CARTAGO

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Ezequiel Furgiuele Cartago


© Máquina purísima de Cecilia Podestá (Dirección editorial y de diseño) Cartago © Ezequiel Furgiuele (Buenos Aires, Argentina 1952) Primera edición, Lima, julio 2013. cecilia.podesta@gmail.com / (511) 998561844

Hecho el Depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú N° 2013-03258


Al Maru



I

Cartago no existe, Treblinka tampoco. Napoleón está roído, apolillado. Mayo 68 es mueca árida, herida en la memoria. La Bruni pasea por los Élysées con un Sarkozy en brazos. Todo se derrumba. Los dinosaurios se transforman en ballenas.


II

El euro y el dólar se culean sin parar, la gente se queda en la calle y la calle se sigue llenando de gente. Una vez más el Dream es un lavarropas y está recontra over. Pull es over y el over es old y en october no hay milagros. Los alemanes con su Oktoberfest se la están llevando calladitos. Los Krupp, los Von Thyessen, los Sachs, fabrican chupetines de acero y nos los meten por el culo. Las coronas a los europerros les pesan, les pesan en el bolsillo. A los únicos que no les pesan es a los suecos.


III

ÂżQuĂŠ puede hacer Strauss contra Calle 13?. Con Mozart y Beethoven no me meto, ellos son la calle en el palacio, como Goya. Pero se los digo: ahorita estĂĄ ardiendo Troya y sigue el art con sus operaciones a la Cayetana, los rusos con Lamborghini, los japoneses con el sushi, el yen y las peceras.


IV La casa reinante en Europa más vieja es la Grimaldi, filibusteros que entraron a pantalla por las ventanas y su dirección postal es la misma desde hace 700 años. Dados a la timba, fiestas, beneficencia, curtirse play boyes de época, campeonas de natación, actrices de Hollywood, tenistas de marca, cantantes de nombre Frank. Paraísos fiscales del Cirque du Soleil.! La Europa de Kusturica, la de los Squatters, los Okupas, y la mar en coche……….


V Primero las brigadas rojas, después la heroína, después los junkies y después la metadona y después todo políticamente correcto y antes el VIH. Vi remozar Chueca, Lavapiés, Malasaña, cantidad de barrios, para con brandy, tabaco y café entrar a la comunidad. El euro salió muy caro, si con las pelas, los duros y los talegos nos apañábamos. Solía desencajarme los ilíacos de tanto andar, solo recordarlo me produce dolor… jugar a perderme sin preguntar jamás a nadie cuál era mi destino y hacia dónde ir. El error será coronado. El error tendrá un “labias corpus”. El Románico presente, Borbón presente, Migrantes para el Cantábrico presentes,


Trilleros compostelanos presentes, Locutorios de ecuatorianos presentes, Putitas dominicanas siempre presentes. Y Herodes ve bailar a Salomé... Ésta pide cabezas de godos, croatas, serbios, bautistas, ecuatorianos. Putitas dominicanas. Delirio neurótico, sacro coxígeo episcopal. Biblia Hefner. La muerte se vende de a poco, nadie sabe nada.


VI Hoy solo cicatrices y eternidad de nuevos espacios para nuevas heridas vencidas y destartaladas. En Atenas los sabios andan buscando moneditas y otros, labios y boquitas. ¡Qué paradoja Don Pío! Con el muro de los lamentos a cuestas. A puestas, cuando lo demolieron, por obra de Helmut y Mijail, por así decirlo, “If I had a hammer” de Trini López volvió a vender millones de copias. Y colocaron a La Republika en órbita nuevamente y allí andan los giris por el mundo, comprando casitas en Mallorca. Y los Skinheads mirando todas las skines en todas las esquinas, acechando, buscando, husmeando, matando. Y la Merkel a los besitos con Sarkozy, sí, sí, ayer yo los vi.


VII La plata se la roban los hijos de puta de siempre, con nombre y apellido, con filiación y filicidios, dirección postal. Abuelos y nietos arropan a los mismos y mandan a sus hijos a las guerras. Y al rato encuentran, el verdadero festín del análisis (judeocristiano-musulmán), (germano-holandés-polaco), (francés-belga), solo por pasarle un trapito a los tantos mapas dibujados. Esa mirada, de acusar al débil, de patearle los tobillos en su cristal de fragilidad, esa capacidad del humano de hacer leña del árbol caído, lo único que logra es un ahumado grosero que no deja vivir. Tan grosero todo esto, como una foto ajada de Jack La Mota en el vestuario, donde te cagás a bifes, por la plata, por el hambre, el puto Club de la pelea para que vea la sangre tu novia, la del vestidito color té, pagar el cuarto, el aborto, dos gramos de merca trucha, bamba, falsa, pero siempre todo más digno que cualquier puta guerra. La Merkel y Cameron se andan planchando la ropita para la fiesta.


