Una no-historia de Caliche Caroma. Fotografía y textos. Morelia, Michoacán, México. 2013 1
Mi carnal es la onda La onda chida La mera rifada Por la avenida van los carros Las camionetas
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Limpiar un parabrisas ajeno Sonriendo al peso Soldados de plomo Contra las malas caras No queremos ser molestados DICEN DICEN DICEN El gran pĂşblico no quiere ser molestado ÂżY el ritmo? Hay que comer Aunque el ritmo no se entienda.
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Subo a los hombros de la humanidad, y no me caigo. 4
Soy el ciego No veo No hablo con los ojos Y nos vemos y no vemos EstĂĄs viendo y no ves ÂżVes?
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Cruzar la calle con mis amigos, con mi familia. Tengo las ganas reparadas, remendadas las ganas. Espero no ser atropellado, espero no ser charco de sangre. Ya una vez fui vĂctima del asfalto, vĂctima de la modernidad metĂĄlica con motor, miles de caballos de fuerza, como mi caballo. Mi perro, mis amigos, mi familia, mi fuerza. Cruzar la calle.
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Fuimos a buscar el pan mas no lo encontramos, encontramos oro, plata y billetes verdes, pero del pan no supimos ni las boronas. 7
Me alejo Te dejo Me voy Nos vamos Adiós Ya vas ¿No traes? Ya vengo ¿Qué hay? Ponte a trabajar.
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Miradas sobre los malabares de la existencia.
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Tengo monedas estériles y basura en reproducción. Escoba, peatones, lecturas, árbol. Lo que no tengo es una historia. 10
ÂżSu limpiada de cerebro seĂąor?, le hago ver la realidad. Lleve su diario, le hago sentir el tiempo. Lleve, no traiga nada. 11
¿Cuántos misterios habrá en las cajuelas de los carros? ¿Cuántas camionetas llevan las vísceras de la esperanza? 12
Y me vi viendo el sueĂąo de la civilizaciĂłn.
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Y aquĂ comienza mi historia, donde llueve incertidumbre. 14