Mujeres en la historia de Colombia 3

Page 1

LUZ Y FE DAN FUERZA

LA MUJER REVISTA QUINCENAL

EXCLUSIVAMENTE REDACTADA POR SEÑORAS Y SEÑORITAS Nº100.

SÁBADO, MARZO 11, 1975


100 Aร OS dรกndole voz a la mujer EDITORIAL: RUIZ, GNECCO, RESTREPO, MENDOZA


INDICE

1.En honor a nuestra fundadorabiografía de Soledad Acosta de Samper 2. ¿Quien nos escribe? 3. Hace 100 años 4. Nuestras primeras letras 5. Entretenimiento 6. Una lucha colectiva 7. Poemario “Nadie En Casa” de Piedad Bonnet Soledad



SOLEDAD Soledad Acosta de Samper (1833-1913) fue una mujer colombo neogranadina, hija del militar, historiador y prócer de la patria Joaquín Acosta y de la americana Carolina Kemble Rou. Fue esposa del político, escritor y periodista, José María Samper. Según el Ministerio de Cultura colombiano, fue la primera escritora profesional que tuvo el país. Soledad Acosta fue pionera del feminismo y la literatura en Colombia de mediados del siglo XIX.“Puede decirse que la obra de Acosta fue sepultada por un silencio que comenzó desde sus primeras publicaciones, que se selló con su muerte, y que se extendió desde ese momento y hasta finales de la década de 1980.” (Alzate, 2018) En su tiempo sus obras no fueron reconocidas por la academia y el público dado el contexto patriarcal y opresor en el que vivía la mujer en ese entonces no tenía los derechos y el valor que tiene hoy en dia, pero aun así, a lo largo de su vida logró escribir; sin mencionar que a lo largo de su vida, publicar medio centenar de narraciones breves junto con veinte novelas cuyo enfoque se centraba en el costumbrismo y en el carácter histórico; además, numerosos artículos ubicados entre movimientos como, el Romanticismo y el Realismo.


Luego de realizar sus estudios en Canadá y París, a sus veintidós años regresa a la Nueva Granada donde se casa con José María Samper, un escritor y político que fue útil compañía para Soledad en su camino de intelectual. Entre otras, Acosta de Samper fundó la revista quincenal La Mujer (1878), la cual estuvo en venta en la Nueva Granada durante tres años. De hecho, y gracias a su estadía en el extranjero por grandes periodos de su vida, poseía una cultura cosmopolita que no mostraba interés alguno por el modernismo de la época, y al tener una narrativa concisa con un lenguaje claro a la hora de escribir, era considerada como una “romántica tardía” quién con su leve discreción, pretendía generar reflexiones morales en sus lectores. A través de su narrativa, Acosta de Samper fue capaz de denunciar la poca, o casi nula participación social con la que contaba la mujer, junto con la lucha por la emancipación y el reconocimiento del papel reconciliador y salvador de la mujer en la sociedad colombiana del Siglo XIX. Cabe aclarar, que en el momento en que se publicaron sus obras fueron poco conocidas debido a su complejidad y al contexto social y cultural de la época, pues este no permitió que hubiera el suficiente interés ni comunicación acerca del trabajo de Acosta de Samper.


El silencio es una forma de invisibilización. Ese silencio crítico que rodeó a su obra en vida se debe en buena parte al carácter que tenía la escritura de las mujeres en la época, de alguna manera ilegible dentro del discurso patriarcal. Este hecho a su vez explica que hayan sido las lectoras feministas, como Montserrat Ordóñez en este caso, quienes rescataron a partir de la década de 1980 a las escritoras de la generación de Acosta de Samper en los diferentes países de nuestro continente, e incluso de Europa. Ordóñez formó parte de la primera generación de mujeres latinoamericanas que llevaron a cabo estudios doctorales, y los hicieron además en la década de 1970, es decir, en el contexto de los movimientos feministas y de lucha por los derechos civiles en general. Las mujeres tardaron mucho tiempo, como sabemos, en ganar acceso a una educación formal que hiciera factible su entrada a las universidades como estudiantes, y se necesitaron varias décadas más para que pudieran entrar en ellas como profesoras e investigadoras, hecho que transformaría la academia y su quehacer. (Alzate, 2018, 2) Soledad Acosta, durante toda su trayectoria logró grandes avances para abatir la desigualdad de género que hasta hoy en día prevalecen y cobran sentido en la lucha feminista.



´ ¿QUIÉN NOS ESCRIBE?


