S U P L E M E N T O S O B R E T E M A S D E L A M U J E R | C A M B I O D E M I C H O A C Á N | N Ú M E R O 316 | JUEVES 17 DE DICIEMBRE D E 2 0 15
Leia,
el despertar de la fuerza femenina Cuando el primer filme de La guerra de la galaxias se estrenó en 1977 no sólo se convirtió en un éxito atemporal, también rompió el esquema del rol femenino de la mujer en el cine, empoderando a la princesa en desgracia para que orquestara toda una rebelión.
POR DINORAH AMBRIZ Leia Organa, aunque una princesa en necesidad de ser rescatada y no despojada por completo de estereotipos de género, se ha posicionado históricamente como uno de los personajes femeninos más memorables y con mayor fuerza en el cine, abriendo un panorama donde su género no se opone a la fortaleza de carácter y una boca que no teme ser honesta. Leia, durante su evolución en la trilogía original de Star Wars, tiene algunas de las frases más memorables por su ironía, astucia y mordacidad, al tiempo que es recordada por acciones heroicas como matar a Jaba the Hutt con sus manos luego que éste la forzara a ser su esclava sexual, ser la primera en actuar de forma desa-
fiante en momentos de conflicto y combatir de frente los más peligrosos villanos de la galaxia. Ser mujer no fue en el universo de Star Wars impedimento alguno para el desarrollo de un personaje con autoridad y fuerza. Fracturando el esquema Una damisela que no se identifica como la tradicional princesa de tiaras y vida monárquica, sino que desde su crianza en un hogar de políticos comprometidos en el derrocamiento de una dictadura impuesta, se asume como una política astuta además de una de las principales figuras de liderazgo en la Alianza Rebelde y voz cantante al centro de la insurrección. En este sentido, en su primer encuentro con Darth Vader no se presenta como la princesa
de Alderaan, sino como integrante del Senado Imperial. «No se trata de que su cabello fantástico o el hecho de que pueda disparar una pistola. No se trata de lo valiente que es o su falta de preocupación al estar cubierta de basura imperial. Ni siquiera es acerca de lo brillante que fue al entregar los planos de Estrella de la Muerte a un pequeño androide antes que las cosas se salieran de control. Se trata de un pensamiento creativo, manteniendo la integridad cuando es necesario. Se trata de ser un líder. La líder», señala el sitio especializado en ciencia ficción Tor.com. Un universo donde ella puede ser una autoridad Es cierto que la función primaria del personaje es la de una persona
en necesidad de ser salvada -la arquetípica dama en peligro- por su hermano Luke Skywalker antes de su misión contra la Estrella de la Muerte, además de que se ha criticado que pareciera Leia ser la única mujer en la galaxia pues los personajes femeninos en general son escasos –hasta los robots son figuras masculinas- y los de peso casi inexistentes, con las únicas participaciones de Mon Mothma, líder de la Rebelión, y la tía Beru, aunque ambas solo aparecen en pantalla durante pocos minutos. Sin embargo, y desde el contexto anterior, Leia Organa encarna una figura memorable que sirvió de inspiración para niñas y adultas, además de que muchos consideran el personaje de gran atractivo en una historia en la que no hay un ambiente donde el género se plantee como un motivo
para tener una autoridad cuestionada. Como ejemplo de la figura de autoridad respetada por sus subordinados se encuentra la icónica escena previa a la batalla de Hoth, donde Leia comunica a los pilotos el plan de escape, el cual es recibido sin cuestionamientos por los rebeldes. Sus logros no son menores por ser mujer, de hecho en el conteo de triunfos en el campo de batalla Leia, se encuentra a la par de los logrados por Han Solo y Luke Skywalker. Incluso, su personaje llega a convertirse en la jefa de Estado de la Nueva República en las novelas del universo expandido de Star Wars, donde luego de casarse con Han Solo y tener un par de hijos, Leia se aboca a dirigir el destino de toda la galaxia. PASA A LA SIGUIENTE PÁGINA
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DESCÚBRETE
Casarse con un fan de Star Wars POR MESA DE REDACCIÓN «Las últimas tres horas se las ha pasado con una maqueta del Halcón Milenario en una mano y con la otra golpeando teclas y abroncando a la pantalla porque no consigue comprar la entrada para ver, el mismo día del estreno, Star Wars: El despertar de la Fuerza», inicia un relato de una periodista anónima en El País, quien destaca las ventajas y desventajas de casarse con un fan empedernido de Star Wars. La autora señala que nunca ha conseguido ver enteras las películas de la saga porque la duermen, todavía no entiende quién era el padre de Anakin y sigue sin comprender por qué millones de adultos tienen discusiones profundas sobre algo que llaman «un universo expandido». Sin embargo, tiene una foto de su boda donde aparece cortando el tradicional pastel con un sable láser mientras suena
