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Escuela Preparatoria Ingenireo Pascual Ortiz Rubio,
CONSTRUCCIÓN DE
TRASCENDENCIA EDUCATIVA S ALVADOR J IMÉNEZ Recién cumplidos 46 años de formar bachilleres que de «San José» salen a prepararse profesionalmente en las diferentes escuelas y facultades de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), la Preparatoria Ingeniero Pascual Ortiz Rubio abrió sus puertas en 1967, con el propósito de descargarle población estudiantil al Colegio de San Nicolás. Apenas llegar al plantel, la diligente atención del estudiante Mauricio Medina y la bióloga Esther Cardoso hicieron que nos sintiéramos como en casa, con ambos guías recorrimos el arquitectónico inmueble, aprendiendo de los orígenes de la institución conocida popularmente como «Prepa 2», que se remontan a 1860, cuando el obispo José Ignacio Árciga ordenó se construyera un nuevo edificio, que sirviera como sede del Seminario Tridentino, atrás del templo de San José, cuando el edificio del Seminario Conciliar -hoy Palacio de Gobierno- fue expropiado por el Ejecutivo estatal. Ahí se impartieron las cátedras de gramática, retórica, filosofía, moral, teología y dogmática, entre otras. El inmueble fue expropiado en 1914 durante la gestión de Gertrudis G. Sánchez como gobernador, por lo que pasó a formar parte de la UMSNH, casa de estudios que instaló en 1917 la sede del Observatorio Meteorológico estatal, al inaugurarse éste de manera oficial. A partir de 1938 el inmueble se utilizó como escuela secundaria varonil y en 1967 se incorpora como plantel de la UMSNH y adopta sus programas de estudios de bachillerato, tomando el nombre del fundador de la Universidad durante los festejos del aniversario 50 de esta institución para después adoptar el nombre de Ingeniero Pascual Ortiz Rubio, el 4 de diciembre de 1967, durante el rectorado de Alberto Lozano. Hoy, a casi medio siglo de su
FOTO: SALVADOR JIMÉNEZ
Fotofrafía que captura una parte del patio de la preparatoria Pascual Ortiz Rubio adornada con la torre y la cúpula del templo de San José que fue terminado en 1884, diseñado en el estilo ecléctico de influencia neoclásica muy ornamentada que dá un aspecto barroco, es obra del arquitecto francés Adolfo Tremontels. apertura, la Prepa 2 cuenta con una matrícula de dos mil 159 alumnos que cursan los bachilleratos Histórico-Social, Ingeniería y Arquitectura, QuímicoBiológico y Económico-Admi-
nistrativo; la maestra María Luisa Tena Vences funge como directora del plantel. Este edificio de estilo inobjetablemente neoclásico es el más amplio entre las preparatorias
pertenecientes a la Casa de Hidalgo, cuenta con seis patios y 40 aulas, laboratorios, salas de lectura y cómputo, y salón de actos para su nutrida comunidad estudiantil, tiene elementos del
barroco: frisos con figuras de guirnaldas y cruces; remates en la cantera con las formas de la corona pontifical cruzada por detrás por el báculo y la cruz; medallones con los nombres de
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Pascual Ortiz Rubio, forma parte de la historia de México porque además de haber sido historiador y geógrafo, fue presidente de la República Mexicana por un corto periodo.
FOTO ARCHIVO
Actualmente la preparatoria Ingerienro Pascual Ortiz Rubio cuenta con una matrícula de dos mil 159 alumnos.