VIII Nosotros, los millones de la fila 30 butaca 8, o los que estamos en el gallinero mirando Manfredi Style cómo se bañaban estos alemancitos tan lindos en Pan y Chocolate. ¿Qué hacemos? Ahora somos todos Brutti, sporcchi e cattivi. Manfredi chupa un huevo, tras el vidrio ve cómo un travesti se coge a una mina que está lavando ropa. La historia, travesti ella, se coge a quien quiere y cuando quiere. Es esa japonesa que, desvariada, da vueltas a la manzana sin parar con una sonrisa amabilísima de idiota, con destino nada. Esa japonesa con quien ritualmente nos saludamos de manera amabilísima como buenos vecinos. Saludándonos sin saber qué hacemos. Lost and Found. /Bellamente perdidos como paraguas……, mesas de disección. Bonjour Monsieur Ducasse.


IX Las lolitas aceptan golosinas de “los desconocidos de siempre”, con voracidad de tenias saginatas. No perdonan ni son perdonadas. Frente a tanta shomeria, pobreza portuguesa, Lisboa y Caeiro le venden a Pessoa cantimploras con gotas de agua del Perito Moreno. Y rifan fotocopias del tratado de Kioto. Mientras en delitro flagrante, le pedimos perdón a los dioses, a los de entrecasa con cara de abuelos rasantes, o a los más circunspectos, con cara de catedrales prepagas. Nosotros arrodillados rezamos. Mientras desde algún húmedo y oscuro lugar, papas, prelados y demás jerarcas con miradas amañadas, codician a nuestros hijos, para continuar con el sometimiento al que fueron expuestos.


X La historia dejará de ser esa enferma ambulatoria crónica, desahuciada. Por eso suenan las campanas. París volverá a ser una fiesta, dios endiabló religiones, mandatos y circunstancias. dios en minúscula, el que configura un gesto, un salto, un movimiento como el 666, el que augura tiempos peores.


XI Mientras existan fronteras, cuartitos de pensión; Salomones, Babilonios, Vespasianos y Titos guardarán pedacitos de las paredes que convengan para jugar con la memoria del vencido. Murallas chinas largas, desde el Gobi hasta Corea para defenderse de mongoles y manchures. El muro de Tijuana, con sus cárteles y policías, los espalditas mojadas y miles de muertos por sueños abortados con fórceps oxidados.


XII Las paredes de cárceles y hospicios, los coquetos cercos de los barrios privados y los cientos de pitbull, filas y dogos cuidándoles el culo, a los Richard Black Newton y sus alambres de púa Wall Street “Calle Pared”, “Gente eis pra brilhar, nao pra morrer de fome” (Caetano Veloso).


XIII ¿Los mercados qué son? Aparecen, desaparecen, se volatilizan, no tienen nombre, no les podemos partir las rodillas con un bate. A los mercaderes, sí. Sabemos dónde viven, dónde comen, qué comen, con quién comen. La historia así lo quiere, la travestida, desvariada, cínica, usual y nuevamente cínica. Somos nosotros, no la japonesa enferma, ambulatoria, crónica, desahuciada a la Fukuyama… Y los postmodernos con Vattimo a la cabeza, dando saltitos de Pierrot epiléptico, blanqueando plata del narcotráfico para inventar pintores, hoy desconocidos… Vattimo, no me acuerdo.


XIV Los Hello Kitty del pensamiento formal contemporáneo con glaucoma de todos los colores se dedican a la política, religión, justicia, deportes, cartomancia, literatura, filosofía, artes escénicas y malandraje. Por eso hoy Cameron tiró la plancha a la mierda y dijo un vez más: somos un Imperio en el medio de todas las miserias. Sin embargo viven cuidando y justificando al Juan sin Tierra, al extramuro hijo de un barquito inerte entre tribus desglaciadas. Sioux, Cherokees, Apaches y cientos de jinetes alucinantes, como sus primos los mongoles y sus también primos los araucanos, los tehuelches, los charrúas, astrónomos, magos, costureros. Arquitectos de cuatro palos y cueros de bisonte. Y antes del caballo, Aztecas, Mayas, Chibchas, Moches, Paracas, cirujanos, trepanadores, tejedores de vicuña, algodón y agua, imposibles ceramistas, doblaron piedras y se codearon con los astros.


XV Diferentes coronas diezmaron con brutalidad imperial, valiéndose de cartógrafos, filibusteros marinos, milicias desahuciadas, ex convictos, escorbuto, sífilis, algunas cruces, algunas ordenanzas reales, bulas por aquí, bulas por allá. Vulgata y bulerías. Espejitos de colores, espejitos de colores y pólvora, mucha, mucha pólvora. Fuego, pentotal, morfina, la Sabin oral nos palpita en la lengua subterránea, en la de los besos sin criterio.


