XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Categoría 2º primaria: Finalistas by Biblioteca Colegio de San Francisco de Paula

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Ayer soñé que iba a casa de una amiga, y que salíamos a pasear por la ciudad. Se veían en los árboles azahares, nidos de pájaros, alguna que otra naranja, flores en los arbustos y en las glorietas; algunas calles eran tan silenciosas que sólo se escuchaban los golpes que daban los zapatos contra el suelo y en otras se escuchaba música y con ella la gente bailaba; también había muchas personas disfrazadas: resultaba que era carnaval. Cuando me desperté, tenía una sonrisa en los labios porque en el sueño lo había pasado muy bien. María Paz Luque Pérez 2ºC

XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y los niños: Pallotta, R. (2011). “Mis abuelos también lo cuentan”. Buenos Aires: Dirección General de Relaciones Institucionales del Gobierno de la Ciudad. Recuperado de: http://rominapallotta.blogspot.com.es/2011/07/mi-burrito-platero.html

Ayer soñé...

Moguer era un bonito pueblo blanco de Huelva. Ahí vivió Juan Ramón Jiménez que escribió Platero y yo, está lleno de edificios históricos, de casas típicas, rodeada de campos y abrazada en la ribera por el río Tinto.

Olivia Bazán López 2ºA XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Moguer

Érase una vez un pequeño burrito gris sin nombre y sin dueño, que caminaba sin rumbo hasta que un día lo encontraron dos niñas llamadas Carmen y Margarita. A Carmen le gustaba llevar siempre un hermoso sombrero de paja con un lazo. Margarita tenía el pelo rizado y negro. Al ver al burrito tan triste se compadecieron de él y lo llevaron al corral de su casa. Todas las mañanas daban largos paseos. Cuando su padre se enteró, se enfadó y lo quiso echar, pero las niñas lo convencieron para que se quedara. Desde entonces le llamaron Capricho. Blanca Carbajal Díez de la Cortina 2ºA XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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El capricho

Érase una vez una niña llamada Lola que vivía en Moguer, un pueblecito de Huelva. Un día Lola descubrió una casita blanca que parecía abandonada y como era muy curiosa entró pensando: “Vaya casa más extraña”. Cerró los ojos y oyó un burrito rebuznando y la voz de su dueño diciendo: “Arre Platero”. Lola se quedó dormida y soñó que jugaba con Platero y le ponía una corona de perejil porque había ganado la carrera, y comprendió que era la casita de Juan Ramón Jiménez. Desde entonces, Lola acude con sus amigos y se imaginan que juegan con Platero. Cristina Casado Estrada 2ºA XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Una casita blanca

Platero y los niños buenos juegan a las carreras en el parque de los naranjos. María grita: - ¡Platero gana esta carrera! Y todos le ponen una corona de perejil y pétalos de rosa. Al anochecer, Platero vuelve a casa a dormir con su almohada blanda de nube. Por la mañana, Platero juega con las mariposas del jardín. Platero se dice: - Tomaré miel de mis amigas las abejas. De camino Platero se para a oler las rosas, Felipe sin querer empuja a Platero y el pobre muere. Desde entonces hay un ángel de algodón cuidando de todos los niños de Moguer. Rodrigo Melgar Rodríguez 2ºA XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y los niños

Platero iba caminando a trote con Juan Ramón Jiménez al lomo. Se encontraron con un camino repleto de piedras. Platero se asustó. Pisó el camino y se hizo mucho daño. Juan Ramón se sentó al lado suyo y lo calmó. Pasó una señora llamada Julia que iba al mercado a vender almohadas y colchones. Juan Ramón compró un colchón de ochenta metros. Como no sabía qué hacer con él lo tiró al suelo y pudieron pasar. Siguieron caminando y llegaron al mercado. Juan Ramón vendió el colchón. ¡Ganaron mucho dinero! Pablo Arroyo Estévez 2ºB XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y las piedras

Un día de primavera Platero y yo íbamos paseando por el campo. De repente nuestro camino se vio interrumpido por un gran estanque lleno de hermosos nenúfares. Platero dio un salto atrás, estaba muy asustado porque pensaba que eran plantas carnívoras. Como lo vi tan asustado me senté a su lado y lo tranquilicé. Para demostrarle que eran inofensivas toqué una y él vio que no pasó nada. Se convenció de que no mordían, vio que eran nenúfares y cruzamos el estanque. Así pudimos continuar nuestro bonito paseo. María Domínguez-Rodiño Iglesias 2ºB XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y los nenúfares