los apóstoles, los doctores y los padres de la Iglesia católica, inscritos en los arcos de cantera que circundan el patio principal en su planta alta. Esta añosa construcción fue cedida a la UMSNH después de haber funcionado como casa de claustro anexa al templo de San José. El patio es típico de las casas y conventos de la época, caracterizados principalmente por su altura y amplitud. Destaca en su arquitectura el trabajo de herrería de los barandales y el del
pasamanos de la escalera, en cuyo frente fue colocado un nicho con el busto del ingeniero Pascual Ortiz Rubio. Ortiz Rubio nació en la capital michoacana el 10 de marzo de 1877. Cursó estudios en San Nicolás y en la Escuela Nacional de Ingenieros de la Ciudad de México, donde se tituló como topógrafo en 1902, tras lo cual regresó a Michoacán, donde ejerció su profesión y se involucró en actividades políticas, como consecuencia de su acti-
vismo, Ortiz Rubio se unió con Joaquín al movimiento maderista, corría 1902. También conquistó una diputación federal durante el régimen del presidente Francisco I. Madero; junto con todos los demás legisladores, fue encarcelado en 1913 tras el cuartelazo del general Victoriano Huerta. Afiliado al constitucionalismo, el ingeniero Pascual Ortiz alcanza el grado de coronel. Viaja a Estados Unidos para hacerse cargo de la impresión de
FOTO: SALVADOR JIMÉNEZ
papel moneda infalsificable. Posteriormente fue nombrado gobernador de Michoacán en 1917, cargo que ocupó hasta 1920 cuando se afilia al Plan de Agua Prieta, que encabezaba Plutarco Elías Calles. La vida le sonreía también en el plano personal, fue así que Pascual Ortiz Rubio contrae matrimonio el 13 de agosto de 1920 con Josefa Ortiz. En el gobierno de Adolfo de la Huerta fue secretario de Comunicaciones y Obras Públicas (1920), puesto
que le fue ratificado durante el gobierno de Álvaro Obregón (1920-1921). Disputas políticas con integrantes del gabinete obregonista orillaron al ingeniero Ortiz Rubio a dejar el cargo y exiliarse en 1921, en España, a donde emigró con su esposa, estableció un negocio de libros y una tabaquería. Posteriormente, se trasladó a Egipto, lugar en el que permaneció por seis meses mientras estudiaba los sistemas de riesgo que los ingleses habían llevado a ese país. Luego de fungir como embajador en Alemania, Elías Calles lo repatrió para postularlo y en las elecciones del 17 de noviembre de 1929 fue candidato a la Presidencia de la República por el Partido Nacional Revolucionario (PNR). Asumió el cargo de presidente el 5 de febrero de 1930, venciendo a su contrincante José Vasconcelos Calderón, ese mismo día fue objeto de un ataque que le dejó como resultado algunas heridas en el rostro. Dos meses duró la convalecencia de don Pascual en el hospital de la Cruz Roja, días que le obligaron a dejar el poder en manos de sus colaboradores. Durante su gobierno se formó la Comisión Nacional de Turismo; Baja California se dividió en dos territorios; Norte y Sur; se inauguró la carretera México-Nuevo Laredo; se promulgó la Ley Federal del Trabajo (28 de agosto de 1931). México ingresó a la Liga de las Naciones y se suprimió el territorio de Quintana Roo, ampliándose los límites de Campeche y Yucatán. Pascual Ortiz Rubio murió en la Ciudad de México, a la edad de 86 años, el 4 de noviembre de 1963.
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Fotografía de una pintura del Ex-convento Dominico de Morelia creada en 1876 por el artista nacido en Morelia Mariano de Jesús Torres, pintura que actualmente está en exhibición en el museo Casa Natal de Morelos.
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FOTO: SALVADOR JIMÉNEZ
R ECINTO MUSICAL CONSERVATORIO DE LAS ROSAS
Frente al conservatorio se encuentra el Jardín de las Rosas como comúnmente se le conoce al Jardín Luis González Gutiérrez, nombre que se le dio en honor al profesor del Colegio de San Nicolás de Hidalgo.
SALVADOR JIMÉNEZ El Conservatorio de las Rosas ha desempeñado un papel protagónico en la vida cultural de Michoacán y de su capital, Morelia,
en ese recinto cultural se llevan a cabo infinidad de actividades académicas y artísticas de primer nivel, además de festivales, seminarios y sus tradicionales cursos veraniegos.
Tomando en cuenta lo anteriormente expuesto, el Conservatorio de las Rosas puede definirse como la institución privada que más opciones ofrece en carreras musicales en México, donde es
reconocido como la mejor opción en la región centro-occidente y norte del país. Su matrícula es de 250 alumnos en los niveles medio superior y superior, lo que coloca al Conserva-
FOTO: VICTORIA PÉREZ
torio como un proveedor natural de músicos de alto nivel para todo el país, con un elevado índice de alumnos titulados en el campo de la enseñanza artística musical.
