SECRETARIADO GENERAL NACIONAL 2013-17
Secretario General Secretario General Adjunto Secretario General Adjunto Alterno Secretario de Administración Pro Secretaria de Administración Secretario de Finanzas Pro Secretaria de Finanzas Secretario de Actas Secretario de Organización y Capacitación Sindical Pro Secretaria de Organización y Capacitación Sindical Secretario de Acción Gremial Pro Secretario de Acción Gremial Secretaria de Acción Social y Deportes Pro Secretario de Acción Social y Deportes Secretario de Seccionales Pro Secretario de Seccionales Secretario de Prensa y Difusión Secretario de Cultura y Educación Secretario de Relaciones Intersindicales Secretaria de Vivienda Secretaria de Previsión Secretaria de DDHH Género e Igualdad Pro Secretario de DDHH Género e Igualdad
Sergio O. Palazzo Andrés R. Castillo Lisandro Aguirrezábal Carlos A. Cisneros Patricia Rinaldi José R. Lupiano Cristina A. Maino Carlos A. Irrera
4131-4243 4131-4233 4131-4220 4131-4268 4131-4271 4131-4260 4131-4429 4131-5389
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Walter O. Rey
4131-4253
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Mariel Iglesias Gustavo E. Díaz Enrique H. Ramírez Liliana Lafauci
4131-4435 4131-4229 4131-4229 4131-5239
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Jorge G. Dipierri José M. Giorgetti Juan E. Pallo Eduardo D. Berrozpe Luis G. Ortega Aldo D. Acosta Analía R. Lungo Rosa del C. Sorsaburu Claudia B. Ormachea
4131-4382 4131-4257 4131-4251 4131-4205 4131-4267 4131-4281 4131-4322 4131-4250 4131-4271
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Eduardo L. Negro
4131-4382
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Edición noviembre 2013
Impreso Secretaría Nacional de Prensa
DIRECTOR Y SECRETARIO DE PRENSA: EDUARDO BERROZPE. EDICIÓN: MARÍA DE LA PAZ SISCO ARCHIVO Y DISTRIBUCIÓN EQUIPO METROPOLITANO DE DIFUSIÓN. HUGO LA PORTA/ROBERTO MAIELI
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Discurso de Sergio Palazzo Acto Luna Park El 9 de octubre de 2013 asumió el Secretariado Nacional 2013/17
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uchísimas gracias por esta maravillosa convocatoria y esta maravillosa concurrencia.
Agradezco a las autoridades que nos visitan y que están presentes: diputados nacionales, diputados provinciales, algunos intendentes, también. Funcionarios del gobierno presente y en un gesto realmente importante y de convivencia se hicieron presentes para saludar antes de la firma del acta los presidentes de las tres cámaras de bancos de la Argentina. Como ustedes saben hay un presidente que no viene, pero vino el Presidente del Banco Provincia de Buenos Aires, que es uno de los bancos más importante de ABAPPRA. AGRADECIMIENTO ¡Gracias a cada uno de ustedes! Gracias por el enorme esfuerzo de estar presentes aquí, gracias a
Pido que no lo silben y que dejemos las cosas ahí. Digo esto, permítanme los compañeros del Nación, porque uno de los argumentos que había es que al sindicato nunca le iba bien en las elecciones en el Banco Nación, que el sindicato tenía problemas en entrar al Banco Nación, que el Secretario General del gremio nunca iba a hacer una asamblea en el Nación y que para colmo, el candidato que llevaba esta lista no era un Nación puro, porque provengo de un banco que quebró y fue absorbido por el Nación. Ellos convirtieron esto en la madre de las batallas. Pretendían ganarnos por 700 votos de diferencia y en el transcurrir de la campaña, se dieron cuenta que había un maravilloso grupo de militantes que estaba a ganar en el Banco Nación. No sabían que en este sindicato tenía a un Pablo Regnier, un Quique Ramírez, una Liliana Lafauci, una Cristina Maino, un Danilo Maislos… no sabían que este sindicato cambió tanto que a mí no me van a correr con hacer asambleas en el banco, así recorrí cada rincón del Banco al lado de mis compañeros y pudimos ganar en el Banco Nación, por eso a ustedes, la maravillosa hinchada que está ahí, les doy mi corazón, mi alma y agradecimiento. A LAS SECCIONALES
los compañeros de cada banco, y a cada gremial interna de Buenos Aires. Sé lo difícil que ha sido para ustedes tener que lidiar con dos listas que llevaban candidatos de capital… soy un hombre del interior, y ustedes hicieron posible que un hombre del interior sacara más de un 80% de los votos en la propia capital a los candidatos que eran de capital. Permítanme distinguir una particularidad en ese extraordinario esfuerzo y es saludar a mis queridos compañeros que tuvieron la más difícil de todas las batallas, porque acá hubo tres listas, pero una tuvo el apoyo del presidente de un banco y fue el Presidente del Banco Nación.
