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ARTE Y ESPECTÁCULOS
Cine
1917
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Con numerosos premios internacionales, este muy interesante film llegó a los Oscar con enormes expectativas, pero una excesivamente galardonada película coreana (“Parásitos”, de Bong Joon-ho) le restó brillo a este prodigio cinematográfico.
Dos años antes de finalizar la muy cruenta Primera Guerra Mundial (1910-1919), a dos jóvenes cabos ingleses se les confía en plena trinchera una misión tan riesgosa como aparentemente imposible, una verdadera misión suicida. Corriendo contra el tiempo y frente a innumerables peligros deben recorrer parte del territorio ocupado por los alemanes en plena campiña francesa, para llevar un mensaje que puede ahorrar la vida de más de un millar de soldados, entre los cuales se encuentra el hermano mayor de uno de los dos héroes. Se trata de un batallón que ha quedado incomunicado y al que los alemanes le han tendido una trampa mortal.
“¿Qué tienen en común –se pregunta el crítico Diego Batlle de La Nación– ‘La soga’, del inglés Alfred Hitchcock; ‘El arca rusa’, del ruso Alexander Sokurov; ‘Victoria’, del alemán Sebastian Schipper y ‘Birdman’, del mexicano Alejandro González Iñárritu, con ‘1917’?”. Y observa que todas estas películas están construidas en un único plano secuencia, sin cortes evidentes. Pero señala que “este dispositivo encuentra justificación y sentido en la propuesta que el coguionista y director británico Sam Mendes hace en “1917”: exponer en toda su dimensión y crudeza las traumáticas vivencias en el frente de batalla”.
¿Es solo un film de guerra? No, es mucho más. Porque si bien nunca pierde el ritmo y no ahorra escenas de violencia propias del género, numerosos momentos elevan la obra a otras dimensiones. Bastaría la amistad que crece entre los dos soldados, los secretos familiares que van confiándose, el encuentro entre las ruinas con una campesina francesa que cuida de una criatura en brazos, la canción en el campamento antes de la batalla, la carrera desesperada mientras de las interminables trincheras salen los soldados a enfrentar un destino cruel, el autoritarismo de un obtuso oficial que no quiere entender razones...
Pablo O. Scholz, de Clarín, anota: “Mendes, el realizador inglés ganador del Oscar por ‘Belleza americana’, y el director de ‘Skyfall’, una de las mejores películas del agente 007 de la historia, se basó en un relato que le contó de niño su abuelo. Y para plasmarla en imágenes contó con el director de fotografía Roger Deakins –habitual colaborador de los hermanos Coen–, que ha hecho mucho más que iluminar las escenas. Piensen que un plano secuencia en movimiento implica abarcar diferentes escenarios, estructuras, sortear obstáculos y la cámara no debe descubrir más que objetos, personajes –cadáveres–, pero ni un atisbo de que se está filmando: ni luces, ni elemento de rodaje”.
por José María Poirier
CUARENTENAUTA
Las novedades mundiales nos cambian hábitos, usos y costumbres y hasta el título de nuestra columna. Ante todo, ¿qué es la cuarentena? Acudimos al Diccionario de la Real Academia Española: .
adj. desus. cuadragésimo (que sigue en orden al trigésimo noveno).
. f. Conjunto de 40 unidades.
. f. Edad comprendida entre los 40 y los 49 años.
. f. Tiempo de 40 días, meses o años.
. f.Cuaresma (tiempo litúrgico).
. f. Aislamiento preventivo a que se somete durante un período de tiempo, por razones sanitarias, a personas o animales.
. f.coloq. Suspensión del ascenso a una noticia o hecho, por algún espacio de tiempo, para asegurarse de su certidumbre.
Optamos por quedarnos con la acepción del conjunto de 40 unidades. ¿De qué unidades estamos hablando? Aún no lo sabemos. Aunque en nuestro caso también aplicaron la Cuaresma y el aislamiento preventivo. Algunos afortunados también cuentan entre 40 y 49 años. Lo cierto es que debemos proceder con calma y confianza, atendiendo a las normas que establecen las autoridades sanitarias de nuestra región. De hecho se produce un fenómeno inédito: gran parte de la población mundial está viviendo una cuarentena forzosa. Intentaremos aportar pistas para estar aislados físicamente hablando y conectados a la distancia.