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DATOS HISTÓRICOS En 1743 se fundó en la ciudad de Valladolid el Colegio de Niñas de Santa Rosa de Santa María, en el edificio que hoy ocupa el Conservatorio de las Rosas, ubicado justo frente al Jardín de las Rosas. El inmueble había pertenecido al Convento Dominico de Santa Catalina de Siena, institución que destacaba en la antigua provincia de Michoacán por su intensa actividad musical. Aunque es justo señalar que el Colegio de Niñas también se distinguió por el papel que desempeñaba en la enseñanza de música, por lo que hoy es considerado como el antecedente más remoto del Conservatorio de las Rosas. El Colegio de Niñas funcionó hasta 1870, cuando el gobierno lo clausuró definitivamente tras casi una década de dificultades y cierres parciales. El edificio fue expropiado y destinado a diferentes usos por parte del gobierno estatal. Con la intención de otorgar una formación profesional a los músicos sacros, en 1904 se inauguró en Morelia la Escuela de Música Sacra San Gregorio Magno, institución que jamás tuvo instalaciones propias, por lo que su existencia fue breve y su cierre llegó al ser clausurado en 1914 junto con otros colegios de origen eclesiástico. No obstante, ese mismo año se organizó en la ciudad el Orfeón Pío X, que surgió con la idea de dar continuidad a la clausurada escuela, pues a los integrantes del coro se les proporcionaba una esmerada formación musical. Pasaron siete años para que el Orfeón se convirtiera en la Escuela Oficial de Música Sagrada del Arzobispado de Michoacán, que en 1926 otorgó los primeros títulos de Licencia de Canto Gregoriano y Magisterio en Composición. Entre los estudiantes titulados en 1927 está Miguel Bernal Jiménez, quien al año siguiente se trasladó a Roma para cursar una especialidad en órgano, una vez que logró su objetivo, Bernal Jiménez retornó a Morelia, donde obtuvo una plaza de maestro de órgano, lo que marcó el inicio de una nueva época para la enseñanza de la música sacra en Morelia. Entre 1930 y 1934 la escuela funcionó en el edificio de las Rosas, pero fue nuevamente desalojada, por lo que continuó su trabajo en locales improvisados. Bajo la dirección artística de Miguel Bernal Jiménez, a partir de 1938 se implementó un innovador y ambicioso plan de estudios en la institución, lo que la llevó a ser considerada como Escuela Superior de Música Sagrada, misma que otorgaba, además del título en Composición y Licenciatura en Canto Gregoriano, la Licenciatura en Órgano.
FOTOS: SALVADOR JIMÉNEZ
En 1941, la Escuela Superior de Música Sacra se trasladó al edificio que ocupa hoy frente al Jardín de las Rosas.
El Conservatorio de las Rosas fue el primer conservatorio de música de América en el siglo XVIII.