Cumplí con algo impensado para todos, y ahora déjenme agradecerle con todo el amor profundo, al ser un hombre del interior, a cada una de las seccionales presentes. Cuántas veces el interior da el presente con un sacrifico tremendo, y cuando es convocado, participan, son protagonistas, ya sea haciendo un paro, haciendo una marcha o haciendo este festejo, aquí hay miles de hombres del interior, sepan ustedes de mi agradecimiento profundo y de mi emoción cada vez que veo las banderas flamear en cada marcha. Porque esto es el sindicato hoy. La integración de capital y la integración del interior, donde no hay seccionales ni chicas, ni grandes. Doy un ejemplo, este maravilloso acto ha nucleado a casi 6.000 bancarios, mañana o pasado voy a viajar a una de las pocas seccionales que me faltó en la campaña, que es Ushuaia, voy a ir a visitarla porque es un compromiso de campaña y no me importa si estoy con 6.000 acá o con 100 compañeros en el fin de la Argentina.
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Así como hice mención del Banco Nación, en el interior también sepan disculpar la mención de agradecerle profundamente a mis compañeros de Mendoza, con quienes nos une lazo de amistad y hermandad de toda una vida, que permitieron que hoy sea el Secretario General de este gremio y soñaron este proyecto. En lo personal, desde luego, a mi familia, a mi señora, a mis 5 hijos, mi madre, mi hermano y el resto de mi familia que esta por ahí. Son siempre los que padecen ausencias y siempre acompañan. Quiero agradecerle a cada uno de los compañeros que aceptó estar en la lista y sepan que tenemos un compromiso enorme con los trabajadores. Un 87,9% no es una victoria electoral, es el compromiso más grande que debe asumir un dirigente para no defraudar y también en este sentido quiero agradecer, en el Secretariado Nacional, a dos compañeros, además de mi Secretario Adjunto, que me ha acompañado por todo el país y me honra con su presencia en la fórmula. Nosotros hemos pasado noches tristes en la Bancaria en el último tiempo y hemos pasado también tiempos felices, esos tiempos de mucha angustia, los compartíamos con José Lupiano y Carlos Cisneros, porque vivíamos juntos en el hotel de la Bancaria… ahí pasábamos noches discutiendo cuál era la salida. Me siento orgulloso de ver un Luna Park prácticamente lleno, ver este poder de convocatoria, ver este poder importante que tiene el sindicato hoy de poder movilizarse. A mí me llena de orgullo ser quien lidere este proceso político en la Bancaria, se terminó la angustia eterna, se terminó el pensamiento de que en cualquier momento nos intervenían. Dejamos hoy atrás la postergación de la grandeza de esta organización. Hoy es un día de gloria. Estamos llegando con el 87,9% de los votos a conducir esta Bancaria. Fue un proceso electoral duro; quiero destacar que
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uno de los candidatos hoy me llamó y a pesar de la diferencia, el compañero a Secretario General de la lista 9 me deseo suerte y se puso a disposición… veo aquí también a algunos compañeros, entre ellos el Cro. Rossi, que también están presentes y eso demuestra madurez en nuestra organización. Celebro que demos por clausurado el período electoral porque los bancarios merecen que trabajemos en conjunto. DEMOCRACIA SINDICAL Teníamos que saldar la triste historia reciente de la Bancaria, donde aparecíamos más en policiales que en noticias gremiales, sabía que iba a ser una campaña donde la violencia y la pirotecnia verbal iba a ser dura contra nosotros. Sabía que podían incurrir también en la injuria y en la calumnia. Pero decidí tomar una resolución política importante. No hay mejor forma de saldar los debates políticos en una organización que no sea a través de un proceso electoral limpio y transparente. Por eso, en mi calidad de candidato a Secretario General, en aquel entonces, le pedí a la junta electoral que habilitara al resto de las listas que se presentaran y al resto de los candidatos que quisieran participar, aún no reuniendo las condiciones estatutarias y así fue como en un proceso histórico de la AB se llegó a concretar un proceso electoral con tres listas. También me propuse no gastar ni un minuto de mi tiempo como candidato a Secretario General en contestar injurias. Los bancarios merecen que fuéramos, como fuimos con Andrés Castillo, a explicarles nuestras propuestas, a contarles qué hicimos, a decirles cómo hemos crecido y a cargar con nuestras historias buenas y malas, que tenemos como cualquier dirigente. Lamento que algunos equivoquen el rumbo y crean que un proceso electoral sirve para buscar y alinear como enemigos al contrario y al adversario político. Creo que tiene
