Palabra de vasco Defendía nuestro abuelo que antes de dar la palabra sobre algo había que pensárselo bien, pero que una vez dada había que cumplirla. Y él lo llevaba a rajatabla. Cumplir con la palabra dada tenía para él mucho más valor que cualquier escrito. Y yo nací y crecí entre dos mundos sonoros. Uno interno y otro externo.Entre palabras distantes y al mismo tiempo entrelazadas. Nací y crecí llamando a las cosas dos veces. Primero descubriendo el nombre de lascosas y los deseos, después aprendiendo a que eso mismo tenía otro nombre. En el idioma vasco hay una expresión, usada por los seres misteriosos, que dice que todo lo que tiene nombre existe. Y teniendo las cosas dos nombres, aprendí que, quizás, tengan dos existencias. Entre esas dos existencias fui creciendo. Y sigo creciendo. Contar cuentos es, en mi opinión, descubrir esos mundos maravillosos que se encierran tras las palabras dichas. Cada palabra, en cada idioma, encierra un mundo en sí misma, en su sonoridad, en su expresividad. Y las palabras, como las ersonas se van adaptando a los tiempos, van transformándose, pero, al mismo tiempo conservan dentro de sí aquella razón primigenia de su existencia. Por ello contar cuentos traídos de la tradición oral no es sino seguir dándoles vida a las creaciones que generación tras generación han ido imaginando, transformando, explicando gentes anteriores a nosotros. Contar esas historias hoy en día, supone de la misma manera ir adaptándolas a nuestro mundo actual, para que sigan vivas, para entender nuestra misma existencia a través de lo maravilloso. Mantener la palabra dicha, como defendía nuestro abuelo, no es una postura intransigente, sino al contrario, es defender la importancia de ella misma. Cuando contamos un cuento nos sumergimos en el mundo maravilloso de la fantasía, una hermosa manera de entender nuestra existencia humana; algo que no es baladí. Palabra de vasco.
INFANTIL (5-9 ños)
Los peores cuentos del mundo, contados peor
ADULTOS/JÓVENES El Viajante de cuentos
E s p e c t á c u l o s
El Arbol del Amor Cuentos pre-eróticos
e n
g i r a
¿Quién dijo miedo?
Los peores cuentos del mundo, contados peor Infantil 5-9 años
Hay cuentos aburridos; hay también cuentos chapuceros; y hay cuentos que son una caca. Se pueden contar unos u otros y el público comenzará a silbar, pero, ¡ay!, si se cuentan todos en la misma sesión...; entonces sí, entonces el narrador contará los peores cuentos del mundo. Y el público se dormirá, comenzará a silbarle, y puede que hasta le eche tomates a ese narrador chapucero. Pues eso haré, os contaré: “¡LOS PEORES CUENTOS DEL MUNDO!” “La casa de la mosca”, o “Por qué la luna está desnuda”, o, ¡Dios mío, el de “Peio Peste”! Preparen las orejas; y los tomates, por si acaso.
El viajante de cuentos
Un hombre regresa a su pueblo después de haber pasado casi toda su vida al otro lado del mundo, a donde llegó en busca de trabajo. Al regresar a su pueblo, la gente le pide que cuente cosas de aquellos lejanos lugares. El hombre cae en la cuenta de que no tiene gran cosa que contar, que, en realidad, no hizo sino trabajar. La vieja maleta que llevó consigo entonces, ha regresado vacía, quizás como su vida. Ante este hecho, decide llenar la maleta con los regalos de quienes regresan de viajar por el mundo; pero pone una sola condición para aceptar el regalo: que esos objetos lleven una historia con ellos. De esta manera podrá imaginar el mundo. Quien visita su casa, podrá descubrir los objetos que guarda la maleta, pero, sobre todo, conocerá las maravillosas historias que esconde, iniciando así un viaje imaginario por el mundo que habitamos. Y al cerrar la maleta, ese hombre que viajó al otro lado del mundo regresando con la maleta vacía, que ahora no lo está, les recuerda: “Quien no tiene nada que contar, podrá llegar al rincón más remoto, pero nunca saldrá de sí mismo”
El árbol del amor Cuentos pre-eróticos La mano del dios egipcio Ra; Eros, Afrodita, Adán y Eva; el agujero en el árbol; la cuestión del “tamaño”; el gozo solitario; amores prohibidos; la senectud. En las mitologías y en los cuentos tradicionales de todas las culturaslas cuestiones sexuales han tenido una presencia notable, de un modo u otro; para explicar la creación de las personas; en la educación ante las relaciones prohibidas: laternura; el amor; la pasión; la procreación... y tantas otras preocupaciones, preguntas, reflexiones aparecen en los cuentos. Tabúes, “desviaciones” prohibidas; deseos ocultos, todo tiene su lugar. Las relaciones sexuales no son un camino único prefijado, sino que componen una red de senderos por los que transitar; muchas veces incomprendidos entre distintas sociedades humanas, o personas. Muchas veces reprimidos y estigmatizados. Pero todos ellos no son más que el reflejo de las relaciones humanas, parte de esa reflexión general de la gente humana sobre el sentido de su existencia y, por qué no, en busca de su libertad. Y eso nos cuentan los cuentos.
