-Volumen 85 No. 1 Publicado por Christian Triumph Co. Enero, Febrero, Marzo 2008
¿Conoce Usted Bien La Iglesia de Dios? cuarta parte Por Pastor Narciso Zamora, Chile
¿Cuáles son las Doctrinas básicas de la iglesia? Hay que poner en práctica la Biblia desde Génesis hasta Apocalipsis. Ordenanzas o Sacramentos y Ceremonias Bautismo en Agua
Es la confesión pública de haber recibido a Jesús como su salvador personal, simbolizando en agua que con Cristo hemos muerto al mundo y al pecado y que con Él hemos resucitado a una nueva Vida, “¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Porque somos sepultados juntamente con Él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva,” Romanos 6:3,4. El bautismo es una manifestación pública que el creyente hace de su identificación con Cristo en su muerte, sepultura y resurrección. La inmersión del creyente en el agua es una representación de su inmersión en la muerte de Cristo, “Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí que los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre Él,” Mateo 3:16. El Bautismo es por inmersión, “Sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos,” Colosenses 2:12. El Bautismo es una Ordenanza dada por el Señor Jesús para los creyentes y que debe obedecer al inicio de la vida cristiana. No es un objetivo que debemos alcanzar a través de mucho estudio y dedicación, sino un requisito según la Biblia es: “El que creyere y fuere bau-
tizado, será salvo; más el que no creyere será condenado,” Marcos 16:16. Entonces el requisito es arrepentirse de los pecados y creer en Jesús como su salvador y confesarse a Él de acuerdo a Romanos 10:9,10. La Biblia no da ningún dato para bautizar a los niños, por lo tanto donde la Biblia calla nosotros callamos y donde la Biblia habla nosotros hablamos y hacemos, sería un gran error bautizar a un bebé o infante; además la iglesia de Dios no bautiza por aspersión, porque el bautismo es en agua no con agua. No puede humedecer o esparcir agua sobre la cabeza para ser bautizado, es anti-bíblico, lea los versículos en las líneas de arriba.
Lavatorio de Pies
El lavatorio de los pies es una ordenanza para la iglesia, “Así que, después que les hubo lavado los pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho? Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis. Si sabéis estas cosas, bienaventurado seréis si las hiciereis,” Juan 13:12-17. El criterio de Pablo para el apoyo de las viudas era que
hayan practicado el lavatorio de los pies a los santos, “que tengan testimonio de buenas obras; si ha criado hijos; si ha practicado la hospitalidad; si ha lavado los pies de los santos; si ha socorrido a los afligidos; si ha practicado toda buena obra,” 1 Timoteo 5:10. Esta ordenanza del lavatorio de los pies significa además el amor de Jesús y lo que nosotros debemos amar a los demás, “Un mandamiento nuevo os doy: que os améis uno a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros,” Juan 13:34 Con el lavatorio de los pies Jesús nos enseña la humildad, servicio y obediencia, Jesús dijo: “Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos,” Marcos 10:45. Nosotros tenemos que seguir el ejemplo que Jesús nos dejó: “Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas,” 1 Pedro 2:21. El lavatorio de los pies es un símbolo a igual que la Santa Cena y el bautismo en agua.
Periodical Permit # 170280
La Santa Cena o Comunión
La Santa Cena fue instituida por Cristo durante su última cena con sus discípulos, “cuando era la hora, se sentó a la mesa, y con él los apóstoles. Les dijo: ‘¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!’...y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros; …tomó el pan y dio gracia, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria mia,” Lucas 22:14-20. La Santa Cena es para la unidad del cuerpo de Cristo y para obedecerle. “Haced esto en memoria mia,” 1 Corintios 11:25. La Santa Cena es para agradecer por la salvación, tenemos que hacerlo en acción de gracias por su don inmerecido. La iglesia tiene que participar de la Santa Cena hasta que Jesús venga, “Así pues, todas las veces que comiéreis este pan, y bebiéreis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que Él venga,” 1 Corintios 11:26. La Santa Cena es Comunión con el Señor y con los hermanos, osea una comunión vertical y horizontal. El sentarnos a participar de la Cena del Señor es confraternizar con Dios y con la familia cristiana que está en plena comunión con el Santo y Señor Jesús. ¿Quiénes participan de la Santa Cena? Deben participar hermanos bautizados y que estén viviendo en santificación, al igual que del lavatorio de pies.
