A fondo

PARROQUIA SALESIANA: LUGAR DE ESCUCHA PARA ACOGER Y COMPRENDER

El 19 y 20 de febrero tuvo lugar on-line el Congreso de Parroquias salesianas. Esta cita sirvió para la puesta en común del trabajo realizado entre párrocos y laicos bajo el lema “La parroquia salesiana, pueblo de Dios en salida”.

El Inspector de Salesianos Santiago El Mayor (SSM), Fernando García, recordó las palabras de Miguel Ángel García Morcuende, consejero general para la Pastoral Juvenil en su intervención cuando dijo que “vivimos en un contexto donde no tenemos tantos fieles como peregrinos en nuestras parroquias. En un contexto así la parroquia está llamada a ser una tienda del encuentro”.

Recordando un pasaje de la Encíclica Evangelii Gaudium señaló que “tal vez la situación que vivimos para muchas personas les haga urgir una búsqueda de Dios que podía estar adormecida y que puede suponer un nuevo peregrinaje en la vida, ojalá las parroquias salesianas sean espacios de espiritualidad, oración y escucha para acoger y comprender”.

El Inspector de Salesianos María Auxiliadora (SMX), Ángel Asurmendi, agradeció la labor de las parroquias salesianas. Especialmente destacó la dimensión social de las mismas con el rostro que tiene la Iglesia a través de Cáritas y otras entidades, atendiendo a tantas personas que llaman a nuestras puertas demandando una mano samaritana.

En este contexto destacó la labor de la parroquia salesiana de Girona que actualmente atiende a feligreses de 74 nacionalidades distintas. “Tenemos que estar en situación de salida, como la primera iglesia que se lanzaba a evangelizar allí donde nadie les podía entender y, sin dudarlo, se dejaron llevar por esa misión, con la fuerza del Espíritu”, explicó.

Sacerdotes con vivencia real de Dios

En su ponencia Un sacerdote acogedor, cercano, empático, colaborativo, el obispo auxiliar de la archidiócesis de Barcelona, Antonio Vadell, explicó que “un sacerdote de estas características es aquel que ama y se deja amar”.

Algunos datos: 58 Parroquias e iglesias públicas 3.000 Agentes de pastoral 48.500 Fieles atendidos

En las palabras de Don Bosco: “Camina con los pies en la tierra, pero teniendo la mirada y el corazón en el cielo”, trajo a colación el pasaje evangélico de la multiplicación de los panes y los peces haciendo hincapié en la hierba que había en aquel lugar, gracias a la cual pudieron sentarse en el suelo y compartir lo que tenían. “La llamada de Dios nos sitúa en el suelo, porque al final somos iguales ante el Señor, pero diferentes desde la vocación y por el carisma que viene de Dios y siempre nos une. Es interesante pensar en sacerdote acogedor, próximo, cercano, colaborativo, llamado a vivir su vocación juntamente con los hermanos diáconos, laicos y con toda la Iglesia, y vivir pendientes del Señor respondiendo a la vocación”.

En el encuentro participaron los dos delegados inspectoriales de Pastoral Juvenil, Jordi Lleixà y Xabier Camino, y contó también con talleres impartidos por Xavier Morlans, Ana Arbona, Pedro Vilchez, Manuel Olid, Myrian Navarro, Álvaro Ginel y Francisco Javier Cruz.

Daniel Díaz-Jiménez Carmona

Alumnos de Salesianos Aranjuez en la celebración por la fiesta de Don Bosco.

Niños del colegio salesiano de San Juan Bosco de Valencia acompañando al sacerdote en la misa.

Web del Congreso con todas las intervenciones:

https://pastoraljuvenil.es/ congresoparroquias/

La misión de los laicos

María José Roca, salesiana cooperadora y catequista de la Parroquia María Auxiliadora de Burriana, afirmó que, según su experiencia, la identidad de una parroquia salesiana se centra en el carisma de Don Bosco y su misión es dar a conocer ese carisma, a personas de cualquier edad y condición que se relacionan con la parroquia en algún momento de sus vidas.

“En cuanto a la misión de los laicos en las parroquias salesianas, en estos momentos es fundamental y necesaria. Por desgracia, cada vez quedan menos personas consagradas que se puedan hacer cargo de todas las tareas necesarias para el buen funcionamiento de una parroquia; y ahí es donde los laicos tenemos la misión de colaborar, como bautizados y creyentes”, añadió.

Por su experiencia, en las parroquias salesianas se cuida mucho ese aspecto; se ofrece la oportunidad de formarse a todos aquellos que están interesados en colaborar en alguna medida en la parroquia. “Creo que esa es la principal misión de los laicos en este momento, formación y colaboración”, concluyó.

Entrevista a Miguel Ángel Calavia, coordinador nacional de Parroquias Salesianas

Pregunta: ¿Por qué este Congreso titulado ‘Pueblo de Dios en salida’ en estos momentos?

Respuesta: Este Encuentro nacional de Párrocos y Laicos ha continuado con una larga tradición de la celebración de Congresos de Parroquias salesianas desde los años 80. Este tuvo como marco y telón de fondo la insistencia del papa Francisco en hacer visible y creíble una “iglesia en salida”, que dio contenido a las reflexiones y líneas de trabajo del Congreso de laicos (febrero 2020) y la aplicación a nuestras parroquias salesianas. Concretamente a la identidad y misión del párroco y el laico en una parroquia salesiana.

P.: ¿Cuál es la identidad de las parroquias salesianas?

R.: Las parroquias confiadas a los Salesianos quieren ser “rostro del Pueblo de Dios, una casa de familia, fraternal y acogedora, que congrega en la unidad todas las diversidades humanas que en ella se encuentran y las inserta en la universalidad de la Iglesia”. Ámbito ordinario donde se nace y se crece en la fe. (Directorio general para la catequesis, 257). Pero, como afirman la Constituciones de los Salesianos, recogidas también en el Cuadro de referencia de la pastoral juvenil, ofreciendo motivaciones y líneas de actuación como: Centro de evangelización y educación en la fe; presencia de Iglesia abierta al barrio; comunidad con mirada misionera; y con una opción clara por los jóvenes y clases populares.

P.: ¿Qué idea destacarías como conclusión del encuentro?

R.: Los tres iconos resaltados por Mons. Antonio Vadell, tres lugares de la casa familiar cargados de un fuerte simbolismo para nuestras parroquias, como lugares donde Dios interpela a los agentes de pastoral (ministerios ordenados y laicos corresponsables): La puerta y el hall / recibidor: donde se acoge de manera exquisita a los fieles, se les escucha con empatía, para conocer la situación personal de cada uno, y se da información sobre la vida y misión de la parroquia. La sala de estar: lugar de encuentro y diálogo de todos los sectores y grupos (Consejo parroquial, Asamblea parroquial, Catequesis, Educación de la fe, Cáritas, Atención a los enfermos, economía…): para conocer la realidad de la zona y de los fieles, y donde se concretan Proyectos y Programaciones que ayuden a personalizar la fe y a desarrollar las cuatro dimensiones de la fe cristiana: Sentido de comunidad, anuncio y evangelización, celebración de la fe y servicio de la caridad y acción social. La cocina: donde se cuecen los alimentos para alimentar y nutrir a los de casa. La cocina en la parroquia es el lugar propicio para la relación personal y el acompañamiento, como comunidad “nutritiva”, que anima y acompaña los procesos personales de los fieles, desde criterios evangélicos y desde la originalidad del carisma salesiano.