LLEGA EL FINAL DEL CURSO...
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Llega el final de curso, otro más que se nos va sin darnos cuenta. Pero si echamos la vista atrás, y nos remontamos a septiembre, habría que decir que son muchas las experiencias que se mezclan en nuestra mente a lo largo de estos últimos 10 meses. En septiembre, a la ilusión del comienzo de curso se sumaba cierta preocupación y ansiedad, como el gusanillo que uno siente siempre que comienza algo distinto: nuevos desafíos, nuevos proyectos, nuevas responsabilidades, nuevas metas y objetivos, decisiones que tomar, dificultades crecientes, y también múltiples novedades (nueva clase, nuevos profesores, nuevas materias, nuevos alumnos, unos compañeros se van y otros que llegan, la seguridad y la alegría del reencuentro con las caras conocidas y la curiosidad y el aire fresco de las nuevas que al cabo de tres días ya son parte imprescindible del paisaje del aula) Esos primeros días eran un tiempo de nerviosismo, inquietudes y temores. Y luego han continuado los trimestres, el trabajo diario: clases divertidas o aburridas, pero siempre provechosas, felicitaciones y broncas, consejos de los tutores, tensión de los días de exámenes, visitas a Jefatura de Estudios de algunos, las excursiones, los viajes, las charlas llenas de bromas en los pasillos , comentarios que contagian optimismo en las horas bajas, palabras de aprecio y aliento, miradas cómplices, confidencias, anécdotas…En definitiva la cotidianidad de la vida escolar, ese cruce de caminos que nos vincula para 2 siempre.
Dicen que las mejores amistades se hacen entre los pupitres, creciendo juntos y es cierto, todos los adultos conservamos buenos amigos de esos años. Pero después de estos nueve meses, llega el final: estamos a mediados de junio. Para los profesores el momento no siempre agradable de las calificaciones finales, tiempo de balance entre lo planeado y lo alcanzado. Para los alumnos tiempo de nerviosismo ,del miedo al fracaso, de lágrimas y decepciones, del “¿Qué tal te salió el examen? y el ¿Cómo llevas el de mañana? “ “¿Qué te va a quedar?”, tiempo propicio en el que habría que haber ido descubriendo el significado de que “los libros son los peldaños de los sueños”, tiempo en el que uno no quiere perderse nada y vivir con intensidad todo. Todos sabemos que cada curso nos hace vivir experiencias que grabaremos en nuestras mentes, y que algún día serán un lugar común al que recurrir, en los momentos de recuerdo y nostalgia, para arrancarnos algunas sonrisas. Algún día…, pero hoy toca esperar los resultados finales, porque este curso se acaba. Y por eso, en este momento es importante que consideremos que en los estudios y en la vida no hay que intentar ser el mejor sino lo mejor que uno pueda. Con esto sobra y basta. Pero habría que llamar la atención en la importancia de la educación en valores, en principios que transciendan el egoísmo personal, que nos permitan construir un mundo más equitativo, más justo, más sostenible y más habitable para todos, donde todos puedan vivir dignamente y sus derechos fundamentales sean respetados; y esto también se aprende en las aulas . nible y más habitable para todos, donde todos puedan vivir dignamente y que sus derechos fundamentales sean respetados; y esto también se aprende en las aulas . Pero ahora llega el verano, con él tendremos más sol, vacaciones , más tiempo para nosotros mismos y para estar con la familia y amigos. Seguro que en el balance del año tenemos a muchas personas a las que agradecer su trabajo, su actitud, una sonrisa, su tiempo, un consejo… , a todos ellos! GRACIAS
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Incluimos en estas páginas las recomendaciones de un profesor de secundaria
y que sorprendieron a alumnos, profesores y padres. Para el verano, sus alumnos no tendrían que hacer oraciones subordinadas, ni resolver ecuaciones.. tendrían que cumplir 15 tareas que les entregó en una lista, tareas sencillas, que nos enseñan tanto y que nos invitan a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida , CARPE DIEM, en definitiva: 1. Por la mañana, de vez en cuando, camina solo por la orilla del mar. Mira cómo el sol se refleja en el agua, pensando en las cosas que más te gustan en la vida y siéntete feliz. 2. Intenta usar todas las palabras nuevas que has aprendido este año: podrás decir más cosas, podrás pensar más cosas y, cuanto más pienses, más libre te sentirás. 3. Lee lo máximo posible. No porque tengas que hacerlo. Lee porque el verano te inspira aventuras y sueños. Leyendo, te sentirás como los pájaros volando. Lee porque es la mejor forma de rebelión. 4. Evita todas las cosas, situaciones y personas que te hagan sentir negativo y vacío. Busca situaciones estimulantes y amigos que te aprecian y te entienden por ser quien eres. 5. Si te sientes triste o asustado, no te preocupes. El verano, como todas las grandes cosas, trastorna el alma. Intenta escribir un diario donde puedas escribir sobre tus sentimientos (y en septiembre, si quieres, lo leeremos juntos). 6. Baila; sin sentirte avergonzado. En la calle cerca de tu casa o en tu habitación. El verano es un baile. Sería una vergüenza no formar parte de él.
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7. Al menos una vez, tienes que ver amanecer. Estar ahí en silencio y respirar. Cierra los ojos, agradecido. 8. Practica mucho deporte. 9. Si encuentras una persona que te gusta mucho, díselo con toda la sinceridad y la gracia de la que seas capaz. No pasa nada tanto si lo entiende como si no. Si no es recíproco, entonces no estaba previsto que él/ella formase parte de tu destino. 11. Sé feliz como el sol, indomable como el mar. 12. No digas palabrotas. Sé siempre educadísimo y gentil. 13. Disfruta de películas con diálogos emotivos, sobre todo en inglés. Esto te ayudará a mejorar tus habilidades lingüísticas y tus oportunidades de soñar. No dejes que la película acabe con los créditos. Vive la experiencia todo el verano. De lo contrario, el verano 2018 es la gran oportunidad para caminar juntos (y si no funciona, vuelve al punto 8). 10. Recuerda lo que has aprendido en la escuela y consulta tus apuntes. 11. Sé feliz como el sol, indomable como el mar. 12. No digas palabrotas. Sé siempre educadísimo y gentil. 13. Disfruta de películas con diálogos emotivos, sobre todo en inglés. Esto te ayudará a mejorar tus habilidades lingüísticas y tus oportunidades de soñar. No dejes que la película acabe con los créditos. Vive la experiencia todo el verano 14. Durante el día o la noche, sueña con cómo puede ser tu vida. Durante el verano, reúne fuerzas para no rendirte y haz todo lo que puedas para perseguir ese sueño. 15. Sé bueno.
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¡ o al menos intentadlo. “No podemos enseñar nada a nadie, tan solo podemos ayudarlos a que descubran por sí mismos”. Galileo Galilei “¡QUE TENGÁIS UNAS INTENSAS Y REPARADORAS VACACIONES !“ y sobre todo ¡SED FELICES¡ o al menos intentadlo.
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PUBLICATA BIBLIOTHECAE Nยบ 99
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