No es sorprendente que una mujer pionera en la literatura y en la poesía no haya sido reconocida sino hasta que fue mencionada por autores tales como Gustavo Otero Muñoz, en los años treinta, Bernardo Caycedo en la década de 1950, y Harold E. Hinds en la de 1970. Sin embargo, no fue hasta 1980 cuando por fin, esta maravillosa escritora salió a la luz. Como cualquier otra mujer, en la historia de Colombia el dejar de ser invisible ante un público o un espectador era una tarea casi imposible. Teniendo en cuenta que, sus letras estaban cargadas de forma explícita de un movimientos que en su época era inconcebible, el feminismo. De ahí puede surgir una pregunta sobre el rol, el estatus y el lugar de la mujer en la sociedad colombiana y cómo se describe o se narra esto dentro de esa misma sociedad ¿Quién nos escribe?


¿Quién narra nuestras vidas, y de qué forma? Hacerse lugar en la literatura como mujer, al igual que en cualquier otra carrera era un camino bastante complejo, sobretodo cuando las letras eran un campo dominado por los hombres y para los hombres, es por esto que Soledad Acosta de Samper es una de las pioneras de la literatura en Colombia. Con el fin de lograr hacer un planteamiento de quien escribe la historia de las mujeres en Colombia, haremos énfasis en un texto investigativo de Carolina Alzate, profesora titular del departamento de Humanidades y Literatura de la Universidad De Los Andes. Consideramos que este texto es esencial a la hora de desarrollar la incógnita de ¿quién nos escribe? Y además partiendo del hecho de que es escrito por una destacada académica, Carolina Alzate, ésta investigación es bastante reciente, lo cual resulta evidente, ya que es escrito por una mujer del siglo 21, así que, ¿son las mismas mujeres académicas quienes nos escriben? Alzate nos menciona la forma en la que la escritura de la gran Soledad Acosta de Samper fue sepultada, y es necesario mencionar que Soledad logró hacerse un campo en el mundo de la literatura colombiana gracias a su estatus social y a su apellido, siendo esto un patrón claro y lamentable en lo que consterna el ser reconocido en un país que desde sus inicios ha estado manchado por la desigualdad y una brecha social extensa.



Pese a que gracias a personajes masculinos tales como lo fueron Gustavo Otero Muñoz, Bernardo Caycedo, y Harold E. Hinds el silencio de la voz narrativa de Acosta de Samper haya sido roto, no puede ser ignorado el hecho de que también haya sido sepultado por destacados académicos en el campo de las letras como viene siendo el caso José María Vergara y Vergara, este tipo de hallazgos resultan relevantes a la hora de poner sobre la mesa a aquellas voces literarias que no tuvieron miedo de reconocer el talante de una eminencia literaria femenina sin miedo alguno, ya que al utilizar este término se hace referencia al temor de una sociedad patriarcal la cual consideraba como inconcebible que una mujer marcará sus libros por su nombre, dejando atrás el patrón de esconderse tras un pseudónimo masculino como fue el caso de las hermanas Bronte, Amantine Aurore Dupin, Matilde Cherner, Louisa May Alcott y Mary Shelly entre tantas otras, lo que para los hombres ha significado una tarea intelectual y espiritual, ha sido para las mujeres un acto de valentía, esfuerzo impetuoso y revolución social.En ese orden de ideas, es casi lógica la respuesta de quienes fueron las personas responsables de sacar a la luz las obras de esta escritora: las lectoras feministas (Ojala esto resultara redundante, pero no es así: no todas las mujeres son feministas por ser mujeres).


Montserrat Ordóñez (1941-2001), fue una mujer fundamental a la hora de ampliar lo que se concibe como el canon literario latinoamericano. Ordóñez hizo parte de de una generación muy relevante en términos de lo que fue la lucha feminista en Colombia, y fue una de las pocas mujeres latinoamericanas dentro de su generación que logró llevar a cabo sus estudios doctorales, esto es mencionando ya que como bien se sabrá, las mujeres tardaron mucho tiempo en lograr hacerse un lugar dentro de la educación formal y por ende en la educación superior y universitaria. Gracias a su esfuerzo y su lucha por destacar el rol de las mujeres dentro del mundo académico y de las letras, en 1980 Montserrat le dio inicio a una investigación que tenía como propósito rescatar a las escritoras de la generación de Acosta de Samper. En el año 2001, Montserrat invitó a Alzate a hacer parte de un grupo de investigación de la Universidad de Los Andes, titulado “Soledad Acosta de Samper y la construcción de una literatura nacional”Podría llegarse a la conclusión de que cuando se habla de lo que es la literatura femenina en Colombia, quienes le han dado visibilidad a esto han sido las mismas mujeres que continúan con la lucha de género e identidad, tal como es el caso de Acosta de Samper, quienes se ocupan de resaltar su trabajo y su importancia dentro del canon literario latinoamericano son mujeres que de una u otra forma hacen parte de su mismo ámbito: las letras.



