VizEnte Telmo Pereira GarcĂa
A mi profesor Camilo de lengua castellana Por motivarme a hacer este libro
Prólogo: Para situarnos, pensad que estamos en España, en una pequeña ciudad y que un niño que no conoce nada de su procedencia, le da un cambio inesperado la vida
Cap.1: Empezamos Hola, soy... No sé qué soy, pero mis padres me pusieron Vicente cuado me adoptaron a los dos años, aunque mis amigos me llaman Ente. porque es lo que mejor me define, un ente, un ser sin más, sin forma en concreto. Vivo en una pequeña ciudad en el interior de España y estudio 3° de la ESO en el instituto de mi barrio. No me llevo muy bien con mis padres porque no paso mucho tiempo en casa. Pero sí que paso mucho tiempo con mis amigos, que paracen ser los únicos que me entienden. Pero cuando entro por la puerta de mi casa vuelvo a mi aburrida vida. A veces me siento solo, demasiado especial, pero me gusta ser ladrillos Lego y transformarme en una casa o en coche y correr por toda la mansion de mis padres, ¡Ah!, todavía no os lo había dicho. Puedo ser lo que quiera, por eso no tengo una forma fija ni
concreta. Soy todo lo que quiera y a la vez no soy nada.
Cap.2: Un día cualquiera Me levanté una mañana como todas con mi padre gritando: ¡Vicente!¡Arriba! Bajé a desañunar y mi madre me dijo: ¡Ponte normal y para de hacer el tonto!, Yo estrañado fui a lavarme las manos y al hacerlo me ví en el espejo. Tenía la cara verde y un rabo también verde y largo asomaba por detrás de mí. Entonces, me di cuenta, de “Mi gran defecto” por así llamarlo. Cuando sueño por las noches, inconscientemente, me transformo en el siueño y así me puedo quedar hasta que me veo en el espejo o alguien me lo dice. Un día que iba apurado incluso llegue a ir a clase así: alto, engominado, con capa y los calzoncillos por fuera. Me lavé cogí mis mi cosas y caminé acia el instituto. Por el camino me encontré con mi amigo Marco y, sin saber que aquel día
cambiarĂa mi vida para siempre. ContinuĂŠ mi ruta.
Cap.3: Aquel día que iba a cambiar mi vida. A primera hora, tocaba lengua castellana, pero el profesor se retrasaba. La clase parecía un circo de animales sin control. Yo me transformé en en un avión de papel para que mi amigo pudiera lanzarme, iba a aterrizar en las manos de mi compañero cuando el profesor entró imponente en la clase gritando: ¡TODO EL MUNDO QUIETO ! A la vez que yo impactaba contra su frente. Se agacho para recogerme pero yo, rápidamente, borre lo que ponía en mi interior. Me recogió y... ¡Zas! Volví a ser Vicente. El profesor me agarro con una mano de mi hombro, con otra un parte y me llevo al despacho del director. ¡¡¡EXPULSADO!!! Estaba expulsado. Cogí mis cosas y fui del instituto. Por el camino me encontré con un hombre en un callejón robándole el bolso a una señora. Al principio tuve miedo, pero en
seguida supe que hacer, me transformé en un monstruo y mandé volando al hombre lejos. La señora me miró y corrió con temor.
Cap.4: Solo Desde aquel día en el callejón me siento en la necesidad de ayudar a la gente en su vida, pero aunque nadie me crea lo que pasó aquel día, lo que hice aquel día… no fui yo, fue una fuerza en mi interior que no supe controlar, yo no lo hubiera hecho así… Algunos me llaman asesino, otros héroe… ninguno de los dos me gusta. Lo sucedido me hizo plantearme si esa era mi verdadera función en este mundo, ya que en cuanto a lo que soy… y no soy estoy solo. Mis padrastros no saben nada de mi origen, o eso dicen, quién sabe. Respecto a mi comportamiento autómata aquel día, tampoco nadie me cree, también estoy solo pero… ¡DING DONG!… ¡DING DONG!… Diario de Vicente día 674. Paré de escribir, bajé al recibidor y abrí la puerta. No había nadie…
-¡¿Tan loco estoy!? ¡¿Ahora me invento sonidos?! ¡Que acabe ya esta pesadilla!Me tiré al suelo derrotado y lo que vi me tranquilizó muchísimo… ¡¡¡Una nota!!! Alguien había dejado una nota, no estaba loco. Estaba tan emocionado que ni siquiera vi un paquete que alguien había dejado junto a la nota.