de música de fondo La marcha imperial. En efecto, está casada con un friki de Star Wars y señala varios puntos a tomar en cuenta para quien se embarque en una
aventura similar. 1. Cuando un fan de Star Wars se casa, el resto se moviliza. Tras la pedida de mano nunca hay que bajar la guardia, porque los ami-
gos de tu pareja intentarán que la boda de su amigo parezca salida de la mente de George Lucas. 2. Darth Vader busca novia. Imagina quedar con alguien para una cita romántica y que al llegar al restaurante esté esperando el mismísimo Darth Vader en la mesita de siempre. Eso le pasó a Joy Joyce. ¿Hubiese sido mejor que llegase vestido de Chewbacca? 3. Las convenciones de fans son el mejor momento para ir de compras. Suelen ser reuniones en las que grupos de adultos vestidos como sus ídolos galácticos conocen personalmente a los actores de las películas, compran extraños artilugios relacionados con la saga (que luego no caben en la maleta), y en general pasan un buen rato charlando sobre el tema. 4. Se corre el peligro de que le ponga Anakin, Luke, Leia, Han o Padme a cualquiera de los hijos, y sin tu consentimiento. Es probable que también para referirse a él
o ella lo haga como «pequeño padawan». 5. Los regalos se facilitan y se complican a la vez. Sabes que es tan fácil como obsequiarle algo relacionado con Star Wars, lo complicado será encontrar específicamente qué. 6. La memoria selectiva existe. Será normal que se olvide constantemente de comprar verduras en el súper o las fechas de cumpleaños, pero que es capaz de recordar los nombres y las afiliaciones familiares de todos los personajes. 7. La vitrina es el elemento esencial en la vida de cualquier friki. Permite exponer y proteger su colección de sus dos enemigos mortales: las manazas de las visitas y el polvo, que es bien conocido en la comunidad galáctica por comerse la pintura de sus figuritas. Es probable que ni tú puedas tocarla. Mucho peor, la mayoría será conservada en su empaque sin ser abiertas jamás.
Suplemento Mujer.es de Cambio de Michoacán. Director: Vicente Godínez Zapién. Coordinador: Arved Alcántara Betancourt Editora: Dinorah Ambriz Contacto: suplementomujer.es@gmail.
Leia, el despertar de la fuerza femenina VIENE DE LA PÁGINA 1
El universo construido por George Lucas, afirman análisis de la saga, es uno donde la audiencia percibe relaciones de género diferentes a las que prevalecen en el mundo real. Se ha señalado además como un hito el hecho de que el trio de héroes en la primera trilogía tenga a una mujer, algo poco común en el cine de los años 70, y más aún en géneros de ciencia ficción, acción y aventura. Hans Solo; la mujer también rescata La relación de pareja con el desfachatado y egoísta personaje de Hans Solo resulta de importancia en el comportamiento progresista de Leia Organa como personaje femenino en el cine. Tras el rescate de Han Solo luego que fuera congelado en Ciudad de las Nubes en el planeta Bespin, Leia de Organa resignifica el acto de rescatar como uno desligado del género. Ahora la mujer no sólo ocupa el sitio de la
desprotegida en necesidad de rescate, sino que también puede encabezar un rescate y tomar acciones arriesgadas por la persona que ama. Derriba también el prejuicio de que las mujeres son las que encarnan comportamientos desesperados e histéricos, pues cuando es herida en el brazo durante la batalla de Endor -y mientras Han parece tener un bloqueo nervioso al tiempo que grita por su acompañante Chewie-, es ella la que mantiene calma para combatir a un par más de Storm Troopers junto a su clásico humor sarcástico. Cabe destacar la diferencia que se ha establecido entre los personajes femeninos de Padmé Amidala en la segunda trilogía de la saga y Leia Organa en la primera, pues si bien ambas compartían destreza como políticas y disposición a «ensuciarse las manos cuando era necesario», Padmé pasó de ser la joven que asumió el trono de Naboo a los catorce años y ser senadora poco después a tener un papel más más pasivo
y cercano a los estereotipos de feminidad. Por su parte, Leia se presentó como una mujer más enérgica y fiera, con un arco narrativo de mayor empoderamien-
n FRAGMENTO DE UNA REBELDE Luke: No hay ninguna otra salida. Chewbacca: (Gruñidos). Han: No podré seguir conteniéndolos. ¿Qué hacemos? Leia: Pues vaya un rescate. Si se entra hay que tener un plan para salir. Han (señalando a Luke): ¡El cerebro es él, encanto! Luke: Bueno, yo no… Leia le arrebata el blaster de rayos a Luke y dispara a los soldados de asalto. Han: ¡¡Qué demonios hacemos!! Leia: ¿Tendré que tomar yo las decisiones? ¡Por el vertedero de desperdicios, rápido!
