Ordenación episcopal de monseñor Segura

Tercer aniversario de la Ordenación episcopal de D. Joseba Segura Etxezarraga. Así se recogía en Alkarren Barri.

UN NUEVO PASTOR PARA LA DIÓCESIS DE BILBAO

Fotos: GONTZAL FERNÁNDEZ, ÁNGEL EREZUMA

Desde el pasado 6 de abril la Iglesia de Bizkaia cuenta con un nuevo obispo auxiliar. Mons. Joseba Segura acompañará al obispo Mario Iceta en la tarea de transmitir “que Dios sigue caminando con la humanidad doliente, y quiere llegar a muchos con Buenas Noticias”. Así lo señaló en su mensaje, recién ordenado, ante los más de mil fieles, familiares, compañeros sacerdotes, prelados y políticos que participaron en la celebración que tuvo lugar en la catedral De Santiago.

Artzain makila, eraztuna, mitra eta paparreko kurutzea. Horreexek dira gotzain batek bere ezkutu eta lemagaz batera hautatu behar izaten dauazan ezaugarriak. On Joseba Segurak on Karmelo Etxenagusia zanaren egurrezko makila eroan eban bere ordenazino ospakizunean. Eraztun “soil bat” eta “Scio enim cui credidi- Badakit norengan fidatu nazan” lema daroan ezkutua aukeratu ebazan egun berezirako. Gallartako, Barakaldoko, San Inazioko, Otxarkoaga- Txurdinagako eta Ekuadorreko alkarteak gonbidatu ebazan. Ondoan izan zituan baita be, bera bizi izan zan Errekaldeko auzotarrak eta Larrea, Galdakao edo Zeanuri aitite eta amamaren herrikoak.

En la celebración de la ordenación, Mons. Joseba Segura recibió el báculo de madera de castaño, obra que el tallista artesano de Dima, Luis Auzmendi, regaló a Mons. Carmelo Etxenagusia para su ordenación. El bastón, que se guardaba en la basílica de Begoña; templo del que fue párroco Etxenagusia, fue uno de los símbolos que portó el nuevo obispo por expreso deseo suyo.

Dos obispos que llegaron de las diócesis de Riobamba y Babahoyo (Ecuador), país en el que ha estado durante doce años el nuevo obispo, participaron en la ceremonia en la que, además, concelebraron cientos de presbíteros diocesanos. El obispo emérito de Donostia, Juan María Uriarte, “quien me convenció para entrar al seminario” y una influencia “muy importante” en su vocación, tal y como ha manifestado D. Joseba en más de una ocasión, también fue uno de los concelebrantes. Otras personas, que ocuparon un lugar destacado en la ceremonia, fueron su hermano, también cura, Txaber Segura y su tío, el presbítero Iñaki Etxezarraga.

La Virgen de Begoña

Don Joseba Segura eligió precisamente una fotografía tomada por su tío –gran aficionado a la fotografíade la Amatxu de Begoña, para ilustrar el folleto que se repartió entre las personas asistentes con el esquema de la celebración. Reprodujo la misma imagen en los dos mil recordatorios que se repartieron al final de la ceremonia, porque para el nuevo prelado el santuario tiene un significado especial. “Ama y amama han sido personas muy importantes en mi vida de fe y que he venido muchas veces con ellas a Begoña”, explica.

Nombres propios

Dos presbíteros designados por Mons. Segura fueron los encargados de pedir su ordenación y presentarle: Francisco Pinilla, último cura ordenado en la diócesis de Bilbao y Juan Mª Lechosa, uno de sus formadores en el Seminario Diocesano. El texto de la Bula pontificia fue leído por el diácono Álex Andreu que será ordenado presbítero el próximo mes de junio en la misma catedral de Santiago de Bilbao.

