INSTITUCIONAL

EL FÚTBOL FEMENINO Y SU ESTRUCTURA PARA AFRONTAR EL 2020 L uego de hacer historia en 2019 al convertirse en el primer club del interior en ingresar al certamen de Primera División AFA, el Fútbol Femenino de Central se ha preparado durante todo el receso de verano para afrontar un 2020 plagado de nuevos desafíos, que tienen que ver con consolidar todo lo logrado hasta acá; continuar profesionalizando la práctica de la disciplina y expandirse en el terreno de las categorías formativas.

Este año encuentra al Femenino Canalla con trabajos en varios frentes: la Primera y Reserva AFA, los representativos de Rosarina y los equipos juveniles. Todo se reparte entre los predios de Ciudad Deportiva, Cristalería y Zona Sur, en donde cada día se optimizan los medios de trabajo, se aplican nuevos métodos y desarrolla su labor un equipo profesional en crecimiento. Primera División AFA

El plantel conducido por Roxana Vallejos realizó la pretemporada con el objetivo de conseguir el pasaje a la zona campeonato: para ello debe terminar entre los 8 primeros puestos al cabo de estas fechas que faltan de la zona regular.

A la base de jugadoras que arrancaron el certamen, las cuales en varios casos ya se ganaron un cierto reconocimiento en el ámbito nacional, se le sumaron juveniles que participaron el año pasado del novedoso certamen de Reserva AFA. Estas fueron integradas a la plantilla luego de ganarse el visto bueno del cuerpo técnico durante la etapa preparatoria.

Para esta primera experiencia en AFA, el Club ha apostado en darle mayor relevancia a la disciplina y profesionalismo. Esto va desde el simple hecho que las jugadoras tienen la misma indumentaria que los jugadores que compiten en la Superliga e incluye, entre otras cuestiones, la implementación de GPS en los entrenamientos para desarrollar un óptimo trabajo físico. Las prácticas vienen desarrollándose, de lunes a viernes, durante tres horas, en las que se realizan las habituales rutinas de entrenamiento, así como también charlas técnicas y de coaching, trabajos con videos y otras labores. Además, a las jugadores se le realiza un continuo seguimiento médico y nutricional. División Reserva AFA

El combinado juvenil arrancó de buena manera su participación en el novedoso campeonato organizado por la Asociación del Fútbol Argentino. Los resultados acompañaron en las primeras fechas y además, varias chicas pudieron mostrarse y se ganaron la consideración de la entrenadora principal, Roxana Vallejos. Rosarina

En lo que respecta a la Primera División, la línea A se está preparando para la nueva temporada en Cristalería, mientras que la B lo está haciendo en el predio de Zona Sur. Se apunta, lógicamente, a ser protagonistas puesto que Central ha ganado 3 de los 4 campeonatos que se desarrollaron hasta el momento.

A la par, están desarrollando su actividad a buen ritmo las categorías Sub 12, Sub 14 y 16. Recordemos que el comienzo ha sido alentador con los títulos de las dos líneas de Sub 12 a finales del 2019. Desafíos

En esta nueva etapa, el Fútbol Femenino Canalla apuesta a profundizar el trabajo de inferiores, un terreno que hasta aquí no ha sido aprovechado por muchos clubes que participan de la disciplina. El objetivo es la formación de futuras profesionales que puedan integrar el primer equipo de AFA.

Con este propósito, se ha

intensificado la formación física y también mental de las chicas, ya que la consiga siempre es formar jugadoras y también personas. Algunos de los ítems que se tienen cuenta son: el acompañamiento psicológico, el apoyo escolar y el fomento de distintos valores necesarios para ser parte de la disciplina y de los distintos planteles. Es importante remarcar que detrás de esto trabaja un grupo de profesionales, que cada día se expande un poco más, ya que se siguen preseleccionando futuras incorporaciones para las áreas que rodean al Fútbol Femenino.