La literatura es parte fundamental de la idiosincrasia de una nación, y mediante las letras de Acosta de Samper se dan a conocer varios de los rasgos culturales que componen a esta misma.Es gratificante la labor de Alzate y Montserrat, ya que dieron valor a una memoria histórica que se da a partir de las letras, y a la vez, manifiestan lo que significaba ser escritora en el siglo XIX.El sistema patriarcal se ha dedicado a sepultar los aportes de las mujeres desde todos los ámbitos, sobretodo el intelectual, es por esto que quienes nos escriben son quienes entienden la lucha del feminismo y la igualdad. Para finalizar este importante artículo, consideramos de menester importancia que nuestros lectores y lectoras desarrollen una capacidad de juicio y crítica acerca del contenido y de los medios de comunicación que consumen cuando se habla de la educación y literatura femenina. La población colombiana, en su gran mayoría, es educada y criada bajo todo un mundo de estigmas y convicciones que usualmente requiere mucho tiempo, lectura, cuestionamiento y reflexión para poder desmentir.


En Colombia no lograremos un verdadero cambio en lo que respecta a la literatura y a la educación femenina hasta no desenmascarar las concepciones que tenemos inculcadas desde que somos pequeños, tal como lo hizo Acosta de Samper. Porque además, algunos piensan que ésta lucha ya ha acabado, que las mujeres ya podemos votar, estudiar, trabajar y volvernos profesionales, etc. Lo que la sociedad aún no parece comprender es que falta aún toda una vida de aspectos para que seamos realmente un planeta donde ambos géneros pueden tener los mismos sueños, metas y visiones sin limitación alguna. Pues no hace falta realizar miles de investigaciones para dar cuenta de que los dueños de las grandes consultoras, negocios y empresas de todo tipo siguen siendo en su mayoría, hombres. Que los científicos y expertos en la medicina siguen siendo, en su mayoría, hombres. Que los presidentes, políticos, alcaldes en América del Sur, son, en su mayoría, ¡hombres! Que aún las azafatas deben utilizar maquillaje y encontrar una pilota de avión es sumamente difícil; que aún nos llaman para estar en la cocina y asumen que nuestra misión en la vida va en función de la maternidad y algunos creen que esta lucha ya acabó, pero la verdad, es que apenas está comenzando.



HACE 100 AÑOS En cuanto a sus obras, consideramos que su trabajo más característico, en cuanto al feminismo y el más importante a lo largo de su trayectoria literaria fue la creación de esta revista, La Mujer, publicada quincenalmente. Lo representativo de esta revista es que se redactó por y para las mujeres de la época. La Mujer es esencial para entender cómo las mujeres se apropiaron de los medios de comunicación masivos y pretendían alzar su voz frente al discurso patriarcal, republicano y católico. La Mujer será un órgano dedicado al bello sexo y al bien y servicio de él bajo todos los aspectos” (Acosta, 1879). Esta revista fue el medio que más adelante permitió que millones de obras y artículos se publicarán. Revistas de hoy como: Mujeres de prensa, Femme Colombia y Fucsia siguen siendo protagonizadas por mujeres, se habla de sus temas de interés, su posición social y el lugar de las mujeres en la sociedad. .



NUESTRAS PRIMERAS LETRAS


Imรกgen: Revista La Mujer. Soledad Acosta Samper (1878)


Además de esta destacada revista, Soledad Acosta tuvo muchas otras obras, alcanzando, 20 novelas, 50 narraciones breves, una amplia variedad de artículos, un cuadro de costumbres y el folletín. Acosta de Samper se caracterizó por tener un enfoque histórico -enfoque colonial- en cuanto a su escritura y también al costumbrismo de la época. Sus obras más representativas fueron, según la bibliografía por Ruiz, Fernandez y Tamar: Novelas y cuadros de costumbres de la vida suramericana (1869), Los piratas de Cartagena (1885) y Un chistoso de aldea (1905)”. Como podemos ver, los textos mencionados anteriormente tienen un enfoque completamente históricos y sus textos estaban muy relacionados con su entorno social, el texto Novelas y cuadros de costumbres de la vida suramericana, fue en dedicatoria a su padre, el general Joaquín Acosta.