crezcan bajo la instrucción y educación Cristiana Bíblica y Evangélica, y que al llegar a la edad adecuada se conviertan al Señor Jesús. 3) Los padres hacen solemnes votos de mantener sus vidas en una alta norma de fidelidad al Señor para ser ejemplo de sus niños. 4) Los padres tienen que ser creyentes evangélicos para dedicar sus hijos en la Iglesia de Dios. 5) Jesús concedió el hermoso privilegio de presentarle los niños a Él cuando dijo: “‘Dejad a los niños venir a mí, y no se los impidáis; porque de los tales es el reino de Dios.’ Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía,” Marcos 10:14-16; Debemos tener en cuenta: (a) Que los niños son una bendición del Señor, “He aquí herencia de Jehová son los hijos,” Salmos 127:3. (b) Dios ha bendecido especialmente a los niños que han sido dedicados a Él, “Yo pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová,” 1 Samuel 1:28.
La Solemnización del Matrimonio
1) El matrimonio fue instituido por Dios, antes que existiera la Iglesia, hubo familia, “Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él…por tanto, dejará el hombre o mujer a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne,” Génesis 2:18-24. 2) El matrimonio fue confirmado por Cristo, “Y dijo: Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su
La Presentación o Dedicación de los Niños al Señor
1) Los padres traen al niño de tierna edad a la iglesia para presentarlo al Señor en acto de gratitud y consagración. 2) Los padres manifiestan el deseo de que sus niños 2
hombre que tenía ciertos poderes sobrenaturales y que como hijo de Dios vivió muy pobre en la tierra. Dejen y les digo que ni Salomón que contaba con su riquezas, o Moisés, o Juan el Bautista, o un dios de la tierra, o un hombre famoso, ninguno absolutamente ninguno ha resucitado de entre los muertos como lo hizo Cristo Jesús, el hijo de Dios. Gracias a su resurrección Él es enteramente suficiente para darnos la victoria y la vida eterna a todo aquel que crea. El lector que vive de acuerdo con las verdades del Apocalipsis evita el juicio de Dios y recibe su abundante provisión. Hay algo extraordinario que tú necesitas saber, Jesús dijo “Tengo las llaves de la muerte, y del hades.” Gracias a la obediencia de Jesús y su amor por la humanidad no descendió de la cruz como se lo pedía aquel hombre, “Desciende de la cruz y sálvate a ti mismo y sálvanos a nosotros.” Él fue obediente hasta la muerte y muerte de cruz. Fue allí donde arrebató las llaves al maligno y resucitó victorioso, y fue a los sepulcros a predicarles a los muertos y muchos resucitaron abriendo sus sepulcros en cuerpos glorificados. Sin duda esta es la victoria más grande para Cristo y sus seguidores, que Él ahora tenga las llaves de la muerte y del hades. Porque Él ahora es la vida, la verdad y el camino al padre, y el que en Él crea le dará vida no importa cuanto tiene de muerto. Él le dijo a Martha “Yo soy el que está contigo. Yo soy la resurrección y la vida, el que cree en mi aunque esté muerto vivirá.” Cuando Jesús se le apareció a Juan, él tenía 85 o 90 años de edad, y por estar en una isla seguramente estaba débil. Pero aunque hubiera tenido todo su vigor o sus fuerzas igual hubiera sido una sorpresa recibir la visita extraña de Jesús y él cayó a sus pies como muerto, Apocalipsis 1:17 verso 17-18. Jesús puso la mano encima de Juan y dijo unas poderosas palabras de aliento, calmó sus temores, su simple afirmación “No Temas,” hizo eco de órdenes parecidas dadas por Dios al revelarse a otros personajes como María y más en las escrituras. Sirve para hacernos recordar que Dios anhela una relación profunda y amorosa con los hombres que creó. Juan se levantó con nuevas fuerzas. Yo, personalmente como mi alma anhela la presencia del Señor Jesús cuando estoy caído, débil, o cuando llega el desánimo. Mi alma anhela una palmada en mi hombro con estas palabras del salvador del mundo, “No Temas” amado oyente si tú te puedes mover y puedes hablar y puedes ver, mira el mundo como perece por falta de ciervos como Juan que lleven las buenas nuevas, según Apocalipsis 1:19-20. Es tu trabajo, tu ministerio, antes que tengas que lamentar no haberlo hecho. Adelante que el Señor viene pronto y tendrás tu galardón. Pastor Israel Hernández