que haber un cambio en la mentalidad de quienes nos proponemos como candidato en cualquier estructura de organización. Ese cambio tiene que ser, que hay que entender que del adversario político a mí me separan pasos de tolerancia, que tengo que comprender su posición aunque no esté de acuerdo. Cuando logremos los dirigentes entender esta materia, seguramente serán más sanos los procesos electorales y ganarán los trabajadores y en el país ganará el pueblo. Por eso, creo que dimos un puntapié inicial cuando decidimos explicar nada más que propuestas. UNIDAD Que queden por allá, en el suburbio de la historia, los que no entiendan el mensaje de unidad que nos reclaman los bancarios. Que cada vez quedarán más
solos con sus diatribas, insolentes e injuriantes y se darán cuenta que sus discursos ya se lo van a saber de memoria sus acólitos que cada vez serán menos. Mientras tanto, el resto de los bancarios comprendamos que este Secretario General, sacó el 87,9%, tiene la humildad de convocarlos a trabajar en unidad. Ahí sí, los bancarios unidos, tomados de la mano fraternamente, vamos a transitar la avenida ancha de la unidad para recuperar cada uno de nuestros derechos. Se equivocan quienes creen que el adversario político es un enemigo, el enemigo, para que quede claro, va a ser siempre el que nos oprime, el enemigo
va ser el que nos niega derechos, el enemigo va a ser el que no cumple con la ley, el que nos va a hacer perder el empleo, el enemigo va a ser siempre el que le haga perder la dignidad a los trabajadores y para eso se necesita un frontón de resistencia que somos los bancarios unidos, para que no nos pase lo que nos pasó en la década de los 90. HECHOS Somos una Bancaria que tiene historia y se enorgullece de ella. Somos la Bancaria que fue capaz en su inicio, como mostraba el acto que hicieron recién las personas que estuvieron en el escenario, que fue capaz de salir a reclamar por su caja de jubilaciones… somos una Bancaria que tiene historia, con una huelga del año 58 y 59 que costó 6.200 cesantes a los bancarios para que tuviéramos derechos laborales… somos la Bancaria
que tuvo la valentía de enfrentase en un tiempo con Perón …la valentía de arreglar en un tiempo, también, para que María Eva Duarte de Perón nos donara el policlínico y creamos el Instituto de Servicios Sociales Bancarios. Somos la Bancaria que en su historia tiene la desaparición de más de 200 compañeros y la detención y tortura de cientos y cientos de compañeros que desde su puesto de lucha, lo único que hicieron fue sumarse al clamor de libertad y democracia contra la dictadura. Somos la AB que también logró, durante la presidencia de Raúl Alfonsín, crear una ley para la reincorporación de los cesantes políticos y gremiales en las instituciones financieras.
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Pero no somos un gremio que se queda en el pasado y con sus lustres de oro y sus luchas históricas, luchas que reivindicamos, por cierto, en cada oportunidad que tenemos de conversar con ustedes. Somos una Bancaria con un hoy y con un ahora, somos una Bancaria que mira el futuro con un presente sólido, de éxitos, de triunfos y también de fracasos. Por eso somos hoy la Bancaria que con el protagonismo de ustedes es la tercera actividad mejor paga del país. Somos la Bancaria que hoy logró convencionar mayores días de licencia por paternidad y adopción. Somos la Bancaria también que pone en funcionamiento, a partir del lunes, las reuniones para crear los comités de salud en cada uno de los bancos de la Republica Argentina y en cada lugar de la Argentina. Somos la Bancaria que consiguió 23.000 afiliados nuevos, que certifica en normas ISO. Somos la Bancaria que logró, en una reciente negociación, recuperar el 1% de aportes a nuestra obra social, para devolver la dignidad de la salud a los trabajadores bancarios y sobre este tema voy a hablar en un ratito porque quiero hacer agradecimientos especiales. NUESTROS JÓVENES Y también decirles que veo muchos jóvenes en esta organización, más de 23.000 afiliados nuevos con una tasa de edad entre 20 y 30 años. Yo les quiero hablar a ellos, porque son el futuro de nuestra organización. Siempre recuerdo que en la campaña electoral del 83, cuando el candidato a presidente de la Unión Cívica Radical Raúl Alfonsín le hablaba a los jóvenes en la universidad, y les decía no sólo
crean en hombres, crean en ideales. Apelo a ustedes con ese discurso, para que sigan ese camino de creer en los ideales por encima de los hombres, que somos nada más que una circunstancia en nuestra organización, a veces más o menos duradera, con más o menos éxito pero, en definitiva, acá lo que importa es la organización.
