ORIENTACIONES PARA PADRES Y PROFESORES DE ALUMNOS Y ALUMNAS CON ANSIEDAD POR LOS ESTUDIOS
• Intentar levantar al niño/a con tiempo. No podemos llevarlo con prisas al colegio, esto aumentará su nerviosismo y su ansiedad. • Es necesario cumplir la regla de la asistencia diaria a la escuela. Si no le exige a su hijo/a que asista diariamente a la escuela, los síntomas físicos y el deseo de quedarse en casa se volverán más frecuentes. Cuanto más tiempo pase su hijo/a en casa o con su madre/padre, más difícil le resultará volver a la escuela. • Si presenta dificultades (llantos, quejas, aumento de los dolores…) al dejarlo en el colegio debemos de separarnos de él/ella de forma firme, rápida y con cariño, no cediendo a las mismas. Nos despedimos de él/ ella con un beso y le damos ánimos, pero no alargamos la situación. Le recordamos que a las 2 volveremos a por él. • No dejar al niño en casa ante los dolores. Comentar con el que los dolores son ciertos pero que están producidos por sus miedos y su nerviosismo y que tiene que cambiar su forma de pensar para que desaparezcan. A continuación le damos la medicación que nos haya recetado el especialista para estos dolores. • Si se queja de síntomas físicos, pero son los que ya ha mostrado en otras ocasiones, deberá ser enviado/a a la escuela inmediatamente con mínima discusión. En el caso de que los padres no estén seguros acerca de la salud de su hijo/a, deben enviarlo/a a la escuela de todos modos; porque si los síntomas empeoran después, el centro lo comunicará a la familia. • Si el niño/a es mayor podemos hacer que vaya sólo al colegio o acompañarlo hasta cierto punto. También podemos hacer que lo acompañe un familiar o que se vaya con unos vecinos que también lleven a su hijo/a el mismo colegio. • No engañar al niño/a con frases como: “no te preocupes que si te duele voy a por ti”. Debe comprender que su obligación es asistir al colegio. • Evitar el chantaje: “si no te pones malo hoy te compro un juguete”, “no llores que mamá se va triste”. -------------------------------------------------------------------------------------------• El niño/a no ha de notar nuestra preocupación ante la situación. Tenemos que hablar con el de forma natural pero sin que nos note que estamos preocupados en exceso, ya que esto podría reforzar esta conducta (si el niño/a lo que quiere el llamar nuestra atención) o bien aumentar el nerviosismo o ansiedad en el mismo.
1
• Quitar importancia a sus vómitos, mareos, inapetencias o dolores estomacales. Los padres deberán no ceder ante las quejas somáticas del niño/a: “me duele la barriga “, “no me encuentro bien “, “me duele la cabeza”. • Debemos hablarle diciéndole que “comprendemos su dolor, que es verdadero, que no está mintiendo pero que lo está produciendo él mismo con su mente y sus miedos y nerviosismos, por lo que tiene que cambiar su forma de pensar para que estos dolores desaparezcan”. -------------------------------------------------------------------------------------------• En clase, ante los dolores debemos actuar de la misma forma. Hablar con el alumno/a para que comprenda que estos dolores son producidos por él/ella mismo al estar nervioso, intentar que se calme y que no piense de forma excesiva en los deberes o exámenes. • Intentar proporcionarle otra tarea o darle una responsabilidad o actividad para intentar distraer sus pensamientos. • No debemos llamar a sus padres cada vez que el niño diga que está malo, ya que si no lo tomará por costumbre. Solo en caso de que veamos cierta gravedad llamaremos a sus padres. • Deben informar al/la maestro/a de la escuela que, si los síntomas del/la niño/a aumentan o continúan, pueden dejar que se relaje de 5 a 15 minutos en otro lugar del aula o haciendo algo que le guste, para incorporarse posteriormente al grupo. Esta medida ha de retirarse poco a poco hasta que desaparezca. • Para aumentar la autoestima y seguridad del alumno/a debemos dar responsabilidades al niño en clase o fuera de la misma y reforzar su comportamiento positivo siempre que sea posible delante de sus compañeros/as.