¡Compatriotas! ¡Nuestra infeliz patria marcha con pasos precipitados hacia la ruina, el sol de la esperanza se oculta bajo la sombra de la desgracia! ¡Los héroes de otros tiempos pierden la confianza y la victoria nos deja para proteger el pabellón enemigo!. ¡Mujeres valientes, de todas las clases de esta ciudad! Aquellos destinados por la naturaleza para protegernos abandonan sus hogares y el valor no los anima ya: ¡nos dejan! ¡Huyen olvidados de que quedan sus familias sin varón que las proteja! ¡Conciudadanas! ¡Levantad vuestras tímidas cabezas, fortaleced vuestros débiles brazos y marchemos a atacar a los vándalos que se han apoderado de esta Ciudad! ¡No temáis! ¡Qué es más honroso, morir por la patria que vivir esclavas de los hombres más inocuos! ¡Qué!, ¿los asesinos y traidores nos seguirán gobernando?, ¿la paz de nuestras casas se acabará por ellos? ¡No! ¡Yo ofrezco llevar a la Victoria a todas las que quieran marchar bajo mis órdenes! ¡¡Compañeras! ¡Corramos a las armas! ¡Demos una lección a los que se titulan la parte valiente del género humano, mostrando que si podemos ser sumisas, también el bello sexo tiene valor y energía! ¡Mirad! ¡EI ángel de la muerte se acerca hacia los perversos, y las mujeres son las salvadoras de su patria! -Soledad Acosta de Samper



ENTRETENIMIENTO


M A N D A L A S


LIBROÂ RECOMENDADO


PLAYLIST DE E L L A S PARA Te busco - Celia Cruz Malamente - Rosalía At last - Etta James I put a spell on you - Nina Simone Inevitable -Shakira Halo- Beyoné Sin salida- Carmen Boza Me liberé - Maria Cristina Plata Girl on fire - Alicia Keys Love on the rain - Rihanna Vamos por el Magdalena - Mónica Giraldo Sola - Flor de Jamaica Mi libertad - Monseur Periné Hasta la piel - Carla Morrison Rehab - Amy Whinehouse Confesión - Marta Gomez Feeling Good - Nina Simone Ruptura - Ximena Sariñana Lo que construimos - Natalia Lafourcade Respect - Aretha Franklin If I aint got you - Alicia Keys La vie en rose - Édith Piaf Valerie - Amy Whinehouse Todo cambia - Mercedes Sosa My baby just cares for me - Nina Simone


EDUCACIÓN SEXUAL PARA DESCUBRIR ANTICONCEPTIVOS PARA DISFRUTAR ABORTO LIBRE PARA DECIDIR


EL PLACER ES FEMINISTA



UNA LUCHA COLECTIVA ECOFEMINISMO El ser humano se aleja cada vez más de su esencia, armonía y humanidad, pues se dedica a intensificar su egocentrismo, romper todo vinculo que tiene con la naturaleza, dividir a su misma especie, engrandecer a unos pocos y destruir a la mayoría. De la naturaleza parte todo lo que somos; origen, espacio, cultura, desarrollo, recursos e ideas. Esta ha estado vigente antes de nuestra misma existencia y lo estará cuando se acabe, sin embargo, aun cuando dependemos completamente en ella, abusamos, destruimos y nos perdemos en nuestra propia construcción de una sucia realidad. Un mundo vacío, injusto, frívolo, postizo y desigual. El bienestar siempre es de la minoría, la cual cree que tiene el derecho de explotar, discriminar, abusar y explotar a otros. La explotación de la naturaleza y el dominio a la mujer son el resultado de la conformación de estas estructuras sociales jerárquicas, desde el patriarcado y la burocracia de las primeras formaciones culturales, hasta las divisiones de clases de la sociedad moderna. Sin embargo, la lucha por estas causas se mantiene y coge cada vez más fuerza, teniendo un interés en común: la construcción de un mundo más justo, sano, equitativo, libre y verde.