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Me siento orgulloso de ustedes y se los digo en cada oportunidad que tengo y puedo charlar. Me siento orgulloso de verlos en una marcha y de verlos participar cuando un joven de 20, 21 o 22 años sale a defender los derechos, sale a defender los derechos de él y el del compañero que ya tiene 60 y gastó toda su fuerza luchando. Y eso a mí llena de orgullo, cuando los veo transitar los caminos y las calles de Buenos Aires acompañando a su sindicato, pienso, emocionado, que podrían hacer cosas que hacen cualquiera de los jóvenes: de participar de una vida social, de diversión, en sus estudios. Sin embargo hacen todo eso y están peleando por el sindicato. Quiero decirles que esta generación intermedia, que ha tenido la responsabilidad de salvar institucionalmente de una intervención a este sindicato, es la que quiere que algún día, algunos de ustedes los jóvenes, se hagan cargo de la Secretaría General de este sindicato. NUESTROS JUBILADOS Decirles que cuando la fuerza flaquee, cuando el espíritu melle, que cuando a veces la duda nos invade y se pregunten por qué tenemos que seguir caminando, apelen a hablar con nuestros jubilados. Apelen a hablar con una historia de pertenencia y de participación en la organización. Hablen con ellos, que son el más vivo ejemplo de lo que significa la lealtad en una organización. Vez pasada entregábamos las medallas a quienes cumplieron 50 años de afiliados en el sindicato y yo les decía en ese entonces: “Qué esfuerzo fabuloso que han hecho ustedes”. Porque han tenido dirigentes que les han gustado y que no les han gustado. Dirigentes que les han hecho bien y mal al sindicato, dirigentes que han tenidos políticas buenas y malas, pero nunca se fueron del gremio. Son los que más padecieron el problema de la obra social, porque no pudieron irse a una prepaga porque no son recibidos. porque cuando llegan a esa edad deberían gozar de los beneficios de una vida de trabajo, es cuando empiezan a cerrarles todas las puertas en la sociedad y se las cierran a las puertas cuando no les dan un préstamo porque la expectativa de vida no es la correcta, cuando no lo asisten financieramente o le aplican tasas de usura, cuando no tienen salud, cuando no tienen una prepaga porque no tienen con qué pagarla y a pesar del esfuerzo con el sistema de actualización del haber jubilatorio, sabemos que falta recuperar parte de ese haber jubilatorio para que tengan un haber digno como se merecen. Ahí vayan los jóvenes y recaben en ellos lo que significa tener una organización y estar todos los días presentes.
