas, no fueron obstáculo para que germinase una amistad basada en ese amor a nuestro pueblo y a sus gentes. Este hombre por quien hoy entonamos este réquiem de despedida al finalizar su transito por la vida; fue LUIS CABALLERO POZO.

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BIOGRAFíA DE LUIS CABALLERO Juan Martínez Rojas

Cuando se trata de escribir sobre una persona conocida y querida, es muy ditrcil la imparcialidad y, sobre todo, frenar tus deseos para ser lo más objetivo posible en tu concepción, a fin de dar la verdadera y real imagen de esa persona.

Hoy, por encargo de mis amigos y compañeros del grupo de redacción de la revista celUGIA.., intentaré hacer una minibiogratra de ese querido paisano que es D. lUIS CABAllERO POZO, cuya personalidad he ido descubriendo a lo largo de nuestra correspondencia, lamentando únicamente el que nuestros contactos no hayan sido tan personales como ambos hubiéramos deseado.

Tras este pequeño preámbulo intentaré describirlo a grandes pinceladas, pues hacerlo de forma meticulosa sería obra de titanes, que necesitaría un gran volumen de folios. *** Nació Luis Caballero Pozo en Valdepeñas de Jaén, el día 31 de agosto de 1883, siendo sus padres Juan Antonio Caballero Montes y Purificación Pozo Arias, modestos labradores en los que se había cumplido el célebre refrán de: «Los nietos de los ricos de hoy serán los pobres de mañana », Efectivamente, los abuelos de Luis fueron labradores muy acomodados que contaban

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con buena fortuna, la cual, por vicisitudes, fue mermando poco a poco hasta casi desaparecer.

El inicio y sus primeros pasos de niño fue en un cortijo que tenían sus abuelos, viniendo posteriormente a vivir al pueblo con sus padres. Inició su educación en la escuela privada que regentaba el sacerdote D. Rafael Godino, en la cual aprendió a leer y escribir, así como Humanidades; posteriormente pasó a otra escuela privada que dirigió en este pueblo un hombre inquieto y activo, maestro de profesión, llamado D. Gregario Milla, el cual, por su talante liberal e influenciado por la idea republicano-socialista, ya que en tiempos anteriores formó parte del profesorado de las Escuelas Laicas que en Cataluña dirigió el célebre Ferrer, hizo que la casi totalidad de alumnos que por ella pasaron sintieran la inquietud socialista, muy en boga en aquella época en que la injusticia y la cacicada estaban al orden del día. El impacto de esta filosofía marcó el derrotero de la vida de Luis, al que la defensa de esta idea a causa de su honradez le haya producido tantos y tantos malos ratos y sufrimientos.

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Fue niño despierto, gran aficionado a la lectura; y apasionado por el saber y por adquirir una mayor cultura mostró deseos de estudiar una carrera. Pero . como sus padres no podían costeársela, gracias a su antiguo profesor D. Rafael Godino, logró marchar a Jaén e ingresar como fámulo en el colegio de San Angustín, en donde, trabajando día y noche a cambio de que le facilitasen sus estudios de bachillerato, así de esta forma, forma que denigra

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y humilla la dignidad de la persona, realizó el bachiller y pudo acudir a las clases de la Escuela Normal del Magisterio, donde adquirió el título de Maestro de Enseñanza Primaria.

Quiero, antes de seguir, rendir tributo de admiración a todas esas personas que, para labrarse una profesión, tuvieron en su infancia que servir a otros, mendigando lo que todo ser humano debe tener, educación completa y total. He admirado al hombre que por sí mismo ha sabido triunfar en la vida.

Para ellos mi admiración y respeto .

LUISCABALLERO POZO,JUNTO AL DIRECTORDE LA CRÓNICA, JUAN INFANTE, EN CHIRCALES, EN SU ÚLTIMA VISITA A VALDEPEÑAS.

Mientras hacía el servicio militar como escribiente en la Capitanía General de Sevilla, preparó e hizo oposiciones al Magisterio, obteniendo plaza en Valencia de Alcor.

Gran estudioso y obsesivamente ilusionado con la tierra en que nació, investigó sus raíces, las raíces de ese Valdepeñas o su Valleclaro, como

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suelo denominarlo en sus escritos. Es tan enamorado de su pueblo, que no hay dfa de su existencia que no añore estos terruños nuestros, tan ásperos y accidentados, que logran atravesar nuestro corazón como espadas de fino acero toledano, produciendo ese apasionamiento del que no podemos evadirnos.

Para muchos, este gran amor de Luis Caballero será calificado como idea manfaca; pero para mf, y para cualquiera que lo conozca , es algo más profundo y más noble. Es cariño puro como el que se siente por una madre; es el sentirse orgulloso de algo que honra y que el hijo agradecido no sabe qué hacer por engrandecer y dar a conocer como medio eficaz de agradecimiento.

De andarfn valero, de inquieto e impaciente por su pueblo y sus gentes calificarfa yo a este hombre que de Valdepeñas ha hecho culto y meta de su vida, de esa ajetreada y penosa vida que le tocó vivir y sufrir y que ahora callamos pidiendo a Dios que jamás se repita, con cuyo deseo le rindo este pequeño trabajo.

(Este artfculo fue publicado en el número IV de nuestra Crónica, correspondiente al primer trimestre de 1986).

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RECUERDOS VALDEPEÑEROS

LA PARROQUIA DB SANTIAGO APÓSTOL DB VALDEPBÑAS DBJAÉN Lázaro QUa Medina

La presente colaboración ha sido extraída del libro <c ARTE Y ARTISTAS DEL RENACIMIENTO EN TORNO A LA REAL ABADfA DE ALCALÁ LA REAL», publicado por la Universidad de Granada en coordinación con el Ayuntamiento de Alcalá la Real en Granada .en 1991. <cLUGIA» ha obtenido autorización del autor D. LÁZARO GILA MEDINA, para publicarlo íntegramente).

1. INTRODUCCiÓN

Al noroeste del Castillo de Locubín, territorio abacial, se encuentra la villa de Valdepeñas de Jaén, perteneciente al mismo Obispado. Su cercanía con la Capital de la Abadía ha posibilitado la existencia de múltiples contactos y fecundos intercambios entre ambas localidades. En especial en el campo del arte y, sobre todo, en la segunda mitad del siglo XVI, que es cuando Valdepeñas va a iniciar la construcción de su iglesia parroquial, puesta bajo la advocación, tan española, de Santiago Após-

toro Esa influencia alcalaína sobre Valdepeñas en el ámbito de la arquitectura hubo de ser mucho más intensa y profunda en esas décadas del quinientos si tenemos en cuenta que, como población «exnovo» -su fundación tuvo lugar en 1539-,2 carecería de esa rica tradición artesanal en el terreno de la edilicia, que, en cambio, tanto desarrollo habíaalcanzado en la Alcalá renacentista.

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Precisamente esa singularidad -ausencia de pasado- es uno de los rasgos históricos fundamentales de Valdepeñas de Jaén y no solamente de esta singular localidad; sino también de otros varios pueblos de la actual provincia de Jaén, tales como: Cabra del Santo Cristo, Los Vil/ares, Mancha Real, etc. Vil/as, todas ellas, fundadas por la corona a lo largo de la primera mitad del siglo XVI, por muy diversos motivos -buscando afianzar la seguridad de los distintos caminos que llevaban al recién conquistado reino de Granada; satisfacer las ansias de poder y demanda de tierras y cargos (municipales) de la nobleza y de la burguesía de las antiguas ciudades fronterizas (Ubeda, Baeza, etc.); solucionar el problema ocasionado en estas ciudades por el excedente de población: etc.-.

PLANTA DELA IGLESIA DESANTIAGO APOSTOL. VALDEPEÑAS DEJAEN.

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No vamos a estudiaraquí, con todo detalle, la fundación de Valdepeñas, aún cuando sea algo muy interesante, solamente queremos señalar que el acta original de su erección, donde, pormenorizadamente, senos van narrando todas las incidencias de su creación y nacimiento, -tales como elección del terreno más apto y apropiado para tal fin; selección de los nuevos pobladores medición de las calles y de los solares para edificar, etc. - fue publicada en 1922 en la revista D. Lope de sose» y que, muy recientemente, se ha publicado por la Srta. Virginia Pérez Rodríguez un interesante artículo sobre su urbanismo, incluyendo en el mismo trabajo el de las vecinas localidades de Los Vil/ares y Mancha Real, de coetánea

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2. ESTUDIO HISTÓRICO-ARTíSTICO DEL MONUMENTO En un primer momento la parroquia de Santiago Apóstol de Valdepeñas ofrece al visitante una visión sorprendente y, a la par, contradictoria.

Así frente a un exterior, donde los muros perimetrales, ciertamente de cantería aunque poco elaborada, con pesados y robustos contrafuertes, con sencillísimas portadas, con ventanas muy escuetas, etc., le dan un aire pesado y mazacotón, más propio de una fortaleza militar medieval que de una iglesia renacentista . Su interior, en cambio, pese a no gozar de estructuras, arquitectón icas muy originales, sus pilares son simples machones de sección cuadrada, por ejemplo; ni disfrutar de importantes piezas ornamentales -todos los retablos, que existen en el templo, son posteriores a la Guerra Civil, que afectó enormemente al edificio-; sin embargo, por la diafanidad de sus naves; lo cuidado de sus paramentos murales; la armonía de sus proporciones; el cromatismo establecido en sus bóvedas entre sus fondos y los perfiles de sus diferentes dibujos geométricos; etc., alcanza y consigue transmitir una indudable sensación de calidad arquitectónica.

Tras esta valoración artística, y antes de adentrarnos a analizar las distintas partes del edificio, tenemos que advertir que, en este caso concreto, no nos es posible presentar una secuencia cronológica completa de su construcción . Puesto que, aunque tenemos documentados por los protocolos notariales alcalaínos aún quedan bastantes interrogantes por resolver. Siendo los dos fundamentales: ¿quién dijo las trazas del templo? y ¿cuándo se iniciaron y en que momento se concluyeron las susodichas obras?

Además, el templo en sí tampoco nos ayuda nada en este sentido, ya que no aparece en él escudo alguno u otro cualquier elemento que nos ayuda a fijar la cronología de sus distintas parte.

No obstante, ya a priori, podemos advertir que el templo, excepto en las cubiertas, estaría casi terminado para finales del siglo XVI. Su planta, de salón, es un auténtico rectángulo de 33,2 metros de largo por 15,2 de ancho, posteriormente modificado al añadírsele en el ángulo sureste la torre.

La cabecera, donde va la capilla mayor -de 4,4 metros de profundidad por 6,6 de ancha- en el centro y una pequeña capilla a cada lado, no se destaca en planta, salvo en el ángulo de la torre. El cuerpo de la iglesia está dividido, por 4 esbeltos pilares, en 3 naves de 3 tramos cada

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una. Estos soportes son unos simples machones de sección rectangular, constituidos por un sencillo plinto por basa; el fuste, alto y esbelto, con las esquinas achaflanadas y el capitel formado por dos sencillas molduras.

