Desafío de valientes

Matrimonio

¿Se enfrió el amor?

Después de la pandemia vemos desastres naturales como ciclones, plagas, terremotos, tsunamis, inundaciones, guerras, enfermedades, etc. Cambio en las estructuras de Gobierno como modificación de las leyes que protegen la vida, la familia, las libertades y el matrimonio original, por ideologías que las dañan y destruyen, además de crear confusión en las personas, solo ven por sus propios intereses, esto provoca que la gente ya no crea en los políticos, ni en sus partidos.

Por si fuera poco, se presenta indiferencia de la iglesia de Dios ante el pecado. La desintegración de los matrimonios y las familias va en aumento, sobre todo con las nuevas figuras; hombre con hombre, mujer con mujer, poliamor, dos mujeres un hombre, familias multiespecie, mascota con apellidos de la familia, persona con ser vivo no humano, etc.

La sociedad quedó a la deriva y por eso se da en todo el mundo el aumento de la pobreza, inseguridad, abuso sexual, aborto, secuestro, delincuencia organizada, trata de blancas, drogadicción, tráfico de órganos, etc.

Todos estos aspectos ocasionan:

• Depresión

• Ansiedad

• Apatia y perdida de confianza

• Incredulidad e idolatría

• Ira, violencia en las familias y en la sociedad

• Adulterio y divorcios

• Indiferencia hacia el prójimo

• Desinterés en casarse, mejor vivir juntos

• Apatía en el cristiano, religiosidad. Enfriamiento en los hijos de Dios, quiere decir, falta de práctica de la fe.

La primera iglesia

El libro de Hechos nos muestra a la primera iglesia, llena de fe y del Espíritu Santo, que anunciaban la Palabra, ganaban almas y transtornaron el mundo conocido en esa epoca

Debemos de recordar que la Iglesia se conforma por familias, y el matrimonio es el núcleo principal de la misma.

Hechos 14:21-22 dice; “Después de anunciar el Evangelio a aquella ciudad y de hacer muchos discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y Antioquía, confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y diciéndoles: es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el Reino de Dios”.

“estos que trastornan el mundo entero también han venido acá”.

Por su parte en el 16:5 del mismo libro señala: “Así que las iglesias eran confirmadas en la fe, y aumentaban en número cada día”. Y en el capítulo 17 verso 6 afrma que en Tesalónica la gente gritaba: “estos que trastornan el mundo entero también han venido acá”.

Cuando las congregaciones de los primeros siglos dejaron de practicar la fe, la oración, asistir a la iglesia y abandonaron la lectura de la Palabra de Dios, vino la época conocida como oscurantismo, donde la iglesia verdadera estuvo a punto de extinguirse. El Señor volvió a provocar un nuevo avivamiento que trastornó al mundo, lo hizo a través de John Wycliffe, John Huss, Martin Lutero y Juan Calvino, entre otros.

Esto trajo como consecuencia un cambio en:

• La manera de pensar y vivir

• Los despertó a buscar a Dios y tener una relación con Él

• Trajo un mover fresco del Espíritu Santo

• Provocó una nueva forma de organización política

• Originó un cambio cultural, se difundió la Biblia

• Un despertar científico y educativo

• Esta generación trasformó el mundo conocido

¿Cuál es la situación en el presente?

A causa de la maldad el amor de muchos matrimonios y familias se ha empezado a enfriar. En Mateo 24:12 señala: “y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará”.

Necesitamos un nuevo avivamiento en el Pueblo de Dios, basado en la fe, en la Biblia, en la guianza del Espiritu Santo. Jesús le dijo, “si puedes creer, al que cree todo le es posible” Marcos 9:23 (RV60). Y también afirma: “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, Él los guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que les dirá todo lo que oyere, y les hará saber las cosas que habrán de venir” Juan 16:13. En la actualidad, como matrimonios, es imprescindible tener fe y conocer al Espíritu Santo de Dios, para vivir un despertar en nuestros hogares y congregaciones.