Cap.5: Un esperanza
rayo
de
Intrigado me agache y cogí, no me estrañaba porque todabía no había la carta. Cerré la puerta y subí a mi habitación, me senté en mi escritorio con mucha ilusión, pues nunca había recibido una carta. Cuando la abrí no me izo gracia lo que vi, pensé que había sido un error o una broma. Me paré a mirarla. Debí de estar unos cuarenta y cinco minutos mirándola fijamente y entonces, le vi sentido. No sé como, no conocía aquella lengua, pero de alguna manera, las letras empezaron a cobrar sentido en mi cabeza. Ponía: Vicente, hijo mío, llevamos años buscándote sin resultado y al borde de perder la esperanza hemos dado con tigo iremos a buscarte pronto tu solo espera . Estaba eufórico pero me controlé. Con el pulso tembloroso abrí el paquete. Me sorpredió, pero no era lo que esperaba, fotos… fotos de
lugares sin mas. Tan mágicamente como leí la carta empecé a ver tres figuras, nada en concreto, pensé, ¿y si esa es mi familia? Seguí mirándolas una por una vi mi colgante, aquel que había llevado toda la vida.
Cap.6: La búsqueda Era una mañana muy buena. El sol ya alumbraba. Había unas pocas nubes altas y todavía se notaba el fresco mañanero. Era sábado, y como todos los días desde hace ya cinco semanas, me levanté con el único propósito de investigar en mi tiempo libre. Desde el descubrimiento de la carta y el paquete, havía pensado seriamente en mi origen: lo sobrenatural, algún tipo de experimento… pero por el que me decantaba era el de ser de otro planeta. Parecía tener más lógica pero no estar seguro. De todas maneras mis padres decían llegar pronto y ellos lo aclararían todo. Creo que estoy más nervioso por conocer mi naturaleza, mi ser, que por conocer a mis padres, mis verdaderos padres. También tengo preguntas sobre todo, muchas preguntas. Seguro que Vicente no es mi nombre, ni esta mi forma de ser. Seguro que
hay una forma en la que pueda ser yo, sin estar transformado en nada, solo yo. También he pensado en el collar. Seguro que mis padres tienen otro y encajan o algo así… pero la verdad es que no lo sé, no tengo ni idea, a lo mejor… quien sabe… Seguro que nadie sabe lo que fastidia ver quien eres pero no saberlo.
Cap.7: La huida Anoche me acosté tarde, estos días estoy muy nervioso. Sigo esperando a mis padres, igual era una broma pesada o imaginación mía, pero ¿Quién iba a querer gastarme una broma a mí? Bajé a desayunar, mis padres adoptivos desayunaban tranquilamente pues no les había contado nada. Tras un rato empezaron a escucharse gritos. Miramos por la ventana y la gente corría de un lado a otro. No nos costó mucho darnos cuenta de lo que pasaba. En nuestro jardín delantero estaba aterrizando una nave. Salimos a ver que pasaba, también llegó la policía, armada, parece ser que alguien la ha llamado. Precintaron la zona y nos apartaron. La puerta de la nave se abrió,salieron dos manchas que pasaron por varias formas antes de adoptar forma humana, ¡ERAN ELLOS! Salté el cordón policial y corrí hacia ellos. La
policía nos apuntó y mi madre se transformó para protegerme… ¡pum! ¡pum! Mi madre calló as suelo, mi padre me empujó dentro para salvarme y luego se metió él antes de que le dispararan. Tuvo que dejar a mi madre para salvarme a mí. Vi como todo se alejaba desde la nave.
Cap.8: El fin 23 de Agosto de 2031. Llevo aquí en mi planeta unos años, ya me he adaptado, además he aprendido muchas cosas ha las que antes no les tenía explicación o ni siquiera sabía. Por ejemplo, mi planeta se llama Plúbiton y no tenemos una forma concreta tampoco aquí, pero este es un tema difícil, así que da igual. Tendría 26 si estuviera en la tierra, pero aquí el tiempo pasa diferente y todavía tengo 17, mi padre tiene 438 años y con lo lentos que aquí pasa el tiempo, imaginaros cuánto es eso. He aprendido la escritura, religión e historia de mi mi mundo, el cual es muy parecido a la Tierra. Además he visto con más perspectiva a los humanos y son horribles: destruyen su mundo, juegan con consolas y demás aparato para divertirse, consumen veneno como alcohol, grasas, droga y azúcar, que lo único que hacen
es acelerar su propia muerte, además de sentir más miedo y odio que curiosidad por lo desconocido. Mataron a mi madre sin saber quien ni que era. Mi padre dice que cuando cumpla los 150 me dejará ir a la Tierra para vengarme y arrasar con ese horrendo planeta que tanto me ha echo sufrir, y lo haré, voy a matarlos a todos hasta que no quede ni uno.
Índice: 1º→ 2º→ 3º→ 4º→ 5º→ 6º→ 7º→ 8º→ 9º→ 10º→ 11º→
Dedicatoria Prólogo Cap. 1 Cap. 2 Cap. 3 Cap. 4 Cap. 5 Cap. 6 Cap. 7 Cap. 8 Índice
Vicente: Esta es la historia de Vicente, que es un niĂąo como tu... o eso en principio, ya que pude hacer cosas que seguro que tu no. Lee esta apasionante historia y descubre lo que enrealidad es.