La nave central es más ancha -8 metros- que las laterales -3,2-, siendo, en cambio, la altura la misma para todas ellas.

Nos sorprenden el hecho de que los tramos de la nave central no sean totalmente cuadrados, como sería lo normal; sino cuadrangulares. Máxime si tenemos en cuenta que se cubren con bóvedas esféricas rebajadas sobre pechinas, las cuales se adornan con un delicado repertorio de motivos geométricos.

Los arcos perpiaños de la nave central son de medio punto, al igual que los formeros; sin embargo, los perpiaños de las laterales -de muy poca luz- son también de medio punto, aunque rebajados. Estos en los muros perimetrales arrancan de ménsulas muy originales, pues tienen forma de pirámide invertida -como el cimacio bizantino-.

Precisamente el tipo de cubrición del algunos de los tramos laterales es uno de los rasgos más distintivos de este templo. Todos se cubren con bóveda de horno, algo rebajada, llevando en los ángulos, formados por los muros perimetrales y los arcos perpiaños, pequeñas pechinas. Sin .embargo, en algunos tramos esta cubierta se transforma en una auténtica bóveda a venerada, enriqueciéndose la venera con amplias fajas decoradas con la más variada gama de motivos geométricos, tales como cffculos,cuadrados, et~ Vemos pues que un motivo tan jacobeo, como es la venera, aparece en multitud de ocasiones en el interior de este templo parroquial. Y, aunque estas cubiertas son muy posteriores; no obstante, pueden ser el mejor exponente y complemento, junto con el hecho de que ya desde el mismo momento de su erección canónica la parroquia fuese puesta bajo la advocación del Apóstol Santiago, para comprender y explicar el gran celo e interés puesto por la Iglesia por cultivar y difundir aquellos rasgos más singulares y particulares del catolicismo hispano.

Poco nos resta que decir del interior del templo; solamente que los muros son de buena cantería, aunque de aparejo algo irregular; mientras que los pilares sí que poseen una cantería muy cuidada, si bien tanto muros como soportes están revocados y encalados. Por su parte, las ventanas son simples vanos de medio punto, que al exterior quedan adintelados.

A los pies del templo se levantó, muy posteriormente, un hermoso y

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espacioso coro en alto, ocupando las tres naves y con bóvedas de arista con lunetos en el sotocoro.

De las tres capillas de la cabecera no diremos más que la central, que hace el papel de presbiterio y a la que se accede por un grandioso arco triunfal, con la misma altura que el resto de los arcos del templo, se cubre con una bóveda de medio cañón, ricamente decorada con motivos de tipo

MURO PERIMETRAL SUR Y TORRE.

geométrico, mientras que de las laterales es más profunda la del lado del evangelio, pues la otra -la de la epístola- quedó acortada al hacerse la torre.

No obstante, desde este mismo momento queremos advertir que si desde el punto de vista artístico estas cubiertas resultan bastante acertadas y originales, sin embargo, su cronología no puede ser la de la segunda mitad del siglo XVI, sino muy posterior. Probablemente, como en su momento se verá, por su factura de finales de siglo XVIII o de comienzos del siguiente. Las primitivas cubiertas, de acuerdo con los grandes contrafuertes exteriores, hubieron de ser bóvedas vaídas o esféricas rebajadas.

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Del exterior de este templo, lo más sorprendente es la sencillez y la austeridad. Sencillez que aparece reflejada en sus dos portadas -una centrando el segundo tramo del muro perimetral sur y la otra en el opuesto-. Son simples vanos de medio punto, donde sólo se resalta las impostas del arco. Por encima de la portada sur va una sencilla homacina semicircular, desconectada de la portada y de factura muy tardía. Hoy está desnuda, aunque originariamente albergaría una talla de Santiago, el titular de la parroquia.

Pero lo más interesante del exterior es la misma configuración del perímetro del edificio. Los muros, de aparejo isódomo poco cuidado, presentan, en todo su entamo, un alto zócalo, lo que resulta comprensible en el lateral norte, ya que en esta vertiente existe un desnivel de terreno mucho más acentuado. A continuación los lienzos de muro y coronando su alberca una sencilla cornisa en forma de gola -la más usual y frecuente en el siglo XVI-.

El muro de poniente se remata con una gran hastial, enmarcado, en este caso, por una moldura en forma de nacela y posibilitado por el hecho de que el tejado de toda la iglesia está unificado en uno solo a doble vertiente.

Los paramentos murales quedan interrumpidos por esos amplios y rudos contrafuertes o estribos en forma de talud, que, como hemos señalado, le imprimen al conjunto un aire pesado y macizo.

La torre, situada en la esquina sureste de la cabecera -localización no muy normal, como se ha dicho- queda ahogada por la serie de edificaciones que la envuelven, entre las que sobresale la misma casa rectoral. De base cuadrada, su estructura es muy simple; puesto que no aparecen en sus altos y lisos muros de cantería nada más que una simple moldura en forma de listel, que marca la separación entre la torre en síy su cuerpo de campanas. Este abre en cada uno de sus frentes un, muy escueto, arco de medio punto donde se alojan las mismas.

Si desde el punto de vista artístico el templo goza de una clara unidad estilística; una planta de salón con un marcado acento longitudinal contrarrestado, en cierto sentido, por los cuatro esbeltos pilares que originan los 9 tramos y que introducen una falsa impresión de planta centralizada, al igual que sucede en otros venas templos coetáneos de la diócesis de Jaén como en Torredelcampo, Iznatorafy sobre todo en el vecino de San Pedro de Alcaudete. Sin embargo tal concordancia o armonía, desde el punto de vista constructivo, no existe; es decir los elementos sustanciales del templo responden a un programa edilicio típicamente renacentista,

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mientras que los demás elementos arquitectónicos nos están indicando un cambio de planteamiento o una profunda mutación del diseño originario. Alteración que, hoy por hoy, no podemos precisar, así como tampoco presentar una secuencia detallada de su proceso constructivo.

No obstante, atreviéndonos a hacer una hipotética evolución de los hechos, éstos podrían quedar del siguiente modo. Ya desde el mismo momento -abril de 1539- en que el representante real ordenó a los alarifes Juan de Requena y Sebastián Ruiz y al entallador Juan de Reolid la planificación del nuevo municipio. En la plaza principal, como era de esperar, además de destinar un solar para los diferentes edificios públicos -carnicerías, ayuntamiento, etc.- se reservó un cuadrado de 40 varas de lado -33,4 mts- para la iglesia, incluyéndose aquí la sacristía, la torre y la casa del clérigo, -el largo total del templo rebasó estas medidas, mientras que en el ancho, incluída la sacristía y los estribos no se llegó-.

MURO PERIMETRAL NORTE.

Incluso, -en tal orden- se dispuso que « ... el lugar que se iba a fundar se llamase Valdepeñas, siendo multada toda persona que la llamase de otra manera en cien maravedises y que esta multa fuera ayudar a la obra de la iglesia y... que (está) tuviera por abogado a Santiago...5

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Si tales sucesos tuvieron lugar en abril de 1539, -el 17 de mayo se señalaban los vecinos admitidos a colonizar el municipio-. Sin embargo la edificación de la iglesia en sí no comenzaría hasta finales de los años cincuenta, Este supuesto puede venir abonado por el hecho de que, aun cuando se conserven los protocolos notariales valdepeñeros desde los mismos comienzos de la vida del municipio, sin embargo, hasta tales fechas no aparece registrado documento alguno relativo a la construcción del edificio, En una lógica actual, tal demora, en parte, se debería a que los pobladores buscarían primero construir sus viviendas -el refugio para sus cuerpos- y a posteriori el templo o el lugar donde encontrar paz y sosiego a su espíritu. Sin embargo lo razonable para el siglo XX tal vez no nos valga para el XVI. Por eso pensamos que la razón última de este retraso estaría motivada por la falta, casi constante, de recursos económicos por parte de la iglesia local para llevar a buen puerto el proyecto edilicio. Lo que se agravaría aún más por las múltiples exigencias y gastos que conllevaría el poner en marcha el complejo organigrama del nuevo municipio.

Hasta el punto que el Obispado tuvo que obligar, en varias ocasiones,

a otras parroquias de la diócesis con más posibilidades económicas para que ayudaran económicamente -se trata de auténticos préstamos- a la fábrica parroquial de Valdepeñas. As¡: por ejemplo, en 1560, los gobernadores del arcediano de Ubeda, y D. Francisco Téllez, canónigo de Jaén, obligaron a las parroquias de Pegalajar y . de Campillo de Arenas a prestarle a la de Valdepeñas 10.000 maravedís -26,6 ducados- cada una. Estas cantidades las recuperarían en el plazo de un año y se gastarían en «. .. proseguir las obras (de su iglesia) comenzadas a hacer..,»,6 Para cobrar tales cantidades D. Benito de Hierro, mayordomo de la fábrica parroquial, autorizó al maestro de cantería, vecino de esa villa, Cristóbal del Castillo -véase su biografía-.. 7 Poco tiempo después, en los mismos términos, de nuevo, al susodicho mayordomo le autorizaba a cobrar de la fábrica de la iglesia parroquial de Bélmez -debe tratarse de Bélmez de la Moraleda- y con el mismo fin la respetable cantidad de 100 ducados -37.500 mereveats-s» Al hilo de nuestra exposición queremos comentar que tal falta de recursos no es algo privativo de Valdepeñas de Jaén; sino que es una constante en la construcción de muchas parroquias de nueva erección

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canónica, en las que no se podía contar con ese importante caudal de rentas que, procedentes de los más variados orígenes, tales como donaciones, mandas testamentarias, dotaciones reales, etc., se habían ido acumulando a lo largo de los siglos.

INTERIOR. ÁNGULO NORESTE DEL TEMPLO Y CAPILLA MAYOR.

Además tan adversa premisa se acrecentaba aún mucho más en aquellos municipios de reciente creación o colonización ,como es el caso que nos ocupa e, incluso, en el de Mancha Real, cuya grandiosa iglesia parroquial, de planta muy similar a la de Valdepeñas, se pudo terminar, ya en el siglo XVII, merced a los préstamos que, por imposición del obispo de Jaén, cardenal Moscoso y Sandoval, le facilitó la parroquiasantuario de Cabra del Santo cnsto» Esta limitación de recursos económicos, probablemente, sea lo que justifique la sencillez general del edificio. En especial en aquellas partes, tales como portadas, ventanas, capilla mayor, etc. donde lo normal era enriquecerlas con algunos diseños ornamentales.

También podemos pensar que esta sobriedad respondería a las directrices que, en esta materia, se impusieron en la diócesis de Jaén en las

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últimas décadas del siglo XVI y que tuvieron sus raíces en el Concilio de Trento.

Por lo que la racionalidad en los gastos y la «austeridad en la estética», en palabra del profesor Galera Anareu," son las normas rectoras de la edilicia religiosa finisecular. Pero es que además, en este caso como venimos sosteniendo, tal racionalidad y austeridad no serían el fruto de una decisión libremente tomada; sino algo que, por las mimas limitaciones económicas de la Iglesia, venía condicionando desde el principio el normal desarrollo del proyecto edilicio valdepeñero.

