EL HOMBRE Y SU IMAGEN LA FONTAINE UN HOMBRE FEO SE SENTÍA BELLO. CUANDO SE VEÍA EN UN ESPEJO SIEMPRE PENSABA QUE ESTABA ROTO. LA SUERTE QUERÍA QUE ÉL SE VIERA COMO ES, POR LO QUE LLENABA SU CAMINO DE ESPEJOS QUE ÉL ESQUIVABA. UN DÍA, SEDIENTO, FUE AL RÍO Y VIO SU REFLEJO. ¿ERA ÉL, EN VERDAD? SE ASUSTÓ Y BEBIÓ LENTAMENTE. SU REFLEJO HIZO LO MISMO.
EL LEÓN Y EL RATÓN ESOPO UN RATÓN DURMIÓ CERCA DE UN LEÓN Y CUANDO DESPERTÓ ÉSTE LO ESTABA MIRANDO. EL RATÓN SE ASUSTÓ Y LE PIDIÓ QUE NO LO COMIERA. ALGÚN DÍA ÉL LO AYUDARÍA. EL LEÓN LO DEJÓ IR. AL TIEMPO, AL LEÓN LO CAZARON CON UNA RED. EL RATÓN SE ACERCÓ Y MORDIÓ LA RED. ASÍ LIBERÓ AL LEÓN.
EL PERRO EN EL PAJAR Esopo
UN PERRO SE HABÍA METIDO EN UN PAJAR POR ERROR, SE SENTÍA MUY INCÓMODO AHÍ DENTRO. GRUÑÍA Y LADRABA A LOS BUEYES QUE NO PODÍAN COMER TRANQUILOS CON TANTO BARULLO. UNO DE LOS BUEYES SE ACERCÓ Y LE DIJO: “RESPETA SIEMPRE LOS DERECHOS AJENOS, PARA QUE ASÍ PUEDAS EXIGIR EL RESPETO A LOS TUYOS.”
El zorro y el cuervo Esopo
ESTABA EL CUERVO POSADO EN UN ÁRBOL CON UN QUESO EN EL PICO. PASÓ UN ZORRO Y QUISO HACERSE DE ÉL. COMENZÓ A ELOGIARLO: QUÉ BELLO ERA, Y ¡QUÉ VOZ DOTADA PARA EL CANTO! QUÉ PLACER SERÍA, COMENTÓ EL ZORRO, ESCUCHARLO CANTAR. EL CUERVO ABRIÓ EL PICO PARA CANTAR Y... EL QUESO CAYÓ. MIENTRAS HUÍA CON EL QUESO, EL ZORRO DIJO: “NUNCA TE DEJES ELOGIAR POR TALENTOS QUE NI SIQUIERA TIENES”.
LA CANGREJA Y SU HIJA LA FONTAINE UNA FAMILIA DE CANGREJOS ESTABA ORGANIZANDO EL CUMPLEAÑOS DE SU HIJA. TENÍAN LA ILUSIÓN DE QUE ENTRARÁ AL SALÓN CAMINANDO DERECHA. A PESAR DE INTENTARLO, ELLA NO PODÍA. ENTRARÍA A LA FIESTA YENDO PARA ATRÁS COMO TODOS LOS CANGREJOS.
LA CIGARRA Y LA HORMIGA DEINONYCHUS QUERÍA MUCHO A SU PRIMO VELOCIRRAPTOR.
LA GALLINA DE LOS HUEVOS DE ORO SAMANIEGO UNA GALLINA PONÍA HUEVOS DE ORO CADA DÍA. EL GRANJERO PENSÓ QUE TENÍA ORO ENTRE SUS TRIPAS. DESARMÓ A LA GALLINA, PERO NO ENCONTRÓ NADA. A LA MAÑANA SIGUIENTE NO HUBO HUEVO DE ORO. EL GRANJERO SE ENTRISTECIÓ. “MEJOR TENER POCO PERO SEGURO QUE MUCHO PERO INEXISTENTE”.
LA MONA IRIARTE
LA MONA RECIBIÓ DE SU DUEÑA UN MONTÓN DE HERMOSA ROPITA. SE LA PUSO Y HUYÓ A ÁFRICA. NINGUNO DE SUS AMIGOS LA RECONOCIÓ Y TODOS LA ELOGIARON. SIN EMBARGO, CUANDO LA ESCUCHARON HABLAR, NOTARON QUE ERA IGUAL A ELLAS, SOLO QUE CON ROPA LINDA. RIENDO DIJERON: -AUNQUE LA MONA SE VISTA DE SEDA... ¡MONA QUEDA!
LOS DOS AMIGOS Y EL OSO SAMANIEGO
A DOS AMIGOS EN EL BOSQUE, SE LES APARECIÓ UN OSO. UNO MUY MIEDOSO SE ESCONDIÓ DETRÁS DE UN ÁRBOL. EL OTRO, SIN TENER A DÓNDE IR, SE HIZO PASAR POR MUERTO. EL OSO SE ACERCÓ Y LO OLFATEÓ. LE DIJO: “ALEJA TU AMISTAD DE QUIÉN SI TE VE EN RIESGO TE ABANDONA.”
LOS RATONES Y EL GATO SAMANIEGO UN GATO ENCONTRÓ UNA CUEVA DE RATONES. CUANDO SALÍAN, LOS CAZABA. UN DÍA, EL JEFE DE LOS RATONES, SUGIRIÓ ATAR UN CASCABEL AL ASESINO. PERO ¿QUIÉN SE LO PONDRÍA? EL GATO, QUE HABÍA OÍDO TODO, SONRIÓ. “ES MÁS FÁCIL SUGERIR IDEAS QUE LLEVARLAS A CABO”, PENSÓ