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DEL DICHO AL HECHO
DE CIENCIA Y OTRAS TENTACIONES
Leia, Ripley y Éowyn, parteaguas de la ciencia ficción y la fantasía POR DINORAH AMBRIZ Las mujeres en el cine de ciencia ficción de mediados del siglo XX se limitaban a gritar ante el monstruo terrestre o extraterrestre, esperar para ser rescatadas por su héroe masculino y fungir de elemento erótico. Críticos cinematográficos han señalado a los personajes de Leia, en Star Wars; Ripley, en Alien, el octavo pasajero, y Éowyn, en El señor de los anillos, como los que comenzaron a fracturar los estereotipos asociados a los personaje femeninos en el cine durante la segunda década del siglo XX. El personaje de Leia, afirma la crítica, tiene antecedente en Éowyn de Rohan, un rol femenino atípico creado por J. R. R. Tolkien para su novela insignia publicada en 1954 que, a diferencia de las mujeres habituales en la literatura épico-medieval, no permanece en su ciudad natal protegiendo a mujeres, ancianos y niños, sino que se encamina personalmente a Gondor a la gran batalla final de
El retorno del rey, dando pie a una de las escenas más memorables en la que Éowyn, disfrazada de guerrero, se enfrenta al Rey Brujo de Angmar. En suma, la noble Éowyn es uno de los primeros referentes femeninos atípicos en la literatura de aventuras y supuso una novedad en este tipo de narraciones. Después llega Leia a la pantalla grande, donde encarna a una mujer con alto grado de independencia, con iniciativa propia en lugar aceptar su sitio de objeto y con disposición para combatir en lugar de esperar ser rescatada. Su aparición en el cine en 1977 anticipa y resulta fundamental para la existencia de la teniente Ripley en Alien, el octavo pasajero, en 1979, quien intenta a rescatar a toda la tripulación y se convierte en la única sobreviviente Nostromo. Al respecto es de destacar que tanto en el guion como en el casting se buscaba a un hombre para interpretar este personaje. También cabe destacar a Sarah Conor en Terminator (1984) como un personaje que rompe la
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Moños de Leia, ¿una herencia de las adelitas mexicanas?
tradicional presencia femenina en el cine fantástico o de ciencia ficción que se venía arrastrando de los años 40 y 50. Un equilibrio natural entre fuerza masculina y femenina El universo de Star Wars es señalado por la asociación simbólica que hace del lado luminoso con un equilibrio natural entre las energías femenina y masculina, mientras que muestra un marcado desequilibrio en favor de lo masculino en el orden político imperial. Así, lo femenino en Star Wars es sinónimo de bondad, solidaridad o altruismo vinculado además a la vida pública. En este tenor, son destacadas Beru, tía de Luke Skywalker, y Shmi, madre de Anakin Skywalker, quienes representan la capacidad para generar, mantener y proteger la vida frente a la destrucción y el caos representado por la guerra. A su vez, las profesiones de personajes femeninos están relacionadas al ala ética socialmente responsable, desde sus cargos como reinas, senadoras o dirigentes de la resistencia. POR DINORAH AMBRIZ Tan icónicos como los sable láser, afirman fans de la saga Star Wars, son los peinados de Leia Organa/ Skywalker, donde sobresalen los chongos -o moños tipo ensaimada- cubriendo sus orejas, que además de ser poco apreciados por Carrie Fisher, actriz que llevó al personaje a la pantalla grande, tienen su fuente de inspiración en las adelitas mexicanas durante la época de la Revolución, según lo ha afirmado el creador de la saga fílmica, George Lucas. «En la película de 1977 yo estaba trabajando muy duro para crear algo diferente que no fuera lo que estaba de moda, así que me fui con una especie del estilo de mujer revolucionaria de Pancho Villa, que es lo que es. Los moños son básicamente de la época de cambio del siglo XX en México . Luego el peinado se volvió exitoso y se convirtió en lo que ahora es», señaló George Lucas en 2002 para la revista Time. Sobre las declaraciones de
George Lucas, críticos han señalado que las mujeres revolucionarias de México, aunque llevaban peinados con ciertas similitudes, no acostumbraban los elaborados chongos que luce Leia en las cintas, a excepción de una fotografía histórica que retrata a una de las esposas de Pancho Villa con dos moños a los costados de la cabeza. La mayoría de las adelitas usaban en cambio largas trenzas sueltas o recogidas a lo alto de la cabeza. En el interés de encontrar el origen de los moños, han sido señaladas como posible influencia las películas de aventura y cómics de ciencia ficción, entre ellos el personaje de Fria, reina de Frigia en la historieta Flash Gordon, de 1939, así como las mujeres jóvenes de la etnia hopi, al suroeste de Estados Unidos. Por su parte Carrie Fisher, quien dio vida a la líder diplomática convertida en rebelde, afirmó en su momento sobre el peinado que fue una «pesada carga» durante el rodaje de las películas, pues la obligaba a llegar a las 5:00 de la mañana al set, antes que el resto del equipo, para ser peinada durante dos horas, tiempo en el que ha afirmado la actriz, se llegaba a quedar dormida en la silla.