mujer, y los dos serán una sola carne. Así que no son ya más, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, que no lo separe el hombre” Mateo 19:5-6. 3) El matrimonio es del todo honroso y constituye una bendición, “Honroso sea en todo el matrimonio, y el lecho sin mancilla,” Hebreos 13:4. 4) La costumbre evangélica de solemnizar la unión matrimonial en un culto a Dios, hace que se reconozca a Dios como el dueño del nuevo hogar que se establece e indica que los cónyuges desean su divina bendición. 5) Un pastor podrá realizar o solemnizar matrimonios a parejas que estén de acuerdo con la fe cristiana y de acuerdo con los principios bíblicos.
La Sepultura de los muertos
En la sepultura de los muertos, los creyentes y amigos acompañarán a los dolientes en un culto fúnebre, en una sala convenida en que la nota principal será consolación y esperanza. El pastor y la congregación deben realizar el servicio fúnebre por la noche y si el muerto y los dolientes no son creyentes entonces el mensaje debe ser evangelístico. No se debe enfatizar el pesar, sino la esperanza de los hijos de Dios. La predicación debe ser para los que viven, no para el muerto. Se debe hablar con los dolientes antes y después del servicio para darles palabras de consuelo. Después les acompañarán al cementerio donde el pastor tomará la dirección de la ceremonia de sepultura, “Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él,” Hechos 8:2.
NO TEMAS Hay ocasiones en que esta vida parece insoportable y la recompensa de una vida eterna en el cielo parece un sueño. El Apocalipsis fue escrito bajo estas condiciones. Lo escribió Juan, un cristiano anciano cansado, débil, por falta de comer a sus horas, pero fuerte en el espíritu. Los años ya estaban haciendo efecto en su cuerpo. Mantenía una buena relación con su Dios y el salvador de su alma, y también tenía una fe enorme, aunque no tuvo un pastor o un hermano o una familia que le consolara en medio de su lucha. Cristo glorificado le trajo fortaleza y consuelo, mostrándole la victoria no solo para él sino para todo aquel que cree. El libro de Apocalipsis es una invitación a confiar íntegramente en el salvador viviente pase lo que pase. ¿Es Jesucristo enteramente suficiente? Esta es la pregunta del débil, el caído, el desalentado. ¡Jesucristo es enteramente suficiente! Algunos dicen que fue un súper 3
Reconstruyendo el Templo: Reparando Grietas
4. Pero Cristo es el intercesor entre Dios y el hombre y nos ha reconstruido sellando y reparando las grietas que nos apartaban de Dios, 2 Corintios 5:19.
1 Reyes 22:3-5
Escrito por Erick Guillen, que nos envía esta nota: Hermanos gracias por los tratados que me envían con esos Salmos para evangelizar. Soy el hermano Erick Guillen y quise aprovechar este medio para agradecer ese gran gesto de amor con el cual nos bendijeron y también les pido que en su amor y en su fondo económico nos puedan seguir mandando esos tratados. El Señor les dará su pago de amor. Gracias y que la gracia de mi Señor J esús les siga el resto de sus vidas y hasta la eternidad. Su hermano, Erick Guillen
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a mayoría de personas tratan diariamente de cambiar sus vidas. Unos tratan de ser más buenos mientras otros regalan cosas para calmar el vacío y sentirse desahogados en su conciencia. Otros tratan de dejar el alcohol, algunos lo logran pero no calman la sed en su interior. Otros tratan de dejar las drogas para poder reparar el daño que ellos han hecho a sus mismos cuerpos, pero la droga los vence al final de esa exhaustiva pelea. Así que si tan solo acudieran al doctor del alma, él repararía las grietas causadas por nuestra falta de entendimiento cuando ignoramos la palabra de Dios viviendo en idolatría y en la incredulidad. Esto no solo nos conduce a una muerte espiritual sino también en algunos o en casi la mayoría de veces a una muerte física. Por lo cual veremos 3 puntos básicos que dañan nuestro templo: Ignorancia, Idolatría e Incredulidad.
