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Nuestras aves
Las aves en el Cerro Carlos Condell
Codorniz
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Callipepla californica
Los primeros registros para la especie en nuestro país datan de 1870 en Valparaíso con posteriores reintroducciones a lo largo de la zona central, adaptándose de manera exitosa en el territorio, continuando su expansión hasta el día de hoy, teniendo incluso hábitat para colonizar en la región de Magallanes. Presente desde Atacama hasta Aysén.
La codorniz cuenta con un marcado dimorfismo sexual. El macho cuenta con un plumaje muy elegante y con un llamativo copete de plumas negras que están dobladas hacia adelante, posee una corona café con una línea negra y blanca, su garganta y cuello es negro con un borde blanco, pecho gris, abdomen con plumas amarillentas con borde negro. La hembra por su lado es de menor tamaño y su coloración es café con un copete mucho más pequeño y fino.
En cuanto a su reproducción, la hembra es muy prolífica, colocando entre 8 a 25 huevos, en ocasiones más de una hembra hace uso del mismo nido, siendo éste una simple depresión en el suelo. Las codornices no son aves solitarias, ellas viven en grupos familiares de dos tipos: grupos familiares simples o grupos familiares comunales, el primero consta de solo una hembra adulta, sus polluelos y machos adultos, mientras que el segundo son varias hembras adultas con polluelos y machos adultos. Esta sería una forma más exitosa de sobrevivencia de la descendencia e incrementa la longevidad del grupo, al ser grupos más numerosos. Su alimentación se basa principalmente en semillas, también hojas y bayas y una pequeña proporción de insectos. Su dieta corresponde principalmente a especies exóticas más que a especies nativas.
¿Dónde la puedes encontrar?
A lo largo de todos los senderos del cerro, bien común entre las zarzamoras. Se pueden ver en grupos familiares, a veces solo se escuchan vocalizar, bien asustadiza, arranca mayoritariamente corriendo y en algunas ocasiones volando al ver la presencia de personas. Al atardecer es bien común ver individuos cruzando la calle, en la última curva antes de llegar a la Virgen.