Platero y Juan Ramón fueron al campo. Al atardecer vieron una sombra. Platero se dio un susto y su dueño le dijo que era una simple sombra, que no se asustara. Se puso encima de ella y el burrito vio que no pasaba nada. Así siguieron su camino. Cuando vieron otra sombra Platero se atrevió a olerla y vio que era igual que la otra. Juan Ramón se inventó un poema sobre las sombras. Alfonso Mena-Bernal Peña 2ºB XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y las sombras

Un día un niño llamado Juan salió con su hermana llamada Elena. Tenían que comprar naranjas para que su madre hiciera zumo. En vez de comprarle las naranjas directamente, se pusieron a jugar en el campo. Y perdieron las monedas y no pudieron comprar las naranjas. Pero alguien les ayudó a encontrar el dinero. Vieron un burrito que venía trotando hacia ellos con un billete en el hocico. El burrito era pequeño, peludo y suave y tan blando que parecía una bolita de algodón. Se llamaba Platero. Los niños al verlo corrían veloces hacia Platero. Le abrazaron y se sintieron felices. Ya podían comprarle las naranjas a su mamá. Juan Manuel Cano Díez 2ºC XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Las monedas perdidas

Parecía un día normal, como cualquier otro. Una niña llamada Alicia se despertó, miró por la ventana y… algo no iba bien, el aire era negro y se respiraba mal. Alicia no sabía que hacer si llorar, gritar, esconderse. Y lo que hizo fue ser valiente y salir. Quería saber cómo aquel humo negro había llegado hasta allí y se había apoderado de cada rincón de la ciudad. Caminaba por la calle cuando de pronto un extraño se acercó a ella y le explicó que el humo negro era el resultado de la contaminación. Alicia y el hombre se hicieron amigos y decidieron luchar juntos para limpiar la ciudad. Claudia Gutiérrez García 2ºC XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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La ciudad del humo

Había una vez una niña llamada Carmen. Y Carmen fue al campo y se encontró a un burro llamado Platero y se hicieron amigos y se fueron por el campo y se encontraron a los amigos de Platero. Platero, Carmen y sus amigos fueron amigos para siempre y montaron una fiesta. Los amigos de Platero se llamaban Carla, Carlos y Lola. Y Platero fue de la familia.

Isabel Osborne Liñán 2ºC XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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El burrito Platero

Juan ramón Jiménez y sus burrito Platero iban andando por el pueblo. Se encontraron con un niños llorando, y se acercaron. Luego le preguntaron que qué le pasaba, el niño les dijo que se había hecho mucho daño. Lo llevaron al médico y le pusieron Betadine y una tirita. Después lo llevaron a sus casa. Su madre lo vio y dio las gracias a Juan Ramón y a Platero. Juan ramón se montó en Platero y se fueron a su casa. Federico Argüelles Argüelles 2ºD XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y el niño llorando

Un día Platero estaba comiendo en su portal. Al cabo de un rato le dije: -¿Por qué no nos vamos a hacer una aventura por la selva? Y Platero para contestar hizo con la cabeza un sí. Estábamos en la selva, hasta que yo escuché un pisotón y era un elefante que se estaba peleando con un tigre. Cuando llegamos, les dije: -No os peleéis, es mejor la amistad y ser amigos, ¿no creéis?. Y dijeron que sí. Platero y yo nos lo pasamos muy bien en la selva. Y colorín, colorado este cuento se ha cerrado. Fernando González Castro 2ºD XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero en la selva

Érase una vez un burrito que estaba muy triste. Unos niños le hicieron una corona de flores. Ya era primavera. El burrito se llamaba “Platerito”. Cada día “Platerito” se sentía más feliz. ¡La corona era mágica! Tenía el poder de la felicidad. Así que viajaron por todo el mundo transmitiendo esa felicidad a todas las personas que estuvieran tristes. Un día “Platerito” se puso malito. Los niños intentaron curarle y le hicieron un collar de flores. Pero se dieron cuenta que ellos eran los que hacían felices a los demás. Y con su cariño consiguieron curar a “Platerito”. Paula Valenzuela de Castro 2ºD XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platerito

Los niños estaban jugando en la plaza de Moguer, de repente, aparecieron Platero Y Juan Ramón Jiménez. Los niños decidieron jugar con Platero a las carreras. — Preparados, listos. ¡Ya! -anunció uno de los niños- y la carrera comenzó. Al acabar nadie veía a Platero. Miraron por donde habían corrido, en su cuadra, por el pueblo, pero Platero no aparecía. En el campo, una niña llamada Lucía vio a Platero, se acercó a él y lo abrazó. Los niños llegaron al campo y vieron a Platero, llamaron a Juan Ramón y el resto del día jugaron. María José Trobat García 2ºD XVI Concurso Literario de Microrrelatos “D. Luis González”. Feria del Libro en Español. Depto. de Lengua Española y Depto. de Biblioteca. Colegio de San Francisco de Paula, 2014.

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Platero y yo