Queridos Hermanos... El trabajo que estoy desarrollando aquí es como maestra del Instituto por Correspondencia de Triunfo Cristiano y procesadora del correo. Es un trabajo que me gusta y en el que no escatimo poner horas extras porque sé que la recompensa me la dará Dios. En la iglesia ayudo como maestra de la escuela dominical y toco guitarra en horas que me necesiten. Hace años, antes de casarme, trabajé por 10 años como maestra del Instituto Bíblico Congrecional en Morelia Michoacán, México. Me encantó poder servirle al Señor de esa manera, las cosas cambiaron cuando me casé. Después de allí con mi esposo Teo Mérida hemos levantado tres iglesias en Michoacán, México. Fuimos pastores por algunos años en esas iglesias y fui coordinadora de Misioneritas al nivel distrital. Durante ese tiempo estaban a mi cargo Querétaro, Guanajuato, y Michoacán y Dios me ayudó para lograr ver tres coronaciones de unas jóvenes muy valientes que lo lograron. Han sido momentos de alegría durante esos años de trabajo en México para mí y mi esposo. Y finalmente estamos por estas regiones Americanas otra vez; desde el momento en que llegamos, trabajamos un poco en lo material y un poco en lo espiritual pero estamos contentos. Yo voy a predicar, cantar, y tocar en tres clínicas de reposo para ancianos. Mi esposo también predica allí algunas veces. Así estamos haciendo la obra de evangelistas, pastores, misioneros, maestros y todo lo que Dios nos ayude para hacer lo hacemos. Efesios 6:7-8 todo aquel que lea este artículo sepa que les amamos y deseamos lo mejor para ustedes de parte de Nuestro Dios.
Oración Transitoria I
1. El hombre no toma en cuenta a Dios por eso la ira de Dios desciende del cielo, Rom. 1:21. 2. Josías ignoraba la existencia del libro de la ley, 2 Rey. 22:8, 11. 3. Hay un cambio en el hombre cuando conoce la verdad y trata de reparar el daño, 2 Rey 22:11 y 19. 4. Cuando conocemos la verdad nos hace verdaderamente libres y sabios. Juan 8:32. Porque por Cristo es quitada la venda, 2 Cor. 3:16.
Oración Transitoria II
1. El hombre necio dice en su cara que no hay Dios pero adora las cosas materiales. 2. Josías era rey de un pueblo idólatra, 2 Reyes 23:6. 3. Josías termina con la raíz de la idolatría, 2 Reyes 23:20. 4. Josías trata de volver al pueblo a la verdad, 1Rey 23: 21 y al 23 y nosotros celebramos. Nuestra pascua la cual nos ha dado libertad nuestro cordero, 1 Cor. 5:7. Cristo es nuestra pascua.
Oración Transitoria III
1. El hombre cree en Dios pero mantiene su raíz en la incredulidad. 2. La incredulidad nos hace enemigos de Dios, 2 Reyes 23:17. El profeta había hablado de parte de Dios años atrás. 3. Josías deja la incredulidad y se convierte de todo corazón, 1 Reyes23:25 y quiso reconstruir la relación de Dios con su casa Israel.