Un medio que cobró inusitada fuerza es la bendita radio, el mejor medio de comunicación, lejos. El de las “3 B”: bueno, bonito y barato. Proponemos escuchar radio, de allí esta sugerencia: Las mañanas de lunes a viernes, desde las 10 y hasta las 12 del mediodía, Marcelo Pavazza junto a un equipo de columnistas nos dan la info que ningún otro medio brinda en Disfrutemos BA, en La Once Diez (AM 1110), la Radio de la Ciudad.
La querida LS 1, emisora pública nonagenaria: agenda cultural, recetas de cocina y la actualidad vista desde un costado pragmático, sin urgencias, sino con criterio y una selección musical impar.
El programa cuenta con la impecable producción de Tere Faisal. En RadioCut: https://ar.radiocut.fm/radioshow/lomalo-de-ser-bueno_1/ ¿Podemos viajar? Claro que sí, tan solo que en forma virtual. Para hacerlo no necesitaremos documento, pasaje, ¡ni siquiera valijas! Son los milagros que nos permiten la imaginación y la tecnología, enhebradas por Tripin TV, un equipo de soñadores que armó un hermoso canal de YouTube, donde el martes 17 de marzo, horas antes de la cuarentena, subieron un documental fenomenal: “Maravillas ocultas de Argentina”.
¿Se pueden forjar vínculos aún dentro del aislamiento? ¡Claro que sí! ¿No sucede que en los edificios los vecinos solemos ser más comunicativos desde que comenzó la cuarentena?
Comparto así desde el estribo una historia inspiradora que puede verse en Netflix. Se trata de “Milagro en la celda N° 7”, película turca de 2019, inspirada en un caso real de Corea del Sur. Son desafíos que nos planteamos en estos tiempos de estar en casa, pero atentos a lo que sucede alrededor de nosotros, y pensando en el bien común. A Dios gracias, los medios digitales tienden puentes que nos acercan. Abramos nuestros corazones a la fraternidad, el mejor antídoto contra todo tipo de virus.
por Quique Figueroa
Libros
Magallanes (La aventura más audaz de la humanidad)
Se cumplieron 500 años del famoso viaje del marino portugués Magallanes financiado por el emperador Carlos I de España. Tres años después de partir de Sevilla, siempre navegando hacia Occidente, una de las cinco naves, al mando del español Juan Sebastián Elcano (Magallanes fue muerto en Filipinas), regresó a España con la noticia de la extraordinaria empresa. Este año, la celebración fue también ocasión para reeditar una famosa obra del novelista y biógrafo austro-húngaro Stefan Zweig, quien se suicidó en Petrópolis, Brasil, en febrero de 1942, convencido que no era posible vencer el avance nazi en el mundo. Y también, la elegante reedición de La Primera Vuelta al Mundo (Alianza editorial), el diario del noble geógrafo y cronista italiano Antonio Pigafetta, quien acompañó a Magallanes en su aventura; en cuyos textos se basó Zweig.
En un viaje en barco a Sudamérica desde Inglaterra, escribe: “Llegué a admirar la hazaña del hombre que, a mi sentir, realizó la más grande proeza en la historia de la exploración de la Tierra: Fernando de Magallanes, quien salió con cinco minúsculos cúteres de pescadores de Sevilla para dar la vuelta al mundo, la odisea más espléndida en la historia de la humanidad”. Entusiasmado, Zweig escribirá después esta magnífica biografía del marino, donde refiere los rigores de un viaje intrépido, lleno de penurias y de sorpresas. La prosa del famoso escritor austro-húngaro sabe combinar el rigor histórico con el atrapante estilo de un novelista de raza.
Tal como señalaba Juan Luis Cebrián en el suplemento “Babelia” de El País de Madrid: “No se trata de un texto erudito, sino emocional, pero es también una contribución notable a la comprensión de la geopolítica de la época y la rivalidad entre las dos potencias entonces imperiales; clarifica también el estúpido debate sobre qué país, si Portugal o España, debe reivindicar la nacionalidad de la gesta”.
Al mismo tiempo sostiene que “Stefan Zweig menosprecia la figura de Elcano, casi un advenedizo a la gloria, y pone el máximo acento en la calidad de visionario del jefe de la exploración, muerto a lanzadas en una isla perdida de las Filipinas”.
El autor austro-húngaro señala que “en un mes Magallanes consiguió más de España que de su patria en 10 años de abnegado servicio”. Y, siempre Cebrián dice que Magallanes “no es un guerrero en pos del triunfo, sino un emprendedor y un líder, minucioso hasta el extremo en los preparativos del viaje, el avituallamiento y hasta las disposiciones hereditarias para el caso –como fue– de que pereciera en el empeño. Ninguna de ellas se cumplió”.
por José María Poirier