El Conservatorio se ha convertido en uno de los institutos de Estatua de Miguel Bernal Jiménez en el Conservatorio de las Rosas. enseñanza musical más prestigiados de Latinoamérica. En los albores de 1941 la escuela se trasladó al edificio que ocupa hoy frente al Jardín de las Rosas, pero fue hasta 1950 que, tras la integración de la Asociación Civil del Conservatorio de las Rosas, que el inmueble fue cedido definitivamente a la academia musical, tras ello, la institución dejó paulatinamente sus raíces clericales hasta ser reconocida como Conservatorio de las Rosas, nombre que ostenta en la actualidad. Luego de la muerte prematura de Bernal Jiménez, en 1956, el sacerdote Marcelino Guiza tomó las riendas del Conservatorio, logrando mantener viva la institución enfrentando situaciones adversas. En esa tarea contó con la co-
laboración de los maestros Bonifacio Rojas, Gerhart Muench y Rubén Valencia, entre otros menos conocidos pero que dieron un decidido apoyo. A pesar de dejar sus orígenes, el Conservatorio de las Rosas mantenía como meta fundamental la formación de músicos para el servicio religioso, lo cual perdió vigencia con los cambios litúrgicos aprobados por el Concilio Vaticano II (1962-1965). Ese hecho llevó a la música a ocupar un lugar secundario en el oficio, consecuentemente la Iglesia dejó de requerir músicos altamente especializados en disciplinas como el canto gregoriano, la polifonía vocal clásica y el órgano. En 1980, el Conservatorio de
las Rosas fue reestructurado apegándose a sus estatutos fundacionales de 1950 con base en un Consejo de Asociados, integrado por distinguidos representantes de la sociedad civil moreliana. José María Pineda fungió como presidente del Consejo hasta 1987, año en que entregó la estafeta a Manuel Contreras Reyna, éste designó como director de la escuela al maestro Jesús Carreño, uno de los más notables discípulos de Miguel Bernal, en sustitución del padre Guiza. Ese hecho constituyó el primer paso para separar definitivamente del clero al Conservatorio. La renovación iniciada en 1987 prosiguió con la restauración del edificio central del edificio que se
encontraba casi inutilizable. El nuevo Consejo de Asociados y la comunidad de maestros tomaron conciencia de que era inaplazable una transformación académica de fondo, que revisara la misión del Conservatorio. Fue a partir de entonces que el Conservatorio se enfocó en la formación profesional de músicos, al margen de todo objetivo religioso. A partir de 1990 ocupó la presidencia del Consejo de Asociados Miguel Bernal Macouzet, quien duró en el cargo una década. Fue sucedido por Alfonso Mier, Francisco Johnson y en 2003, Francisco Bernal Macouzet. El ingreso de maestros mexicanos y extranjeros convirtió al Conservatorio en una institución de vanguardia en la educación musical nacional e internacional. Con mención especial para la doctora Gellya Dubrova, maestra de violín, viola, música de cámara y pedagogía, y pilar académico del Conservatorio, gracias a su total dedicación a la música, a su amor por sus alumnos y la formación musical de estos. Con una experiencia de más de 50 años en sus facetas de intérprete catedrática, Dubrova tiene un gran número de ex alumnos dispersos en orquestas e instituciones de educación y cultura de diferentes países de diferentes latitudes. La construcción del Campus Carlos Prieto fue el proyecto de crecimiento más ambicioso de la última década del siglo pasado. Un moderno edificio diseñado por el arquitecto José Moyao, con niveles de preescolar y secundaria que, junto con la primaria que ya existía, completaron la oferta educativa del Conservatorio; así, el proyecto académico de los niveles básicos se transformó radicalmente para dar paso a un modelo de educación integral con enfoque humanista, que incluye ciencias sociales y exactas, tecnología, inglés, deporte, música y artes. También se crearon los talleres artísticos y deportivos, espacio ideal para el desarrollo de habilidades musicales, artísticas y deportivas a edades tempranas. El Campus Carlos Prieto es un proyecto único en México, y es uno de los grandes orgullos del Conservatorio de las Rosas. Actualmente el Conservatorio tiene presencia en entidades como Sonora, Aguascalientes y Nuevo León; se han signado convenios con instituciones académicas que permiten a sus maestros y alumnos impartir cursos y ofrecer recitales fuera de Michoacán. Además; se establecieron convenios con la Universidad de Texas, en Austin, el Conservatori Liceu de Barcelona y la UNESCO, organizando conjuntamente eventos de intercambio académico.
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ANTIGUA DE MÉXICO FOTO ARCHIVO
Mural La Conquista de Hollis Howard Holbrook, 1952 ubicada al costado del Sotocoro.
