El castillo que no lo era │Claudia Leal

Page 1

el castillo que no


CL A R A

LE O

ALBERTO


C H IC O

WA N D A

M A RCEL A

J U LIA


Claudia Leal,

autora de este libro, es fotógrafo y diseñadora gráfica y ha venido de Caracas, donde dejó sus gatos y su casa con jardín, para dedicarse a la ilustración infantil en Madrid. En sus ilustraciones intenta reflejar el color local de su país y vivencias de su infancia junto a sus hermanos. ®Claudia Leal El castillo que no lo era Depósito

legal

If25220132001847 IS B N

978-980-12-6624-2



A

quel día fue inolvidable para Leo y sus hermanos. Era uno de esos cálidos días de vacaciones de verano y su madre los llevó a pasar el día a casa de la abuela.




Entre matas de mango, níspero y mamón, la moderna y limpia casa sobresalía con sus formas geométricas. Marcela siempre corría emocionada para ser la primera en abrazar las piernas de la abuela. En cambio Alberto y Clara se quedaban los últimos escuchando los consejos de mamá.


La abuela, junto a su perro Rothko, los recibió con sorbetes de coco, piña, tamarindo, limón y kola, que era el favorito de Wanda. Hacía mucho calor y el viento hacía sonar las ramas de los chaguaramos de la plaza de enfrente cuando chocaban unas contra otras.




En la biblioteca de la casa de la abuela había libros enormes. Cada uno cogió uno para leerlo. Alberto amaba los de guerra y aviones; a Wanda le encantaban las revistas de decoración; Leo, en cambio, escogió su preferido: el gigantesco libro sobre castillos y palacios. A Leo le parecía que la casa de la abuela era un gran castillo.



De pronto, algo inesperado pasó. De la nada aparecieron barricadas y catapultas y cada uno tomó su posición. Clara, con su sombrero de guerrero medieval, inició una batalla. Marcela pensó que ella bien podría ser la princesa. Rothko ladraba asustado mientras todos combatían.


Enseguida salieron corriendo por los pasillos hacia las habitaciones donde consiguieron las capas y los sombreros para vestirse. ÂżDĂłnde estarĂ­a el enemigo?



Y fueron a buscarlo... Chico conocía bien el camino y sus hermanos lo siguieron sin dudar. Hasta la pequeña Julia, que no entendía muy bien lo que pasaba, fue detrás de él en busca del adversario.




Subieron a la torre del castillo y desde all铆 lo vieron: un gran drag贸n verde con cola de serpiente que ya estaba acercando sus fauces amenazadoras hacia la princesa Marcela y su doncella Julia.


Rápidamente bajaron a salvarlas. Alberto logró agarrar al dragón por el cuello y Leo consiguió darle un golpe en la cabeza con su espada. El gran dragón de cola de serpiente escupió fuego peleando muy enfurecido, pero finalmente lograron vencerlo y salvar a la princesa y a su doncella. El pobre Rothko estaba escondido muerto de miedo.




Muy contentos se fueron todos de vuelta a palacio luego de la victoria. Chico llevaba el drag贸n a cuestas. Ahora hab铆a que bordear el foso de hambrientos cocodrilos, que los husmeaban golosos desde abajo.



Finalmente llegaron al palco de celebraciones del palacio. Marcela y Chico iban marcando el camino con signos en los muros para registrar la gran victoria. Wanda bailaba y cantaba de alegrĂ­a. Su Majestad los esperaba agradecida para homenajearlos con un delicioso banquete.


En palacio, los asistentes de la reina ya tenían arregladas las mesas. Allí degustaron pollo, plátanos, naranjas, zumos y leche. La princesa y las doncellas esperaban la comida con paciencia, mientras los victoriosos caballeros hacían honores a Su Excelentísima Majestad. Fue una gran celebración. Hubo comida hasta para Rothko y los cocodrilos.




Acabado el banquete, los guerreros se sentían muy contentos, sobre todo Leo, porque había sido él quien había vencido al dragón con su espada. De pronto, se escuchó el galopar de caballos: un elegante carruaje se acercaba al castillo... Era mamá, había que volver a casa.


ÂĄ Si, si, hija! ÂĄse han portado muy bien ! Han arreglado el armario, han dado de comer a los animales, han regado el jardĂ­n, han jugado al equilibrio, y han hecho unos dibujos preciosos...


Este libro termin贸 de imprimirse el 5 de diciembre de 2014 en los talleres de Fragma, Madrid. Ha sido encuadernado por Enrique Anciones Taller de Encuadernaci贸n, Madrid. En su dise帽o se han usado tipos Baskerville 13/15 pt y 11/13 pt sobre papel offset 90 gr.


CL A R A

LE O

ALBERTO


C H IC O

WA N D A

M A RCEL A

J U LIA



Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.