2 minute read
Conclusiones
I. Humanizar los servicios de salud es un deber y un derecho que tienen los usuarios y usuarias y no solo implica considerar el impacto de las dinámicas de género en la población si no personalizar el servicio, hacerlo amigable, con sensibilidad y dando espacio suficiente para trabajar el cambio de comportamiento. En este sentido, el acercarse a estas poblaciones requiere que la intervención esté permeada de un enfoque de derechos, pero a la vez conscientes de que los constructos de género no siempre son perceptibles y que pueden estar midiendo muy sutilmente en la manera en que el proyecto se desarrolla.
II. Sistematizar el seguimiento a pacientes implica asignar recursos y voluntad, pero es la manera en que deja de ser un evento esporádico y llega a ser una parte integral de la atención. En el caso del PLM se ha hecho en el ámbito de la salud (detección de ITS) sin embargo, la metodología de aplicación del modelo es transferible a otras áreas, como el área de ginecología y obstetricia. Los resultados con esta intervención demuestran que el Laboratorio Móvil puede ser un espacio amigable para personas que viven en comunidades alejadas y que están consiente de la necesidad de hacerse una evaluación periódicamente.
Advertisement
III. La experiencia de programación conjunta es replicable en otros contextos en que se busque empoderar y concientizar a los gobiernos municipales y unidades de servicios, especialmente del área de la salud, siempre y cuando se logre una verdadera articulación, especialmente en la implementación de las acciones en terreno.
IV. Involucrar a los actores locales en todas las fases de las propuestas, desde el diseño es vital para aplicar un enfoque integral.
V. Dar acompañamiento constante a los actores locales avivo la confianza, fortaleció habilidades técnicas y no menos importante elevó su credibilidad ante las personas usuarias, esto por realizar el servicio médico de manera apropiada en tiempo y forma.
VI. El proyecto Laboratorio Móvil es altamente valorado porque en base a transferencia de conocimiento y gestión de acceso médico pudo articular una respuesta adecuada para aquellas personas que están afectadas por ITS en los municipios de Yorito, Sulaco y Yoro.
VII. El Proyecto Laboratorio Móvil fue una escuela de aprendizaje para todos los actores involucrados. Un elemento sobresaliente en las entrevistas cualitativas a representantes de las Unidades de Salud es que afirmaron que no sabían cómo podían trabajar en la detección, tratamiento y seguimiento de personas con ITS (por tener que transportarse en caminos rurales y de difícil acceso) en este sentido, el Proyecto les sirvió no sólo para aprender sobre cómo realizar este proceso sino sobre metodologías para la implementación sostenible.
VIII. La conjugación de sostenibilidad-institucionalidad implicaría que el Sector Gubernamental inserte las capacidades adquiridas por el personal de salud en sus protocolos, planes de acción y presupuestos, aunque las demandas de salud sobrepasen la capacidad del presupuesto de dicho sector. En esencia, la sostenibilidad va a depender no tanto de los recursos disponibles sino de cuánto la institución asume los aprendizajes como propios.