BAMBÚ

- Al igual que la madera el bambú es vulnerable a la humedad lo que provoca que hayan hongos e insectos.

- El bambú no siempre crece completamente recto lo que genera problemas en las obras debido a que no siempre tienen la misma forma.

- Es altamente vulnerable a los rayos ultravioletas del sol, por lo tanto, requiere de un constante mantenimiento y protección del material.

- Las uniones se deben hacer con empalmes como la madera y hay que acudir a piezas especiales de diseño.

- Gracias a sus capacidades de flexibilidad, resistencia y dureza hacen que el material pueda ser empleado en todo tipo de mobiliarios, estructuras, revestimientos, drenajes, etc.

- Tiene una alta resistencia a tracción equiparable al acero, y a compresión, comparable al hormigón

- Es apto para construcciones sismo resistentes debido a su rigidez y elasticidad que evita su ruptura al curvarse.

- Necesita poca energía para su producción, con una huella ecológica baja lo que ayuda a reducir considerablemente las emisiones de CO2.

- El crecimiento del bambú es muy rápido. Consigue un rendimiento aproximado de 3,3 veces el de la madera, sin contar con los beneficios que se producen ante la desertificación del suelo y la deforestación.

Debilidades Oportunidades Fortalezas Amenazas

- Como no es un material homogéneo, existe una dificultad en el cálculo estructural y aún más desde una perspectiva de normativa.

- Hay que tener especial cuidado con las plantaciones de bambú y su relación con los ecosistemas, ya que puede llegar a ser una especie invasora si no existe un control estricto.