NUESTRAS COMPAÑERAS A nuestras queridas compañeras, que son muchas por cierto en la Bancaria, quiero decirles, como siempre, que este sindicato tuvo la decisión política de crear la Secretaría de Derechos Humanos, Género e Igualdad porque creemos que los derechos humanos no deben ser sólo una política de estado, cada organización gremial tiene que darse una política de recuperación de derechos humanos y de reconocimiento a aquellos compañeros que cayeron en la dictadura. Hablamos de género y hablamos de igualdad. Hoy cuesta conseguir, salvo en el Banco Provincia y algún otro banco público, que se respete esa ley nacional que en los organismos públicos tiene que haber una cantidad de compañeros que ingresen con capacidades diferenciadas. Y estamos dispuestos a dar esa pelea, las peleas no son mayoritarias o minoritarias. Son peleas y hay que darlas. En el caso del tema del género, la caracterización del género en nuestra actividad se da por la discriminación. El 42% de la fuerza laboral del sistema financiero son mujeres y sólo el 18% están englobadas en los primeros 50 sueldos. El caso mas grosero lo da la banca pública. En el Banco Nación de los 50 primero sueldos sólo dos son mujeres. Cómo no vamos a tener el desafío a través de esa Secretaría de darnos políticas que terminen con esa discriminación. He recorrido el país y como dijo Andrés, no soy el que va a los actos simplemente. Me embarro los zapatos y me meto en cada lugar a hablar con cada compañero que puedo y he visto la cara de angustia de mis compañeras bancarias. He visto esa cara de dolor, de saber que son maltratadas, de saber que son acosadas y maltratadas porque es una nueva modalidad que tienen en los bancos y veo esa cara de angustia y dolor porque les dicen los funcionarios superiores que no pueden ascender porque tienen que cuidar a los hijos y eso les impide tener una performance correcta en los bancos. Les vi esa cara de dolor y angustia, cuando vemos que los números son claros. Perciben en el sistema financiero, si tomamos la masa salarial masculina contra la masa salarial femenina, perciben el 21% menos de salario que un trabajador varón. Y si se jubilan es peor, porque perciben el 25% menos. Por eso sepan que esta conducción nacional, y en cabeza de su Secretario General, va a dar todo el apoyo para cambiar esa mirada triste y de angustia por una mirada combativa como la tuvo Juana Azurduy, la primera montonera, como lo tuvo la mirada, por los derechos
de género, de Alicia Moreau de Justo, como lo tuvo la mirada transparente de la legisladora mendocina Margarita Malharro de Torres, creadora de la ley de cupos y como lo tuvo la mirada tierna de María Eva Duarte de Perón, cada vez que luchó por los trabajadores. OBRA SOCIAL Por eso, son tiempos de cambio en la AB y uno de esos cambios, que lo dejé como eje central, es el tema de la obra social. Ustedes saben que en la década de los 90, en la década del neoliberalismo si hay a quienes golpeó fue a los bancarios, tanto en sus empleos como en sus derechos sociales. Y entre ellos estuvo la derogación del 1% de intereses y comisiones de los bancos que iban a nuestra obra social. Pasaron 18 años de reclamos de esta organización, pasaron 18 años para que nos escucharan el poder político y empresario, pasaron 18 años de extorsión que cuando reclamábamos por esto y nos decían que a cambio querían una jornada laboral de 9 horas. Pasaron 18 años compañeros donde esa era la polea y palanca de transmisión para apretarnos cada vez más y perder más derechos. DECISIÓN DE LA PRESIDENTA Y de golpe nos encontramos en la ultima negociación, que tomamos una decisión política de envergadura, primero cuando nos enfrentamos en diciembre con el acuerdo salarial e hicimos paro e indispusimos a gran parte del gobierno y luego también cuando tuvimos que acordar, en esto quiero resaltar la figura de algunas personas importantes, sin duda como dijo anteriormente Andrés Castillo, que hubo una decisión política de la Presidenta de la Nación que acompañó
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el reclamo de los bancarios para recuperar el 1% y a quien le deseo una pronta recuperación. Tenemos que entender que no estuvimos solos. En la negociación nos acompañó nuestro abogado y amigo de toda la vida, Héctor Recalde, que está ahí presente y también nos acompañó el diputado Wado De Pedro, a quien agradecemos su participación. Pero la fuerza de los bancarios fue lo más importante durante estos 18 años para resistir el apriete y el chantaje y decir hoy, con orgullo, que recuperamos un valor histórico, que de por vida los bancos van a aportar el 1% sobre la masa salarial para sanear definitivamente nuestra obra social y recuperar las prestaciones médicas que nos merecemos.
En segundo lugar me gustaría resaltar que nos tenemos que dar una discusión por un nuevo convenio colectivo de trabajo. Este convenio es sumamente sabio, pero hay que actualizarlo, es del año 75. Por si alguno no lo sabe, en ese convenio todavía figura el adicional de grabo perfoverificador. Yo me acuerdo que por los 70 empezaba a estudiar esas cosas y a tanto tiempo de esto hay que discutirlo, como hay que discutir la discriminación que es un nuevo flagelo, como hay que discutir la guardería, como hay que rediscutir la zona desfavorable para que se deje de sancionar fallos que contengan a los compañeros a cobrar montos ínfimos cuando los costos son mayores sobre todo en el sur o en las zonas alejadas. Hay que darse la discusión
LO QUE NOS FALTA
de un convenio nuevo y tenemos que tener la valentía y la inteligencia de darlo en el terreno que más nos conviene.