Así pues, retomando la exposición cronológica de los hechos, para 1560, según el poder dado por el mayordomo de la fábrica de la iglesia, D. Benito de Hierro, a Cristóbal del Castillo, las obras estarían recién comenzadas. Se iniciaron por el testero -muro de la cabecera-, si bien lo que es la capilla mayor en sí no quedaría totalmente delimitada hasta pasado el año 1575. Pues el 12 de noviembre de ese año al otorgar testamento el prior de dicha iglesia, el bachiller D. Pedro Díaz, en una manda ordenaba ser enterrado en la capilla mayor, si estuviera terminada para el día de su fallecimiento y si no en el altar de Santa Catalina, donde estaba enterrado D. Benito de Hierro, mayordomo que fue de este tem-

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, Los años de más actividad constructiva irían desde 1560 a 1590, aproximadamente. Sobre todo a partir de 1565, en que nos aparecen, con mucha frecuencia, trabajando en su edificación, junto al ya mencionado Cristóbal del Castillo, varios canteros de origen vasco y vinculados a Alcalá la Real. Concretamente los hermanos Juan y Martín de Uzarza, naturales de Bolívar y Domingo de Uribe, natural de Mondragón -véase sus respectivas biografías-o

Por el testamento de este último, otorgado en 1586, sabemos que los tres se ocupaban de esta obra, al menos, desde 1566, desempeñando Juan de Uzarza un papel más relevante. Este hecho, el mismo nos lo ratifica en algunos documentos cuando dice que estaba trabajando « ... en la obra de la yglesia del señor santiago questa a mi cargo de hazer y en mi fue rrematada... ».12

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Con tal fin, Juan se uniría con su hermano Martín a la par, contrataría los servicios de, su amigo y paisano, domingo de Uribe, quien durante muchos años sería no sólo el cantero que les suministró toda la piedra necesaria para tal empeño; sino también el que les anticipó, en algunas ocasiones, importantes cantidades de dinero. Incluso, a finales de los

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años 70, una vez muerto Martín de Lizarza, Juan y Domingo se concertaron para terminar entre los dos dicho templo.

Así, dentro del primer caso citado, tenemos que el3 de marzo de 1572 Juan se obligaba a pagar a Domingo 9.544 merevedis, que aún le restaba debiendo de la piedra que la había sacado y labrado para tal obte." Poco tiempo después, concretamente el 26 de junio los dos hermanos se comprometían a devolver 9.000 maravedís, que Domingo les había prestado. 14 Yen el tercer caso -el de la mancomunidad laboral entre Juan y Domingo--, señalaremos que, el 14 de octubre de 1577, Juan, tras reconocers-otre vez más que estaba a su cargo « . .. la obra de la yglesia de vetdepencs con cienes condiciones que se contienen en la escritura que paso ante rrodrigo alvarez... agora -sigue diciendo el escribano- a por bien de se concetter con domingo de uribe maestro de cantería para que todo lo que queda por hazer en la dicha obra de la dicha yglesia ... sea a cargo de anbos por ygual a perdida o ganacia... ».15 Este último documento, aparte de notificarnos la creación de la sociedad laboral entre Juan y Domingo, es sumamente interesante porque nos transmite otras dos novedades dignas de comentarse. En primer lugar que toda la documentación relativa a las condiciones y remate de la obra en Juan de Lizarza habían sido registradas por el escribano Rodrigo Alvarez yen segundo lugar que el fin por el que se asocian era para acabar lo que aún restaba por edificar en dicho templo.

No obstante, por lo que atañe a la primera noticia comentada, debemos decir que, si bien en el Archivo Histórico Provincial de Jaén se conservan los legajos de este escribano, que van desde 1546 al 1579, en donde necesariamente tendría que estar esa escritura de adjudicación de obra; sin embargo, después de revisarlos detenidamente, no la hemos localizado. Y respecto a lo segundo, es decir que se unieron para acabar las obras, pensamos que, en realidad, su final no sería tan rápidamente como el documento en cuestión nos hacer presuponer. Pues a partir del año siguiente a esta concertación laboral-1578- Juan, quien a su vez ffevaría la edificación de la iglesia de Noalejo y otros diversos trabajos en la iglesia de Ntra. Sra. de la Consolación de Alcalá Real, desaparece de los protocolos notariales, por lo que creemos que hubo de morir -acaso presintiéndo el final de sus días es por lo que aceptó, en febrero de 1578, de los frailes de este convento alcalaíno una capilla de enterramiento en su iglesia como pago a sus trabajos en la mtsme-i-."

A partir de esta fecha, Domingo de Uribe sería el maestro-director de las obras, aunque su comportamiento personal no fue, incluso desde

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bastante tiempo atrás, nada correcto. Así sabemos por algunas mandas de su testamento -donde hace una verdadera confesión buscando, sin duda, la paz de su conciencia y su salvación eterna- que no sólo no había abonado a sus compañeros de trabajo diversas cantidades de dinero que para tal fin le habían sido dadas por el mayordomo de la iglesia parroquial de Valdepeñas; sino que temolén el mismo mayordomo había sido objeto de sus estafas. Por esó declaraba que « . . . estaba a cargo de hacer la obra de la yglesia de valdepeñas y el dinero que iba gastando... me lo pagaba el beneficiado moriana mayordomo... de la dicha yglesia y con el dicho mayordomo... yo hice cuentas y le di por pagados diez myll maravedies y porque el dicho beneficiado es muerto y la deuda la debia mando que se paguen los dichos... maravedises a su sobrina... la hija de su hermana por descargo de mi conciencia e porque hubo y yerro ... ».17 No son éstas las únicas mandas testamentarias que domingo de Uribe, en descargo de su conciencia, había confiado a sus herederos para un conocimiento más profundo de este personaje véase su biografía-o Esta falta de compañerismo y de transparencia con el mayordomo, que también afectaría al proceso edilicio del templo, llegaría a oídos del provisor del obispado, quien le pidió un detallado informe sobre la marcha de las obras de la iglesia, a la par que ordenaba al mayordomo que le retuviese todo el dinero que se le adeudase. De nuevo por su testamento sabemos que Domingo cumplió lo ordenado por el provisor, redactando un amplio informe ante el escribano Cristóbal de Arce -lamentablemente tampoco aparece en los protocolos de este escribano tal dictamen-; mandando a sus herederos que lo llevasen a Jaén, a la par que solicitaba del provisor la liquidación de lo que aún se le debía y que según el mismo afirmaba « •.. debenme de la obra y maestria en la dicha yglesia de valdepeñas veynte y quatro ducados... y es mi voluntad que quatro ducados... se que den en la dicha yglesia para ayuda de la dicha obra... y los otros veynte ducados vengan a mis herederos... ». 18 Probablemente ya no volvería más a dirigir las obras, pues su muerte hubo de producirse entre octubre de 1586 -fecha de su testamento- y enero del año siguiente, en que su viuda, Catalina de Lara, vendió algunas de las posesiones que su marido había dejado en Valdepeñas. 19

A la muerte del maestro pensamos que las obras del templo irían bastante avanzadas; los muros perimetrales estarían a la altura de su alberca y, en consecuencia, no quedaría por hacer más que las primitivas

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cubiertas -las actuales tal vez sean debidas a la magnificencia del obispo fray Diego Mela de Portugal (1795-1810)-.20 Paralelamente a la actuación de los hermanos Lizarza y de Domingo de Uribe e incluso antes que ellos, ya teníamos trabajando en esta iglesia a Cristóbal del Castillo. Su actividad iría desde 1560 al 1584, en el primer año señalado recibía el poder del mayordomo para cobrar los préstamos señalados y en el segundo otorgó su testamento.

INTERIOR. ÁNGULO SUROESTE DELTEMPLO.

También junto a este Cristóbal del Castillo aparece otro cantero con el mismo nombre y apellido, natural de Málaga, trabajando por los años 1559 y 1560. Tal vez sea uno de esos muchos canteros errantes, que iban de un lado para otro ofreciendo sus servicios y cuya actuación se centraría en los comienzos de la edificación de esta iglesia, pues su rastro en los protocolos notariales se nos pierde a partir de segundo año señalado -1560-.

Por último, hemos dejado para este momento un importante interrogante, que ya nos planteamos al comienzo de este trabajo, ¿quién sería el autor de las trazas de esta espaciosa iglesia parroquial? De antemano

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.(

rechazamos la idea, defendida por algún investigador jiennense, de que las trazas serían dadas en 1539 por el entallador Juan de Reolid, quien, como vimos, participó, junto con dos alarifes en hacer el replanteo urbanístico del municipio. Reolid y sus compañeros se limitanan, solamente a señalar sobre el terreno el solar sobre el que en día se edificaría el templo.

Ju

La decisión y la obligación, en última instancia, no sólo de conducir el proceso edilicio sino de dar todos los pasos necesarios para que este se pudiera materializar era, efectivamente, de la Iglesia y ante ello ¿ qué arquitectos o maestros de cantería se ocupaban, hacia 1559 aproximadamente, de los diversos proyectos edilicios promovidos por la diócesis?; básicamente tres. Por un lado Andrés de Vandelvira, quien por esas fechas -155~ en que se inició en serio la edificación de este templo, estaba en la cumbre de su carrera profesional con la obra de la catedral de Jaén. Respecto a una hipotética intervención suya en este templo podemos decir que, si bien el dificio nos ofrece una planta de salón de testero casi plano, muy similar a la de la misma catedral jiennense, lo cual nos puede llevar a atribuirle la autoría de este diseño; sin embargo otra serie de detalles, como el tipo de pilar empleado a la misma morfología de los contrafuertes, nos inducen a desligarlo del mismo.

En segundo lugar tenemos a Alonso Barba, el discípulo dilecto y predilecto de Vandelvira, quien, aun cuando para esos años ya fuera un hombre maduro -estaría alrededor de los 35 años-, sin embargo, siguiendo al profesor Galera Andreu, -hasta ahora su mejor biógrafo-, su definitivo e individualizado despegue profesional no tendría lugar hasta 1575, año de la muerte del gran Andrés de Vandelvira, de quien había sido, hasta ese momento, su aparejador en las obras de las catedral de Jaén,21 y a cuya sombra había ido progresando profesionalmente. No obstante, pensamos que, por esta sola razón, no lo debemos de excluir, totalmente y a priori, puesto que la jerarquía eclesiástica diocesana le pudo haber encomendado el trazado de este templo, al tratarse de una obra de segundo orden, dentro del amplísimo programa edilicio de la diócesis, tendente a dotar de templo parroquial a todos los pueblos necesitados de él. Además, coetáneamente, se iniciaban otros templos como el de Iznatoraf o la parroquia de Torredelcampo, ya mencionadas, de planta muy similar a este de Valdepeñas y en los que, de una manera u otra, intervino Alonso Barba.