Atentamente su amiga y hermana en Cristo, Elena Mérida Maestra del Instituto Bíblico por Correspondencia 4
mente alumbrada, gritando: “¡Perdón por la sangre de Jesús que limpia! ¡Recibe mi espíritu, oh Señor!” Poco tiempo después estaba yo con ella al lado del patíbulo; los terrores del juicio sitiaron otra vez su alma. “Pero yo he pecado y estoy para aparecer delante de Dios, ¡O! ¿Qué será de mí?” Querida amiga, le dije, “tú no puedes hacer nada, pero la sangre de Jesús puede hacer todo.” Después no cesó de murmurar: “La sangre de Jesús ha borrado mis pecados, en sus manos encomiendo mi espíritu.” Unos cuantos minutos después había partido, la justicia estaba satisfecha. Un cuarto de siglo más tarde en 1889, al cruzar una de las calles de Madrid, se dirigió a mí un extranjero, quien con una reverencia y algunas palabras amigables, me dio un librito. Yo le pregunté de que se trataba, y él me contestó: “¡De la preciosa sangre de Cristo!” Cuando se había ido, y mientras leía yo el título: “Sin duda hay un Salvador para ti también, “alguien me dijo: “¿No estáis enterado de que es un libro protestante y que os es exponéis a la excomunión si se os halla leyéndolo?” Alarmado por esas palabras y poco deseoso de llegar a ser una víctima del Santo Oficio, destrocé el librito y desparramé sus páginas. Seguí mi camino con la sensación del alivio que siente uno al ser liberado de algún mal que ha estado a punto de vencerle. Pero la voz grave y amable del extranjero resonaba aun en mis oídos, pues sus palabras: “La preciosa sangre de Cristo,” habían despertado en mí antiguos recuerdos. Todos los detalles de aquella antigua y triste historia de crimen, juicio y muerte, pasaron de una manera vivida delante de mí. Por fin arrancaron de mi alma agitada la pregunta: “Puesto que esa pobre mujer fue consolada por la seguridad de la virtud de la sangre de Cristo, ¿Por qué has roto el libro que evoca esa verdad?” Retrocedí por el mismo camino, pero el viento había desparramado las hojas. Sin embargo, hallé una porción de la pasta roja, en la cual leí con emoción el título: “¡Sin Duda Hay Un Salvador Para Ti También!” Continuando mis reflexiones, me dije: ¿Engañaste a esa pobre mujer en el dintel de la eternidad al darle la esperanza del perdón en la sangre derramada? ¿Fueron tus palabras para con ella nada más que mero consuelo vulgar, recuerdos de estudios áridos, y a las que tú mismo no les das ninguna importancia? Y no obstante, esas palabras la consolaron en el oscuro valle de la muerte, con sus ojos dirigidos hacia el mundo invisible, al invocar una y otra vez a Jesús, y encomendar su espíritu en sus manos. ¿Y no fue respondido ese grito? ¿Darían las llamas del infierno una cruel negación a esa fe, a esa confianza sencilla? ¡No, no, eso es imposible! ¡No puede ser porque la Palabra de Dios es verdadera! Sí es así, me dije así mismo, entonces, ¿Por qué la rechazas para ti
LA SANGRE DE CRISTO En el año de 1964 (refiere un sacerdote español), fue enviada al tribunal de Alar del Rey una caja que contenía el cuerpo inanimado de un ciudadano bien conocido de aquella población y que repentinamente había desaparecido. Indagando sobre el particular, recayeron sospechas sobre dos mujeres de haberle asesinado y fueron arrestadas. En el proceso confesaron ser culpables y fueron sentenciadas a muerte. Yo estaba entre los sacerdotes señalados para ayudar a estas infelices mujeres en los últimos días. Una de las mujeres fue especialmente confiada a mi cuidado. Era penoso presenciar su desesperación. La idea de la