Quiero hablar de lo que nos falta, tenemos un montón de reclamos por delante. Básicos sin resolver todavía en algunas cámaras, tenemos condiciones de trabajo que discutir en otras, pero me gustaría centrarme en 4, 5 o 6 puntos –no digo 6, 7,8 para que no digan que estoy ni a favor o en contra y no dividir la platea–. El primero es tomar el guante de la obra social. La hemos recibido con 1.068 millones de pesos de pasivo aproximadamente y saben qué, tenemos la capacidad para sacarla adelante igual compañeros, para eso tenemos un equipo de profesionales que hemos traído. Tenemos la obligación moral por los jubilados que padecieron una larga historia de lucha de no renunciar a tener una obra social.
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Como tercer punto vamos a seguir acompañando cualquier iniciativa que tienda a una reforma tributaria. Hemos dado un paso muy importante hace poco con la actualización de quienes cobran hasta 15 mil pesos, que no pagan impuesto a las ganancias y esa actualización extra. Pero todavía falta y para la eliminación definitiva de ese impuesto a los salarios, hay que tratar una reforma tributaria. Hicimos propuestas. Porque hoy todos hablan de este tema y está bien que al fin se instaló, pero quiero recordar que el 10 de noviembre de 2010, en soledad política y sindical, más de cinco
HABLANDO DE POLÍTICA
mil bancarios fuimos al Congreso a decirle que una reforma puede ser, que le saquen a la minera, al juego, a la renta petrolera y agropecuaria, que se dejen de meter la mano en los bolsillos de los trabajadores. Dimos un paso adelante y falta más. Somos dirigentes gremiales y somos trabajadores de un gremio combativo. Nunca nos vamos a conformar a pesar de los reconocimientos. Vamos a apoyar cuanta iniciativa haya que transforme la realidad del sistema financiero porque esta Ley de entidades financieras es la ley de Martínez de Hoz, Videla y su pecado original es que les costó la vida a 30 mil argentinos que fueron desaparecidos y torturados, le costó la vida a miles de puestos de trabajo que fueron cesanteados por una economía de especulación. Por eso, desde este sindicato, alentamos que haya una nueva ley de entidades financieras al servicio de la producción y el empleo. Por cierto, vaya si es importante, queremos terminar con las tercerizaciones en el sistema financiero. Cuantos compañeros hay que deberían ser bancarios y que están siendo pagos por convenios inferiores. Porque solapadamente esconden el costo salarial trayendo trabajadores a los que abonan sumas inferiores a las que deberían cobrar como bancarios y ahí vemos como aquellos que son eventuales pasan a estar dos años en un banco. Ahí vemos como pareciera que la tarea de cajero no es de bancario, es de otra actividad y te ponen un empleado de una empresa que cobra por otro convenio, por otro gremio. Como no hablar de lo que hace la banca pública con Nación Servicios. Hay 1.200 trabajadores, que venden productos bancarios, que trabajan dentro de un banco, que les dan uniformes, que reciben órdenes de un gerente del banco, cumplen horario bancario y tienen la caradurez de decirnos que no son trabajadores bancarios. Es hora de sincerar lo que tiene que pasar con las tercerizaciones compañeros.