En tercer lugar tenemos al gran Francisco del Castillo, quien para esas fechas ya llevaba algunos años de vuelta de Italia y se encontraba

25LugÚl

realizando algunos trabajos para la Diócesis, como su intervención en San IIdefonso de Jaén o en la parroquia de San Pedro de Alcaudete.

Precisamente esta última nos puede dar mucha luz para una posible atribución del templo de Valdepeñas a Castillo, ya que nos encontramos con idéntica planta, sólo que, en vez de 4 pilares, el templo alcaudetense tiene 8. Además los pilares de ambas iglesias son muy similares y el tipo de bóvedas de Alcaudete -vaídas para las naves y de medio cañón para las capillas de la cabecera- son las mismas que propugnamos y proponemos, originariamente, para Valdepeñas. Por todo ello creemos que no sería muy descabellado pensar en una posible intervención en la iglesia de Valdepeñas del gran maestro del manierismo jiennense. y, aunque no aparezca en el templo, con claridad, ningún rasgo estilístico característico de este artista, debemos pensar que estas notas distintivas se nos muestran, básicamente, en la organización de portadas, ventanas, bóvedas y en este caso concreto ni los accesos al templo se adornan con portadas, como es lo normal, ni tampoco las bóvedas son las originarias.

Finalmente, también podemos albergar la sospecha, dado que la presencia de Juan de Lizarza en estas tierras abaciales está documentada desde mediados de siglo, de que sea él el autor de las trazas. Pues, en muchas ocasiones, estos maestros de cantería, aún cuando no tuvieran una profunda formación teórica -esto es lo más normal-; sin embargo, desde el punto de vista práctico eran unos auténticos profesionales de la edilicia, levantando, en la mayoría de los casos, monumentos de una gran calidad y complejidad, por lo que gozaban de la total confianza de los patronos o comitentes, en este caso la Iglesia.

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NOTAS: 1.- Ostenta el título de ciudad desde 1917. Revista O. Lope de Sosa. Número 50, P. 61.

2.- Con anterioridad había existido varios intentos fundacionales, pero sin resultado positivo.

3. - Anónimo. 1922. P. 71-82.

4. - Pt:REZ RODRfGUEZ. Virginia. 1988. P.p. 193-198.

5.- Anónimo. 1922. P. 227.

6.- A.H.P .J. Legajo 10538. Folios 91-91 vt.º.

7.- No confundir con otro Cristóbal del Castillo, natural de Málaga.

8.- A.H.P.J. Legajo 10538. Folios 188-118 vt.º 9.- GILA MEDINA, Lázaro. 1982. P. 19.

10.- GALERA ANDREU, Pedro. 1982, P. 18.

11.- A.H.P.J. Legajo 10544. Folios 289-94.

12.- A.H.P.J. Legajo 10543, folios 288-89 vt.º 13.- Idem. Folio 288 .

14.-ldem. Folios 107-107 vt.º 15.- A.H.P.J . Legajo 467. Folio 513 vt.º 16.- Idem. Folios 88 vt.º O 89.

17.- A.H.P.J. Legajo 4800 . Folios 221 vt.º 18.- Idem. Folio 222.

19.- Idem. Folios 19 vt.º- 20.

20.- MONTIJANO CHICA, Juan. 1986. Pp. 174-76.

21.- GALERA ANDREU, Pedro , 1982. Pp. 3968.

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BUSCANDO NUESTRA HISTORIA LOS COADJUTORES DE LA PARROQUIA DE VALDEPEÑAS Rafael ValdJvla Castro.

En el último número de nuestra revista salía un trabajo mío sobre todos los Curas Párrocos que hubo en Valdepeñas. Aunque los Coadjutores no tuviesen tanta importancia como ellos, sin embago, al ser sus colaboradores más cercanos y eficaces , su trabajo y su influencia incidieron de forma especial en la marcha de la Parroquia y también en la del pueblo. Además, todo lo que sea recuperar personas o trozos de nuestra historia bien merece la pena insertarlo en el entramado de ella.

Lugia28

Tuvieron diversos nombres a través de los tiempos. Aparecen hasta el siglo pasado como «Curan, palabra de origen latino que significa «cuidado», «atención», «solicitud», «administración», «dirección», etc.; algo de todo eso tiene la misión del sacerdote respecto a las almas a él encomendadas. El Cura solía ser el primer Coadjutor, ya que se habla, en ocasiones, del «Teniente de Cura», que debía ser el segundo Coadjutor. Tenía sus obligaciones específicas, además de ser el principal colaborador del Prior o Párroco; hacía las veces de éste en su ausencia, si el Obispo no designaba un Regente o Sustituto temporal. En el Sínodo Provincial de 1624, se hace, con frecuencia, corresponsable al Cura juntamente con el Prior en muchas de las obligaciones parroquiales. Esto indica su importancia en la tarea pastoral y evangelizadora de nuestro pueblo.

Posteriormente se le llamó «Coadjutor» porque ayudaba o compartía con el Párroco las tareas parroquiales. Esta denominación ha perdurado hasta nuestros días; todavía se acostumbra a llamarlos así en la conversación normal.

En la actualidad en los documentos oficiales se les llama «Vicarios Parroquiales», cuya significación es la del que hace las veces o sustituye a otro. Vemos que son tres formas distintas de indicar una misma realidad sacerdotal: el que comparte y colabora con el Párroco en las tareas parroquiales.

Generalmente, era el que administraba los sacramentos del bautismo y del matrimonio y también celebraba las exequias o entierros. Por ello, la mayoría de los valdepeñeros se nos hizo cristianos por mediación de ellos; igualmente nuestros antepasados generalmente sería casados o enterrados con la intervención de los mismos.

Vemos que la duración en sus cargos varía entre unos meses de alguno y los treinta y cinco años de otro. Esto hace que coexistieran dos coadjutores durante algún tiempo; los de más larga duración compartieron este cargo de Coadjutor con varios compañeros consecutivos, que se marchan de la Parroquia a otro destino o que se mueren, mientras ellos perseveran en nuestro pueblo.

Pongo a continuación la relación de los mismos por orden cronológico, reseñando la fecha en que aparecen por primera vez en los libros parroquiales y la fecha en que se anotan y que se pudieron marchar algo después. Se dan sus apellidos, sus nombres y su titulación académica.

29 Lugia

DESDE. ..

1579-09-14 1584-03-24 1597-02-15 1605-09-11 1608-02-04 1609-01-09 1610-08-10 1611-02-06 1615-01-23 1621-09-11 1622-06-29 1634-04-30 1635-12-13 1644-05-29 1644-06-26 1648-05-13 1655-01 -26 1669-01-30 1670-07-06 1691-05-05 1701-10-02 1702-05-28 1707-12-09 1720-08-30 1724-12-18 1753-16-12 1755-02-11 1776-09-08 1787-11-01 1789-11-23 1792-02-27 1800-04-23

Lu¡¡úJ 30

HASTA

1585-11-12 1585-01-25 1609-02-16 1633-11-30 1608-03-15 1610-11-29 1621 -07-01 1624-04-04 1615-09-13 1622-02-24 1632-10-05 1635-11-25 1642-02-03 1646-04-29 1649-09-09 1655-05-14 1656-01-20 1671-06-01 1694-10-21 1701-08-06 1702-04-19 1707-09-19 1749-11-23 1724-11-21 1758-11-05 1784-08-22 1772-11-29 1803-10-13 1802-03-29 1854-02-02 1817-08-31 1830-01-07

APELLIDOS

de Castro de la Cera de Robles Malina González de Lara de Mirez Coba Naranjo Viedma Leal deCalvente López Moreno de Velasco Pérez de Segovia de Armenteros Betia Marín Bella Marín Galindo Pastrana Jiménez Calvente de Tones Díaz de Torres de la Cámara y Vizcaino de Quesada Ballartas Sánchez de Aguilar RuizPeral Ruiz de Contreras y Medina del Pozo Arias Aranda Gallego de Castro Cortes Extremera de Arias Melero RuizMalina de Ex1remera y Arias Martínez Gallego

NOMBRE

TITULO

Gabriel Licenciado Alonso Licenciado Juan Licenciado Pedro Juan Licenciado Juan Juan Licenciado Cristóbal Licenciado Tomás Licenciado Tomás Licenciado Diego Licenciado Luis Licenciado Simon Licenciado Antonio Licenciado Antonio Licenciado Juan Licenciado Martín Licenciado Lázaro Licenciado Dionisia Licenciado Cristóbal Licenciado Salvador Maestro Francisco Licenciado Juan Licenciado Juan Licenciado Juan Francisco Antonio Juan Antonio Jase Antonio Juan José Juan José Juan Antonio Francisco

DESDE. ..

1802-09-06 1803-05-29 1806-11-29 1819-01-01 1840-01-09 1840-04-05 1846-06-13 1852-07-08 1852-10-30 1856-12-27 1858-06-1 7 1858-10-10 1867-04-20 1869-03-01 1869-08-02 1875-05-17 1876-05-04 1878-04-05 1878-07-30 1882-06-10 1893-10-02 1898-12-26 1899-12-03 1900-08-06 1901-01 -06 1901-02-04 1901-11-12 1905-06-09 1906-07-15 1908-01-05 1909-10-19 1912-03-03

HASTA

1841-11-27 1808-02-15 1848-02-23 1919-10-20 1852-11-23 1846-04-30 1852-06-05 1867-04-09 1856-01-12 1857-04-14 1859-09-29 1893-10-01 1869-01-09 1871-09-14 1874-12-01 1876-0314 1878-03-26

APELLIDOS

Te 110 de Arias Ruizde Malina de Ureña y Anguita Mancilla Jiménez Callejón Jiménez Ocaña Castilla Monserrat y Vargas Gutiérrez Camacho Armilla Nuevo Parreño García Bueno Ruiz Valenzuela Gómez 1881-10-31 Díaz 1889-01-17 Mena 1896-12-19 Rodíguez Hidalgo 1899-12-13 Córdoba Córdoba 1900-07-27 Garrido y Gallego 1908-01 -10 Pérez García 1907-05-02 Navarro Gómez 1901-12-08 Salís Pedrajas 1905-05-28 Jiménez Machín 1906-06-03 Hernández Martos 1921-06-06 Godino Montes 1913-11-27 Marín Mardemont 1913-11 -27 Palomo Pelaez 1939-08-36 Jorquera del Castillo

NOMBRE

TíTULO

Esteban José José Serafín Cristóbal Licenciado Pedro Antonio Pedro Bernardino Manuel Amador Rafael Cristóbal Amador Bachiller Fausto José María Diego Francisco Pablo Antonio Licenciado IIdefonso Manuel Juan Leopoldo Francisco Bachiller Diego Fermín Francisco Licenciado José Antonio Rafael Juan de Dios Pedro Pedro

31 Lugia

DESDE. ..

HASTA

1913-07-10 1914-03-08 1915-09-03 1923-09-08 1940-09-28

1915-09-03 1930-01-19 1930-01-19 1933-04-27 1942-10-01

LUfjÚJ 32

APELLIDOS

Segura Orzaez Hueso Pérez Galán Martos Martínez Cortés RuizAlba

NOMBRE

Francisco Manuel Diego Santiago Miguel

TíTULO

GENEALOGíA DE LOS MARQUESES DE NAVASEQUILLA Ramón Espanta/eón Jubes

Don Antonio GARCIA DE QUESADA Caballero de Santiago. Año. 1796. Expte.

