Despedida final delegados y ptes de a s 17 11 2017

CARTA CIRCULAR: A LOS DELEGADOS DIOCESANOS Y PRESIDENTES NACIONALES DE ASOCIACIONES, MOVIMIENTOS Y GRUPOS DE APOSTOLADO SEGLAR. Madrid, 17 de noviembre de 2017 Después de treinta y dos años de trabajo en la COMISION EPISCOPAL DE APOSTOLADO SEGLAR. Primero como Director del Secretariado de Pastoral Obrera (años 1985-1993), después como Director del Secretariado CEAS (1993 hasta ahora, septiembre de 2017). Ha llegado la hora del relevo. El Rvdo. Luis Manuel Romero, sacerdote de Mérida-Badajoz, sustituto como Director de la CEAS, os ha escrito una carta presentándose. Gracias y ánimo a todos en esta nueva andadura.

Los primeros días de octubre estuve con mi hermana religiosa Angelina (Mª José) y con el Equipo de “Pueblo de Dios” de la 2 de TVE, que emitirán unos programas sobre aquella realidad, probablemente el 26 de noviembre. Os lo digo porque el contacto con los pobres, su sufrimiento, sus necesidades, su religiosidad sencilla y popular, sus carestías humanas, me interpelaron muy fuertemente y, ante tanta pobreza y necesidad ¿yo, qué hago?, ¿Cómo vivo?. Fue un aldabonazo tremendo, pero lo considero como la mejor gracia que me ha dado Dios como final de esta etapa en la CEAS en la que he querido servir y como acicate para el futuro, ¿He servido? Vosotros lo sabéis y diréis, ¿fallos? tal vez más que aciertos, pero que os conste que he querido ser fiel al Evangelio, a la Iglesia y a los laicos, siendo alegre testigo de Jesucristo.

En esta nueva etapa, me podréis encontrar en la Calle San José, 21 / 03140-Guardamar del Segura, colaborando como sacerdote adscrito en la Parroquia de San Jaime Apóstol.

Si durante todo este tiempo alguno de vosotros ha encontrado en mi algún desprecio, poca atención o menoscabo, ha sido por mi propia humanidad, así que perdonadme para que el Señor también os perdone ¿No? Y, si os he ayudado en algo, pues darle gracias al Señor.

Esta no quiere ser una carta de despedida, sino de comunicación fraterna y agradecida y para desearos a todos y cada uno de vosotros muchos ánimos, fuerza y fe en Jesucristo y que confiados en la ayuda de su Madre, sigamos todos construyendo el Reino. Los tiempos actuales son recios, no basta con la buena voluntad, como sabéis bien. Un gran y fuerte abrazo y besos para todos y todas los que trabajáis por formar y promocionar al laicado para que seamos testigos de esperanza. Gracias a todos y Os deseo UNA SANTA Y FELIZ NAVIDAD Antonio Cartagena Ruiz