Biblioteca Pública Universitaria
TERCERA RIQUEZA BIBLIOGRÁFICA MÁS ANTIGUA DE MÉXICO
SALVADOR J IMÉNEZ
Al igual que la mayoría de monumentos arquitectónicos de la capital michoacana, la Biblioteca Pública Universitaria ocupa un edificio que fue diseñado y construido como templo católico, pertenece a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y está ubicada en pleno corazón de Morelia, frente al Colegio de San Nicolás de Hidalgo y a dos cuadras de la Catedral Metropolitana, la construcción de este inmueble se remonta al siglo XVI, durante el virreinato albergó el Convento de la Compañía de Jesús, el edificio incluía el anexo que actualmente ocupa el Palacio Clavijero y que inicialmente dio cabida al Colegio de San Francisco Javier. La Máxima casa de estudios en el estado ha dedicado el edificio a fomentar el conocimiento de sus estudiantes y al servicio de los morelianos en general, es un edificio construido en cante-
La Biblioteca Pública Universitaria fue fundada en 1930 a iniciativa del entonces gobernador Lázaro Cárdenas del Río. FOTO: SALVADOR JIMÉNEZ
ra rosa, en un estilo barroco tablerado de aquella época, su fachada apunta hacia el oriente y cuenta con un acceso con arco de medio punto que es alternado por pilastras estriadas con capitel dórico, en su segundo nivel exhibe una ventana colar con arco
de medio punto donde se halla la escultura de un pelícano rasgando su pecho, se dice que la imagen representa el sacrificio redentor de Cristo, pues cuando escasea el alimento, el pelícano se picotea el pecho hasta hacer brotar la sangre, con la que sacia
el hambre de sus pequeños. Su interior presenta planta de cruz latina, techo con bóvedas de pañuelo, cúpula sobre el crucero y decoración neoclásica del siglo XIX. A lo largo de los muros del recinto se ubican altos libreros de madera en niveles donde se resguarda el fondo bibliográfico an-
tiguo. En los muros del crucero y el ábside se ubican murales en la técnica de pintura al fresco, así como en el sotocoro. Este centenario edificio conserva murales al fresco pintados a mediados del siglo XX por los estadounidenses Hollis Howard Holbrook, S. C. Schoneberg, R. Hansen y el mexicano Antonio Silva Díaz, así como un par de estatuas de Miguel de Cervantes y Vasco de Quiroga, similares a las que ornamentan el Jardín de las Rosas. Además muestra diversas tallas en relieve con elementos vegetales y dos perfiles de rostros humanos, así como un orbe con cruz patriarcal. La fachada
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Su estilo es ecléctico y fue diseñada durante el decimonoveno siglo por el ingeniero belga Guillermo Wodon de Sorinne. presenta dos pequeñas torres simétricas con segundo cuerpo en forma de ochavo y remate cónico. Afuera del edificio, donde se ubicaba el atrio del templo, se encuentra un jardín con dos pequeñas fuentes de cantera en ambas esquinas, su estilo es ecléctico y fueron diseñadas durante el decimonoveno por el ingeniero belga Guillermo Wodon de Sorinne; también se colocaron jardineras que adornan los bustos en bronce de Manuel Martínez Solórzano y Natalio Vázquez Pallares, dos nicolaitas destacados, en el costado sur se encuentra un pequeño obelisco en cantera. La Biblioteca Pública Universitaria fue fundada en 1930 a iniciativa del entonces gobernador Lázaro Cárdenas del Río, conserva un fondo bibliográfico antiguo de 22 mil 901 volúmenes, compilación del siglo XV hasta principios del XX, es considerado el tercer fondo antiguo más grande de México bajo resguardo de universidades públicas. Estos volúmenes se exhiben en tres pisos de estantería antigua de maderas finas y está a disposición sólo de investigadores e historiadores. Su extenso fondo bibliográfico se ha enriquecido gradualmente gracias a volúmenes donados por antiguas bibliotecas morelianas; la del ex convento franciscano, el antiguo Seminario Conciliar de Morelia, la del Colegio de San Nicolás, y bibliotecas particulares de destacados personajes como Melchor Ocampo y Mariano de Jesús Torres, entre otros obsequios.
FOTO: SALVADOR JIMÉNEZ
La biblioteca conserva un extenso fondo bibliográfico antiguo compuesto por ejemplares desde el siglo XV hasta principios del siglo XX. FOTO: SALVADOR JIMÉNEZ
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Es uno de los edificios más importantes de la capital michoacana y se ubica a unos pasos de la Plaza de Armas.