Nacido en Jaén .

Ba.: A.H.N. Carlos GARCIA DE QUESADA Y GARCíA DE QUESADA Caballero de Calatrava. Año 1864. Expte. 275.

Nacido en Valdepeñas de Jaén , el 19 de Septiembre de 1833. merced en Real Cédula de 23 de marzo de 1863, y Título en Real.

Decreto de 27 de enero de 1864.

PADRES Bias GARCíA DE QUESADA No. Valdepeñas de Jaén, el 26 de diciembre de 1799.

Po. Marqués de NAVASEQUILLA. Co. Valdepeñas de Jaén, el 7 de febrero de 1823.

María Francisca GARCIA DE QUESADA. Na. Granada, el 6 de julio de 1801.

ABUELOS PATERNOS Pedro GARCíA DE QUESADA. No. Valdepeñas de Jaén, el 22 de abril de 1770.

Po. Marqués de NAVASEQUILLA. Doctor en Derecho Civil y Canónico.

To. En Jaén, el 20 de noviembre de 1839.

Hijos: Bias y Francisco.

33 L Uffia

Ca. Alcázar de San Juan, el 8 de febrero de 1798.

María Jacinta AGUILERA. Na. En Alcázar de San Juan, el 7 de noviembre de 1771.

ABUELOS MATERNOS Bias GARCIA DE QUESADA. No. Valdepeñas de Jaén, el 26 de Noviembre de 1772.

To. En Jaén, el 26 de enero de 1838.

Hijos: Bias, María Francisca (Casada con Don León Esteban) Molino, Senador del Reino), Vicenta y María de Bracia.

Ca. Vélez-Málago, el 15 de Mayo de 1797.

María Guadalupe DUSMET. Na. Fuenterrabía.

BISABUELOS PATERNOS PATERNOS Bias GARCíA D. No. Jaén, el 1 de Febrero de 1744.

Po. Caballero 24 de Jaén.

Alférez de Fragata.

Primer Marqués de NAVASEQUILLA (30-8-1787).

Caballero de Santiago en Real Cédula de 26-11-1766, y en Real Decreto de 27-2-1767.

Ca. Valdepeñas de Jaén, el 17 de mayo de 1797.

Isabel Ana LOPEZ GONZALEZ y GALLEGO. Na. Valdepeñas de Jaén.

To. Valdepeñas de Jaén, el12 de diciembre de 1791.

Hijos: Francisco, Pedro y Bias.

BISABUELOS PATERNOS MATERNOS Francisco Andrés AGUILERA y FIGUEROA. No. Alcázar de San Juan.

Po. Maestrante de la Real de Ronda en 27 de abril de 1788.

Hidalgo en Padrones de 1785, 1793 Y 1794.

Gobernador del Gran Priorato de San Juan en 1803.

Alcalde de la Sta. Hdad. por el E.N. To. Alcáza de San Juan, el2 de agosto de 1817.

Hijos: Francisco, María del Rosario, María Teodora, María de los Dolores y Jacinta.

LU¡¡Úl34

Ca. Membrilla, el 17 de octubre de 1768.

Elvira Blanca MuĂąoz y Salazar.

Na. Membrilla, el12 de diciembre de 1780.

BISABUELOS MATERNOS PATERNOS Los propios bisabuelos partemos paternos .

35 Lugia

BISABUELOS MATERNOS MATERNOS Vicente DUSMET y BARRABÁN No. Trapani (Italia).

Po. Teniente General.

Caballero de Santiago en Real Cédula de 17 de octubre de 1789, y en Real Decreto de 21 de Noviembre de 1789.

Ca. fuenterrabía, el 9 de abril de 1780.

Maria de la Cruz Ladrón de Guevara e Icuza.

Na. Fuenterrabía.

To. En Madrid, el 7 de octubre de 1796.

Concepción, Francisca y Manuel.

Don Francisco GARCíA DE QUESADA Y GONZÁLEZ MARTíNEZ DE ATOCHA Y GALLEGO. Caballero de Carlos 111. Año de 1790. Expte. 363.

Nacido en Valdepeñas de Jaén, el 23 de abril de 1769.

Caballero por Real Decreto de 12 noviembre de 1789, y aprobado por Real Cédula de 8 de enero de 1790.

Hijo de Bias García de Quesada, Caballero de Santiago y Primer Marqués de NAVASEQUILLA. Don Bias GARCíA DE QUESADA Y MARTíNEZ DE ATOCHA. Caballero de Santiago. Año 1767. Expte. 3311.

Nacido en Jaén, el1 de febrero de 1744.

Caballero de Santiago por Real Cédula de 26 de noviembre de 1766, y aprobado por Real Decreto de 27 de febrero de 1767.

Alférez de Fragata de la Real Armada.

PADRES Francisco Javier García de Quesada.

No. Jaén, el 19 de agosto de 1711.

Po. Caballero 24 de la Ciudad de Jaén.

Hijodalgo en 1742.

Alcalde de la Sta. Hdad. por el E.N., en 1754, en Jaén.

Alcalde de Valdepeñas en 1763.

To. En Jaén, el 11 de julio de 1789, ante Francisco Antonio.

Sánchez (en mancomún).

Hijos: Bias José, Pedro Tomás, Francisco de Paula, Diego, Francisco Javier, Juan Bautista y Antonio García de Quesada.

Lu¡¡ia 36

Ca. Jaén, el1 de enero de 1739.

María Josefa Martínez de Atocha.

Na. Jaén, el 29 de noviembre de 1718.

ABUELOS PATERNOS Bias Garcia de Quesada.

No. Jaén, el 1 de marzo de 1675.

Po. Hijodalgo en 1736 y 1737.

To. En Jaén, el 19 de marzo de 1754.

Hijos: Pedro Gregario, Francisco Javier, Jerónima del Carmen, Rosa Jesús y Juan Jacinto (+).

Ca. Valdepeñas de Jaén, el 9 de febrero de 1695.

Catalina González de Medina.

Na. Valdepeñas de Jaén, el 2 de marzo de 1672.

ABUELOS MATERNOS Juan Martín Martínez de Atocha.

No. Jaén, el 21 de julio de 1676.

Po. Alcalde de la Sta. Hdad.

To. En Jaén, el 17 de noviembre de 1724.

Hijos: María Josefa y Diego José.

Ca. Valdepeñas de Jaén, el 9 de febrero de 1718.

Ana Santiago Ruíz de Contreras.

Na. en Valdepeñas, el 29 de julio de 1689.

BISABUELOS PATERNOS PATERNOS Juan García Medina del Rincón.

No. Jaén.

Ca. Jaén, el 16 de Noviembre de 1671.

Luciana de Quesada y del Salto.

Na. Jaén.

To. En Jaén, el 22 de diciembre de 1683.

Hijos: Francisco, Antonio y Bias.

BISABUELOS PATERNOS MATERNOS Pedro González de Medina.

Po. alcalde en 1700.

37 Lugia

To. En Valdepeñas, el 16 de Septiembre de 1700.

Hijas: María, Isabel Ana y Catalina.

Ca. Valdepeñas, el14 de Octubre de 1657.

Francisca de Rozas y Pareja.

BISABUELOS MATERNOS PATERNOS Diego Martínez de Atocha y Aguilar.

No. Fuerte del Rey. Ca. Jaén, el 16 de Noviembre de 1671.

Luciana de Quesada y del Salto.

Na. Jaén.

To. En Jaén, el 22 de Diciembre de 1683.

Francisca de Rozas y Pareja.

BISABUELOS MATERNOS PATERNOS Diego Martínez de Atocha y Aguilar.

No. Fuerte del Rey. Po. Recibido como Hidalgo en Jaén, en 1687.

To. En Jaén, el 11 de mayo de 1727.

Hijos: Juan Ramón, Juan Martín y Catalina.

Ca. Jaén, el 10 de agosto de 1671.

María de Aillón y Gutierrez.

Na. Jaén.

BISABUELOS MATERNOS MATERNOS Juan Ruiz de Contreras.

No. Valdepeñas.

Po. Alcalde.

To. Valdepeñas, el 6 de Junio de 1717.

Hijos: Juan, Francisco, María, Ana, Santiago y María.

Ca. Valdepeñas, el 19 de octubre de 1671.

María González de Medina y Mozas.

Na. Valdepeñas.

Don Pedro Tomás GARCíA DE QUESADA Y MARTíNEZ DE ATOCHA GONZÁLEZ DE MEDINA Y RUIZ DE CONTRERAS.

Lu¡¡ú:l 38

Caballero de Carlos 111. Año 1791. Expte . 572.

Nacido en Jaén, el 27 de septiembre de 1745.

Canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Jaén.

Caballero eclesiástico por Real Decreto de 2 de diciembre de 1791.

Hermano de Bias José Garcia de Quesada, Caballero de Santiago.

NOTAS: BA. Archivo Histórico Nacional.

No-Na. Nacido, a; natural.

Po. Titulo, oficio.

Co. Casado en.

To. Testamento.

39 L ugía

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J

.... ...

NUESTRA PATI?IA

CI/ICA

EL TRAJE POPULAR VALDEPEÑERO:

La mujer Por J. Carlos Navasal Huertas)

Ana Extremera Aceituno y Manuel Nieto Ortega, dos valdepeñeros de finales del siglo XIX.

Lugia40

Cuando tratamos el origen en el tiempo del traje regional caernos fácilmente en un error ampliamente extendido que es el de creer que su procedencia es muy antigua remontándose varios siglos atrás, aunque desde luego, en él existen algunos elementos de remota antigüedad justificados por el clima, el género de vida, además de otros condicionamientos socioeconómicos. El traje popular tal corno hoy lo conocernos tiene su origen en el siglo XVlII, siendo su época de esplendor extensible a la prirnera mitad del s. XIX.

Al comenzar el s. XIX tras haberse producido dos importantes hechos Históricos la Revolución Francesa y la Revolución Industrial, los conceptos de producción textil su utilización y uso cambian notablemente la forma del vestir occidental. Estos avances en la industria textil contribuyeron enormemente a los cambios en la indumentaria.

En la forma de vestir inciden una serie de elementos, tales como la protección contra las inclemencias del tiempo (Telas gruesas en invierno y más ligeras en verano) o incluso en el uso del color, (fuerte en zonas frías y desvaído en zonas templadas como Andalucía). Factor de especial interés es el de la diferenciación social; no visten lo mismo jóvenes que viejos, pastores que labradores...

Al abordar el traje popular de Valdepeñas nos encontramos que como en el resto de los pueblos de la provincia e incluso la capital, Jaén, tenemos pocos datos que hagan referencia a la manera de vestir, de sus usos y formas.