-------------------------------------------------------------------------------------------• Evitar sobreproteger al niño/a. Esto más que beneficiarle le produce un gran perjuicio. • Conforme el niño/a se va haciendo mayor propiciar que se relacione cada vez más con sus amigos/as y grupos de iguales y que vaya disminuyendo el tiempo que pasa con los padres. El niño/a necesita relacionarse con sus iguales y no estar constantemente apegado o sobreprotegido por los padres. • Fomentar siempre que sea posible la autonomía del niño, evitando sobreprotegerlo. Por muy pequeño que sea ha de intentar siempre que haga las 2
cosas por sí solo, que juegue y se relacione con otros niños/as de forma independiente, etc. • Nunca compara su conducta con las de sus hermanos/as. Hay que hacerle ver que cada persona es de un modo distintos, cada una tiene cosas buenas o positivas o cosas negativas. • Es necesario que alienten a su hijo/a para que hagan deporte (por lo general, prefieren los deportes que no son de contacto físico). Además es conveniente que envíen más frecuentemente a su hijo/a fuera de casa o a las casas de otros/as niños/as. Pueden invitar a los amigos de su hijo/a a salir con su familia o a pasar la noche en su casa. • Diseñar o planificar distracciones para el niño/a (salir con los amigos, clases extraescolares, actividades deportivas, clases de informática, de idiomas,…), algo que le guste y que le sirva para no estar pensando constantemente en los estudios. -------------------------------------------------------------------------------------------• Hay que hablar y dialogar con el niño/a haciéndole ver que “los estudios y las notas son importantes pero que no lo son todo en la vida, también hay que divertirse, pasarlo bien con responsabilidad… Si alguna vez se suspende o no se puede hacer una actividad no es el fin del mundo, siempre hay soluciones para todo”. • Recordar al niño/a como en otras ocasiones por muy difícil que haya sido la situación siempre ha salido de la misma por que es listo y sabe cómo hacerlo. • Comparar sus problemas con los de otras personas u otro tipo de problemas haciéndole ver que los suyos son más pequeños y los va a poder resolver (pero sin quitarles importancia ya que realmente le preocupan). • No es recomendable preguntar constantemente al/la niño/a cómo se siente porque esto lo estimulará a quejarse. Mientras que no diga nada es mejor no hablar sobre el tema. -------------------------------------------------------------------------------------------• La mejora forma de cambiar una conducta es utilizando estas dos técnicas a la vez: -
Extinción. Consiste en prestar solo la atención mínima a la conducta del alumno ya que si estamos continuamente fijándonos en la misma, preguntándole al niño/a sobre ella o haciendo mucho hincapié en la misma lo que conseguimos es que el niño aumente la conducta que queremos eliminar. Siempre que se pueda no prestar atención a la 3
-
conducta o bien prestarle la atención mínima y cambiar de tema o hacer otra cosa. Reforzamiento positivo. Reforzar al niño/a con premios (no materiales), ánimos, decirle que estamos muy orgulloso de él/ella, que lo ha hecho muy bien, que estamos muy contentos con el/ella, que siga así... Reforzar siempre al alumno aunque estemos acostumbrados a que se porte bien o que saca buenas notas.
• Hablar de la escuela con el niño/a siempre en positivo, comentándole lo bien que se lo pasa allí, los amigos que tiene, etc. No hablar de los aspectos negativos o de su conducta, procurar hablar de los aspectos positivos. -------------------------------------------------------------------------------------------• Cualquier cambio de conducta requiere seguir las orientaciones firmemente y constantemente. Los cambios no se producen de un día para otro, pero si somos pacientes y trabajamos en este sentido los cambios deseados aparecerán. • Si el problema continúa podemos consultar con el pediatra la posibilidad de valoración por parte de la Unidad de Salud Mental Infantil correspondiente o bien consultar con un psicólogo con vista a un posible tratamiento.
4