Actualmente el feminismo se encuentra en un creciente interés por las problemáticas ambientales, esto ha conducido a un replanteamiento de las causas que motivan a estar en contra del sistema que históricamente ha dominado y explotado no sólo a las mujeres sino también a la naturaleza; los efectos devastadores del patriarcado, proponiendo una alianza entre el feminismo y la ecología. Como resultado sale el eco feminismo, este plantea cambiar nuestra relación depredadora con respecto a la naturaleza y a la mujer. Implantando la idea de que estas victimas de violencia dejen de ser vistas como objetos de consumo y se respeten. El eco feminismo tiene una visión del mundo menos jerarquizada, con grandes cambios sustanciales en la vivencia de la cotidianidad. La importancia que se le da a un ser vivo no debe estar ligada con su productividad y utilidad dentro del sistema económico consumista que nos rodea, se tiene que abandonar esta maquinaria que se impone y darle el mismo valor a todo ser vivo. La historia de la humanidad se compone de una gran cantidad de tragedias, muchas que parten de injusticias sociales. El pasado de Colombia es duro y complejo, pero está en nuestras manos usar esta serie de eventos para evitar que vuelvan a pasar. La revolución ambiental y social busca humanidad y da voz a los que no la tienen. Esto es un trabajo constante que requiere una evolución de conciencia. El cambio se debe aplicar a diario y empieza con simples reflexiones que surgen a partir de nuestra normalidad.




POEMARIO “NADIE EN CASA” DE PIEDAD BONNETT En el poemario “Nadie En Casa” de encontramos un poema llamado Trabajos fragmento de éste dice:

Piedad Bonnet, Domésticos. Un

Una mano grave, pausada, quita el polvo con un plumero alegre, barre el zaguán, el tedio que se hamaca, coloca su paciencia en la camisa, lava con humildad,y en las burbujas ve la cara de Dios y ve su propia cara. Éste poema de Bonnet manifiesta una fuerte crítica al trabajo doméstico al que nacemos condenadas las mujeres. Lo detalla en su esencia más pura y tediosa, injusta. Podemos relacionar fuertemente este poema y postura de Bonnet con la vida, la ideología y las obras de Acosta de Samper pues ambas denuncian explícitamente todo ésta idea y tradición en la cual el único deber de la mujer se basa en la maternidad y en el cuidado de la casa. Acosta de Samper es, por así llamarle, las críticas de Bonnet, pasadas de tinta y papel a una puesta en práctica de carne y hueso. Una mujer que se cuestiona su obligación a los “Trabajos Domésticos” y más bien dedica su vida a la literatura y a generar un real cambio en las mujeres de su país y de su sociedad.



Una de las obras más importantes e influyentes de Acosta de Samper es Dolores, esta obra resulta totalmente pertinente a la hora de hablar sobre el rol femenino dentro de la literatura colombiana, partiendo del hecho de que fue escrito en una época en la que las mujeres no podían ser concebidas como escritoras. Soledad Acosta se caracterizó por narrar guerras del siglo 19, y una de las cosas más bellas de su escritura es la forma en la que esta escritora logra captar pequeños detalles a través de lasensibilidad, más allá de un libro sumamente romántico, este es un libro que narra la guerra desde la perspectiva de una mujer que se encuentra en aislamiento por causa de una enfermedad severa, la lepra, el rostro de esta mujer se ve totalmente desconfigurado por causa de esta enfermedad, sin embargo, no fue solo su rostro lo que se vio afectado por la enfermedad, sino también su alma. Esta novela se basa en la reconstrucción de una mujer mediante las letras, pero desde una forma casi secreta dado que escribir para una mujer es podría representar violar un tipo de ley natural, casi como pelear con su propio sexo.Dolores vive rodeada de escritura, quienes la rodean escriben desde prosa hasta escritura periodística, pero ella se escondía tras su diario, y esta fue el primera acercamiento que tuvo con un bolígrafo y una hoja en blanco.Dolores es huérfana, y en cierta forma esa ausencia de lo maternal define en gran parte su personalidad, más allá del contenido de esta obra en sí, lo interesante es relacionarlo con la vida misma de Acosta de Samper, y resulta inevitable ver este texto como un ejercicio autobiográfico por parte de la autora.


Dolores es un libro que mediante sus páginas manifiesta lo que significa el ser mujer dentro de un siglo en que la mujer vivía en aislamiento constante, no por una enfermedad sino por sus sexo. El lepra que tiene la protagonista podría ser considerado como el machismo de una sociedad totalmente homogeneizada con respecto a lo que es una mujer. Leer a estas mujeres es un ejercicio importante, ya que nos hace reconocer la lucha de estas mismas mediante la ficción.


LA MUJER Nยบ100.

Sร BADO, MARZO 11, 1975


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.