muerte y la perspectiva de ir a la presencia de Dios sin poder redimir su crimen mediante algunas buenas obras la torturaba atrozmente. En vano le hablaba yo de la confesión que había hecho de la muerte por la cual estaba para expiar su delito, y especialmente de la absolución que había recibido de mi boca; todo eso solamente traía una apariencia pasajera de alivio a su cara agonizante y no cesaba de retorcerse las manos diciendo: “¿Quién puede decirme que eso es suficiente para obtener el perdón? ¡O! ¿Qué puedo hacer para obtener perdón, miserable y perdida como soy?” El tiempo pasaba, la última noche se acercaba al fin y el sol del día siguiente brillaría sobre el cuerpo inanimado de la pobre criatura. Había yo hecho todo lo que podía pensar para consolarla, y sentía terriblemente la insuficiencia de las palabras humanas en presencia de tal angustia. Por fin, y sin entender el pleno significado de mis palabras le dije: “¡Pero la sangre de Cristo debe servir para algo!” “¡Ah!” gritó ella, asiendo la idea, y volviendo a las palabras: “Sí, la sangre de Cristo debe servir para algo!” “No solamente puede hacer algo esa sangre,” dije yo, “sino que puede hacerlo todo, pues la sangre de Jesús, el Hijo de Dios, limpia de todo pecado.” “¿Es cierto eso?” preguntó ella. “Sí,” fue mi respuesta, “el apóstol Juan lo afirma en el nombre de Dios.” “¡Ah! ¿Por qué no me dijo usted eso más pronto?” dijo la pobre mujer, y yo estaba sorprendido de la expresión de tranquilidad que apareció en su pálido rostro: Después de un momento de silencio replicó: “La sangre de Cristo limpia de todo pecado; ¿Qué puedo hacer para que pueda borrar el mío también?” “Hija mía” le contesté, “Mira a Jesús en la cruz, y pronuncia las palabras exhaladas de sus divinos labios con su último suspiro” Jesús murió de esta manera; tú debes morir así y nadie podrá arrebatarte de la mano de Dios. Se arrojó sobre las húmedas lozas de la capilla opaca5
mismo, y buscas tu propio perdón por otros medios?” No pude apartar mi espíritu de estas serias consideraciones, y el título del pequeño folleto resonó en mis oídos incesantemente hasta que, unas cuantas semanas más tarde, hice efectivo en mí, que “la sangre de Jesucristo, el hijo de Dios, limpia de todo pecado.” Mi conversión data desde esa hora, y esas palabras que dirigía a la pobre condenada han venido a ser, por la gracia de Dios, el fundamento de mi fe, mi gozo y mi esperanza. – De “El Mensajero”
galón de centenarios por un galón de agua. Los dos ganaron, uno no podía creer que un galón de agua pudiera valer tanto oro, pero él salvó la vida del otro en el último momento. Eso es lo que vino hacer Juan el Bautista a este mundo, emparejar el camino. Él era la voz de Dios en medio del desierto, verso 40:3. Cuando Cristo se hace presente dice Juan, “he aquí el cordero de Dios que quita y borra el pecado del mundo, Él es, yo no soy digno de desatar la correa de sus zapatos.” Amigo Cristo vino a dar vida a los muertos, porque eso era nuestro fin si seguimos en nuestros pecados y deleites. Si estamos cansados Él nos hará descansar. Él es la luz del mundo para no andar mas en tinieblas, Él es el camino para caminar con seguridad, porque Él es el buen pastor y sus ovejas le conocen, le obedecen, y le siguen porque conocen su voz. Quizás éste sea el paso más difícil que vas a dar en tu vida, el arrepentirte antes que sea demasiado tarde. Pero este paso traerá para ti salvación y bendición: ríos de agua viva para ti. Acepta a Jesús como tu salvador hoy mismo y no lo tendrás que lamentar mañana.