Otro desafío es generar más espacios de igualdad. Esto se traduce en la decisión de incorporar a mujeres en las distintas funciones que requiere el fútbol femenino, algo que en no muchas instituciones ocurre. Un estructura de jugadoras Gigante

Aproximadamente 150 futbolistas conforman hoy el Fútbol Femenino de Rosario Central, contando Primera División AFA, Reserva AFA, Primera Rosarina A y B, Sub 12, Sub 14 y Sub 16. Además, cada día se están sumando más, debido a la importancia del Club y la relevancia que le está dando a la disciplina en todos los aspectos. La aspiración es poder seguir agrandando esa base y darle cada día mejores condiciones de desarrollo.

UN ÍDOLO BAJO LOS TRES PALOS ALEJANDRO FABIO LANARI

Hay futbolistas que trascienden más allá del tiempo y de las generaciones. Ya sea por sus logros o por haber defendido y dejar bien en alto una camiseta. Y no necesariamente tiene que haber surgido de las divisiones inferiores, hay muchos casos de jugadores que no nacieron en Central y sin embargo cuando llegaron se enamoraron, como “El Puma”, “El Chacho”, “El Polillita” y así podría seguir nombrando protagonistas hasta el cansancio

Uno de esos casos emblemáticos es Alejandro Lanari. El arquero llegó a Central para disputar la temporada 86/87 proveniente de Deportivo Italiano y a partir de allí, se comienza a agigantar su figura, siendo uno de los artífices del equipo que se coronaría campeón en esa temporada.

Para que lo recuerden los más grandes y lo conozcan los más chicos. Con ustedes... el Doctor, Alejandro Fabio Lanari. Llegada a Central

Luego de haber ganado el reducido tras vencer a Huracán en la final y de esa manera lograr el ascenso a Primera División con Deportivo Italiano, A Lanari, se le presenta la oportunidad de dar un salto en su carrera: “Al otro día de aquella final con Huracán, me llama Bauleo, Presidente de Italiano y me dijo que prepare el bolso porque a la mañana siguiente me iba a la pretemporada con Racing. Me tenían que pasar a buscar a las 8 de la mañana, pero se habían hecho las 10 y no habían venido. Al ratito me llamaron y me dijeron que a las 11 se reunían con el Escribano Víctor Vesco porque lo de Racing se había caído y que me iba a Central y al mediodía ya estaba acordada mi llegada”. ¡Campeones!

En su primera temporada en Central, Alejandro Lanari, se dio el gusto de compartir equipo con

grandes jugadores y también de coronar tremenda campaña saliendo campeón. Tras lograr el título en cancha de Temperley, el “uno” recuerda los festejos de aquel 2 de mayo: “Ese día recién, tomé conciencia de la magnitud de donde estaba. Volvíamos de la cancha de Temperley y veía toda la gente en la calle festejando, ahí me di cuenta de lo que era la magnitud de estar en Rosario Central. Me acuerdo bien. Llegamos y fuimos al Gigante, fue una verdadera fiesta. Yo no podía creer lo que estaba viviendo”.

En cuanto a aquel equipo que logró una inmensa campaña, el arquero además de recordar a los grandes jugadores que tenía como compañeros, caso de Palma, Gasparini, Cornaglia y Bauza entre otros, no deja de mencionar al gran conductor que tuvo aquel equipo en el banco de suplentes: “Hay una persona que se lleva casi todos los laureles, Don Ángel Tulio Zof. Era capaz de manejar un equipo recién formado y mantener a todo el mundo enchufado, aunque alguno no estuviera jugando y encima se le daban los resultados. Lo que él nos decía en la previa después pasaba en la cancha”. Al tiempo que agregó que: “Cuando perdimos con Boca 4 a 1, “Don Ángel” nos dijo: ‘Quédense tranquilos que vamos a salir campeones’, yo lo viví y yo lo escuché. En aquel momento lo sentí como una voz de aliento, uno cree poco en esas situaciones, pero él realmente nos transmitía esa seguridad. Yo aprendí a disfrutar mucho del fútbol cuando tuve técnicos de esas características, y “Don Ángel” fue de los mejores que tuve”.