Escuchemos, pues, cuentos anteriores al erotismo, cuentos pre-eróticos.
¿Quién dijo miedo? Cuando se apagan la luces y nos encontramos sólos en la oscuridad, ¿qué peligros nos acechan?, ¿qué o quién se esconde bajo la cama?, ¿qué son eso extraños ruidos? Cuando paseamos solitarios en la noche por el bosque o esa apartada carretera, ¿qué puede ocurrir?, ¿quién puede aparecer? Esa casa solitaria, o abndonada, en vuelta en un halo misterioso, ¿qué historia esconde?, ¿nadie vive en ella?, ¿está vacía? Miedos humanos, ancestrales, ilógicos que surgen al escuchar un relato “verdadero”, de boca de un conocido, ocurrido en algún lugar, lejano a veces, demasiado cercano otras. Relatos que se cuentan y escuchan en reuniones de colegas, a la luz de la lumbre, en la barra del bar. Relatos que, quizás, inesperádamente, anidan en algún rincón de nuestro imaginario, surgiendo en momentos tremolantes. Relatos que nos hablan de los miedos humanos, de las preguntas básicas: la vida, la muerte, las relaciones sociales. Dicen que cuentan que alguien escuchó que mencionaban algo que le ocurrió a alguien que podría se uno mismo. Pero:
¿Quién dijo miedo?
“Para abordar este tema intervinó el actor y cuentacuentos Joxemari Carrere, quien desgranó con humor los encuentros carnales de las deidades de diferentes mitologías que acabaron por crear a la Humanidad.Escenas como el nacimiento de Eros en una noche de borrachera, la generación de los dioses egipcios en un momento de entretenimiento onanista de Ra y el encuentro del primer hombre y la primera mujer bajo el árbol del amor en algún lugar de África arrancaron carcajadas de un público al que Carrere se metió en el bolsillo desde el primer momento. «Ha sido todo un acierto», reflexionó satisfecho el director de la Azoka, Jon Irazabal, respecto a la elección de Carrere para inaugurar esta edición. «Ha conseguido hacer reír sin molestar a nadie y sin caer en la vulgaridad, ha estado muy fino», valoró. “ Raquel Calvo El Correo
M e n c i o n e s
m e d i á t i c a s
“Una sesión de cuentos con Joxemari Carrere es un viaje de sorpresa en sorpresa. Y es que nunca se sabe por dónde te va a salir. Él trae su sesión sus cuentos preparados, y luego sobre la marcha los va acompañando de anécdotas, de reflexiones, de otros cuentos que le vienen a la mente... al final resulta como en algunas partes de las Mil y Una Noches, que uno no sabe ya muy bien en qué cuento está, pero no importa, porque lo mismo se está divirtiendo Joxemari contó (como suele hacer) cuentos tradicionales; algunos me sonaban a traídos de África. Incluyó también, como se animó a hacer desde este blog, un cuento palestino. Entre su forma tan natural de estar ante el público y la cercanía que transmiten siempre los cuentos tradicionales, sean de donde sean (todos somos primos hermanos), le hace a uno perder la noción del tiempo, y se podría estar horas escuchándole” Blog Los Cuentos de la Luna
“El mismo día que el señor Futbol campaba a sus anchas por toda Aspaña, Josemari Carrere, con su 'Misery Tour', nos contaba sus historias vascas y no tan vascas a la gente que decidimos optar por estar en el Grito. El hombre desgranó sus cuentos, haciendo un gran alarde de interpretación. Habiendo momentos que parte del público echo lagrimas de la risa y el descojone. Historias sobre la creación, la biblia, como buscarse la vida, de pareja y ligoteo, incluido siempre el condón, que siempre hay que llevarlo, pa por si acaso. En resumen, un humor muy original, a veces también muy "vasco", y en todo momento, interpretado de una manera soberbia” Crítica Indimedia