BIBLIOTECA PARTICULAR CABALLERO BONALD
Comparecen los libros en lugares anómalos, se juntan con indolente asimetría: un tropel de vestigios locuaces, pendencieros, irresolutos, lerdos. He pugnado con ellos durante muchos años: los he visto nacer, durar, languidecer. Han resistido intemperies, saqueos, turbamultas. Algunos llevan dentro la ponderada prueba de mi envidia, los más el distintivo incorregible de la decepción. Mi error fue abrir un día un libro.