Si bien, su origen y desarrollo por analogía al contexto general de la evolución del traje sea el mismo que describíamos al principio, sus elementos nos serían totalmente desconocidos si no hubiesen perdurado en el tiempo yen la memoria de nuestros mayores. Hemos de considerar sin embargo, que precisamente en el traje de Valdepeñas no partimos precisamente sólo de la tradición oral pues de él tenemos representaciones gráficas de la época en la que aún se usaba y de la mano de reconocidos pintores costumbristas a finales del s. XIX tales como Manuel de la Paz Mosquera y el reconocido Pedro Rodríguez de la Torre, que tomaron apuntes del natural de tipos coprovincianos (precisamente de valdepeñeros) en algunas de sus composiciones, pues las clases populares siempre inspiraron un buen número de sus cuadros.

Ya entrado el s. XX en su primer cuarto concretamente el año 1925 se organiza en Madrid la Exposición del Traje Regional a la que concurre la provincia de Jaén con una magnífica representación dentro de la cual figuran unos maniquíes con trajes tipo de Valdepeñas (una mujer y dos hombres), algunas de las prendas que formaron parte de la misma pueden verse hoy día en el Museo del Pueblo Español de Madrid constituido a partir de tal acontecimiento.

En la década de los cuarenta nace una institución, La Sección Femenina, interesada por todos aquellos aspectos de la cultura popular en esos momentos en grave proceso de desaparición (canciones, bailes, indumentaria tradicional...) que trabaja en diferentes pueblos de la provincia realizando trabajos de campo, que si aún no han tenido una

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repercusión en medios de comunicación escrita (esperemos que en un futuro próximo salgan a la luz) si dieron lugar una vez extinguida esta institución a lo que hoyes la «Asociación Provincial de Coros y Danzas «Lola Torres» de Jaén que, como su antecesora, trabaja y se preocupa de este tesoro perdido de los valores del sentir popular. En el contexto de esta Asociación, y marcado por sus objetivos de defender y hacer públicos los elementos del pueblo en sus diversas manifestaciones, expongo de manera sencilla el trabajo de campo realizado durante mi estancia en Valdepeñas durante los meses de Agosto a Diciembre de 1990.

DIFERENTES TIPOS DEL TRAJE DE MUJER

Como apuntaba en la introducción al hablar del traje popular no podemos etiquetarlo como un modelo único e invariable de una persona a otra, si el traje está condicionado por varios elementos (Clima, economía, ocasión en la que se viste) es de suponer que aun cuando existan en él piezas uniformes, otras dependerán del momento o situación en la que se utilice.

DESCRIPCIÓN DEL TRAJE DE MUJER TRAJE DE DIARIO

A diario la mujer cubría el busto con armillas de satén o algodón brillante ajustadas al cuerpo y amplias a la cintura, a modo de faldilla que caía sobre el refajo. No solían estar adornadas de una manera especial, pues su único adorno la constituía la manera en la que estaban confeccionadas, esto es,

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unas jaretas que recorren toda la espalda y que en la cintura se convierten en pliegues entallados, que forman el faldón antes dicho .

Las mangas solían ser rectas y estrechas yen su boca unos tres o cuatro botoncillos de forro; otro tipo podía ser rizadas y unidas en un puño de la misma tela de la camisa o de terciopelo. Cuello a la caja, sin más adorno, y abiertas al pecho con botones de forro o de cristal.

Sobre la armilla se llevaba un pañolillo de merino al talle, generalmente de color negro o marrón, con estampadas en colores (naranja, amarillo o rojo) distribuidos en una cenefa a todo lo largo del pañuelo, ocupando el centro pequeñas florecillas salteadas. En invierno se sustituía por tocas de lana o de felpa con grandes flecos que llaman «de moco» muy apreciadas por su vistosidad y colorido. Para salir a la calle, y también como prenda de abrigo utilizaban «el toqu íll ón» de lana tejida y flecos rizados, que cubría desde la cabeza casi todo el cuerpo.

En verano los pañuelos de merino se sustituían por los pañolones de algodón en colores claros, predominando los llamados «de asendría» en color rojo y estampado blanco o viceversa. También en esta época del año se usaban unas toquillas triangulares que denominan de pelo de cabra confeccionadas en hilo de seda brillante en variados colores, pero predominando la de color canela.

La siguiente prenda, y quizás la que más muestras presenta es el refajo; a diario suelen ser bastante sencillos, tejidos en telares locales, unas veces a listas verticales lisas y de un grupo de unos 2 cm., en colores vivos; este tipo de refajo es también el utilizado para las faenas del campo. A veces incluso puede estar bordado en su parte inferior. Otro tipo es el adornado con aplicaciones de tela (pañete, lanilla o bayeta) llamados «de pícao», cuyo resultados es conseguir el contraste entre los diferentes colores que componen la tela que se recorta y aquella a la que se aplica.

De todos ellos, sin duda, los más utilizados son los adornados con cintas de terciopelo o pana lisa cosidas en los bajos en horizontal al sentido de la tela, o componiendo sencillos dibujos en combinación con recortes de pañete. Todos estos tipos se rematan en su borde inferior con una puntilla de ganchillo en hilo o lana, también en cordón trenzado llamado «de llave».

Otra prenda de uso diario es la faltriquera, llamada aquí «bolsillo de cadera» realizada en pana, paño o ganchillo a punto enano.

El mandil constituye quizás la prenda más cuidada y elaborada del traje de diario, pues son diversas las formas de realización y materiales

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con los que se hace. El corriente y más rudimentario es el tejido en algodón en colores azul y blanco, predominando este último, a listas; es de gran tamaño y suele llevar bolsillos. Este tipo de mandil también puede realizarse en lana, pero esta vez en distintos colores . Otros son en hilo bordados en calado, en tul bordado, adornados con encajes de bolillo, con encajes de ganchillo, o también al deshilado. La tela con que se realiza es la batista blanca muy fina, casi transparente, el hilo color beige o incluso tonos pastel.

Las medios o calcetines son en lana o hilo de inferior calidad, tupidas y tejidas a listas horizontales en vivos colores, que se combinan con el negro; también las hay hechas a máquina, con listas muy finas y bordadas en vertical a cadeneta; otras son negras bordadas en colores, con sencillos dibujos de lana o seda.

El calzado lo constituían las alpargatas de paño negro, cerradas de pie y ajustadas con hebilla.

TRAJE DE PASEO

Una variante del traje utilizada para asistir a los rezos en las iglesias, visitas de cumplido, asistencia a velatorios y pésames.

Comparte prendas en común con el traje de fiesta que después describiremos.

Las armillas en esta ocasión son en seda estampada o raso liso, predomina el primer tipo aunque también las llevaban de terciopelo con encaje negro en cuellos y manga. Las de seda utilizan agremán haciendo dibujos en cuello y mangas, así como encaje de tul bordado sin rizar al puño y en la pechera de las mismas, pieza ésta que

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constituye el máximo adorno y el más cercano también a la moda del siglo XIX, del que esta pieza del traje está directamente influenciada.

La forma es entallada de cuerpo, con costadillos. Otras son una especie de blusón manchego al que dan forma al ajustarlo con el mandil.

Debajo de las armillas llevaban otra camisa de hilo o cáñamo ricamente adornada con tiras bordadas y encajes de cuello, mangas y delanteros que las jóvenes solían lucir cubiertas con corpiños de terciopelo con o sin tirantes, bordados o recamados con agremán y lentejuelas negras o de colores.

Los pañuelos de talle con sustituídos ahora por grandes pañolones de merino sin flecos, en colores marrones o granates con rosas y otras flores en colores .

En invierno el más usado era el mantón de merino de los llamados «de ocho picos» liso o bordado.

Pieza ésta de gran tamaño en forma de rectángulo de lanilla negra tejida finamente pero muy tupida, que han de doblar para llevarlo puesto, de manera que cubre todo el busto y las espaldas hasta media pierna. Si son bordados solo lo están la parte que cae a la espalda y cruza sobre el pecho, es decir, una esquina del mantón, en una cenefa de colores a realce.

Refajos de paño generalmente blanco o bayeta de diversos tonos, bordados a realce, a medio punto o a cañamazo, con flores a veces, y con dibujos realistas en la mayoría de los casos muy sencillos .

I

Entre los refajos de bayeta destacan los denominados «pintados», que no son sino realizados a fuego sobre la tela, con el resultado de la estampación en negro de las cenefas, generalmente tres de complicados dibujos florales y animales que ocupan todo el bajo de la prenda. En ocasiones se suelen bordar a cadeneta este tipo de refajos dándoles mayor vistosidad.

Los mandiles en batista negra muy fina, casi transparente, bordados en «abierto» voz popular para denominar los calados con los que se realizan los filos de esta prenda que también ahora es la más finamente realizada, de modo que a simple vista estos calados simulan, ya veces superan, el mejor tipo de encaje.

Con otra técnica afín, el «richelieu», consistente también en perforar la tela de la prenda, se realizan mandiles bordados en colores. Las medias de algodón de buena calidad a listas rectas y onduladas, caladas en diversos puntos geométricos o de flores, muchas de ellas con dedicatorias

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en la boca de la media, con letras perfectas, con el nombre de quien las regala, realiza o va destinada. No faltan en ellas piropos o frases de amor, pues la mayoría de las veces son regalos del novio o sus parientes a la prometida; en otras es la misma persona que las hace la que se ensalza al ver terminado lo que, para ella constituiría una obra de arte . «Viva el mérito» dice una de ellas.

Zapatos negros abotinados y atados.

TRAJE DE FIESTA

Si hay un traje que defina a la mujer valdepeñera, es sin duda el que a continuación se describe, el que ha merecido como talla denominación de traje típico. Ello es debido, entre otras cosas, a que cuando la moda imponía a finales del pasado siglo maneras similares de vestir, barriendo las personales y propias de cada pueblo, aún entre las personas de más edad en Valdepeñas se seguía usando de manera deformada y empobrecida.

Las armillas son las mismas que se decriben en el traje de pase, es decir, en sedas estampadas o bordadas ajustadas de cuerpo y con costadillos.

Sobre ellas mantoncillos de Manila al talle en seda o crespón, estos últimos bordados en el mismo pueblo, al igual que los mantones de merino sólo se borda una esquina, la que se luce una vez que va puesto. Sobre el mantón colocaban, a un lado del pecho, un ramillete de flores naturales o de papel o tela cogidas a él con un alfilerón.

Refajos interiores llamados «de cadera» largos y con

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un volante de unos 20 cm. de ancho, bordado en su borde inferior a punto de festón recortando y una pequeña greca de flores a uno o varios colores.

Este refajo es el que mayor número de muestras presenta, existiendo muchos de ellos iguales o con ligeras variantes. La tela de la que estaban hechos era la bayeta, a la que dan aquí el nombre de «muletón». El volante podías ser con cabecilla o pegado a la tela con una cinta de algodón que solían bordar a zig-zag.

En invierno estos refajos de cadera se sustituían por otros llamados «de cuerpo entero», también de muletón, que como su nombre indica cubren todo el cuerpo, de manera que de cintura para arriba tienen forma de corpiño, y hacia abajo una falda como tal. Tanto unos como otros llevan bordadas las iniciales de la persona a la que pertenecen y sencillos ramilletes de flores. Los colores de la bayeta son bastante vivos, generalmente rosas, verdes y azuletes.