XVI Onganías and delivery, idiota engominado con sus cuatro pelos leporinos. Videla, ahórcate con tu rosario diario y seguí desapareciendo a tu hijito oligofrénico en algún cuchitril de clínica privada. Cuadripléjicos católicos marianistas, asesinos seriales, asalariados de comunión diaria. Estas líneas se las ganan de puro aburrimiento. Todos ustedes incapaces de toda capacidad, malos hijos de tristes putas, sodomitas sin coraje, temerosos de dios y aterrados de todos nosotros… Así es, así será and delivery Amén.


XVII Ahora la historia realmente es incluyente, todos somos sudacas, quién carajo quiere un pasaporte de la Comunidad, todos se están tomando el olivo. Y ésta, la Merkel de cuarta, guaranguita, pidiéndole al Rajoy guita, guita y guita. Eso pasó hoy.


XVIII En la guerra de Viet-Nam los chicos quemaban sus documentos. Ahora hacemos piras con las tarjetas de crédito… emanan humo negro, ácido nauseabundo, mezcla de plástico y cocaína. Hoy Vinicius suena en mis costados, mejor es llevarlo en el hígado que en otro lado Pensemos en los niños mudos telepáticos, pensemos en las niñas ciegas, inexactas, pensemos en las mujeres rotas, alteradas. Pensemos en las heridas como rosas cálidas. No se olviden de la rosa, de la rosa, la rosa de Hiroshima. La rosa hereditaria, la rosa radiactiva, estúpida e inválida, la rosa con cirrosis, anti rosa atómica, sin color, sin perfume, sin rosa, sin nada. (V. Moraes) HOJE PORTUGAL ESTA ASIM CARALHO PUTA MERDA! SOLO DA PRA BEBER BAGACEIRA, NO ULTIMO BOTECO DA NOSSA CIVILIZACAO. SAUDE. EM TUDOS OS CAIS DO PORTO, EM TUDOS OS LARES, EN TUDOS OS ROSTOS, SAUDE!


XIX Hoy el gobierno portugués tuvo que embutir una ley de emergencia, todos los pacientes de los hospitales tendrán que pagar veinte euros para poder ser atendidos. Y si no, empeñarán algún viejo rosario o una sopera en un mercado de pulgas o transarlos por talismanes y escapularios para tener el pan y el salar. Las cajas de Pandora de los anticuarios se transforman en sarcófagos llenos de carroña; los porteros, celadores, enfermeros en antropófagos selectivos eligiendo las más perversas delicadezas, en un aquelarre de transferencias interbancarias. La amenaza infantil: “Nene, comé todo, que sino viene el hombre de la bolsa y te saca la comida para siempre”.


XX Los Occupy están cerrando filas con los huelguistas de los 30, está todo mezclado. Los Tea Party no saben dónde están parados ni a dónde van. En Zuccotti Park acampan. Ya no toman Earl Grey, ahora chupan a pico Bourbon berreta, Four Roses. Todo, todo remite Kiefer, esos cuadros de paisajes destrozados por mano humana, sin bocetos. Ahora, la doctrina Monroe, cuyo espíritu se sustenta en un escabroso juego de palabras, “AMERICA PARA LOS AMERICANOS”, empieza a cobrar su verdadero lugar. A los del Maine, a los hondureños, o paraguayos: “AMÉRICA PARA LOS AMERICANOS”


XXI Creo más en la otra Monroe, que murió en su ley y en su lecho, empastillada por algún sicario con saquito Palm Beach y sombrero Panamá, desaparecido de madrugada en un Thunderbird color inolvidable. Happy birthday, dear president.


XXII El ADN de la historia suena como castañuelas de mercurio, cianuro y plomo en el fondo del Tíber con cascos de centuriones, estatuaria de todo tipo, dientes de leones y miles de máquinas fotográficas de nipones. En el Sena, un atado de restos de Juana de Arco carbonizados, escritos de Diderot borrados y ropitas mojadas de la Bardot. En el Rímac, todo lo que quieran desde Cerro de Pasco hasta Lima. En el Rin, carretones de cerveza con percherones, barriles y aserrín. En el Volga solo flota el bicornio de Napoleón y algunos tristes pelos de la barba de Tolstoi. El Río de la Plata fue generoso devolviendo cadáveres y el Ganges, incinerando. La lengua es el ADN que lacta, que recta, que no refracta, ni tiene espejos, la que aguanta todas las temperaturas y todos los dejos, la que lame memoriosa todos los rincones de lo íntimo, testa, inventa… dice.