DIOS LLAMA AL ARREPENTIMIENTO Isaías 40:3-5 y
Mateo 3:2
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i la Historia de la salvación fuera un rompecabezas, Juan el Bautista sería una de las piezas clave. Fue el precursor de Cristo y llamó al pueblo al arrepentimiento para la preparación de la venida del Salvador. Dios lo levantó con este propósito y Juan lo cumplió con fidelidad. La persona de la que habló Isaías prepararía el corazón del pueblo para la llegada del rey de reyes. Cuando Jesús comenzó su ministerio público ya el arrepentimiento había abierto muchos corazones al evangelio que él proclamaría y ya su presencia estaba en medio de ellos. En realidad algunos de los primeros discípulos de Jesús se hallaban entre los que habían respondido positivamente al ministerio de Juan el Bautista. El arrepentimiento hoy tiene ese mismo propósito. Podemos cometer el error de pensar que el arrepentimiento nos cuesta de alguna forma. La bendición de la salvación tiene un peso mucho mayor que el precio que tengamos que pagar. Echa abajo el muro de la separación entre Dios y los hombres y abre los corazones a sus bendiciones abundantes. Cuando se realiza el trabajo descrito en los versículos 3 y 4 de Isaías, permitía que el pueblo experimentara “La gloria de Dios.” En verso 5, su esplendor no sería manifiesto sólo para un grupo selecto como el pueblo judío arrepentido sino, “para toda carne.” Nuestra vida al paso del tiempo ha fabricado caminos torcidos, montañas que no podemos escalar, los caminos no nos llevan a ninguna parte sólo a la muerte. Hemos hecho de nuestra vida un desierto donde no hay descanso por las tormentas de arena, donde no hay agua para refrescar la boca. Se dice que un hombre en el desierto traía un galón lleno de centenarios de oro pero venia muriéndose de sed. A pesar de esto, la providencia le puso en su camino un hombre que llevaba un galón de agua e hicieron un cambio. Él le dio el
Por Pastor Israel Hernández
Un Mome nto Misione ro
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alimos a repartir folletos por el parque, por las calles y por el mercado, predicamos la Palabra de Dios. No había ingresos económicos, se terminó el dinero y no había para la comida. Solamente teníamos 8 soles (la moneda del Perú), lo que costaba un tarro de leche “Gloria” para Gerson; fue el peor momento para nosotros. Solamente teníamos una cama, unas ollas y el andador o coche del niño, es todo lo que había dentro de la casa. No teníamos mesas ni sillas para sentarnos, sólo una cocinita de kerosén muy pequeña para dos ollas chicas, y una máquina de coser. No sabíamos qué hacer. ¡Necesitábamos alimentos! Compramos un tarro de leche de un litro para Gerson, que tenía ocho meses de edad, y eso duró casi una semana mezclado con agua. Mi esposa y yo seguíamos pensando qué hacer para conseguir alimentos. Oramos al dueño de nuestra vida, Jesús, que es la respuesta. Salí a buscar trabajo en las panaderías, construcción y en el mercado, caminé toda la pequeña ciudad y no encontré trabajo; mientras tanto seguimos trabajando repartiendo folletos en los hogares y por las calles y predicando la Palabra de Dios. Luego decidí salir al campo a buscar comida. Llevé conmigo unas tazas de plástico para cambiar por alimentos no perecibles. Un día miércoles muy tempra6
no, salí de casa caminando hacia el oriente, llevaba un pequeño paquete de folletos para evangelizar durante el viaje, caminé siete horas y llegué a unos campos donde había mucha verdura. Llegué a una chacra en la cual encontré un hombre flaco con sombrero grande que araba la tierra con una yunta de bueyes. Lo saludé y me detuve junto a él y platicamos un momento, me presenté, “Soy Pastor Evangélico.” Le hablé del Señor Jesús y su obra en la Cruz del Calvario. Él me dijo que un profesor le había dicho que el hombre no es creado por Dios, sino que existe por evolución, que la tierra evolucionó y apareció el hombre, fue importante lo que él le contestó y le dijo, “Profesor, si la tierra evolucionó y de allí salió el hombre, porque no aparecen hombres cuando yo aro la tierra, solamente encuentro gusanos.” Allí en la chacra parado junto a su yunta tomando el arado con su mano yo le pregunté que si quería aceptar a Jesús como su Salvador, y dijo que él había aceptado al Señor algunos años atrás, pero nunca más vio a un cristiano que llegara a visitarle, y que necesitaba estudiar la Biblia. Luego me invitó a quedarme esa noche en su casa y que él invitaría a otras personas más para tener un estudio bíblico, y me pidió que les enseñara de la Palabra de Dios. Acepté su invitación con mucha alegría y me senté a un costado de la chacra hasta que llegó la tarde. Él colocó en el pasto a los bueyes y llevamos el yugo y arado a su casa. Llegamos muy tarde. Yo estaba muy hambriento y necesitaba comer. Nos invitaron a cenar unos choclos blancos muy calientes con una sopa de papas con algunas verduras y legumbres Esa noche me acordé de mi esposa y las necesidades que ella y mi hijo estaban pasando. Salimos luego a visitar a los vecinos para invitarles a un estudio bíblico esa noche. Se reunieron los miembros de varios hogares para escuchar el mensaje. Pude hablarles del sacrificio de Cristo en la Cruz por el mundo para ser salvos. Después de terminar la reunión la gente salió y nos quedamos con la familia platicando de la maravillosa Palabra del Señor y seguí enseñándoles como debían seguir firmes en Jesús. Era las tres de la mañana y seguían muy emocionados haciendo preguntas. Obsequié literatura para que ellos pudieran evangelizar a sus vecinos, luego oramos juntos. Por la mañana del día siguiente le dije a la familia que tenía unas tazas de plástico y deseaba cambiárselas por alimentos no perecibles. El hermano me dijo que no debería traer nada, solamente tenía que pedir y allí tenían para que me llevara a mi casa.