Sobre el refajo se colocaba unas «senaguas» de tela fina y estampada en un solo color haciendo aguas o con florecillas salteadas sobre fondo liso.

Son rizadas y ajustadas en una pequeña cinturilla, en su borde inferior tres alforcillas y al filo un cordoncillo fino de seda.

Van forradas en su interior con una tira de seda en un color claro sin dibujo.

Tardíamente eran en color negro y en la mayoría de los casos sustituían la seda por algodón o percal.

Este traje podía no llevar mandil, cuando lo llevaba eran los de batista bordados «en abierto». ' Las medias en hilo de algodón en un solo color (azules, rojas, verdes) en complicados puntos y dibujos bastantes apretados, con dedicatorias algunas de ellas. Otras blancas a punto de garbanzo aquí llamado «de pellízquitos», Botas de terciopelo o piel «de cartera» atadas o ajustadas con botoncillos laterales en forma de bolitas de metal.

Otra de las prendas común a los diferentes tipos de traje la forman las enaguas blancas. En cáñamo para el verano, muy pesadas pero frescas, en color amarillento con un gran encaje en el bajo del mismo hilo. En algodón caladas en sus bordes, otras bordadas en colores y ribeteadas con encaje a ganchillo. Unas plisadas, otras rizadas a la cintura.

Prenda de uso corriente es también la mantilla; como en el resto de España en forma de rectángulo curvo en uno de sus lados, orlado de cinta

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de terciopelo de gran anchura. En seda o raso para verano o paño y bayeta para invierno.

Aderezos: A diario zarcillos que llaman «candaos» y «morcillas». manchegas y brocalejos para vestir.

«Saboyanas» y pendientes de lazo con alfilerones compañeros.

Cadenas de oro de las que cuelgan cruces, medallas y escapularios.

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EXTRAORDINARIO TRÍO MUSICAL DE OTRO TIEMPO Enrique Marchal Lendínez

Merece nuestro cariño y homenaje el recuerdo de tres grande profesionales de la música, excelentes artistas y buenos amigos, conocidísimos por todos los vecinos de Valdepeñas de Jaén. Destacaron en creatividad artificiosa e ingenio en sus actuaciones musicales de cuerda y viento: - Roger Cabrera Mora, - Pedro Morales Quesada, y - José Aguilera.

Roger, de apodo «TITILLO», sobresalió como buen concertista ejecutando al laúd las jotas y fandangos valdepeñeros. También por los populares pasodobles, valses y mazurcas antiquísimas, de buen ver y oír.

Por entonces había varias 'comparsas de aficionados a la música que constituían grupos. De todos ellos tenemos muy buenos recuerdos.

Pero, en el presente escrito, sólo vamos a citar al trío ya referido anteriormente, compuesto de laúd, flauta y guitarra.

Faltaría papel para expresar la maestría y el buen gusto musical de nuestro gran amigo Pedro Morales. Además de ser un hombre noble y sencillo, era todo un puro artista. A estos intrumentos les arrancaba ' impresionantes sonidos melódicos, angelicales, impregnados de buen ritmo y cargados de arpegios sobrenaturales. !Qué bonito cuando la flauta o el clarinete sobreponen el relieve, o mérito, entre los demás instrumentos musicales al hacer un contratiempo!

Los contracantos son sonidos sincopados que acentúan la parte débil

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de una partitura. ¡Qué fantástico el sonido del contratiempo en los pasodobles como «Pepita Creus» o cela Gracia de Dios»! la música nunca dio nada tan bello, como se demostró por entonces.

Todos sabemos que son varias las partituras escritas por autores paisanos valdepeñeros. Elogio y orgullo de un pueblo sencillo y querido como el nuestro. Yo lo reitero, sin quitarle mérito' a los demás.

Hasta en los corros, las jóvenes cantaban haciendo alusión a nuestros amigos: No hay quien pueda , no hay quien pueda , con Titillo , Periquito y Aguilera.

De José Aguilera (<<AGUllERllLA») se pueden recordar fácilmente sus éxitos grandes de estilo y arte; no sólo en el tacto de la guitarra, sino también cantando el fandango valdepeñero de una forma maravillosa.

Con letrillas populares y picantes como las siguientes:

[Oué polvo lleva el camino!

Camino de Despeñaperros llevan a un borrico preso, porque ha querido dar a la burra un beso.

¡Qué polvo la carretera!

[Oué polvo tiene el molino! ¡Qué guapa la molinera!

A la entrada del molino a la molinera vi, tendida en los costales: ¡Del polvo la sacudí!

Con un polvo y otro polvo se junta una polvareda.

Con un vaso y otro vaso se junta una borrachera.

y ya para terminar, sólo queda la parte aclaratorio de cómo a Roger ceTITlllQ » le vino el «apodo»: Ya sabemos que, de pequeñitos, todos los seres humanos nos expresamos con nuestra «media lengua», y repetimos palabras interpretando el sentido de ellas. la madre de Roger se llamaba Alejandra, y era llamada celAlA» por su hijo y, después, por sus nietos.

Cuando se ausentaba de su casa por algún motivo, el niño queda al cuidado de su padre cePAPA-NÉ» (diminutivo de Francisco José).

LugÚl50

LALA, al regreso de sus quehaceres, preguntaba por su hijo, de una forma como lo hacen todas las madres: - ¿Dónde está lo más grande de mi casa?

y el niño, con su media lengua, contestaba: - ¡Aquí! pero yo no soy «qande»: soy «chi-tltlllo».

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~

El padre de Roger (cePAPA-NÉ»), a quien le gustaban mucho las chanzas, a partir de entonces lo nombraba con el vocablo que el niño decía: El «chltltíüo» de la casa.

Después, de forma más abreviada: El «titillo» de la casa.

y con la broma, posteriormente se convirtió en «El, TITILLO», ya para toda su vida.

OTRA DEL cePAPA-NÉ» Los nenes de aquella época jugaban con inventivas, procurándose ellos mismos los juguetes para su distracción.

Roger se ideó un carricoche con una caja de los zapatos. En ella atravesó dos agujas de hacer calceta y colocó en sus extremos cuatro «qállaras» que encontró en las támaras de la leña de quejigo. Estas

51 Lugia

gállaras le sirvieron como ruedas; y con un cordón de las botas hizo el tiro del vehículo para su arrastre.

Cargaba y descargaba la carretilla con tierra entre la calle y el portal de la casa, ensuciándolo todo.

El «Papa-né». que estaba sentado en la mesilla del taller de zapatería que tenía, golpeando el material de las suelas de los zapatos con el martillo sobre la piedra de batir el cuero, al son del martilleo le cantaba tonadillas compuestas por él: «TITILLO» jugar, y la casa manchar.

'TITILLO» ensuciar, y la ccLALA» limpiar.

Con su mérito relevante cerramos esta historieta en recuerdo de unos amigos tan queridos, muy destacados artistas, a los que jamás podremos olvidar.

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A BUEN ENTENDEDOR. ..

Por Emiliano P. Herrera Redondo.

- Dicen que las mujeres carecen de espalda, será porque tienen demasiado culo .

- Los hombres nos hacemos viejos, pero no maduramos.

- El que debe poco, sufre; el que debe mucho, goza .

- Si prestas un libro eres tonto; si lo devuelves, más.

- Frente al televisor vives de espaldas a la realidad.

- Los hombres que hablan son numerosos, los que saben escuchar escasos.

- Arrepiéntete más de haber hablado que de haber callado.

- Hay que saber y saberlo demostrar.

- Nunca des explicaciones. Tus amigos no las necesitan, y tus enemigos tampoco van a creerte de todos modos.

- Si al beber pecaste, con la resaca lo pagaste.

- Parece que han pasado serbios y croatas por las calles del pueblo.

- El Impuesto de Circulación debería emplearse en pagar los amortiguadores de los sufridos vehículos de la ciudad.

- Toca el claxon antes de llegar a un bache, por si hay alguien dentro.

- Es de agradecer que el viento barra caritativamente las calles y plazas.

- Cuando llueve, las movibles baldosas del acerado, refrescan los «calcañales», de los transeúntes.

- Desgraciadamente sigue habiendo «florífagos carneroides» en la localidad.

- El «autocarril» hasta Jaén es una vergüenza compartida con los Villares.

53L "IJÚl

- Los arbolitos de la Avenida de Andalucía, necesitan un buen «pelado».

- No pienses en lo que vale una mujer, sino en lo que cuesta.

- Los pensamientos más profundos son los que parecen más sencillos.

- Un libro que no merece una segunda lectura es malo.

- Muchas personas leen, pero pocas saben leer.

- Cuando repetimos la misma mentira, acabamos creyéndola.

- Los jefes son hombres que necesitan de otros .

- Las obras no se acaban, se abandonan.

- Dos ladrones tenemos en casa, el teléfono y la luz.

- Planta árboles aunque sepas que nunca te sentarás a su sombra.

- ¿Cómo voy a querer que ganen los mejores, si no sé cuáles son?

- Siquieres que el tiempo vuele, firma letras a treinta, sesenta y noventa días.

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LA ACTUALIDAD

Noticias Breves Enero - Febrero - Marzo

(ENERO) DíA 5.- Como viene siendo tradicional se celebra la Cabalgata de Reyes, muy discreta; y como siempre adoleciendo de una mejor organización. De todos modos el entusiasmo e ilusión de los niños, tapan los defectos.

DíA 7.- Aparte de los inmigrantes magrebíes que acuden en buen número a los «rnercadillos» de los viernes se establece un ciudadano marroquí en el Cortijo «La Beata". Su hijo acude al Colegio «Santiago Apóstol" y reside en la Escuela Hogar «Los jilgueros ».

(FEBRERO) DíA 2.- Se celebra la festividad de «La Candelarla», deslucida por el viento, frío y desapacible; a pesar de ello son numerosos los valdepeñeros que se dan cita alrededor de la gran hoguera que se instala en el Ferial.

El vinillo y las rosetas hacen más llevadera la gélida tarde. La organiza-

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ción corrió a cargo de la Asociación Cultural -Luqia», con el patrocinio del Ayuntamiento. La Ceremonia religiosa este año es más breve, se celebra en la iglesia parroquial y no se realiza la procesión que otros años recorría las calles de la población.

DíA 5.- Se inaugura un nuevo alumbrado en el barrio de San Juan , los puntos de luz (farolas con globos de cristal) se suceden a pocos metros unos de otros. Desde lejos el «Chaparral» parece un ascua de luz. Otros barrios esperan que les llegue el turno. Verdaderamente hay zonas con escasa iluminación y suponemos que pronto serán subsanadas estas deficiencias.

DíA 12.- Cierra la guardería temporera, pues prácticamente han regresado ya todos los aceituneros que marcharon a otros lugares para la recolección.

DíA 21.- Insistimos en la desorganización del concurso de disfraces, se debe poner más empeño en que cada año salga mejor, pues el pueblo sí se supera y cada vez los disfraces son más acabados y originales y el número de participantes mayor.