XXIII Están retando a Hungría, la mala alumna Magyar, la entenadita austríaca, por no pagar. Si el Bismarck se metió con gitanos se jodió, el húngaro es la lengua que el diablo nunca, nunca, nunca Muñecos ahorcados, Betty Boop llora desolada frente al verdadero teatro negro de Praga, frente al Moldava y cada suicidado es una boca menos, un tributo menos. YA NO HAY QUE TEMER POR NINGUNA FORMA DE TOTALITARISMO. ¡LAS PELOTAS!


XXIV A tomar por culo y construir la vida, es la hora de los con boca y con lengua, el lenguaje con todas sus tropelías esta cerrado por balance. Less is more, less money, less food and more hungry, and more, and more angry. El happy hour se terminó. I love New York, I love New York. “Ay lunita tucumana tamborcito calchaquí, perdido en las sinrazones”, less is more. Todo es lo mismo, Nixon, Reagan o Gore.

Del Upper West Side a los gritos de Argel. En Moscú se rompen vidrieras, pasean en Maseratti y a los indigentes se les congelan las babas sobre el cordón de las veredas. Compran Bankys por kilo y a Hirst por gramo. Las ucranianas no limpian casas en Parioli, ahora se casan con millonarios mejicanos, cambia todo.


XXV El pecado es la contradicción. Mañana quiero solo futuro y por la noches los dados rodando desde la Rua Girassol l030 a Estados Unidos 834 y estrellarlos contra las paredes de las cornisas del endemoniado Marconetti y aullar: “7”, como el aullido del endeble muchachito de Paterson, para nunca más escuchar las cornetitas flatulentas de las castrenses retretas vespertinas, llenas de migrañas, mensajes de texto no enviados y celulares estrellados en los arenales del Irak, con tres imágenes de su chica cogiendo con el dependiente del Seven Eleven. Así se enferman los cuerpos destinados a otros menesteres. Olvidarán.


XXVI ¿Dónde mierda están las pilchas de Gadafi? ¿Sus bonetes de payaso viejo, todos chorreados de hena? ¿Los plumeritos que apoyaba sobre el hombro de sus vastas túnicas y de paso espantaban los mosquitos? Si están a un costado todos pisoteados, en el mismo lodo, todos manoseados*. Tirado sobre un colchón Kuitkiano los fotógrafos se afanan por dar las mejores imágenes al mundo y a codazos se afanan los mejores lugares. De Mussolini y la Petacci tres tristes fotos.


XXVII La historia no tiene tiempo ni paciencia con los neutrales. Y con la chota y puta Confederación Helvética. ¿Quo vadis, Domini?. Demoliendo Bancos. Ya nadie va de la cama al living, ni llora sobre el bidet. Se oye un murmullo de Atilas ataviados al uso con instrumentos destartalados en una orquesta de nadies. Miller dando clases de inglés, por diez francos la hora. La victoria de Samotracia huye despavorida por el paso de las Termópilas. Ícaro se estrella en la bruma y todos escuchamos la voz de la Callas desangrándose en el último acto de Tosca. Es el horror, es el horror.




TO BE CONTINUED Nosotros inventamos el tejo, el ajedrez, la tabla de Mendeleiev, la regla de tres, los sombreros Panamá, el olor de santidad, el concepto de la memoria, las huellas digitales, el AK 47. Y al mismo Dostoviesky, mostrando fotitos de Aliona Ivanovna wanted, en la puerta de los bancos. Inventamos las capitales. Nos tambaleamos como Raskolnikov, en un Karaoke sado fascista bancario donde repiten como letanía de derviches: pagar, pagar, pagar. ¡Qué descaro! El farmacéutico griego Dimitris Christoulas a los 77 años se voló la cabeza, con una balita de mierda. ¿Cuánto cuesta una prótesis de cadera borbona? Un elefante, ya sabemos, 20 mil euros. Ponele 25. ¿Juan Carlos te acordás el tiro accidental que le pegaste a tu hermano en Estoril? También de vacaciones, ¡qué casualidad! Y en el 2006 te mataste un oso en Moscú, for export para ver qué se siente, con el dolor y el estrépito de seres sagrados, majestuosos de verdad, cayendo al piso derrumbado con balas de su majestad Cazador de grandes mamíferos o adolescentes consanguíneos. ¿Tus súbditos qué sentirán? Andá a jugar al rey de los monos en palacio y en familia incluyendo a tus yernitos de colección. No te olvides en el verano de irte a Palma a seguir jugando al Cristóbal Colón. Ezequiel Furgiuele Pd. Si te sobran algunos euros mándale a la familia del Sr. Dimitris. Atraviesan un momento difícil y también son europerros.


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