Su cuñada Mavi Laiseca y su sobrino se encargaron de las lecturas en la celebración. El primer recuerdo que tuvo el obispo auxiliar en su pronunciamiento público estuvo dirigido hacia su ama, Tere, quien incluso “cuando la enfermedad terminal ya no le dejaba hablar”, le escribía en una pizarra: “Joseba no te lo creas”. Sumó a esta petición que le repetía su madre, a todas “esas grandes mujeres y hombres” que con su ejemplo de “fe y fortaleza”, han vivido “con sencillez y fidelidad” y “sin pretender que hacían nada excepcional”.

Homilía del obispo

El obispo diocesano, Mons. Mario Iceta se dirigió al ordenando en su homilía señalando que se le confía “el hermoso ministerio de cuidar esta viña de Dios que es la Iglesia”. Recordó además el sentido del ministerio que es “ponerse a los pies para servir”. El obispo de Bilbao también se refirió al lema del nuevo obispo auxiliar: “‘Sé bien de Quién me he fiado’. Él no te va a defraudar –le ha dicho-. Lo sabes bien por la experiencia propia de tu vida” •

RETAZOS DEL MENSAJE DEL NUEVO PRELADO

Anai-arreba maiteok, hemen nozue zuekin batera bidean jarraitzeko prest. Orain arte lez, baina hemendik aurrera ardura sendoagoarekin. Pero ha sucedido y creo que Diosito, que así le llaman en Latinoamérica, me dice también algo acerca de cómo debo entender esta ordenación episcopal: como llamada a seguir con más ganas y verdad a Cristo, el más bello de los hombres, quien, desde su cruz sanadora, ha dado vida plena a tantos millones de personas que han muerto sin que nadie les haya hecho justicia, a pesar de todas las promesas que habían escuchado de labios humanos. Ese Jesús de Nazareth, esperanza para todos los que hoy, hermanos y hermanas nuestros, reclaman dignidad y necesitan nuestro apoyo para superar pobrezas, sufrimientos o soledades. Hainbeste gizon-emakumeren testigantzak babestuta eta nire konfiantza osoa Jainkoagan jarrita, hasierako harriduratik eguneroko zerbitzu pozgarrira igaro nahi dot. Eso quiero hacer: acompañar con nuestro obispo Mario a esta Iglesia de Bizkaia a transmitir que Dios sigue caminando con la humanidad doliente, y quiere llegar a muchos con Buenas Noticias. Quiero hacerlo con la convicción y la perseverancia de los que sabemos que Cristo es capaz de sostener nuestro amor y nuestra entrega, incluso cuando la solidaridad humana se debilita o se torna pura apariencia.

Nunca hemos sido tan conscientes de que, incluso nuestra supervivencia, puede estar en peligro. El planeta comienza a dar signos de no poder soportar más depredación. Un mundo que necesita unidad de acción para afrontar muchos retos, pero en el que, paradójicamente, creencias y valores se fragmentan hasta el punto de que la misma idea de humanismo es cuestionada públicamente en algunos ambientes. Pero en este mundo sigue habiendo también mucho que celebrar, mucho que agradecer, mucho en lo que confiar, mucho más de lo que percibimos con nuestras mentes demasiado focalizadas en listados de amenazas y peligros. Ez da egoera samurra gaur hemen bizi doguna, egia esan. Beste sasoi batzuetan ere ez dira zailtasunak falta izan. Nosotros, los seguidores de Cristo, no tenemos las soluciones. No creo que Él nos esté pidiendo andar por ahí, proponiendo remedios o recetas. En todo caso, lo que hoy se nos pide, más que palabras, son testimonios de vidas auténticas; a todos los niveles y, ciertamente, de modo especial, en ámbitos de responsabilidad. Esker onez gainezka dago gaur nire bihotza. Ondo dakit, orain arte bidelagun izan zaituedanok hemendik aurrera ere ondoan izango zaituedala. Me habéis hecho el sacerdote que ha entrado hace dos horas por la puerta de este templo. Ahora, con vuestro apoyo espiritual y corrección fraterna, ayudadme a ser un buen obispo. Eskerrik asko, bihotz bihotzez. Jesukristori jarraitu nahi deutsagunoi hauxe eskatzen jaku: bizi gaitezala sinisten dogunaren arabera.