Y también decirles, hablando de política, que hoy se da un marco donde pareciera que algunos quieren la desaceleración de la economía o piensan que la economía debe estar en un punto muerto. Esto significa que nosotros tenemos riesgo de empleos. Entonces aparece el poder mediático, el poder económico, los neoliberales, que sueñan de vuelta con la patria contratista, con la patria financiera, con la flexibilización laboral. DISTRIBUIR MEJOR EL TRABAJO Se equivocan si piensan que no vamos a tener propuestas. Seguramente, si quieren perjudicar las fuentes de trabajo por esa desaceleración, tendremos que salir a reclamarle a los legisladores, pues entonces, que se distribuyan mejor las horas de trabajo y que se baje la jornada laboral. Porque éste es un punto, para ponerle un cepo a la intención económica neoliberal de dejarnos sin empleo. LIDERAZGO, DEBATES Y CONSENSOS Decirles ya en el final, que sé, lo he sabido siempre, porque participo en política que los liderazgos políticos, en ellos incluyo a los liderazgos sindicales, más tarde o más temprano, crean culturas sociales. Nosotros, producto de una profunda crisis institucional y por la impronta de conducción de quien les habla, hemos recurrido a un liderazgo colectivo y ese liderazgo colectivo, ha sentado las bases en nuestra organización de los consensos suficientes para darle más protagonismo a cada trabajador en los debates de las decisiones que se toman. Por eso, los bancarios hemos aprendido a darnos todos los debates necesarios, porque sufrimos el neoliberalismo de los 90, aquél que nos convirtió, después de la adhesión casi carnal a las políticas del Consenso de Washington, en meras mercancías laborales en donde nos flexibilizaban, pretendían que digamos sí a todo y nos querían obligar a discutir cuantos compañeros menos nos echaban en lugar de discutir salarios y condiciones de trabajo. Fueron tiempos difíciles y quiero hacer un alto en esto. Muchos decían que las políticas del consenso de
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Washington, que en el sector financiero se apoyaban en la ley de entidades financieras de Martínez de Hoz y Videla, eran necesarias porque la Argentina se caía del mundo. Fue así como muchos compraron el discurso privatista. Y este país encontró en muchos gobernadores de provincias a los mejores alumnos del manual del FMI… así primero privatizaron nuestras entidades financieras porque lo reclamaba el Fondo y porque si no, no tendríamos asistencia financiera y nos caíamos del mundo. Más tarde privatizaron porque era simpático con los multimedios. Recuerdan ustedes Doña Rosa, Neustadt y Grondona que hacían creer a todo el mundo que quienes trabajaban en una empresa pública eran meros vagos atorrantes, que tomaban mate y comían bizcochitos todo el día, usufructuando un salario que les pagaba toda la sociedad. Después porque era más fácil seguir corriendo por derecha con esa posición que tenían los multimedios antes que les sacaran una tapa en contra a los gobernadores si defendían sus principios… por eso nos privatizaron. NO HAY QUE CAER EN EL DIVISIONISMO ESTÉRIL Más tarde se dieron cuenta que eran despidos, destrucción del aparato productivo de la Argentina lo que ocasionaron la primera y segunda privatización. Y un quiebre social en nuestro país en el sector de los trabajadores… si esto pasa no hay gente que pague los impuestos y empiezan los problemas de caja. A partir de ahí privatizaron y vendieron los activos de la nación para cubrir el déficit fiscal. Más tarde, ya se habían vuelto privatizadores seriales, siguieron privatizando. Pero lo más grave, por convicción ideológica, así entregaron la riqueza de la nación,
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se fueron nuestros bancos provinciales y algunos de nuestros bancos nacionales, la Caja de Ahorro, el banco Hipotecario, el Banade. Pudimos mantener el Banco Provincia de Buenos Aires, el Banco Ciudad y el Banco Nación porque el sindicato se puso al hombro la defensa de los trabajadores y de la economía nacional juntando más de un millón de firmas. Por eso, no hay que caer en el divisionismo estéril en estos tiempos de Argentina dividida. Hay que actuar con inteligencia, hay que hacer propuestas, hay que dar debates y hay que elegir lo que cada uno quiere elegir en este país. MOVIMIENTO SINDICAL En este marco le dedico un párrafo especial al modelo sindical y al movimiento obrero argentino. Tenemos que hacer una autocrítica profunda los dirigentes sindicales de qué es lo que nos pasa por no llegar a la unidad. Tenemos que reconocernos como egoístas y sectarios. Porque ése es el principal eje por el que el movimiento obrero no llega a la unidad; también tenemos que hablar, no de la despolitización de la CGT y del movimiento obrero. Tenemos que hablar de la despartidización. Yo no quiero una CGT oficialista y otra opositora. Quiero un CGT de todos los trabajadores con sus representantes y dirigentes bien adentro y para eso la AB va a poner todo su esfuerzo... RESPONSABILIDAD POLÍTICA Me voy a despedir de ustedes hablándoles no como el Secretario General de esta hermosa y poderosa organización que es hoy, me voy a dirigir a ustedes
