Necesito un apapacho de Dios

Estaba en trabajo de parto de mi segunda hija, con el ginecólogo y la pediatra al lado, cuando inexplicablemente el ritmo cardiaco del bebe cayó y tuvo un paro, de un procedimiento natural pasamos a una cesárea de emergencia, después de 30 minutos de maniobras de reanimación, nos informaron que tendría un retraso en el desarrollo por el evento tan difícil que pasó mi pequeña. Posteriormente le diagnosticaron parálisis cerebral

platica Alexa Morales que en esos difíciles momentos pensó que Débora no sobreviviría. Posteriormente la bebé no se sentaba, ni sostenía su cabeza, ese fue el foco rojo de que no estaba bien, y así, de médico en médico durante estos últimos 12 años.

Sergio Villarreal agrega que ellos veían que era una bebé como cualquier otra, hasta que se percataron de que dejó de desarrollarse normalmente. Era muy difícil porque es algo para lo que no estás preparado, afirma.

Una noche cuando quería dormir pero no podía pues Débora no conciliaba el sueño por su misma condición cerebral, tuve un choque emocional muy fuerte, con gran culpabilidad pues me llegaron pensamientos de no haber tomado las decisiones correctas o de que pudimos evitar lo que sucedió. Me puse a orar para poder fortalecerme, pero era una guerra mental terrible. Entendí el por qué muchos abandonan su responsabilidad ante tal situación, en la mayoría de los casos son las madres quienes se quedan solas afrontando el problema.

A pesar de todo lo negativo, Dios siempre está con nosotros, superamos esos momentos de confusión, nos ha dado mucha paz y aún suple lo material. Por ejemplo, vimos la necesidad de una silla especial para transportar a Débora, lo pusimos en oración y nos llegó sin ningún costo. Es increíble ver como hasta nos proveyó una casa, asegura Sergio.

Débora Villarreal, una pequeña afortunada rodeada de amor y cuidados.

Alexa comenta que también ve el apapacho de Dios a través de la vida de amigos. A la llegada de Ana, mi tercera hija, a la par Débora empieza con múltiples hospitalizaciones. En esos momentos contamos con el apoyo de ellos, de mi mamá, mi hermana y hasta de la vecina cuando había una emergencia y corríamos al hospital. Vimos como el Señor nos cuidaba en toda circunstancia.

Por su parte Sergio Villarreal explica que es como pareja, es como si fueran en una balsa remando en la misma dirección en donde no te puedes bajar ni desistir por sentirte cansado, uno como varón tiene que adaptarse, no podía darme el lujo de que ella hiciera todo el trabajo pesado que demanda Débora, pues nuestras tres hijas son herencia del Señor y es responsabilidad de ambos.

Débora no es el centro de la familia

Un médico nos explicó que un pequeño con capacidades diferentes no debe de ser el centro de la familia, sino que tenía que incorporarse a la familia, asumir las mismas reglas. Es una cuestión de rutinas y de horarios, señala, de tal manera que mis mañanas son para Débora, mis tardes de mis otras dos hijas, a las 9 de la noche se acabó su tiempo y viene el mío con Sergio como pareja para platicar. Regularmente se caen en el error de que todo se mueva alrededor de quien tiene discapacidad y se descuida a todos los demás incluyendo al esposo.

Es muy importante tener el tiempo juntos como pareja, sin las hijas, donde convivimos, oramos, abrimos nuestro corazón, disfrutamos de nuestra intimidad, se fortalece nuestro amor. Sergio y Alexa.

Cabe señalar que también recibimos ayuda de Keila, la mayor y de Ana la más pequeña, buscan que Débora sea feliz, es así, como un solo equipo, que cada quien disfruta su tiempo con ella, y seguramente ella también lo experimenta.

Nosotros estamos esperando la promesa de que Débora pueda levantarse, pero es en el tiempo del Señor y vemos como Dios suple todo. Sergio agrega, en ocasiones flaqueo, recuerdo que el Señor me ama y corrijo.

¿Cómo pudieron salir de esta situación?

La base de nuestra relación es Cristo y yo tengo que levantar mis oraciones - afirma Sergio - a su vez Alexa sirve y genera nuevas ideas en la iglesia, también mis hijas desde muy chicas las nutrimos de la Palabra a través de la lectura, y análisis en familia

Al respecto, Alexa comenta que el curso de Ilustrando la Prédica surge a partir de que Keila entraba a la adolescencia y era necesario un puente entre ambas, no solo nos unió sino que creamos un sistema que ayuda a otros, de tal forma que pudimos aplicarlo durante los servicios dominicales.

No nos encerramos en una burbuja de discapacidad, Ana y Keila tienen amistades y nos acercamos a sus familias, salimos con ellos y eso es de gran bendición. Aprendimos que los amigos te consienten, te ayudan en las áreas de la fe, física y emocional.

Somos una familia en donde cada miembro es importante, el cual requiere su tiempo, espacio y atención.

Somos un matrimonio, pero necesitamos tiempo con las hijas, la familia, amistades y los amigos de las hijas, por lo que establecemos acuerdos y horarios para que el barco no se hunda sino siga y ganemos todos, señala Alexa Morales de Villarreal.

En los conflictos ¿cómo podemos sentir el apapacho de Dios?

No te fijes en lo negativo, explica Alexa, por algo escogiste a tu pareja, más bien céntrate en qué fue lo que los separó, esos conflictos tienen un origen y eso se puede negociar, háblenlo para evitar que sea un problema.

Sergio señala que cuando inicias una relación de matrimonio te percatas que existen hábitos de tu pareja con los que chocas, es en ese momento en que uno debe de reconocer la soberanía de Dios sobre nosotros, para saber callar, para no herir, hacer un lado el orgullo, pedir disculpas y orar para resolver los conflictos de raíz con la gracia del Señor.

Sergio por su parte explica que le funciona el leer y escuchar la palabra de Dios, pues se va anidando en la mente y alma, tarde o temprano empieza a dar fruto, pero si nosotros no alimentamos el espíritu,

la carne va a dominar, entonces empiezan los problemas porque no se frena el ego… recordemos, el principio de la sabiduría es el temor del Señor

Para Alexa son muy importantes sus amigas cristianas, pues le ayudan a ver las cosas más claras, oran con ella, la aconsejan de acuerdo a los preceptos bíblicos. Ellas me hacen ver que Sergio es la pareja ideal para mi puesta por Dios.

Las amigas cristianas son muy importantes, pues te aconsejan sabiamente de acuerdo a la Palabra de Dios

¿En que fijarnos para conocer la pareja ideal?

Por su parte Alexa le recomienda a las chicas: Si la persona que te gusta no ama a Dios, cómprate unos tenis y huye, si dice que cree en Dios y no sirve en la iglesia, entonces tampoco, por su fruto lo conocerás, y agrega que de la abundancia del corazón habla la boca, pues donde esté su tesoro allí esta su corazón.

Lo principal es estar en el mismo sentir, que no caigamos en la desesperación o la duda, afirma Sergio Villarreal, hay que confiar en Dios y tomar decisiones correctas, prepararnos y muy importante, tener el deseo de casarnos.

Por Elizabeth Guzmán y Oscar Gallardo