Un palacio para honrar a
CLAVIJERO
SALVADOR J IMÉNEZ Con la misión de dar a conocer otra de las maravillas arquitectónicas que atesora la antigua Valladolid, visitamos esta ocasión el Palacio Clavijero, fastuoso edificio de estilo barroco cuyo origen se remonta al siglo XVII y que hoy alberga el Centro Cultural Clavijero, mismo que fungió como sede del Colegio Jesuita hasta 1767; se trata de uno de los edificios más importantes de la capital michoacana. Ubicado a unos pasos de la Plaza de Armas, esta emblemática joya colonial funcionó también como correccional para sacerdotes y sede del Congreso de Michoacán en 1824, tras el triunfo del movimiento independentista y la integración de los estados en una federación que daría origen a la República Mexicana. La edificación de este conjunto arquitectónico inició el 2 de diciembre de 1660, por iniciativa del obispo Marcos Ramírez, más de tres siglos después (1969-1970) fue sometido a trabajos de restauración con la finalidad de conservar la estructura del Colegio, que debe su nombre actual a uno de los más destacados y brillantes integrantes de la orden jesuita: Francisco Javier Clavijero, religioso de origen español, nacido en Veracruz
FOTOS:VICTORIA PÉREZ Y SALVADOR JIMÉNEZ
La edificación de este conjunto arquitectónico inició el 2 de diciembre de 1660, por iniciativa del obispo Marcos Ramírez, más de tres siglos después (1969-1970) fue sometido a trabajos de restauración con la finalidad de conservar la estructura del Colegio, que debe su nombre actual a uno de los más destacados y brillantes integrantes de la orden jesuita: Francisco Javier Clavijero. (1731) y educado en París. Tras su formación profesional en la capital francesa, Clavijero regresó a la Nueva España para encargarse de las alcaldías mayores de Teziutlán y Xicoyán, en Puebla. Ingresó a la Compañía de Jesús en 1748, recluyéndose en el Seminario Jesuita de Tepotzotlán, Estado de México; de inmediato se adentró al estudio de las ciencias físicas y naturales; además
tenía especial pasión por los idiomas, siendo un políglota que dominaba lenguas nativas como el náhuatl y el otomí. También era
un apasionado de la música, las letras latinas e hispánicas. El fraile e intelectual mexicano sufrió el exilio cuando fueron expulsados los jesuitas en el año de 1767. Murió el 2 de abril de 1787en Bolonia, Italia, donde escribió en castellano la Historia antigua de México, sus restos fueron traídos a territorio nacional y depositados en la Rotonda de los Hom-
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bres Ilustres de la capital del país. Catedrático ilustre, este fraile de la Compañía de Jesús innovó en la enseñanza de la filosofía y la literatura, adquiriendo también amplios conocimientos en el campo de las matemáticas y ciencias físicas. Francisco Javier Clavijero dejó constancia de su sabiduría en el terreno de la filosofía neohumanista, plasmó su sapiencia en las páginas de un volumen que lleva por título Diálogo entre Filiteles y Paleófilo. En su obra Historia antigua de México, que abarca desde la descripción del Valle de Anáhuac hasta la rendición de los mexicas y la prisión de Cuauhtémoc. Ahí, analizó a detalle y bajo un novedoso y exhaustivo punto de vista, la organización social, religión, vida cultural y costumbres de los indígenas. Su obra fue publicada por primera vez en italiano en el año de 1780; la versión en castellano se remonta a 1824. Clavijero nos legó su obra póstuma: Historia antigua de California, que salió a la luz en Venecia dos años después de su muerte. En ésta, el escritor e historiador expone de qué manera el pasado de un pueblo puede influir en su futuro. En la entrada del Centro Cultural Clavijero, un amplio patio con una fuente central parecen integrar el comité de bienvenida, sus largos pasillos, altas columnas y barandales dan un toque entre elegante y sobrio al centenario inmueble. A ello se debe que el antiguo Colegio Jesuita esté considerado entre los más bellos monumentos coloniales, contribuyendo además al bien ganado epíteto por La Ciudad de las Canteras Rosas.