como lo que soy, como un bancario más igual que ustedes. Les quiero decir que en los tiempos aciagos y en las noches oscuras que tuvo esta organización, ustedes fueron un pilar fundamental para mantener el espíritu erguido, la frente alta y la dignidad de cada uno de los trabajadores bancarios. Que triste hubiera sido que todos ustedes que tienen una vida de lucha en esta organización hubieran visto a la Bancaria intervenida como pretendían algunos. Qué hubiera sido, y los invito a la reflexión, una Bancaria con un interventor. ¿Hubiéramos tenido la posibilidad de avanzar en lo salarial? Seguramente, no. ¿Hubiéramos tenido la oportunidad de discutir condiciones de trabajo? Ni se imaginen. ¿Habríamos conseguido la reparación histórica del 1% para nuestra obra social? Mucho menos aún. ¿Sería éste el sindicato poderoso que es hoy? Ni por asomo. Esos tiempos en los que la duda y el egoísmo de algunos hacía sentir que iba a haber una fractura en nuestra organización y un quiebre político, nos encontró a todos unidos con una dirigencia madura y reflexiva que supo postergar las apetencias personales, que cualquier dirigente tiene, en pos de la organización y encontró, en cada uno de ustedes, el defensor de la misma y seguramente los tiempos por venir serán como siempre de reclamos. Es nuestra vida, es nuestra historia, es lo que llevamos cada uno en el alma y en el corazón. Esos tiempos, como los tiempos de la dirigencia y los tiempos políticos, a los dirigentes nos ponen a prueba, así como estuvimos en el infierno hoy podemos parecer seductores por el poderío que tiene la organización. Principalmente ésta. Esta tiene mucho poder, porque en Argentina se puede no tener pan que el pueblo va a comer galletitas, pero cuando no hay plata en el sistema financiero el pueblo voltea gobiernos. Por eso esta organización es fuerte. Pero esa fortaleza la tenemos que saber administrar. Tenemos que tener la responsabilidad política de saber que no siempre vamos a tener el 100% de lo que vamos a buscar en las negociaciones. Tenemos que tener la responsabilidad política de mirar el conjunto y no mirarnos el ombligo. Porque a veces también nos convertimos en egoístas. Vamos
por más y está bien. Pero hay un punto a saber que si la cuerda se tira tanto, en un punto se corta muchachos y cuando se corta, se corta por el lado del empleo. Entonces apelo al poder que nos da trabajar en una de las actividades más poderosas y más fuertes. El poder que tenemos con esta maravillosa militancia de este hermoso sindicato lo usemos con responsabilidad política en estos tiempos políticos. Yo sueño que en este país las transiciones políticas sean distintas. Pero veo que a veces nos peleamos y en esto también, nosotros los dirigentes sindicales, para ver cuanto más rápido decantamos el poder del que se va. En definitiva los procesos catástrofes, los procesos de caos lo único que generan es que salga perdiendo el trabajador, porque el que tiene fortuna millonaria no le va a importar si pasamos diez días sin bancos, sin industria, sin micros o subtes o lo que sea. Total la plata la tienen acá o afuera. Entonces, en tiempos de dureza, debemos tener la responsabilidad de pensar cada uno en nuestro sacrificio. Ustedes saben, porque nunca me avergoncé y siempre me sentí orgulloso, como cada uno de ustedes de la militancia política que tienen, que yo soy un afiliado al radicalismo y que le reconozco a este gobierno muchas de las cosas que hizo bien, pero se las reconozco no sólo porque las hizo bien sino porque tengo responsabilidad política, pues si no se las reconociera no tendría autoridad moral para criticar cuando se equivocan y esta organización critica cuando se equivocan. Todos pensaban que este sindicato, porque había acordado con el gobierno y con los empresarios el 1% para su obra social, iba a salir en una política de alcahueterismo político. Saben qué, el 31 de julio ganamos la elección y un día después, el 1° de agosto, la AB decretó un paro nacional para reincorporar a los 36 compañeros que el dictador Alperovich, en una decisión estúpida y revanchista, echó de la Caja Popular de Tucumán, olvidándose que vive en democracia y al mejor estilo del gobierno de Bussi en Tucumán, ha reprimido marchas de bancarios y despedido a los compañeros que sólo cometieron el pecado de luchar por su fuente laboral. No vamos a parar un minuto hasta que reincorporen a cada uno de los 36 compañeros y tampoco me preocupó decretar una medida de fuerza en el banco Nación, principal banco de la Argentina, cuando vemos que se atiende mal a los clientes, cuando vemos que no hay personal, discrimininación en la entrega de premios o bonus que se pagan... ¿saben por qué lo hacemos?, porque al hombre le pueden quitar muchas cosas, le pueden quitar dinero, su casa, comida,
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