Tan fuerte fue el impacto de aquél título y su estadía en Central, que como tantos otros, Lanari, se terminó haciendo hincha: “Yo quedé hincha de Central. De chico era de Boca, hasta que

pasé por Central. Hoy acá en Buenos Aires, yo agarro el diario y lo primero que miro son las noticias de Central y sigo la campaña del equipo. Central me marcó mucho, fue el equipo que me dio la chance de estar en el fútbol grande. Me enamoré de Central y también de la ciudad”. Más que un penal, una historia de paternidad

En julio de ese mismo año, Rosario Central fue invitado a jugar un partido amistoso llamado Duelo de Campeones entre el campeón de Argentina y el de Italia. Central viajó a Nápoles para jugar un partido contra el Napoli que era el campeón del Calcio. El cotejo terminó 1 a 0 a favor del Canalla con gol de Jorge Balbis de cabeza. La frutilla del postre, fue cuando el propio Alejandro Lanari le contuvo un penal a Diego Maradona sobre el final del encuentro: “El partido fue absolutamente parejo aunque por momentos dominamos nosotros. Íbamos ganando y en los últimos 5 minutos inventan un penal porque no le podíamos arruinar la fiesta al Napoli y tuve la suerte de habérselo atajado a Diego”. Hasta acá la anécdota es conocida para todos los Canallas y hasta parece redundante mencionarla, pero… sin embargo, la historia continuó más allá de aquella jornada europea: “La historia de ese penal comenzó después. Con Diego fuimos compañeros bastante tiempo después en la Selección y yo pensé que no se iba a acordar de aquella historia, pero por el contrario, se acordaba muy bien del penal ese (risas). Siempre me invitaba a que le dé la revancha, me decía: ‘vamos a jugar a los penales’, y yo siempre le repetía lo mismo, si querés patéame tiros libres de afuera del área pero penales nunca más, yo me voy de esta vida ganándote 1 a 0 (risas). Después lo tuve de técnico en Racing y se repetía la historia, un lindo recuerdo con Diego. Un profesional por donde se lo mire

A lo largo de esta nota, muchas veces mencionamos a Lanari como Doctor y muchos se preguntarán por qué, aunque ya muchos conocen su historia. Es que Alejandro, además de ser arquero, paralelamente a su carrera futbolística, llevó a cabo su carrera universitaria y se recibió de médico: “Desde que tengo uso de razón sabía que iba a ser médico. Lo del fútbol se fue dando, yo jugaba en las inferiores de Italiano, y un día me llamaron para la tercera, y un

día me llamaron para la primera, y de golpe salimos campeones. El fútbol se me fue dando, por otra parte yo iba estudiando y sabía que me iba a recibir en algún momento, porque tarde o temprano mi carrera en el fútbol se iba a terminar. A lo largo de mi carrera tuve técnicos que me iban ayudando con el estudio, algunos llegaron a cambiar el turno de entrenamiento para que yo pudiera ir a rendir, como por ejemplo Cabrero”. Quizás el momento más complicado lo tuvo cuando vino a jugar a Central: “Yo no podía hacer el cambio de facultad de Buenos Aires a Rosario porque me faltaba muy poco y tuve que preparar las materias allá (en Rosario) y venir a rendirlas acá (en Buenos Aires). En las ganas de recibirme hice cosas realmente impensadas. Me quedaban seis materias y había una que no la podía rendir libre y se cursaba desde las 8 de la mañana hasta las 12 y duraba un mes. Entonces durante un mes me tomaba el micro a las 4 de la mañana, llegaba a Puente Saavedra a las 8, iba al Hospital Pirovano hasta las 11, a las 11.30 me tomaba el micro de vuelta, llegaba a las 4 de la tarde y de ahí me iba a entrenar a Central, por supuesto, sin que nadie se entere, si no me mataban”.

Alejandro Fabio Lanari fue un profesional con todas las letras, inteligente por naturaleza, siempre tuvo claridad a la hora de definir su futuro, quiso ser futbolista y Médico y logró destacarse en las dos profesiones. Se destacó en el arco Canalla, y jugó en la Selección Nacional. Hoy, los hinchas de más de 40 años lo recuerdan con mucho cariño, llegó, salió campeón quedó en la historia y su corazón se tiñó de azul y amarillo. Nota: Juán José Sánchez (Jota Jota)