DíA 23.- Las Cooperativas del Campo, celebran el «Remate» de la aceituna, como final de la Campaña olivarera de este año.

DíA 24.- Carnaval paralelo celebrado por profesores y alumnos del Colegio Público «San Juan». Esmerada organización, buen gusto yoriginalidad. Un atractivo y brillante espectáculo que recorrió las calles de la localidad levantando la adm iración de todos.

DíA 28.- Coincidiendo con la celebración del Día de Andalucía, y organizado por el Excmo . Ayuntamiento, se celebra el Día del Árbol. Más de un centenar de árboles son plantados en varias zonas de la localidad con la colaboración de Asociaciones culturales, deportivas, de vecinos y colegios. Feliz idea que apoyamos plenamente.

( MARZO)

DíA 2.- Amanecemos con una buena nevada, casi como las de antaño, que tanto echamos de menos; sobre todo por lo que significan para los acuíferos, tan necesitados, tras tan pertinaz seguía. Hay dificultades de paso en la carretera a Jaén, pero la nieve desaparece pronto.

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DíA 13.- Los miembros de la Asociación Provincial de Coros y Danzas «Lola Torres» de Jaén, interpretaron las canciones recogidas en el disco: «Cantes y Bailes del Santo Helno», editado por la Diputación Provincial.

El acto que se celebró en el Teatro Municipal «Darímella» de Jaén, contó con un entusiasta y numeroso público que aplaudió enérgicamente todas y cada una de las interpretaciones. Una de la más celebrada fue el fandango de Valdepeñas.

DíA 18.- Se inicia en el Colegio Público ccSantiago Apóstol» con la colaboración de profesores y alumnos, una campaña para recaudar fondos con destino a Somalia; consiste en poner a la venta vales por valor de cien pesetas, equivalentes a un litro de leche. La recaudación será enviada a la Cruz Roja para que la haga llegar a su destino. ~Val d ep eñ as responde generosamente y se recogen más de cuatrocientas mil pesetas.

DíA 31.- Se anuncia que van a comenzar a funcionar varios talleres infantiles y juveniles organizados por las Asociaciones de Padres de Alumnos con la colaboración de los Colegios y del Excmo. Ayuntamiento.

A partir de Abril y hasta Agosto, los escolares podrán participar en cursillos de teatro, máquina, pintura y música.

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Acuerdos Municipales Resumen de los acuerdos tomados por el Pleno del Ayuntamiento durante el primer trimestre de 1993.

SESiÓN ORDINARIA DEL DíA-12 DE FEBRERO. * A propuesta del Grupo Popular se nombra una comisión de investigación sobre la compra del lugar denominado «Las Veredas». * El mismo Grupo Popular propone al Pleno se nombre una comisión para mantener una entrevista con responsables de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, sobre la traída del agua de los manantiales del Papel y de Chircales. * Se da cuenta de la liquidación pendiente correspondiente a varios ejercicios de la contribución rústica y urbana. * Por el Sr. Alcalde se da cuenta de los resoluciones de la Alcaldía

relativas a la Junta Pericial de Zona y sobre Funcionarios. * Se da cuenta del Pleno de una instancia de la Cooperativa ceStº Cristo de Chircales» sobre terrenos colindantes con ella. * Se leen varios informes sobre licencia de obras y apertura de establecimientos. * Padrón Municipal.

Población de derecho al 1 de enero 1992

4.578

Altas del 1-1-92 al 1-1-93

155

Bajas del 1-1-92 al 1-1-93

87

Población de Derecho al 1 de enero 1993

Lugia 58

.4.646

* Se autorizan varias propuestas sobre asesoría juridica e investigación de terrenos colindantes con las instalaciones deportivas. * Se presenta por el Sr. Alcalde una moción sobre el Comité de la Regiones de Europa.

* Se debate la instalación de un transformador para la caseta municipal.

SESiÓN EXTRAORDINARIA DEL DíA 26 DE MARZO

* Se aprueba por mayoría el convenio en la Diputación sobre el servicio de recaudación. * Se aprueban varias obras:

\

1) Acondicionamiento campo de deportes.

2) Acerado C/. Bahondillo y Plaza del Bosque.

3) Paseo del Río Chorrillo.

* Se apruebael convenio cultural con la Diputación Provincial para 1993. * Se aprueban las propuestas de compensación de varias unidades de actuación. * Se debaten los siguientes asuntos:

a) Imposición contribuciones especiales para el arreglo de calles. b) Adjudicación de Kioscos en la Plaza de la Constitución. e) Expropiación de terrenos para el gimnasio del Instituto.

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MOVIMIENTO DEMOGRÁFICO RELACiÓN DE NACIMIENTOS OCURRIDOS EN VALDEPEÑAS DE JAÉN DURANTE EL PRIMER TRIMESTRE DE 1993.

Ana Belén Gómez Liébana

13-1-93

Domingo Jaenes Armenteros

7-2-93

Dolores Tello Rodríguez

2-2-93

Nuria Collado Martínez

8-2-93 -:;

Alberto Garrido Gallego

10-2-93

Mª José Torres Tello

21-1-93

Manuel Rosales Zafra

13-2-93

Mercedes Ortega Extremera

21-2-93

Cristina Milla Serrano

3-3-93

Ana Belén Rodríguez Martínez Macarena Lendínez Sánchez

13-3-93 6-3-93

Borja Ortega Aceituno . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18-3-93 Alba María Jiménez Jiménez

27-3-93

MATRIMONIOS Elías Fernández Navas y Dolores Gutiérrez Rosa Pedro Rosa Martínez y Mercedes Narváez Tello

7-3-93 27-3-93

DEFUNCIONES Amador Extremera Cabrera

16-1-93

Fernando l\Iana Abril

7-2-93

Rosendo Marchal Extremera

8-2-93

Dolores Gutiérrez Ortega

8-2-93

Lugia 60

RESUMEN PLUVIOMÉTRICO Con datos facilitados por FRANCISCO MARTíNEZ TORRES.

ENERO

FEBRERO

MARZO

Día

Día

Precipitación mm

Día

1 2 3 4 5

2

1 2 3 4 5

Precipitación mm

1 2 3 4 5 6

1\ 6

7 8

7 8

9

9 10

10

6 7 8 9 2 1

10

Precipitación mm

1

1,5

0,3 0,5

12

11 12

13

13

13

13

14

14

14

3

15 16

15 16

15 16

17

17

17

18

18

19

18 19

20

20

20

21

21

21

22 23

22 23

22 23

24

24 25

24

11

25

20

11

25

26 27

26 27 28

28 29 30

29 30 31

0'5

Precipitación total del mes0,5 mm

11 12

19

4 9,5 1

31 Precipitación totaldel mes19,5 mm

26 27 28 29 30 31 Precipitación tolal delmes49,3 mm

61 Lugúz

CUADRO DE TEMPERATURAS CORRESPONDIENTES AL PRIMER TRIMESTRE DE 1993.

Con datos facilitados por BERNARDINO MARTíNEZ VALDERAS.

ENERO Día

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31

LllfJia 62

Mínima

-5 -6 -4,5 -8,5 -8,5 -7,5 -9 -7 -5 -6 -6 -5,5 -5,5 -5 -5,5 -5,5 -4,5 -2 -6,5 -6,5 -6,5 -2 -5,5 -6,5 -2 -1 -5,5

Máxima

7 7 7 7 9 8 6 7,5 8 9,5 10 12 10 10 11 12 10 11 10 11,5 10,5 11,5 10 12 10 12 12

FEBRERO Observac.

"en w ....J en

Z

O

CL C/)

es O

z

C/)

O

1-

-c Cl

Día

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28

Mínima

4 4,5 3,5 3 -4,5 -1,5 2,5 -4,5 -4 3 1 3 0,5 2 -2 -4 -1 -6 -1,5 -1 -1,5 -1 -1 3 -2 -5 -2 -3

Máxima

9,5 9,5 8,5 10,5 10,5 11,5 10 11 13 13 13 13 12 12,5 13,5 11,5 10,5 11 12 14 15 12 10 10 10 8,5 4 3

Observac.

Nuboso

"

" "

" " Despejado Nuboso

" " Chubascos Nuboso Soleado

" "

" " " " " " " Nuboso

" Soleado

" Nieve

"

MARZO

Día

Mínima

Máxima

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31

-9,5 -5,5 -5 -4 -1,5 3 -2,5 0,5 -2,5 1 1 1 2 3,5

1 4,5 7 13 14 12 13 12,5 13 14 14 14 14 11,5 12 16 18,5 18,5 18 18 18 16 20 19 10 14 16

O

4,5 7 5 7,5 3 5 3 4,5 5 4 -3 -1,5 1,5 1,5 3 3

Observac.

Nieve 11

Nuboso Soleado 11

Nuboso Chubascos Soleado 11

Chubascos 11

Nuboso Chubascos 11

Nuboso Soleado 11

11

11

11

11

11

11

Tormentoso 11

Soleado

LASTEMPERATURAS EXTREMAS DURANTE ESTE TRIMESTRE HAN SIDO LAS SIGUIENTES:

Noche más fresca: (Día 1de Marzo: -g,S 'C) Noche más templada: (Día19 de Marzo: 7,S'C),

11

17

11

18 20,5 19

11

11

11

Día más fresco: (Día 1 de Marzo: 1ºC).

Día más caluroso: (Día 30 de Marzo, 20,S 'C).

63 LugÚJ

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PÁGINAS ABIERTAS ¡

COSAS DE ABUELO A MI NIETA ALBA

Una niña muy chiquita, muy bonita, muy graciosa y más preciosa que una flor, acostada en su cunita, dormidiia, como rosa ) primorosa, tengo yo.

Es encanto de su abuela, la que vela de su sueño, con empeño y con amor,

Enrique MarchaJ Lendfnez

Pa ver el barranco. pa ver la laera sin una maiuja., Pa ver que s 'e rn b ie te rn de pel ás las pe ñas, ¡Anda tú, si quieres!

No he d'ir por mi gusto, si en cruz me lo ruegas.

Por ande se jueron, pa no volver nunca, tantas cosas güenas.

la que acuna en su regazo, con su brazo y es el trien to de su aliento, su calor.

Yo las miro tiernamente, y en mi mente, se reúnen y se unen con ardor,

el cariño y el afecto más perfecto, la ternura y la dulzura, ha cia las dos.

Por esa verea se jué la alegría, quereres, suores, y alientos de caza.. . vinieron las penas. ¡Hasta el Vadillo sin agua! ¡To se jué por ella!

En Valdepeña s faltan muchas cosas: ¡Hasta Juan Ba sterrech ea! ¡Éjame que duerma a ver si es pa siem p re! ¡Si no me espertara!

Anda tú, si quieres, al campo de ca za.

Valdepeñas de Jaén, Mayo 1992.

ANTONIO GAUEGO ESTEPA.

LUgÚl64

«ANDA TÚ SI QUIERES»

Pué que yo nunca pise más la y erba, ni el tomillo, ni la retama.