Dejé las tazas y ellos me dieron un saco de 40 kilos de choclos, zapallos, alverjas verdes, habas, frijoles verdes, papas, chochoca, caihuas, zanahorias, betarragas, y repollos, etc. Lo recibí muy alegre, tenía bastante comida para llevar a mi familia. Después del desayuno coloqué el saco arriba de mis hombros y me puse a caminar. Eran las siete de la mañana, en pocas horas estaba cansado porque todo el camino era cuesta arriba. Tenía que subir la montaña, pero me senté para descansar junto al camino; entré al bosque por entre los árboles y saqué unas sogas (allí le dicen bejucos), amarré el saco por la mitad y lo coloqué en mi espalda amarrándolo sobre mis hombros haciendo un nudo a la altura de mi pecho y seguí caminando. El sol declinaba y ya era muy tarde. No tenía más fuerzas, tenía mucha hambre y sed y mi corazón se alegró al mirar la ciudad y pensé, ¡Oh que cerca que estoy! A las cuatro de la tarde llegué a mi casa, mi esposa corrió a recibirme; con el peso del saco la soga me había herido los hombros y sangraba. Estaba muy agotado, sin fuerzas, pero feliz, muy feliz porque ese día mi esposa cocinó unos choclos y una sopa de verduras muy ricas.
Esta ha sido una selección del libro Caminante con Dios ...en apuros más no desesperados. El Trabajo Misionero en América Latina por Pastor Narciso Zamora. Si disfrutó de esta selección, le invitamos a leer el libro entero. Visite www.walkingman.ws para descargar el libro digital en español – gratis. También está a la venta el libro en empaste rústico en ingles y español, en oferta especial - sólo $10 (US). El envio dentro de los Estados Unidos es gratis, favor de añadir $5 (US) por enviar al extrajero. Los ingresos de este libro benefician el trabajo misionero en América Latina. También se puede pedir el libro en cualquier librería en los Estados Unidos, y comprarlo en www.amazon.com.
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SI PERMANECEMOS UNIDOS BIENVENIDOS MIS HERMANOS A ESTE PEQUEÑO CULTO PARA ASÍ DARNOS LAS MANOS LO MISMO NIÑOS QUE ADULTOS.
SI QUEREMOS ESTAR UNIDOS Y COLMADOS DE BENDICIÓN DEBEMOS ESTAR SIEMPRE UNIDOS DE TODO PURO CORAZÓN.
ESTAMOS TODOS REUNIDOS EN EL NOMBRE DEL SEÑOR SINCERAMENTE UNIDOS REBOSÁREMOS DE AMOR.
DIOS NOS MANTIENE UNIDOS A TODOS CON MUCHO AMOR Y TODOS UNIDOS EN UNO EN EL NOMBRE DEL SEÑOR.
DEBEMOS PERMANECER UNIDOS CADA DÍA MÁS PARA ASÍ LLEGAR A VER LO QUE NO HEMOS VISTO JAMÁS.
DEBEMOS RECONOCER QUE ESTAMOS VIVOS POR ÉL SI PERMANECEMOS UNIDOS NADIE NOS PODRÁ VENCER. POR ESTUPENDA DE CUBA