Se recomienda el uso de protectores solares a partir de los 6 meses de edad. Se recomienda utilizar protector solar de amplio espectro. Lo ideal es usar productos con óxido de zinc y dióxido de titanio, ya que estos disminuyen la posibilidad de reacciones adversas.
Utilizar barreras físicas, como ropa con materiales que ofrezcan protección contra los rayos ultravioleta y sombreros de ala ancha que cubran principalmente la cabeza y el cuello. Buscar áreas que proporcionen sombra, como sombrillas, principalmente de color oscuro (negro), toldillos o marquesinas.