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LA CREACIÓN PERFECTA DEL CREADOR
by Calacoaya
Invento perfecto de DIOS
Vivimos en una era donde se devalúa la vida humana y el pecado del aborto destruye nuestras naciones. En todo grupo étnico, vemos la destrucción de seres creados a imagen de Dios, desde el niño por nacer hasta el anciano. Aún más alarmante es el hecho de que esto ocurre tanto dentro de la iglesia como en el mundo secular.
La destrucción de vidas humanas hiere el corazón de nuestro Padre Celestial y el Espíritu Santo quiere despertar a la iglesia, haciéndole reconocer la transgresión a la santidad de la vida humana, en contra de aquellos que Él creó a Su propia imagen. Perdón y redención están al alcance del mundo entero a través de la sangre derramada de Jesús; ¡Nos invita a unirnos a Cristo en su obra redentora! Dios redimirá, sanará y restaurá vidas heridas por el aborto; podemos unirnos a Él en esta obra dadora de vida en las naciones.
Todo líder cristiano, en su intimidad con Jesús, lo lleva a entender el corazón de Dios en lo que se refiere a la vida humana, y tiene el compromiso de darlo a conocer a quienes es de influencia.
Cada persona está en un nivel diferente en su trayecto a este entendimiento. Todo creyente en Cristo es guiado por el Espíritu Santo de Dios a una acción específica, proveer, preservar y defender la vida humana, así como llevarlos a los pies de Jesús para que reciban de Él la eternidad.
La Biblia enseña: “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”. (Gén. 1:26-27).
El principio fundamental de esta verdad, es también la base moral para proteger, para defender la vida humana en toda edad y etapa, que tiene igual dignidad y valor inmensurable desde la concepción hasta la muerte natural, porque somos hechos a semejanza del Creador.
“Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.” (Génesis 2:7).
Aliento de vida
El hombre es un ser singular porque el Señor respiró aliento de vida directamente sobre él; esto no es verdad para ninguna otra criatura viviente. También, el ser humano se distingue de los animales por su percepción espiritual y por tener consciencia; ambas características vienen directamente del Creador.
Hombres y mujeres tienen características intelectuales, emocionales, morales y espirituales; todos estos atributos son un reflejo de las características que Dios posee.
La imagen de Dios
También se refleja en toda virtud de nuestro carácter: amor, fidelidad, justicia, rectitud, paciencia, gentileza, amabilidad, humildad, perdón, misericordia y gracia.
La Biblia habla claramente de la soberanía de Dios sobre toda la creación, pero distingue de forma especial a la humanidad—hombres y mujeres—pues somos los únicos seres creados a su imagen.
Fuimos creados por el Padre con un propósito (Salmos 100:3, Salmos 139:13–16a), y Él tiene un plan para nuestras vidas, el cual comenzó en la concepción, que es el primer momento de nuestra existencia (Jer. 1:4–5).
Todo Ser Humano tiene el Mismo Valor
Nuestro valor, frente a Dios es el mismo, sin importar las diferencias que hay entre nosotros: sexo, edad, color de piel, identidad étnica, casta o tribu, religión, idioma, nacionalidad, nivel de inteligencia, estrato y clase social, u otros factores. Toda vida humana es hecha a imagen del Creador, debe ser respetada, tratada con dignidad, preservada, nutrida y prosperada; y no con faltada al respeto, despreciada, devaluada, abandonada, disminuida, desechada o asesinada.
Cada año, el aborto acaba con la vida de más de 42 millones de personas alrededor del mundo.
Debemos “librar a aquellos que están siendo llevados a la muerte” (Proverbios 24:11).
Desde la concepción
Toda vida humana es valiosa desde el momento de la concepción y dicho valor se extiende a lo largo de toda nuestra existencia.
Aquello que agrede a los enfermos, los débiles, las personas con habilidades especiales o los ancianos, constituyen una ofensa contra Dios. Así mismo lo es un acto de violencia en contra del niño en el vientre.
“Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.” (Génesis 1:27). Hombres y mujeres son portadores de la imagen de Dios, por lo tanto ambos tienen igual dignidad y valor.
A imagen de DIOS
Uno es la imagen de Dios masculino, la otra de características femeninas.
Aunque con roles diferentes en la familia, distinto nivel de fuerza física, maneras de pensar y sentir acerca de muchas cosas; ambos son portadores de lo que el Creador es, y por lo tanto tienen el mismo valor. Tratar a las mujeres como si fueran menos que los hombres es un gran problema en muchas culturas y una ofensa para Dios.
Fuente: Life International