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Rey, Phasma y BB-8, herederas del nuevo protagonismo EN FOCO
POR DINORAH AMBRIZ Para las fans de Star Wars, la séptima entrega podría ser la película más entrañable de la saga, luego de que hasta antes de su estreno se especulara sobre una mujer siendo la heroína en el verdadero corazón de la historia, ello en base -entre otros spoilers- a una pelea entre la protagonista Rey y Kylo Ren, el nuevo antagonista. El personaje de Rey, afirman seguidoras, plantearía por primera vez un personaje femenino más fortalecido que los anteriores, pues su fortaleza y valentía no estarían contrariadas por su rol de princesa en necesidad de ser salvada. Una guerrera libre de estereotipos de género es donde está el deseo de millones de aficionadas. Al respecto se destaca que no únicamente hay más personajes femeninos -la princesa Leia convertida en general, la capitana Phasma, Maz Kanata, y Rey-, sino que en El despertar de la Fuerza las mujeres parecen estar más lejanas de roles tradicionalmente femeninos que sus predecesoras Padmé Amidala y Leia. El cuestionamiento de lo femenino puede ser puesto a discusión por Rey, interpretada por Daisy Ridley, quien se dedica a la poco femenina profesión de ser carroñera del espacio al tiempo que luce un también poco glamuroso guardarropa conformado por botas y trajes de lino. «Ella será muy relevante para las audiencias actuales, pues encarna el sentido de la autonomía y la independencia. Creo que eso es lo que es ella, tanto la persona de Daisy Ridley como su personaje de Rey», ha dicho Kathleen Kennedy, presidenta de la compañía Lucasfilm. Una de las primeras pistas sobre la importancia de mujeres en el Episodio VII y la postura de Star Wars sobre ellas se dio cuando la página oficial contestó al comentario de uno de los fans que señalaba lo poco femenino de la armadura de la capitana Phasma, respondiendo: «Es una armadura. En una mujer. No tiene por qué lucir femenina». Sobre ello Gwendoline Christie, quien lleva a Phasma a la pantalla grande, ha dicho que siente a su personaje como uno «verdaderamente progresista. Nos rela-
cionamos con la capitana Phasma no a través de un grupo aleatorio de elementos que nos hace lucir de cierta manera, sino a través de sus acciones y su personaje y eso. Creo, es verdaderamente moderno. Y es lo que realmente me emociona de esta película, ha habido diversidad en el casting y con ello está honrando con honestidad sus raíces». A su vez, Lupita Nyong’o, la actriz que presta sus movimientos y voz a Maz Kanata, ha afirmado sobre la importancia de que niñas y mujeres verán roles femeninos más alejados de estereotipos: «Van a experimentar un Star Wars que es un mejor reflejo del mundo en que viven –lo cual es emocionante- donde las mujeres juegan un papel importante y pueden estar lado a lado con los niños». Por su parte, Kathleen Kennedy ha hablado abiertamente sobre el interés de la productora fundada por George Lucas por hacer filmes más respetuosos para la audiencia femenina en la pantalla grande y fuera de ella, pues las mujeres también se encuentran mejor representadas en diferentes
áreas, por ejemplo ellas ocupan cuatro de los seis sitios en el departamento encargado de desarrollar la historia. El comportamiento además no está alejado de razones financieras, en tanto durante el 2015 algunas de las películas más taquilleras fueron historias protagonizadas por niñas y mujeres. Las cifras indican que durante la década pasada las cintas más esperadas sobre mujeres recaudó cada una en promedio 126 millones de dólares, en comparación a lo obtenido por las que optan por sólo hombres en el rol estelar, con 80 millones. Cabe mencionar que la presencia femenina también ha llegado en esta entrega a los droides con BB-8, sobre la que se ha dicho surgió del interés del director J.J. Abrams por subsanar el hecho de que los androides y robots de peso en la historia, y a pesar de que técnicamente no tienen género, han sido asociados a hombres. «J.J. estaba determinado a hacer de BB-8 un personaje tierno, fuerte y femenino».
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